El documento resume la historia y gestión del Monte Abantos, un monte situado cerca de El Escorial que sufrió un gran incendio en 1999. Explica que el monte fue repoblado a finales del siglo XIX después de la deforestación, pero las condiciones adversas del suelo han dificultado la silvicultura. Tras el incendio de 1999, las repoblaciones de la Comunidad de Madrid han tenido altas tasas de fracaso debido a la sequía y falta de mantenimiento. Se propone fomentar la regeneración natural para crear un
Dosier sobre el Monte Abantos: la historia, la gestión forestal y las agresiones ambientales
1. DOSIER SOBRE EL MONTE ABANTOS
15º ANIVERSARIO DEL GRAN INCENDIO: 20/08/2014
http://entornoescorial.blogspot.com.es/
2. Wikipedia: Michel-Ange Houasse
A) LA HISTORIA DEL MONTE ABANTOS
1: EL SIGLO XVI
El Monte Abantos toma su nombre del abanto, término que describe el buitre o alimoche, y en el siglo XVI,
era también conocido como "Buen Monte del Oso", debido a la abundancia de especies de caza mayor.
Cuando a finales del año 1.561 Felipe II eligió El Escorial como lugar para su Palacio/Monasterio, las laderas
del monte estaban peladas debido a la deforestación y el pastoreo. La principal vegetación consistía de jaras
con alguna mancha aislada de robledal. La construcción del Monasterio terminó con los pocos árboles que
había debido a la gran necesidad de carbón para las fraguas. Felipe II, un amante de la naturaleza, expresó su
preocupación por el estado de conservación de los montes escurialenses: “Temo que los que viniesen
después de nosotros han de tener mucha queja de que los dejamos consumidos”. El rey introdujo la
proteccion de los bosques reales en las fincas de La Herrería, La Fresneda, El Campillo y El Monasterio. Sin
embargo, no se vio factible la reforestación de las rocosas laderas de Abantos hasta el siglo XIX.
3. Vista del Escorial: Laurent 1863 en Montes del Escorial de José Javier Ramírez Altozano
2: LA REPOBLACIÓN
A finales del siglo diecinueve la Escuela de Ingenieros de Montes, que tenía su sede en San Lorenzo entre
1869 y 1914, llevó a cabo la repoblación del “Monte de la Jurisdicción”. El director de la Escuela solicitó al
alcalde el acotamiento de la zona en 1891 y la repoblación empezó en 1892 con la plantación de 5.000
pinos. La restauración del bosque fue muy complicada para los ingenieros porque la capa de tierra vegetal,
cuando existía, solamente tenía entre 10 y 15 centímetros y el suelo era muy seco. Los alumnos de la
escuela plantaron diferentes especies de pino: pino negral o resinero (Pinus pinaster), pino silvestre (P.
Sylvestris) y pino laricio o negral (P. Nigra). Dentro del pinar, también plantaron pequeños bosquetes:
pinabete (Abies alba), pinsapo (Abies pinsapo), abedul (Betula pendula), castaño (Castanea sativa), cedros
(Cedrus atlantica, C.libani), hayas (Fagus sylvatica), olmo común (Ulmus minor), álamo temblón (Populus
tremula), etc.
• Más información: Montes del Escorial: Historia de una Repoblación
Ramírez Altozano, J.J. (2011) Madrid: Visión Libros
4. 3: EL SIGLO XX
La repoblación fue llevada a buen término a
pesar de las condiciones adversas del suelo y el
clima (ver la foto del Monte Abantos del año
1937). El traslado de la Escuela de Montes a
Madrid en 1914 supuso el fin momentáneo de
la actividad repobladora. Sin embargo, se
retomó en los años 50: en 1953 y 1954 se
plantaron 202 hectáreas de pinos (resinero,
albar y negral).
Desde principios del siglo XX empezó la presión
urbanística en San Lorenzo con la construcción
de dos colonias del estilo “ciudad-bosque” de
Abantos y El Romeral.
Como reacción a esta creciente actividad
constructora, en 1.961 el Monte Abantos y La
Herrería fueron declarados “Paraje Pintoresco”,
una de las primeras figuras de protección
ambiental en España.
