El Sistema Monetario Europeo (SME) surgió en 1978 con el objetivo de establecer una zona de estabilidad cambiaria en Europa y acabar con la inestabilidad derivada de la variabilidad de los tipos de cambio. El SME entró en vigor el 13 de marzo de 1979 y estaba compuesto por la unidad de cuenta europea ECU, el Mecanismo de Tipos de Cambio y el Fondo Europeo de Cooperación Monetaria. Su objetivo era estabilizar los tipos de cambio y preparar el camino hacia una futura unión monetaria europe