6. La escasez y el control gubernamental explican la aparición de las cartillas de racionamiento que perduraron hasta los años cincuenta. Las colas y escenas de hombres pidiendo junto a sus hijos fueron habituales en los durísimos años de la posguerra.
7. A partir de 1951 , se intentó una tímida apertura económica. Se puso fin al racionamiento, se relajó algo el control sobre los mercados y se inició una reforma agraria e industrial limitada , con la Ley de Concentración Parcelaria (1952) y el Plan Badajoz (1952). Gracias a estos esfuerzos se produjo una relativa recuperación de la Renta Nacional , el control de la inflación y un cierto crecimiento industrial. Pero, a mediados de los años cincuenta , la economía española, a pesar de las ayudas de EEUU, volvía a encontrarse estancada . España tenía una balanza de pagos negativa , las reservas de oro comenzaban a disminuir de forma peligrosa, la agricultura no producía lo suficiente y de nuevo el incremento del coste de la vida se traducía en continuas protestas obreras y universitarias que el régimen acallaba con dureza. La vía autárquica estaba agotada. Los intentos de liberalización de los años cincuenta
10. Los tres factores ligados al crecimiento económico y al “desarrollismo” de los años 60 son: 1.- La emigración 2.- El “boom” turístico 3.- Las inversiones extranjeras
11. La expansión económica del desarrollismo -Economía en expansión desde 1950. -1957 Febrero NUEVO GOBIERNO política liberalizadora. La Falange pierde poder y suben los tecnócratas del Opus Dei: Laureano López Rodó ; apoyo de Carrero Blanco . Proyecto tecnocrático : modernizar económica y socialmente el país sin alterar las estructuras autoritarias . EL segundo franquismo (1959-1975):Evolución socioeconómica.
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13. A corto plazo, el ajuste fue muy duro. Supuso una congelación de los salarios, una escasez de artículos de consumo y un aumento del paro y la emigración . Sin embargo, desde 1961 y en un período que se extiende hasta 1973 se conseguiría una transformación radical de la estructura del país. España renovó su equipamiento y se convirtió en una potencia industrial, integrándose en los circuitos económicos europeos. Los planes de desarrollo El plan fue un ajuste económico que implicó la drástica devaluación de la moneda, recortes en el gasto público y una progresiva liberalización del mercado para atraer capital extranjero. La operación se llevó a cabo bajo supervisión del FMI y de la OECE. Señalaban las inversiones prioritarias, asignación de recursos y como estimular la iniciativa privada con ventajas fiscales y crediticias.
14. El llamado milagro español se consiguió gracias a los planes de desarrollo. Para armonizar el crecimiento económico, se instauró una planificación indicativa, al estilo francés. Para ello se situó a López Rodó al frente de la Comisaría del Plan de Desarrollo (1962) y el año siguiente se promulgó el Primer Plan de Desarrollo para 1964-1967, al cual seguirían dos más (1968-1971 y 1972-1975). Los planes se sustentaron en tres pilares : inversiones extranjeras, ingresos obtenidos por el turismo y las remesas de divisas que enviaban los emigrantes. Al mismo tiempo, el Estado apoyó con beneficios fiscales , construcción de infraestructuras y ayudas a la exportación a las empresas que se dedicaban a determinados sectores o que se situaban en regiones que el Estado intentaba promocionar. En ese sentido, los llamados polos de desarrollo creados por el Estado quisieron terminar con el tradicional desequilibrio económico regional que afectaba al país. Laureano López Rodó
15. La transformación del sector primario . La falta de medidas de reforma agraria del franquismo y la elevada natalidad de los años sesenta habían mantenido una elevada población rural, carente de posibilidades de trabajo . Por ello, cuatro millones de españoles emigrarán a las zonas de crecimiento industrial y al extranjero. Así, se redujo la mano de obra que existía en el campo y se elevaron los salarios rurales . El factor trabajo dejaba así de ser barato, y los terratenientes tuvieron que iniciar un proceso de modernización de sus explotaciones, mecanizándolas y diversificando la producción para obtener una mayor rentabilidad. Las consecuencias del desarrollismo
16. De 1961 a 1974 crecimiento del PIB del 7% (sólo superado por Japón). 1975, España un país industrializado: 2/3 habitaba en poblaciones de más de 10.000 h. Entre 1959 y 1975: -La Agricultura pasa del 23% al 9% de PIB -La Industria del 34% al 42% del PIB -Los Servicios del 43% al 49% del PIB Entre 1960-1975 emigran 7 millones a las ciudades desde el campo. España se había trasformado. EL MILAGRO ESPAÑOL
17. Las condiciones de vida El desarrollo económico trasformó la vida cotidiana de los españoles profundamente. Aumento del nivel de vida En los 60 España casi dobló el valor real de su renta nacional: de 613 a 2.178 millones de Pts. Renta per capita, de 20.234 Pts en 1960 a 145.769 Pts en 1975. Poder adquisitivo comparado con la CE: 58,3% en 1960 a 79,2% en 1975. EL MILAGRO ESPAÑOL
18. Consumo y bienestar Incremento del presupuesto familiar. Transformación en la estructura de sus gastos. Necesidades básicas: en 1958 el 77,2%, en 1973 el 57%. Bienes duraderos: línea blanca, coche, televisor, etc. Modificaciones en las forma de vida, asimilándose a las europeas. Reformas educativas y sociales. 1963 Ley de Bases de la Seguridad Social . Derecho de todos los españoles a la SS. 1970 Ley General de Educación . Incrementar la inversión, número de profesores, obligatoriedad, formación profesional, etc. Pautas cotidianas cada vez menos religiosas.