En 1.984 la UNESCO hizo la declaración del
Monasterio como Patrimonio de la
Humanidad. Actualmente el Monte Abantos
goza de varios elementos de protección (LIC
del Rio Guadarrama, BIC de la Gran Cerca y
Monte Preservado).
Vistas de Abantos desde la Calle Dorregaray en San Lorenzo en marzo 1937
Foto: forosocialsierra.org
5. Así informó El Mundo del incendio el sábado 21 de agosto:
“El incendio, que comenzó el viernes en la zona conocida como "El Tomillar",
en la ladera sur del Abantos, a primera hora de la tarde y que ha quemado
450 hectáreas, se consideró controlado esta tarde, y al mediodía se habían
abierto las urbanizaciones de las que ayer fueron evacuadas miles de
personas, y funcionaba a pleno rendimiento el hospital, que también había
sido desalojado, al igual que el camping. El suceso, cuyo origen se
desconoce y por el que se necesitarán cien años para restablecer la
vegetación, requirió el corte de la carretera M-600, abierta hoy al tráfico, y
obligó a desalojar a unos 5.000 vecinos de las urbanizaciones cercanas, a los
turistas del Valle de los Caídos, a los monjes de su abadía, a los enfermos del
hospital local y a los campistas.”
El balance del incendio fue totalmente desolador: el fuego arrasó 450 ha. de
bosque, quemó 170.000 árboles y destrozó los hábitats de muchos animales
y aves. El incendio se inició en la parte baja del monte, a la altura de El
Zaburdón y, como en la mayoría de los incendios en la Comunidad de
Madrid, la causa sigue desconocida.
4: EL GRAN INCENDIO
6. 5: DESPUÉS DEL INCENDIO
Foto: El País 2004
Foto: ISTAS 1999
Después del incendio del 1999, la gestión
forestal de la Comunidad de Madrid fue
muy criticada. La repoblación de las zonas
afectadas se inició en el otoño de 2000,
sin tener en cuenta la regeneración
natural que se estaba produciendo.
Cuando se iniciaron los trabajos de
reforestación, los pinos jóvenes tenían
por aquel entonces una elevada densidad
(4-5 pinos/m2) y una altura de diez
centímetros. Por cada hoyo excavado con
la máquina se arrasaron quince o veinte
brotes de pinos procedentes de semillas
de las que ardieron.
En el “lustro de la euforia” (2002-2007),
en pleno auge de la burbuja inmobilaria,
la especulación urbanística sembró las
laderas de Abantos de chalets adosados
que treparon hasta los mismos mojones
del monte de utilidad pública. Además
del catastrófico impacto paisajístico, estas
construcciones han convertido el Monte
Abantos en un bosque semi-urbano con
impactos muy negativos para el entorno
natural.
7. B) LA GESTIÓN FORESTAL
1: Las condiciones adversas
Tenemos la suerte de contar con una estación
meteorológica en el Monte Abantos (La Pizarra). Esto
nos permite saber datos como la dureza de la sequía
estival y los años con más o menos lluvia desde el
1985: 1.318 mm en 1989, 1.315 mm en 1996, 489 mm
en 2005 y 480 mm en 2012. Las cifras demuestran el
claro impacto del cambio climático con un aumento de
la desertificación.
Otro problema es el efecto del viento que tumba
muchos pinos después de cada temporal. Los pinos
tienen poca raíz y son más vulnerables debido a la
escasa capa de tierra en muchos lugares.
Las sequías propician las plagas como las
procesionarias, los escolítidos y los hongos. Las
procesionarias hacen más daño durante el invierno
cuando las orugas se alimentan de las acículas de los
pinos. Los escolítidos son escarabajos que perforan la
madera, creando galerías bajo la corteza. También hay
hongos como la seca de la encina, la tinta del castaño
y la grafiosis del olmo.
Como descubrieron los ingenieros de monte a finales
del siglo XIX, el Monte Abantos es un lugar complicado
para la silvicultura y aún más con el cambio climático.
