1. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la
docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
J. González de Dios
Servicio de Pediatría. Hospital General Universitario de Alicante. Departamento de Pediatría.
Universidad Miguel Hernández. Alicante. España.
El cine y la orientación de la el cinematógrafo, manifestación artísti-
educación médica desde la estética ca basada en el movimiento de las imá-
“Erase una vez, un elegante bulevar genes (sus raíces griegas lo avalan: kiné
de la ciudad de París…”. Así podemos y grafos).
empezar una de las fábulas más maravi- La infancia ha sido, es y será motivo
llosas: el nacimiento del cine. El fenó- de inspiración y reflexión en el arte, en
meno cinematográfico, tal como lo co- cualquiera de sus manifestaciones, bien
nocemos, nació con la exhibición co- sea el cine (denominado “séptimo ar-
mercial el 28 de diciembre de 1895 en te”), como en cualquiera de las previas
París, en el Grand Café del Boulevard seis Bellas Artes consideradas del mun-
des Capucines. Allí los inventores Louis do clásico: arquitectura, escultura, pin-
y Auguste Lumiére proyectaron varios tura, música (incluye el teatro), decla-
documentales. La primera película ofi- mación (incluye la poesía) y danza. Ni-
cial fue La sortie de l´usine Lumiére a ños y adolescentes comparten la aven-
Lyon. Pero en aquella primera sesión se tura e historia del cine, bien en papeles
proyectaron varios documentales más, principales o de reparto, como núcleo o
entre ellos Llegada de un tren, Estanque como excusa argumental, en la salud y
de las Tullerías, La partida de cartas o en la enfermedad.
El desayuno del bebé… Desde sus ini- La visión que el cine proporciona a la
cios se confirma que la infancia se con- infancia (con el niño o adolescente co-
vierte en un motivo de inspiración para mo protagonista), a las enfermedades
Javier González de Dios: javier.gonzalezdedios@gmail.com
El autor declara no presentar conflictos de intereses en relación con la preparación y publicación de este artículo .
299
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
2. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
pediátricas y/o a la realidad vista a tra- foro de aprendizaje. Pues el cine (y
vés de la inocencia de la mirada de un también el vídeo y la televisión) es un
niño contiene elementos culturales y medio de gran impacto para informar,
docentes asociados al entretenimiento. divulgar mensajes y formar a la pobla-
Porque el “séptimo arte”, al igual que ción. La utilización del cine como recur-
los seis anteriores, componen un mosai- so educativo en estos tiempos domina-
co de posibilidades que los educadores dos por la imagen, es una posibilidad
utilizan para ayudar a una formación efectiva. Si a esto se suma el hecho de
médica más completa. Literatura y tea- que la enfermedad ha sido siempre un
tro1,2, poesía3, ópera4 y cine5-11 se con- referente permanente de los cineastas,
vierten en un recurso útil en el universo con muchas películas que pueden servir
de la educación médica. de base educativa, el cine se convierte
El cine, con su imagen y sonido, es un en un método ideal para mostrar una
despertador de emociones dentro de la mirada holística de la salud y la enfer-
“cultura del espectáculo”. El cine es po- medad. Además, los cineastas nunca se
siblemente la manifestación artística han ocupado de enfermedades, sino
más completa a la hora de plasmar una siempre de enfermos, de su vida, de su
enfermedad (se ve, se oye y se siente). lucha por sobrevivir, de sus circunstan-
En los últimos años la docencia está cias personales y con una mirada huma-
siendo sacudida por una imperiosa ne- nitaria e integral, que los médicos pode-
cesidad de adaptación y evolución. En mos utilizar para una labor educativa13.
este sentido, las técnicas audiovisuales La educación encuentra en la estética
(entre ellas, y principalmente, el cine en –artes y humanidades– un aliado im-
sus distintos formatos), con su incom- prescindible. Educar desde la estética no
parable capacidad de representación, es querer anclar en la emoción y en la
constituyen uno de los métodos más sensibilidad todo el cuerpo de concep-
poderosos de difusión de conocimien- tos necesarios para construir los valores
tos, de desarrollo de aptitudes y de de la persona. Lo que se pretende es
creación de actitudes12. provocar la reflexión, condición impres-
Los profesionales de la salud han co- cindible para cualquier intento de cons-
menzado a investigar qué pacientes y trucción de la personalidad.
enfermedades trata el cine y cómo las El objetivo de este artículo es fomen-
trata, pero sobre todo ha servido como tar un espacio de reflexión sobre las
300
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
3. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
posibilidades que el cine permite para mo Darryl F. Zanuck, Samuel Bronston
la docencia y humanización en medici- y Samuel Goldwyn. Sólo Charles Cha-
na, en general, y en la Pediatría, en plin, Douglas Fairbanks y Mary Pickford
particular. se rebelaron contra esto, intentando
concebir el cine más como un arte, y lo
Un poco de historia: arte e industria intentaron por medio de su estudio:
conviven en el cinematógrafo United Artists.