19. El desarrollo europeo de los sesenta necesitaba mano de obra barata , y la obtuvo de los países de la periferia más atrasados, como Portugal, Grecia o España . Los emigrantes procedían en su mayoría de las zonas rurales y eran hombres jóvenes . Las divisas que enviaban a España se convirtieron en una de las bases del desarrollo . La emigración se dirigió sobre todo a Francia, Gran Bretaña, Alemania, Suiza y Bélgica (de 1960 a 1973, un millón de españoles se instala en esos países y otro millón trabaja allí de forma temporal para luego regresar a España). La emigración a América perdió importancia. La emigración y el turismo
20. La emigración supuso: - Reducción del paro. - Entrada de divisas, remitidas por los emigrantes. - Formación técnica recibida en el extranjero. El emigrante entra en contacto con una Europa democrática, con sindicatos potentes, libertad de expresión y sistemas de educación y formación profesional abiertos a todos . Por ello, muchos empezarán a cuestionarse, lejos de su hogar, por qué España seguía siendo diferente . Mientras que muchos españoles emigraban a Europa en busca de trabajo, cada vez más europeos acudían a España como turistas . En la década de los sesenta España se convierte en uno de los destinos turísticos preferidos (6 millones en 1960, 24 millones en 1970), y la inyección de divisas de esa actividad contribuyó a equilibrar el déficit comercial español.
21. El turismo fue trascendental para: * Equilibrar la balanza de pagos * El desarrollo económico * Iniciar un cambio de actitud social y política Mientras que muchos españoles emigraban a Europa en busca de trabajo, cada vez más europeos acudían a España como turistas . En la década de los sesenta España se convierte en uno de los destinos turísticos preferidos (6 millones en 1960, 24 millones en 1970), y la inyección de divisas de esa actividad contribuyó a equilibrar el déficit comercial español. Pero el turismo también tuvo su contrapartida negativa para el país. Incidió sólo en ciertas zonas , aumentando así el desequilibrio regional.
22. LA ESPAÑA DE LOS SESENTA: CAMBIOS SOCIALES España se une al ciclo demográfico moderno propio de los países europeos desarrollados: bajas tasas de natalidad y de mortalidad, crecimiento vegetativo reducido y envejecimiento de la población . Superados los años difíciles de la posguerra, al comienzo de los sesenta se observa un notable descenso de la tasa de mortalidad , pero hasta los años setenta se mantiene alta la natalidad, con el consiguiente crecimiento de la población, que pasa de 25 millones en 1940 a más de 37 en 1980. El descenso de la natalidad no se inició hasta la década de los setenta. Cambios en la estructura demográfica Una sociedad industrial España se convirtió en una sociedad industrial : El sector industrial que más creció fue el del metal (de medio millón a más de dos millones en el período 1950-1970). De ese incremento, un 40 % procedía del sector agrario . Este último sector pasó de representar el 39,7% de la población activa en 1960, al 29,1 % diez años más tarde. Aunque muy por debajo respecto a los países desarrollados, la mujer también amplió su participación en el mundo laboral: si en 1950 trabajaban 1,7 millones, en 1970 lo hacen 2,3 millones, lo que ya representa un 20 % de la población activa total.
23. El éxodo rural y la emigración modificaron la distribución demográfica espacial, acelerando algunas tendencias anteriores: crecieron los núcleos industriales tradicionales (Cataluña, País Vasco), Madrid, las zonas litorales y los nuevos polos de desarrollo (Valladolid, Pamplona, Zaragoza), a la vez que se producía una progresiva desertización de las regiones interiores. Crecimiento caótico de las áreas urbanas La llegada masiva de población a las ciudades en busca de trabajo desbordó las posibilidades de acogida. Así, se desarrollaron barriadas obreras con viviendas de baja calidad y escasos servicios sociales, que mantenían la marginación de los recién llegados Pero el desarrollo supuso también el crecimiento proporcional de las clases medias en el conjunto social, que a finales de los años sesenta representarán un 20% del total de la población activa y cuya composición cambia respecto a la de épocas anteriores: aumenta el personal administrativo, técnico y comercial, así como el de profesiones liberales.
24. La sociedad de consumo y los nuevos valores Los españoles de los años sesenta disfrutaban de unos ingresos más elevados que en los años de la posguerra y pudieron acceder a la sociedad de consumo (la renta per cápita pasó de 290 dólares en 1960 a 2.486 dólares en 1975). Por primera vez en la historia, bastantes españoles disfrutaron de vacaciones pagadas, de electrodomésticos (nevera, lavadora, televisión) e incluso de automóvil (el Seat 600, fabricado en España). El cambio hacia una sociedad consumista se produjo de forma brusca, y en un contexto de falta de libertades políticas y de democracia . El consumismo fomentaba los valores materiales y ponía en crisis los valores tradicionales (la familia, la religiosidad, la obediencia, la patria), socavando algunos de los principios del régimen . Pero la juventud , ajena a los discursos sobre la guerra civil, recibía con entusiasmo todo lo que llegaba del extranjero, de la Europa desarrollada.