Datos de la precipitación en Abantos CC Óscar Hontoria
Árbol caido invierno 2013 Foto: Entorno Escorial
8. 2: “Plantando dinero”
Las primeras repoblaciones de la Comunidad de
Madrid después del gran incendio fueron muy
criticadas por la altísima proporción de marras
(árboles muertos). El mismo patrón se ha repetido en
sucesivas plantaciones. En el invierno del 2013/2014
la Comunidad plantó 4.000 árboles frondosos en la
zona de los arroyos de la Cruz y del Barrancón.
Entorno Escorial ha monitorizado la zona reforestada
y ha observado un 80% de marras, causado por la
sequía (primero en mayo y luego en pleno verano) y
también por la falta de protectores que dejan los
plantones vulnerables a los corzos y otros animales.
Entre el año 2000 y 2014 la Comunidad gastó 2,3
millones en plantar árboles en el Monte Abantos. En
un acto de Entorno Escorial en febrero 2010 el agente
forestal, José Luis Valdelvira, llegó a decir que “lo más
importante que se ha plantado en Abantos es el
dinero.”
Según Ecologistas en Acción, el despilfarro de dinero
en plantaciones fracasadas es muy común en Madrid,
principalmente por la ausencia de mantenimiento. La
ONG también critica la opacidad y falta de datos reales
sobre las repoblaciones. “El único beneficio lo
obtienen las empresas adjudicatarias” zanjó
Ecologistas el 21 de marzo 2014.
Una marra de la repoblación del 2013/14 en mayo 2014 Foto: Entorno Escorial
Otro problema es la plantación de árboles que no
son de la zona aunque sean de especies
autóctonas. Francisco Felipe de ARBA comentó que
“la diversidad genética está amenazada por la
plantación de ejemplares que vienen de fuera o de
otra región de la península. La pérdida
de la variedad genética hace más
vulnerables los árboles a las plagas.”
Un alcornoque vacío de la repoblación del 2013/14 en agosto 2014 Foto: Entorno
Escorial
9. 3: El negocio del fuego y los recortes
La Comunidad de Madrid ha reducido el número de
bomberos forestales con contratos laborales (364 en
2008 a 228 en 2013). Hay 250 bomberos funcionarios
menos y las plantillas de los agentes forestales están
estancadas desde hace años. A la vez ha habido
recortes en los presupuestos de la empresa que lleva
el suculento negocio del fuego: INFOSA en la zona
oeste de la comunidad.
En el verano de 2013 los servicios de prevención y
extincción de incendios fueron concedidos de nuevo a
INFOSA, pero con una rebaja del 30%. El resultado ha
sido la eliminación de una brigada de bomberos
forestales en Navalcarnero. Los trabajadores también
denuncian un empeoramiento en sus condiciones
laborales y recortes en los gastos de maquinaria. En
opinión de Entorno Escorial, la falta de una trituradora
forestal puede haber causado un incendio en mayo en
Abantos (ver foto) porque los trabajadores tuvieron
que quemar rastrojos en vez de triturarlos.
Uno de los problemas es la privatización de un servicio
básico. Según CNT INFOSA "la gestion privatizada de
incendios forestales de la CAM es mucho mas precaria
que si la gestion fuera publica, dado que las empresas
lo unico que pretenden es sacar beneficios de
cualquier forma, para ello recortan en personal,
maquinaria y un largo etc.”
Conato de incendio en el Monte Abantos mayo 2014 Foto: Entorno Escorial
Uno de los focos del incendio de La Herrería en septiembre 2013
Foto: Entorno Escorial
10. 4: ¿Hacia un bosque autóctono?
Un bosque de frondosos: La Herrería Foto: Entorno Escorial
El pinar de Abantos Foto: Entorno Escorial
Comparado con los pinares de plantación, los bosques
autóctonos tienen mucho más resistencia al fuego. Lo
vimos en 2013 cuando se salvó La Herrería a pesar de que
un pirómano había creado cinco focos de fuego. Los
bosques de las especies nativas tienen mucha más
biodiversidad y además la madera es más valiosa.
En la mayor parte del Monte Abantos el bosque autóctono
es el melojar con una mezcla de otras especies como el
fresno, maíllo, cerezo silvestre, arce de Montpellier, espino
cerval, endrino, majuelo y saúco.