En sus albores y por un tiempo, el ci- La convivencia en el cine de arte e in-
ne fue considerado una atracción me- dustria fue, es y será siempre una cons-
nor, incluso un número de feria. Una fi- tante. Pero el desarrollo del discurso
gura fascinante cambió este concepto: fílmico cinematográfico siguió sus pasos,
George Méliès desarrolló los efectos es- precedido por los antecedentes comen-
peciales para simular experiencias mági- tados del discurso de los Lumiére (más
cas. Este hecho y el nacimiento en la documentalista) o del discurso de Méliès
primera década del siglo XX de múlti- (más carnavalesco). Para entender esta
ples pequeños estudios cinematográfi- evolución, no podemos dejar de enume-
cos, tanto en Estados Unidos como en rar tres elementos que podemos consi-
Europa, cambiaron el ritmo (ya impara- derar clave en ese desarrollo inicial del
ble) del cine en nuestra sociedad y en nuevo lenguaje cinematográfico:
nuestra vida. – En Estados Unidos, David W. Grif-
Uno de estos estudios se convirtió en fith y su “montaje invisible”, con la
La Meca del cine: Hollywood, un pe- implantación inicial de recursos ta-
queño poblado en las proximidades de les como el primer plano o el flash-
Los Ángeles. La mayor parte de los es- back. El nacimiento de una nación
tudios fundados en aquella temprana (1915) o Intolerancia (1916) cam-
época (Fox, Universal, Paramount, Me- biaron el cine para siempre, hasta
tro-Goldwyn-Mayer) miraban al cine el punto de que se afirma que con
más como un negocio que como un ar- Griffith nace de verdad el lenguaje
te, controlando la producción fílmica, la cinematográfico.
distribución y su cartera de directores y – En la Unión Soviética, Sergéi Ei-
actores (lo que marcó la aparición del senstein y su “montaje de atrac-
star-system). Era el dominio de los ciones”, que busca mezclar imá-
magnates, nombres emblemáticos co- genes chocantes para provocar
301
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
4. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
una asociación emocional o inte- rias. Paradigmas fílmicos que se yuxta-
lectual en el público. Lo avalan los ponen o contraponen y que se iniciaron
1.290 planos de El acorazado Po- con las llamadas vanguardias históricas
temkin (1925), posiblemente la a principios del siglo XX, que se desta-
película sobre la que más se ha es- caban por la renovación radical en la
crito en toda la historia del cine. forma y el contenido, explorando la re-
– En Europa varios movimientos cul- lación entre arte y vida. En el cine se di-
turales se trasladan al cine, princi- ferencian tres etapas en el movimiento
palmente el Expresionismo del ci- vanguardista (impresionismo, expresio-
ne alemán (en el que prima la ex- nismo y surrealismo), pues otros movi-
presión subjetiva sobre la repre- mientos de vanguardia (fauvismo, cu-
sentación objetiva de la realidad) y bismo, futurismo, dadaísmo, etc.) no
el Surrealismo del cine francés (en tuvieron reflejo en la pantalla. A partir
el que prima la búsqueda de sen- de este momento, otras corrientes cine-
saciones y de sentimientos, imá- matográficas fueron apareciendo con el
genes absurdas que rompen con tiempo y dejando su impronta:
la lógica temporal). El gabinete del – En los años 20, el Cine-Ojo ruso
doctor Caligari (Robert Wiene, (Dziga Vertov) o el Cinema-Pur
1920), Nosferatu, el vampiro francés (Henri Chomette, Man
(Friedrich Wilhelm Murnau, 1922) Ray Rene Clair…).
y Metrópolis (Fritz Lang, 1927) – En los años 40, el Neorrealismo
son claros ejemplos del primero. italiano (Roberto Rossellini, Vitto-
Retorno a la razón (Man Ray, rio de Sica, Luchino Visconti…) o
1923), Entreacto (René Clair, el Underground estadounidense
1924), El perro andaluz (Luis Bu- (Maya Deren, Keneth Anger…).
