(MEERA) Dapodi Call Girls Just Call 7001035870 [ Cash on Delivery ] Pune Escorts
Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva
1. Los 7 hábitos de la gente
altamente efectiva
En esencia, lo que Stephen pretende hacernos ver en este libro, es que
en las últimas décadas ha prosperado un paradigma de éxito que es
erróneo, basado en que alcanzar el éxito consiste en ser capaz de
mostrar hacia afuera los símbolos que caracterizan a una persona
exitosa.
Es decir, un enfoque desde afuera hacia adentro. Trabajaremos para
crear cosas, bienes, relaciones, logros que mostrar y una vez
conseguidos, eso nos convertirá en personas exitosas.
Hábito #1 – Sé proactivo
Puedes dividir el mundo en dos zonas, la de las cosas que puedes
controlar y la de las que están fuera de tu alcance. Llamaremos a estas
dos zonas, círculo de preocupación y círculo de influencia.
Dentro del círculo de preocupación se ubicarán cosas como el clima, la
política, la economía, lo que la gente piensa sobre ti, las opiniones de
los demás, etc.
Dentro del círculo de influencia tendremos tu actitud, tu educación, las
habilidades que has aprendido, tus hábitos, tu entusiasmo, etc.
Basándonos en esto encontraremos a dos tipos de personas: Las
reactivas y las proactivas:
Las personas reactivas reaccionan a eventos que están fuera de su
control, se quejan y se lamentan sobre estos eventos o sus sobre sus
circunstancias personales, están continuamente frustradas esperando
un cambio que puede o no suceder, y sobre el que poco pueden hacer
porque no depende de ellas.
Las personas proactivas tienen claro que sus decisiones dominan su
vida, no sus condiciones. No se lamentan sobre cosas que no pueden
controlar y toman acciones para mejorar aquellas sobre las que sí tiene
el control. Tienen claro que hay ciertas situaciones que no pueden
controlar, pero saben que, en esos casos, sí pueden elegir su reacción
ante ellas.
2. Ante una situación de fracaso, la persona reactiva culpará a agentes
externos, ubicados en su zona de preocupación, mientras que la
persona reactiva asumirá responsabilidades y buscará la manera para
mejorar y sortear el problema usando los medios a su alcance.
Si solo vas a implementar uno de los 7 hábitos debería ser este, ya
que por sí solo, este cambio de mentalidad puede tener un impacto
enorme en tu vida.
Hábito #2 – Comienza con el
fin en mente
Cuando estés en el lecho de muerte, ¿cómo te gustaría que se te
recordara? o ¿qué te gustaría ver cuando mires atrás? Lo que estás
haciendo ahora ¿te está llevando en ese camino?
Una de las capacidades cognitivas que nos hace unos animales tan
especiales es la de poder crear en nuestra mente escenarios
futuros. Esto nos permite, mediante prueba y error «mental», elegir
mejor nuestras próximas acciones.
Creamos todo dos veces, primero en nuestra mente y después en
la realidad. Debemos utilizar esta capacidad en nuestro beneficio y
visionar hacia dónde nos van a llevar nuestras acciones presentes de
forma que podamos pivotar cuanto antes si esa dirección no es la
correcta.
Stephen Covey utiliza el símil de una escalera apoyada en un árbol 🌴
en una selva.
Puede que te estés esforzando muchísimo en subir por la escalera y
que estés subiendo muy rápido, pero, ¿te has parado a pensar si la
copa del árbol en el que está apoyada tu escalera es la que quieres
alcanzar? Porque es a la copa de ese árbol a la que llegarás si sigues
subiendo esa escalera y serán sus frutos los que recogerás.
Es más, puede que no solo te estés equivocando de árbol sino de selva,
y se por eso por lo que no encuentras ningún árbol que sea el ideal para
ti.
Necesitas definir tu misión personal porque si no tienes una
estarás siguiendo la que alguna otra persona ha decidido para ti.
Hay varios tipos de propósitos vitales que suelen determinar hacia
donde centra sus esfuerzos cada persona: Pareja, familia, dinero,
trabajo, control, placer, amigos, enemigos, culto…
3. Aunque pudiera parecer que unos son buenos y otros malos, la realidad
es que centrar tu vida en cualquiera de estos propósitos no te conducirá
a ser una persona altamente efectiva porque todos ellos se apoyan
en factores externos.
El mejor modelo es centrar tu propósito en tus principios. Que serán
algo inalterable y totalmente bajo tu control y desde donde emanará
todo lo demás.
Por eso es muy importante definir dichos principios sobre los que se
sustentará tu misión de vida.
Hábito #3 – Prioriza las tareas
importantes
Con el segundo hábito habrás creado el modelo mental, la misión, la
dirección. Con el tercero es hora de llevar todo eso a la realidad, de
implementarlo. ¨PONER PRIMERO, LO PRIMERO¨
Hay diferentes niveles de tipos de gestión del tiempo. Todo lists,
agenda, time blocking, pero el más elevado es categorizar las tareas
en función de su importancia y su urgencia.
Este método da como resultado la siguiente matriz de cuatro
cuadrantes, llamada Matriz Eisenhower:
En el cuadrante I: Tenemos aquello que es urgente e importante, no
nos queda más remedio que atenderlo personalmente y de inmediato.