¿Cómo podemos llegar a un bosque de frondosos? El
fracaso de las repoblaciones de la Comunidad de Madrid y
las grandes dificultades que han tenido ARBA y Entorno
Escorial en su plantación ciudadana cerca del Arroyo de la
Cruz contrastan con el éxito de la regeneración natural que
hemos observado a lo largo de los años. En los barrancos y
otras zonas con más humedad (ej. la cuneta de la pista
forestal) han prosperado árboles como fresnos y sauces.
Encinas solitarias que sobrevivieron el incendio también
han sido importantes para la regeneración natural.
Una posible solución sería un programa de regeneración
natural, vallando zonas seleccionadas del monte para
impedir el acceso de las vacas y los corzos y controlando
los pinos y el matorral. Sería mucho más barato que una
repoblación y podría tener mucho más éxito.
11. 5: La plantación ciudadana en Abantos
Desde el otoño de 2004 ARBA Sierra de Guadarrama y Entorno Escorial, con la ayuda de otros
grupos como Correcaminos y muchos ciudadanos, han llevado a cabo la plantación de árboles
autóctonos en una parte de la zona quemada en las orillas del Arroyo de la Cruz (a cada lado
de la pista forestal).
Durante cuatro veranos, del 2005 a 2008, voluntarios de los grupos involucrados regaron todas
las semanas la plantación y lograron mantener vivos la mayor parte de los arboles, a pesar de
la sequía. En los últimos años, con la mayoría de los árboles ya establecidos, se decidió dejar
los riegos semanales como experiencia para ver su evolución.
La última plantación de árboles se llevó a cabo a finales del año 2013 en otra zona, encima de
los chalets de Monte Escorial, por las operaciones forestales de la Comunidad de Madrid en la
zona del Arroyo de la Cruz.
2004 2008 2013
12. 6: Aprovechamientos sostenibles y la nueva economía verde
En un acto de Entorno Escorial sobre
los incendios forestales en 2013,
Miguel Ángel Soto de Greenpeace
España pidió un cambio de nuestra
visión del monte en España: “en vez de
limpiar el monte para evitar incendios,
habrá que crear un sector forestal
sostenible. Sería un gran yacimiento de
empleo y que tendría gran potencial
económico dentro de una futura
economía verde con la explotación de
biomasa para fines energéticos.”
Según un informe redactado por Luis
Molina de CCOO, el sector forestal
podría generar hasta 50.000 puestos
de trabajo, duplicando la inversión
pública. Además de promover el uso de
la biomasa forestal y el consumo
responsable de productos forestales,
CCOO propone reducir el abandono de
las propiedades forestales, incentivar la
gestión colectiva y aumentar las
subvenciones a propietarios con una
certificación forestal FSC.
Madera en Silió, Cantabria Foto: Miguel Ceballos http://blog.educastur.es
En el monte Canales, perteneciente al municipio de Silió,
Cantabria, se realizan todos los años la retirada de la madera
muerta del monte. Los vecinos talan árboles que ya están secos
para poder aprovechar su madera como combustible en sus casas
durante los meses de invierno.
Además de este aprovechamiento, los habitantes se encargan de
cuidar y mantener sus montes realizando cierres con el objetivo de
que el ganado, ya sea vacuno o caballar, no entre en determinadas
zonas seleccionadas para que la población de árboles
autóctonos no se vea reducida y que se vaya
repoblando por si misma, con la mínima
intervención del hombre posible.
13. 1: La construcción
La burbuja inmobiliaria tocó de lleno a San Lorenzo de El Escorial, dejando un muro de hormigón al borde
del Monte Abantos de unos seis kilómetros, desde las nuevas casas de Unamuno pasando por los pareados
de la zona Cebadillas y Monte Escorial hasta las macro-urbanizaciones del Felipe II y La Pizarra. A pesar de las
nefastas consecuencias ambientales, sociales, económicas y políticas de la especulación urbanística, el actual
alcalde de San Lorenzo sigue con su política de construir más. Está aprobada la construcción de viviendas en
el jardín de las Carmelitas y hace poco el equipo de gobierno propuso la compra de suelo urbanizable para
construir más casas todavía .