ñuel, 1929) y La edad de oro (Luis – En los años 50, el Cinema Verité
Buñuel, 1930) son ejemplos del (Jean-Luc Godard, Michel Brault,
segundo. John Cassavete,…), la Nouvelle
Así pues, y desde sus orígenes, el cine Vague francesa (François Truffaut,
ha evolucionado por medio de sucesi- Alain Resnais, Éric Rohmer, Clau-
vas corrientes cinematográficas, co- de Chabrol…), el Free Cinema bri-
rrientes no ajenas a la evolución de tánico (Lack Clayton, Lindsay An-
otras manifestaciones artísticas o litera- derson, Karel Reisz, Tony Richard-
302
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
5. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
son…) o la Vanguardia estadouni- que abarquen y, sobre todo, por el sen-
dense (Stanley Kramer, Otto Pre- timiento que busquen provocar en el
minger, Delbert Mann…). espectador. En un intento de clasifica-
– En los años 60, el Cine Moderno o ción, de los múltiples géneros que han
New Hollywood (Robert Altman, ido apareciendo, podemos diferenciar-
Francis Ford Coppola, Martin los por su estilo (acción, animación,
Scorsese, Roman Polanski, Steven aventura, comedia, documental, dra-
Spielberg…) o el Cine indepen- ma, épico, fantasía, misterio, negro, ro-
diente americano (Dennis Hopper, mántico, suspense, terror, etc.) o por
John Schlesinger…). su ambientación (bélico, ciencia ficción,
– En los años 70, el Baxploitation es- deportivo, fantástico, gore, histórico,
tadounidense (Mario Van Peebles, independiente, musical, negro, oeste,
Ossie Davis, Gordon Parks…) o el policíaco, etc).
Nuevo Cine alemán (Volker
Schlöndorff, Rainer Werner Fass- Cine y medicina: recurso docente
binder, Werner Herzog, Win Wen- para la humanización y mejora
ders…). de la relación médico-paciente
– En los años 80, el Cine Postmo- No existe un género de cine dedica-
derno (Quentin Tarantino, Baz do a la medicina. Pero la medicina sí
Luhrman, Pedro Almodovar…) o es un tema recurrente en el cine, en-
el New Queer Cinema (Gregg focado desde múltiples puntos de vis-
Araki, Gus Van Sant, Todd Hay- ta, y visible en todas las corrientes y
nes…). géneros enumerados. Y distintos au-
– En los años 90, el Cine Digital tores han publicado comentarios res-
(George Lucas, James Cameron, pecto a esta asociación. Hay recursos
hermanos Wachowski…) o el mo- que vienen compartiendo este doble
vimiento Dogma (Lars von Trier, interés, en busca de la conexión entre
Thomas Vinterberg, Soren Kragh- el cine y la medicina y en sus diversas
Jacobsen…). facetas: información, formación, do-
Las corrientes cinematográficas se cencia, etc. En España queremos des-
solapan con los géneros. Géneros cine- tacar algunos recursos que vienen
matográficos que se clasifican según compartiendo este doble interés entre
los elementos comunes de las películas cine y medicina:
303
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
6. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
– La Revista de Medicina y Cine/ ofrece una particular interpreta-
Journal of Medicine and Movies, ción cinematográfica sobre la sa-
posiblemente la única revista que lud y la enfermedad.
reúne estas dos materias de análisis. – A estos recursos nos sumamos re-
Es una revista bilingüe (español e in- cientemente con la sección “Cine y
glés), electrónica y de acceso libre, Pediatría” publicada dentro del
publicada por Ediciones Universidad blog “Pediatría basada en pruebas”
de Salamanca y cuya dirección corre (www.pediatriabasadaenpruebas.