4. En el cuadrante II: es donde deberíamos centrar la mayoría de
nuestros esfuerzos, son aquellas tareas que nos proporcionarán
mayores retornos en el largo plazo.
Sin embargo, es el cuadrante donde más dificultades tenemos para
permanecer, porque las tareas que se encuentran en este cuadrante no
generan tanta satisfacción.
En el cuadrante número III: Tenemos tareas que son urgentes, pero
no importantes y que deberíamos tratar de delegar para que no nos
quiten tiempo en el cuadrante II.
En el último cuadrante: Se ubican todas aquellas actividades con las
que rellenamos nuestras vidas: TV 📺, redes sociales y en general
actividades que entretienen, pero no aportan nada, solo nos restan
tiempo y, por tanto, debemos minimizarlas.
Hábito #4 – Piensa Win/Win
Existen seis tipos de relaciones interpersonales.
Win/Lose – Lose/Win: Asume que siempre que una persona gana otra
debe perder, es un enfoque que muchas personas entiende como el
único posible. Los resultados de aplicarlo no son los mejores ya que
tiene como base una mentalidad de escasez.
Lose/Lose: Todos pierden. Suele darse como resultado de un
sentimiento de odio o venganza. Como por ejemplo en un mal divorcio,
en el que ambas partes terminan perdiendo.
Win: Siendo estrictos no es un tipo de relación, es símplemente un
individuo consiguiendo lo que quiere sin interacción con otras personas.
No Deal: No hay un acuerdo, por tanto, nadie pierde, pero también
nadie gana. Puede ser una buena salida si la única alternativa es un
Lose/win o un lose/lose.
Win/Win: Es el tipo de relación que debes buscar. Se basa en
una mentalidad de abundancia. Es posible establecer relaciones
en las que ambas partes salen ganando. Estas relaciones son las
más fuertes, duraderas y beneficiosas. Las que crean verdaderas
sinergias entre individuos y colectivos.
5. Hábito #5 – Busca primero
entender y después ser
entendido
Mantenemos una «cuenta bancaria» emocional con cada persona
que nos relacionamos.
Eso creará confianza y, eventualmente, permitirá a la otra parte abrirse
a ti.
Solemos ver el mundo desde nuestra propia perspectiva y tratamos de
ayudar usando nuestra visión, pero tenemos que darnos cuenta de que
cada persona tiene una situación diferente.
Por tanto, pueden existir varias posturas correctas frente al mismo
problema.
Debemos escuchar primero, con la intención de entender, no con la
intención de responder.
Una vez hayamos entendido el problema, observándolo desde la
perspectiva de nuestro interlocutor, y si recibimos la petición de consejo
o ayuda, es cuando podremos lanzarnos a hacerlo.
En ese momento ya tendremos la atención y la confianza de la otra
persona y además habremos comprendido la naturaleza real del
problema.
Esto aplica en cualquier tipo de relaciones, tanto personales como
profesionales.
Hábito #6 – Genera sinergias
La suma de las partes es mayor que el valor individual de cada una de
ellas.
Suelo poner el ejemplo de un palo y un trozo de metal. Por separado
son de escaso valor, digamos 1, pero si los unimos y creamos un
martillo el resultado no es la suma de las partes, no es 2, si no mucho
mayor.
6. Esto ocurre también con las personas. En lugar de ver las diferentes
actitudes, habilidades y maneras de enfocar la vida de otras personas
como algo malo por el mero hecho de ser diferentes a las tuyas,
deberías verlo como algo positivo.
Esas diferencias, cuando se colocan juntas de la manera adecuada
pueden dar lugar a algo mucho más grande que lo que podría
generar cada una de esas personas por separado.
Esta es la manera más potente de generar valor y conseguir cosas
increíbles, aprovechando el potencial de varias personas trabajando
juntas (aprovechando sus diferentes fortalezas para conseguir un
objetivo común).
Dominar cinco primeros hábitos es lo que te permitirá llevar el
sexto hasta su máxima expresión.
Hábito #7 – Afila la sierra
Stephen pone el ejemplo de una persona serrando un árbol. Es una
labor ardua y le llevará 6 horas terminarla al ritmo que lleva. Cuando se
le sugiere parar un rato para afilar la sierra para después avanzar
mucho más rápido, la respuesta es que no tiene tiempo de parar para
hacerlo.
Solemos estar tan enfocados en aquello que estamos haciendo, en
subir la escalera que hayamos elegido o en la que nos hayan colocado,
que «no tenemos tiempo» para pararnos un momento, observar y
prepararnos de la mejor manera antes de continuar.
En nuestras vidas, nosotros somos la sierra, y debemos parar
regularmente para afilarla. Cuatro aspectos son los que tenemos que
cuidar:
💪 Fisico: Hacer ejercicio, comer bien, dormir suficiente.
🧘 Espiritual: Misión, ética, autoconocimiento, meditación.
🧘 Conocimiento: No parar de aprender, explorar, enseñar.
❤️ Social: Nutrir las amistades, familia, pareja.
Mantener afilada la sierra, aunque nos suponga cierto tiempo
diario, será la base para poder poner en práctica el resto de
hábitos con los mejores resultados.