Este aumento de la presión humana ha tenido un indudable impacto negativo sobre el Monte Abantos: por
ejemplo ahora casi no se ven animales relativamente comunes en el pasado como el largarto (ocelado e
ibérico). Como se puede apreciar en la foto de un solar vacío, arriba a la izquierda, la construcción en una
zona con gran desnivel también afecta la capa freática del bosque. Durante el invierno y primavera el solar se
convierte en una laguna donde crecen sauces y crían ranas. Además, según un informe de la
UGT en 2006, el peligro de incendios aumenta un 70% en los bosques colindantes con zonas
urbanas, algo que hemos visto también en Robledo de Chavela en los últimos años.
Obras en Abantos 2007 Foto: Entorno EscorialUn solar en Abantos en 2013 Foto: Entorno Escorial
C) LAS AGRESIONES AMBIENTALES
14. 2: El tráfico en la pista forestal
Durante los fines de semana, especialmente
durante la primavera y el verano, hay importantes
aglomeraciones de vehículos privados en la pista
forestal que sube al puerto de Malagón. A veces,
los coches y todoterrenos aparcados en la cuneta
de la pista forestal apenas dejan pasar a las
camionetas y todoterrenos de las brigadas anti-
incendios y de los agentes forestales. Desde el año
2011, Entorno Escorial ha enviado varios escritos al
Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial y al
Área de Disciplina Ambiental de la Comunidad de
Madrid, pidiendo el uso restringido durante la
época de riesgo de incendios de los vehículos
particulares.
De acuerdo con los reglamentos actuales del Monte
de la Jurisdicción, no deberían pasar ni coches
particulares ni motos por la pista forestal. Entorno
Escorial entiende que el cierre completo de la pista
durante todo el año podría causar problemas de
acceso para mucha gente, por ejemplo para los
ganaderos, los visitantes del Arboreto Luis Ceballos
y las personas con discapacidades físicas. Sin
embargo, sí pensamos que hay momentos, cuando
hay riesgo de incendio forestal, que exigen medidas
puntuales.
Coches en la pista forestal Foto: Entorno Escorial
Coches en el Puerto de Malagón Foto: Entorno Escorial
15. Ley de Montes (10/2006 de 28 de abril de modificación de la
ley 43/2003 de 21 de noviembre). Limita la circulación de
vehículos a motor por pistas fuera de la red de carreteras y
caminos vecinales, exclusivamente a las actividades de
vigilancia, extinción de incendios, gestión agroforestal y, si las
hubiera, servidumbres de paso.
Ley de Vías Pecuarias (3/1995 de 23 de marzo): Prohíbe la
circulación de vehículos a motor por toda la red de Vías
Pecuarias con excepción de los usos ganaderos, rurales o
emergencias.
Entorno Escorial ha observado la
presencia de motos de campo y quads en
caminos y senderos del Monte Abantos y
ha denunciado estos hechos a las
autoridades. Como resultado, en nuestro
blog hemos recibido comentarios de
motoristas, llenos de insultos. Sin
embargo, quizás lo peor es que hay
motoristas que comparan su actividad
con el ciclismo y el senderismo y
proclaman su amor por la naturaleza.
Hay que recordarles que distintas leyes
nacionales y de la Comunidad de Madrid
no permiten la circulación de ningún tipo
de vehículos motorizados por los montes
y vías pecuarias, salvo autorización
especifica.
El impacto sobre el entorno natural de las
motos es brutal: atropellos de animales,
deterioro del terreno, contaminación
aérea y acústica (especialmente
impactante en la época de cría) y la mas
importante en época estival, el riesgo de
incendio forestal.
2: Motos y quads
Un motorista cerca del Puerto de Malagón
Foto: Entorno Escorial
16. 4: Basura y pintadas
El 99% de los ciclistas y senderistas en el Monte Abantos son respetuosos
con el entorno natural. Sin embargo, una pequeña minoría tira basura al
campo, algo que se ve especialmente después de los puentes y la
Semana Santa. Otros visitantes al monte van en coches, generalmente
durante la noche para montar botellones. Esta fauna humana no tiene
ningún respeto por la naturaleza y tira al monte sus latas, botellas,
condones usados etc.