a cargo de los hermanos José Elías y com/). Desde esta sección plantea-
Enrique García Sánchez, que com- mos una selección de aquellas pelí-
parten su trabajo en el Departa- culas cuyos protagonistas son, de
mento de Medicina Preventiva, Sa- alguna manera, niños o adolescen-
lud Pública y Microbiología Médica tes, algunos enfermos y la mayoría
de la Universidad de Salamanca y su sanos. Nos vale la mirada de un ni-
enorme afición al cine. Se publica ño a través de la cámara como hilo
cada trimestre desde el año 2005 y argumental para plantear diferentes
ha marcado un antes y un después problemáticas que ocurren alrede-
en este campo. Se pueden descar- dor del cuidado y atención del cuer-
gar los distintos números de la revis- po, la mente, el corazón y el alma
ta desde la web http://campus. de la infancia y adolescencia.
usal. es/~revistamedicinacine/. De El valor añadido de estos recursos es
lectura recomendable. señalar la potencial utilidad del cine en
– La página electrónica “Una filmo- la docencia y formación humanística y
teca peculiar” (www.fisterra.com ética del médico. Una afición que pue-
/human/3arte/cine.asp), confec- de ser más que un entretenimiento,
cionada por la Dra. Carolina Bote- pues el cine puede transmitir conoci-
lla, médico de familia de Santa mientos, vivencias, experiencias… y
Cruz de Tenerife, cuyo contenido despertar sentimientos en el especta-
está colgado en la web de Fisterra. dor, quien a su vez interpreta la narra-
– El blog “Medycine” (http://medi ción desde sus experiencias previas, al
cinaycine.blogspot.com/), que se tiempo que se siente afectado por ella y
publica desde el año 2007 por el la incorpora a su vida como una expe-
Dr. Albeiros desde Orense y que riencia más propia14.
304
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
7. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
La formación humanística y ética del las acciones que se presentan. La meto-
médico, en general, y del pediatra, en dología educativa utilizada incluye: pro-
particular, es una necesidad indiscuti- yección de escenas breves, acompaña-
ble. Pero los estudiantes y los jóvenes da de los comentarios del profesor-faci-
médicos (y los no tan jóvenes) presen- litador y el debate conjunto en formato
tan una curiosa convivencia entre abun- taller durante 20-30 minutos (con dis-
dantes conocimientos técnicos y escasa cusión abierta e informal para intercam-
formación humanística. En la mayoría bio de opiniones, reflexiones o emocio-
de las facultades de medicina los estu- nes que la proyección les ha sugerido)16.
diantes han sido formados en enferme- Nos adentra en un campo de gran inte-
dades, no en enfermos. No parece que rés: el cine como herramienta en la en-
el examen MIR y la formación MIR con- señanza de la medicina, especialmente
tribuyan a mejorar sustancialmente este para conocer la condición humana y
aspecto. Aún hoy no es infrecuente que mejorar la relación médico-paciente. Es
algunos médicos no contemplen a sus necesario potenciar una educación sen-
pacientes como una persona (con senti- timental, educar los sentimientos, edu-
mientos, con familia, con proyecto de car la afectividad.
vida particular), sino más bien como un Se trata de establecer un punto de par-
conjunto de órganos y patologías15. tida desde la que se pueda despegar para
La educación de la afectividad a tra- un aprendizaje más profundo. Es eviden-
vés del cine es un método utilizado ha- te que este proceso requiere tacto, habili-
ce más de 9 años por la Sociedad Brasi- dad y promover un aprendizaje que res-
leña de Medicina de Familia (Sobram- pete el ritmo de la emotividad. La cultura
fa), que viene desarrollando “una ense- de la emoción está intrínsecamente unida
ñanza médica de cine”, es decir, una a otro elemento integrante del universo
metodología cinematográfica para ayu- del estudiante: la imagen o la “cultura del
dar a los médicos y a los estudiantes de espectáculo”. Con la imagen todo es di-
medicina en el entendimiento más ínti- recto, rápido, como un atajo que despier-
mo del ser humano gracias al visionado ta la emoción17. El cine provoca emocio-
de pequeños vídeos –de menos de dos nes y, sobre todo, ofrece la posibilidad de
minutos– con un alto contenido emo- contemplarlas y compartirlas en discusión
cional, ya sea por la actitud de los intér- abierta, abriendo caminos para una ver-
pretes, por las frases que dicen, o por dadera reconstrucción afectiva. La convi-
305
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
8. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
vencia virtual del cine amplía las oportu- al emplear los medios audiovisuales.
