1. LOS COLORES
Se sabe por experiencia que los niños distinguen en primer lugar las
formas, y después los colores. Cuando un bebé nace sólo distingue
los contrastes entre los colores, es decir lo claro contra lo oscuro. Su
cerebro parece no haber aprendido aún a diferenciar tal cantidad de
matices.
Con el tiempo, y cuando ya diferencian bien el blanco del negro, como
colores extremos que representan lo claro y lo oscuro, empiezan a
distinguir también las formas .Y es más tarde cuando ya distinguen
principalmente los colores más brillantes y esenciales como el rojo,
amarillo, verde y azul.
Si a un niño de unos dos años se le enseñan grupos de colores, éste
los irá asimilando. Si además se le amplía la gama, enseñándole
diferentes tonos y matices, también aprende a diferenciarlos
rápidamente. A más entrenamiento más refinamiento y memoria para
distinguir todos los matices cromáticos.
La enseñanza de los colores siempre está presente en el Nivel Inicial.
En el caso de los
niños pequeños no se trata de aprender las teorías sobre el color. El
objetivo es la experimentación, el descubrimiento empírico de las
relaciones de los colores entre sí mediante ejercicios interesantes.
El color es el medio de expresión propio de las artes plásticas,
actividad que los niños disfrutan mucho.
Por esta razón, es un inmenso campo de exploración visual. Al ser
estimulantes, los colores despiertan
el interés de los pequeños, que tienen sus preferencias: a unos les
gusta el rojo, a otros, el amarillo... El niño con problemas familiares o
2. de salud lo expresa a través del gris, del marrón o del negro; y esto
los maestros lo sabemos muy bien.
Existen numerosos recursos para enseñar los colores a los niños:
actividades plásticas, canciones, cuentos y poesías , adivinanzas
,juegos de asociación y clasificación con material concreto, etc.
Para enseñar los colores:
En la web Educarchile encontré una actividad muy interesante para enseñar los colores
primarios y sus combinaciones mediante una canción, a la cual se la acompaña con
títeres del respectivo color, y se le puede añadir un contexto (casa de los títeres, papeles
de colores por el aula, telas de colores, luces de colores, etc.) para enriquecer la
actividad y que los niños aprendan los colores.
El objetivo es que los niños se relacionen con la canción, la aprendan, la
canten y se diviertan. La actividad educativa tendrá un momento previo en el
que se explica que existen colores primarios, y que de la combinación de esos
colores surgen otros nuevos.
La canción tiene dos momentos. En el primero los colores primarios cantan en
primera persona y cuentan un poco de ellos mismos.
En el segundo momento de la canción, el narrador le cuenta a los niños
algunas anécdotas sobre cómo fueron apareciendo los nuevos colores.
Soy el color amarillo
Y me gusta mucho el sol
Pinto a todos los pollitos
Al cantarles mi canción.
Yo tengo el color del cielo
También el color del mar
El azul así me llaman
Cuando salgo a navegar.
En la nariz del payaso
En el traje del pascuero
Soy el rojo apasionado
Y a todo el mundo quiero.
Azul, rojo y amarillo
Somos todos muy amigos.
Un buen día el amarillo
Se encontró a rojo jugando
Fueron juntos a subirse
Al gran árbol del naranjo.
3. El azul y el amarillo
Se aburrieron de ver tele
Y se fueron a la plaza
A jugar al pasto verde.
Azul y su amigo rojo
Estaban muy, muy hambreados
Se comieron unas moras
Sus labios están morados.
Verde, morado y naranjo
Quieren seguir cantando
Verde, morado y naranjo
Azul, rojo y amarillo
Los colores de la vida
Somos muy buenos amigos
Actividades para enseñar los colores
* Formar 3 equipos: el equipo de los verdes, el de los naranjas y el de los violetas. Cada
equipo recorta de revistas elementos que contienen su color. Ordenar los recortes y
pegarlos sobre un cartón. Se obtiene un friso muy original .
* Hacer un collage con recortes de revistas que sean del color elegido, cubriendo toda
la hoja.De esta forma podrán podrán apreciar que existen distintas tonalidades de un
mismo color. Sobre este fondo luego los niños pueden dibujar con rotuladores negros.
* Superponer dos hojas de papel celofán del mismo color; cambiar de color; observar
los cambios.
* Colocar papel crepé en agua para hacer agua coloreada con los colores primarios.
Mezclar para experimentar el surgimiento de los colores secundarios .
* Jugar al veo veo descubriendo objetos de distintos colores escondidos en la sala:
Veo, veo.
¿Qué ves?
Una cosa.
¿Qué cosa?
Maravillosa.
¿De qué color?
¡Amarilla!