Relacionada con el botellón es “la pintada en la naturaleza”. No contentos con afear las calles y parques del
pueblo, los vándalos se desplazan al monte con sus sprays para pintar en rocas o muros. Se ven grafitis
alrededor del Mirador de Rubens y también en el valle del Romeral (ver foto). Las personas que tiran basura
al monte o destrozan el paisaje natural con sus pintadas expresan así su desdén por la naturaleza, una
mentalidad que es un producto de la dominante ideología consumista, reforzada por algunos políticos que
hablan con desprecio de los “arbolitos” a la vez que lanzan nuevos proyectos urbanísticos.
Vistas de
Basura debajo del Mirador de Rubens
Foto: Entorno Escorial
Pintadas en el valle del Romeral
Foto: Entorno Escorial
Basura cerca del Camino del Horizontal Foto: EE
17. El Monte Abantos es el pulmón verde para muchos
escurialenses y madrileños y se ha visto un aumento
del ciclismo y del senderismo en los últimos años. Éste
es un fenómeno muy positivo, pero trae sus
problemas.
El ciclismo: La gran mayoría de los ciclistas solamente
utilizan las pistas forestales y los caminos de más de 3
metros de ancho. Sin embargo, hay ciclistas, sobre
todo los amantes del descenso extremo, que no
respetan los caminos y van a velocidades peligrosas.
Incluso hay empresas que organizan bajadas y suben a
los ciclistas en furgonetas. El resultado de la
proliferación de este tipo de ciclismo es la aparición
de nuevas veredas entre la vegetación y la erosión de
los caminos antiguos con el aumento de baches y
agujeros.
El senderismo:
El Monte Abantos es un paraiso para los senderistas y,
si se hace con cuidado y respeto, trae pocos impactos
al entorno natural. Varios grupos locales, incluyendo
Entorno Escorial, organizan excursiones al monte y
quizás habría que limitar el número de personas en
cada grupo. Por eso, en el futuro nuestra asociación
va a poner un límite de participantes, especialmente
en caminatas por zonas de gran valor ecológico.
5: Usos recreativos
Un ciclista por el Monte Abantos Foto: El País (Santi Burgos)
Ciclistas y un paseante en la pista forestal Foto: Entorno Escorial
Excursión de EE en 2013 Foto: Entorno Escorial
18. 6: La caza
En julio del 2014 el Ayuntamiento de San Lorenzo aprobó la renovación
de la concesión del aprovechamiento cinegético del Monte de la
Jurisdicción. Con toda seguridad la concesión por cinco años, que
solamente cuesta 2.964 euros al año, irá de nuevo al Club de Cazadores
de San Lorenzo, un grupo muy afín al actual alcalde. Entorno Escorial y
otros grupos locales como la Plataforma Ciudadana Escurialense han
criticado esta concesión porque no es compatible con los otros usos del
monte, principalmente el ciclismo y el senderismo. La caza en Abantos
supone un uso exclusivo del monte publico por un pequeño grupo de
personas, perjudicando a cientos de personas que pasean y creando un
evidente peligro por la falta de suficientes zonas de seguridad.
Un corzo matado en Abantos febrero 2014 Foto:
Origen desconocida
7: La ganadería
La ganadería extensiva es uno de los usos tradicionales del Monte
Abantos. Está regulado por el Ayuntamiento, con el número de reses y
caballos limitado, y su impacto general es incluso positivo por el control
de la maleza dentro del pinar. Sin embargo, Entorno Escorial ha
observado las vallas rotas de varias zonas de replantación, permitiendo la
entrada del ganado. En nuestra opinión, es importante restringir el paso
del ganado en muchas zonas del monte y así permitir la regeneración
natural.
8: Operaciones forestales
Hemos tratado la gestión forestal en otro apartado. Sin embargo, cabe mencionar que la
contratación de empresas privadas por la CM a veces ha tenido como resultado desbroces,
“limpiezas” y talas que han destrozado flora protegida.
Una vaca en Abantos Foto: Entorno Escorial
19. DOSIER SOBRE EL MONTE ABANTOS
15º ANIVERSARIO DEL GRAN INCENDIO: 20/08/2014
http://entornoescorial.blogspot.com.es/