nidades y experiencias, provoca otras vi- Desde la experiencia de los hermanos
vencias desde la pantalla. A través de las García Sánchez, del Departamento de
narraciones (reales o ficticias) se reflejan Medicina Preventiva, Salud Pública y Mi-
en las películas sus propios conflictos y, a crobiología Médica de la Facultad de
través de estas vivencias virtuales, se pro- Medicina de la Universidad de Salaman-
voca una actitud reflexiva que fácilmente ca, y desde la creación de la Revista de
se guarda en el ámbito de la memoria Medicina y Cine, se han prodigado las
afectiva. experiencias docentes utilizando como
Se ha confirmado por la experiencia herramienta el cine. Desde distintas uni-
que el cine es un recurso educativo de al- versidades han publicado sus experien-
to impacto, si bien requiere cautela y co- cias: Universidad Pompeu Fabra15,18,19,
nocimiento para su buen uso. Se precisa Santiago de Compostela20, Buenos Ai-
buena preparación, con objetivos con- res13,14 o Salamanca12,21. El diseño docente
cretos, experiencia en el manejo de gru- propuesto por la Universidad de Sala-
pos de discusión y habilidades técnicas manca se expone en la tabla 1.
Tabla 1. Metodología docente a través del cine propuesta por la Universidad de Salamanca
1. Selección de la película: criterios de selección:
• Sólo películas de ficción, no documentales.
• Disponibilidad de películas, a ser posibles en versión original (con subtítulos).
• Calidad cinematográfica mínima e imprescindible.
• Selección de películas atractivas.
2. Relación cinta/tema: en algunos casos el tema elegido constituye el núcleo central de la película;
en la gran mayoría posiblemente sólo incluiremos apartados concretos de la misma, centrando el
interés en alguna escena en particular.
3. Métodos de proyección:
• Íntegra y colectiva: la forma habitual de ver el cine.
• Proyección de secuencias elegidas en función del contenido.
• Visualización individual de una película: cada alumno puede visionarla con apoyo informático y
no necesariamente implica aislamiento, pues se puede comentar posteriormente en conjunto.
4. Momento de la proyección en relación con la lección o tema teórico a tratar:
• Proyección inicial: actuaría como elemento motivador.
• Proyección final: actuaría como colofón, como elemento globalizador y que ejerce
una función fijadora de contenidos.
• Proyección intermedia: quizás la más conveniente, ya que el alumno ha adquirido el marco
referencial mínimo inicial y la explicación final aglutina todos los conocimientos.
5. Evaluación: el más apropiado es el método de evaluación continuada de la interacción de cada
alumno con el profesor.
306
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
9. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
Algunas películas aconsejables – El Doctor (Randa Haines, 1991):
para iniciar un debate sobre Jack MacKee es un brillante ciruja-
la humanización de la práctica no, rico y con éxito, convencido
médica y mejora de la relación de la necesidad de distanciarse
médico-paciente emocionalmente de los pacientes.
Cada lector tendrá en su mente alguna Su vida cambia cuando un día
película que bien pudiera incluirse en este unas molestias en la garganta le
apartado. Películas que marcan y que no llevan a la consulta de una compa-
se olvidan. Películas con interesantes ñera, quien le diagnostica un tu-
mensajes hacia los profesionales sanita- mor canceroso. Jack será quien
rios. Expongo una breve relación de 5 pe- padezca ahora, como cualquiera
lículas de aconsejable visionado, propicias de sus enfermos, las desagrada-
para iniciarse en las potencialidades do- bles consecuencias de la burocra-
centes orientadas a mejorar la humaniza- cia y la frialdad de los médicos que
ción y la relación médico-paciente. él tanto defendía... Escenas espe-
Figura 1. El Doctor (Randa Haines, 1991).
307
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
10. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
cialmente reveladoras al final de la ponen su vida en las manos de sus
película, cuando tras las experien- médicos (figura 1).
cias vividas durante su enferme- – Las confesiones del Dr. Sachs (Mi-
dad (y como enfermo), recibe a chel Deville, 1999): una serie ágil
sus nuevos residentes y les obliga de viñetas sobre la actividad y vi-
a convertirse en pacientes durante vencias de un joven médico en un
un día completo: visten la misma pueblo de Francia, con una estruc-
indumentaria que los pacientes, si- tura episódica y de índole descrip-
guen la misma dieta y son someti- tiva. Es ésta una película sobre la
dos a algunos de sus procedimien- ética y sobre la función social, casi
tos diagnósticos. El último mensa- religiosa, que cumple Sachs como
je del Dr. MacKee es reconocer arquetipo. La película tiene mo-
que los pacientes se sienten asus- mentos excelentes, de profunda
tados, avergonzados y vulnerables humanidad, testimonios de la em-
y confían tanto que, en realidad, patía entre médico y pacientes.
