Sermonario menores

AUTORA: Vera Lúcia Felau Kefler (USeB)

EDICIÓN Y COORDINACIÓN GENERAL: Graciela de Hein - MN - DSA
TAPA: Jocard
TEMAS: Vera Lúcia Felau Kefler (USeB)
TRADUCCIÓN: Departamento de Traducción - DSA
DISEÑO: Victor Trivelato - DSA

SEMANA SANTA - MARCAS DE ESPERANZA

INTRODUCCIÓN
El tiempo de Pascua siempre hace crecer la ansiedad de los niños, pues
quieren saber qué recibirán. Los medios de comunicación contribuyen en
gran manera a la fijación del consumismo y la secularización de un tema que
está recubierto de tanto amor y renuncia.
Si vamos a los inicios de la institución de la Pascua, vemos que lo mismo
sucedía en la celebración de la liberación del pueblo de Israel, de la esclavitud
de Egipto. Ellos tenían que marcar los umbrales de las puertas para identi-
ficarse como el pueblo escogido. De igual forma, ahora estamos llamados a
marcar una diferencia entre el secularismo y el verdadero significado de la
Pascua.
La Semana Santa “Marcas de Esperanza” fue preparada con mucho cariño
por la profesora Vera Lucia Felau Kefler (USeB), a quien le expresamos nues-
tro sincero agradecimiento por el desarrollo de los temas especiales basados
en el material (2013) para los adultos.
Todos los temas tratados tienen historias de personas que vivieron situa-
ciones de vida real y pudieron poner en práctica los principios enseñados a
los niños. Nuestro deseo es que ellos entiendan el gran plan de Dios para la
vida de cada uno, permitiendo que cada día sean marcados por Jesús.
El plan para la realización del programa de Semana Santa “Marcas de Es-
peranza”, para adultos, es que se realice en las casas, en Grupos Pequeños.
Por eso, sugerimos que el material infantil también sea utilizado de la misma
forma y que, al final de la semana, se siga la programación en las Iglesias/
Congregaciones con todos sus participantes, con los adultos y los niños en
ambientes separados y con la presencia de muchas visitas.
Este material preparado para utilizar en los hogares y las iglesias, también
puede ser desarrollado en las escuelas, barrios nuevos, etc., por cualquier persona

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MARCAS DE ESPERANZA - SEMANA SANTA

que sienta el deseo de llevar a los niños a los pies de Jesús. Su estructura original
puede ser alterada y adaptada a otros contenidos relacionados con la Biblia, salud,
cultura, relaciones sociales, buena conducta, valores cristianos, etc., dependiendo
de la ocasión y de la realidad de su comunidad.
Además del AFICHE y la INVITACIÓN para una excelente y previa di-
vulgación, tenemos toda la programación en un FOLLETO con las historias/
orientaciones para los maestros y también el CUADERNO DE ACTIVIDA-
DES que cada niño debe utilizar todas las noches. Las músicas serán de libre
elección.
Como este programa es parte de una semana especial, motivaremos a los
niños a tomar decisiones diarias al lado de Jesús, teniendo momentos de ora-
ción y propuestas de actividades para la fijación de dichas decisiones.
¡Que Dios los bendiga mucho en esta programación de Semana Santa!
Que por medio de su trabajo, muchos niños puedan conocer mejor a Jesús y
que sean definitivamente marcados con las “Marcas de Esperanza”.

Graciela de Hein
Ministerio del Niño - DSA

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INDICE
Informe de Semana Santa ......................................................... 6

Resumen Diario ........................................................................ 7

Programa General .................................................................... 9

1º dia – LAS MARCAS DE MARÍA ...................................... 13

2º dia – LAS MARCAS DE JUAN EL BAUTISTA ................. 18

3º dia – LAS MARCAS DE NATANAEL ............................... 22

4º dia – LAS MARCAS DE BARTIMEO ............................ 26

5º dia – LAS MARCAS DE JUDAS ......................................... 31

6º dia – LAS MARCAS DE SIMEÓN ................................... 35

7º dia – LAS MARCAS DEL CENTURIÓN ........................ 40

8º dia – LAS MARCAS DE ESPERANZA ......................... 45


Informe de Semana Santa Infantil - DSA
(Modelo para la Iglesia/Grupo)

Iglesia/Campo: ________________________________________________
Fecha de envío al Campo/Unión: ____/____/____

1. Número de programas de Semana Santa que se realizaron en los si-
guientes lugares:
a) Iglesia/Congregación (_____)
b) Grupo pequeño (_____)
c) Otro lugar (_____)
Total general (_____)

2. Número total de niños que participaron del programa de Semana
Santa:
a) Adventistas ____________
b) No adventistas ____________

3. ¿Hay alguna observación/sugerencia que le gustaría presentar sobre
este material?
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________

4. Si hay algún testimonio especial, relátelo a continuación, o al dorso,
en pocas palabras y envíe fotos.

NOTA: Una vez que termina la programación, recorte esta hoja
y envíe su Informe al Campo local.