Figura 2. Las confesiones del Dr. Sachs (Michel Deville, 1999).
308
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
11. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
Y en el que vislumbramos en mu- obra teatral de la que procede, de
chos casos el concepto de las extraordinario valor. Monólogos
“consultas sagradas”, consultas para la reflexión, en los que no fal-
que no sólo mejoran para siempre tan los comentarios a los profesio-
la relación médico-paciente y ob- nales sanitarios y en el que la enfer-
tienen un impacto en salud, sino mería queda mejor parada que los
que compensan al médico del dia- médicos. Escenas para recordar (y
rio apresuramiento tormentoso (fi- que todo sanitario debería ver, al
gura 2). menos para sentir lo que no se de-
– Amar la vida (Mike Nichols, 2001): be hacer) son el momento en el
una profesora de literatura, soltera que se le comunica el diagnóstico
y racional, a la que un día diagnos- del cáncer o los pases de visitas
tican un cáncer terminal de ovario. médicos (figura 3).
La película está repleta de monólo- – Las alas de la vida (Antoni P. Ca-
gos, propios de la adaptación de la net, 2006): película documental
Figura 3. Amar la vida (Mike Nichols, 2001).
309
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
12. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
sobre Carlos Cristos, médico de fa- un diagnóstico, lo recibió y era él el
milia afecto de ASM (atrofia sisté- que escuchaba el diagnóstico de
mica múltiple), enfermedad dege- ASM. Película muy recomendable
nerativa, invalidante y mortal. Au- para todos, quizás especialmente
téntico cinema verité, documental para los médicos, y que contó con
filmado del 2003 al 2006, que es la aparición de figuras de la medi-
una reflexión en primera persona cina como Carlos Simó (investiga-
sobre la vida y la muerte, sobre la dor del IVI) o José María López Pi-
muerte digna y cómo mirarla a la ñero (catedrático de Historia de la
cara. Reflexiones desde la perspec- Ciencia). Película elogiada por pú-
tiva de dos médicos, Carlos y su blico y crítica. Cuenta con una web
mujer, Carmen Font, residentes en propia: www.lasalasdelavida.
Mallorca junto a su hija pequeña. com/index.html (figura 4).
Carlos es una persona multifacéti- – El mal ajeno (Oskar Santos, 2009):
ca, pero que un día en lugar de dar Diego, un médico de cuidados pa-
Figura 4. Las alas de la vida (Antoni P. Canet, 2006).
310
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
13. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
liativos, está tan acostumbrado a que la película presenta inconsisten-
manejar situaciones límite que ha cias melodramáticas, cabe aprove-
logrado inmunizarse ante el dolor char el planteamiento sobre los
de los demás: desconectado de su cambios de sentimientos que pre-
trabajo, de su pareja y de su com- senta el médico (figura 5).
promiso como padre. De vuelta de No sólo el cine panorámico es una
todo y sin empatía con sus enfer- oportunidad para mejorar la enseñanza
mos terminales. Todo cambia cuan- y la humanización en medicina, tam-
do le disparan, pero salva milagro- bién las series de televisión sobre temas
samente la vida. Posteriormente, la médicos: Anatomía de Grey, Urgencias,
historia relacionará a médicos y pa- Hospital Central, Scrubs… hasta House
cientes y se verá agitado entre la (porque también de los errores se
milagrosa curación que empieza a aprende…). Cualquier iniciativa artística
sucederle a sus pacientes y los pro- aplicada a la humanización de la medi-
blemas de salud de su familia. Aun- cina debe ser bienvenida.
Figura 5. El mal ajeno (Oskar Santos, 2009).
311
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
14. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
Tampoco hacemos referencia a nin- mayor recorrido en la parte II de este
guna película directamente relacionada artículo sobre cine y pediatría.
con la pediatría. A ellas dedicaremos un
Bibliografía dades infecciosas y la microbiología clínica. En-
ferm Infecc Microbiol Clin. 2002;20:403-6.
1. Shapiro J. Literature and the arts in medical 11. González Blasco P, Roncoletta AFT, More-
education. Fam Med. 2000;32:157-8. to G, Levites MR, Janaudis MA. Medicina de fa-
2. Blasco PG. Literature and movies for medi- milia y cine: un recurso humanístico para educar
cal students. Fam Med. 2001;33:426-8. la afectividad. Aten Primaria. 2005;36:566-72.
3. Whitman N. A poet confronts his own mor- 12. Fresnadillo Martínez MJ, Diego Amado
tality: what a poet can teach medical students C, García Sánchez E, García Sánchez JE. Meto-
and teacher. Fam Med. 2000;32:673-4. dología docente para la utilización del cine en la
4. Blasco PG, Moreto G, Levites MR. Teaching enseñanza de la microbiología médica y las en-
Humanities through Opera: leading medical stu- fermedades infecciosa. Rev Med Cine. 2005;
dents to reflective attitudes. Fam Med. 2005; 1:17-23.
37:18-20. 13. Moratal Ibáñez LM. El cine y su mirada
5. Ber R, Alroy G. Twenty years of experience holística y humanitaria de las enfermedades. Rev
using trigger films as teaching tools. Acad Med. Med Cine. 2007;3:85-6.
2001;76:656-8. 14. Cappelletti GL, Sabelli MJG, Tenutto MA.
6. Rabinowitz D, Melzer-Geva M, Ber R. Tea- ¿Se puede enseñar mejor? Acerca de la relación
ching the cultural dimensions of the patient-phy- entre el cine y la enseñanza. Rev Med Cine.
sician relationship: a novel approach using didac- 2007;3:87-91.
tic trigger films. Med Teach. 2002;24:181-5. 15. Baños Díez JE. ¿Cuál debe ser el grosor del
7. Self DJ, Baldwin DC. Teaching medical hu- estudio? La enseñanza de las sutilezas de la rela-
manities through film discussions. J Med Huma- ción médico-paciente mediante obras literarias y
nit. 1990;11:23-9. películas comerciales. Rev Med Cine. 2007;3:
8. Seld DJ, Baldwin DC, Olivarez M. Teaching 159-65.
medical ethics to first-year students by using film 16. Blasco PG, Moreto G, Roncoletta AFT, Le-
discussion to develop their moral reasoning. vites MR, Janaudis MA. Using movie clips to fos-
Acad Med. 1993;68:383-5. ter learners’ reflections: improving education in
9. Wilt DI, Evans GW, Muenchen R, Guegold the affective domain. Fam Med. 2006;38:94-6.
G. Teaching with entertainment films: an empat- 17. González Blasco P, Pinheiro TRSP, Ulloa-
hetic focus. J Psycosoc Nurs Ment Health Serv. Rodríguez MF, Angulo-Calderón NM. El cine en
1995;33:6-15. la formación ética del médico: un recurso peda-
10. García Sánchez JR, Fresnadillo MU, García gógico que facilita el aprendizaje. Pers Bioet.
Sánchez E. El cine en la docencia de las enferme- 2009;13:114-27.
312
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313
15. González de Dios J. Cine y Pediatría (I): una oportunidad para la docencia y la humanización en nuestra práctica clínica
18. Loscos J, Baños JE, Loscos F, De la Cámara 20. Muñoz-Crego A, Santos Rodríguez Y,
J. Medicina, Cine y Literatura: una experiencia Seoane Prado R. MicroDeCine: la docencia de la
docente en la Universitat Autónoma de Barcelo- Microbiología Clínica en la Universidad de San-
na. Rev Med Cine. 2006;2:138-42. tiago de Compostela mediante el cine. Rev Med
19. Baños Díez JE, Aramburu Beltrán JF, Sentí Cine. 2009;5:87-91.
Clapés M. Biocinema: la experiencia de emplear 21. García Sánchez JE, Trujillano Martín I,
películas comerciales con estudiantes de Biolo- García Sánchez E. Medicina y cine ¿Por qué?
gía. Rev Med Cine. 2005;1:42-6. Rev Med Cine. 2005;1:1-2.
x
Ver también en este número:
González de Dios J. Cine y Pediatría (II): infancia y adolescencia en las pantallas
de cine de todo el mundo. Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:e21-e46.
313
Revista Pediatría de Atención Primaria • Vol. XII. N.º 46. Abril/junio 2010
Rev Pediatr Aten Primaria. 2010;12:299-313