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RESUMEN DIARIO
Objetivo Historia
Día Tema Actividades Desaf ío
Principal Bíblica
Ayudar a los
Las marcas Ser honesto Nacimiento Unir núme-
1º padres en una
de María y verdadero de Jesús ros y pintar
tarea
Predicación Llevar un
Las marcas Hablar
de Juan y Dibujo para amigo a la
2º de Juan el siempre la
bautismo de pintar reunión del día
Bautista verdad
Jesús. siguiente.
Las marcas Felipe pre- Felipe y
3º de Natanael Llevar ami- senta Jesús a Natanael
Iniciar estudios
gos a Jesús con un amigo.
Natanael Armar
Ayudar a
Las marcas Tener más Jesús cura a alguien con
4º Laberinto
de Bartimeo persistencia Bartimeo necesidades
especiales.
Contar la
Saber tomar Santa Cena.-
Las marcas historia para
5º elecciones Traición de Laberinto
de Judas un compañero
correctas. Judas
de clases.
Hacer una
Juicio de
Las marcas Carta actividad que
6º Bautizarse Jesús - Simón
de Simón enigmática. mamá siempre
lleva la cruz
hace.
Obsequiar
Decidir no
el centurión
Las mar- reclamar en Crucifixión Buscar los
7º y contarle la
cas del situaciones y muerte de errores.
historia a un
centurión dif íciles Jesús amigo.
Prepararse Resurrec-
Marcas de para el regre- ción/Camino Jugar con un
8º so de Jesús. de Emaús. Laberinto amigo el juego
Esperanza
2.ª venida de de la memoria
Jesús

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PROGRAMA GENERAL
TEMA
Esta parte está reservada para el líder o presentador del programa. Es la síntesis
de la historia bíblica que se presentará. El objetivo es que el líder identifique en el
comienzo lo que se tratará ese día.

OBJETIVO
También está dirigido al líder, quién manifestará los objetivos que se preten-
den alcanzar al final del programa diario. Con esto en mente, el líder podrá esta-
blecer mejor sus propuestas y acciones, de manera que estos objetivos se alcancen
plenamente.

VERSÍCULOS
Para cada día hay un versículo para memorizar, con el objetivo de presentar
en resumen la historia bíblica. Los niños deben ser incentivados a memorizar el
versículo de cada día. Recibirán ese versículo escrito a la salida de cada reunión y
deberán recitarlo al llegar el día siguiente en lo posible.

ALABANZAS
Esta actividad debe ser bien animada, y se debe lograr que todos los niños se
involucren y participen. Será interesante usar, por lo menos, un equipo toca CD o
DVD con karaoke, para que la letra de los cantos aparezcan en la pantalla y puedan
ser más fáciles de aprender.

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BIENVENIDA
Este es un momento de gran importancia, que debe ser realizada por una per-
sona alegre y cristiana. Es la oportunidad de agradecer por la presencia de los niños,
indicando quienes son las visitas, y comentando cautelosamente el tema del día,
demostrando suspenso, para despertar la atención y la curiosidad de los niños.

ACTIVIDADES PREPARATORIAS
Esta actividad se hace para llamar la atención de los niños a la historia bíblica
que luego será presentada. Trate de involucrar al máximo a los niños en esta acti-
vidad, ya que es importante para la fijación de las ideas que se presentarán luego.

CANTO INICIAL
Elija un canto relacionado con el tema para cantar cada noche.

ORACIÓN TEMÁTICA
Esta oración debe hacerse de acuerdo con el tema diario de cada historia bí-
blica. La persona que hará esta oración debe de informarse anticipadamente de
los objetivos y de la historia del día, mencionando en su oración los asuntos a ser
tratados, preparando así el corazón de los niños.

HISTORIA INICIAL
Casi todos los días hay una historia inicial que sirve como introducción a la
historia bíblica y al tema del día. La persona responsable de esta parte debe prepa-
rarla con anticipación para evitar leerla. Esta persona debe también dar secuencia,
contando la historia bíblica con la aplicación y el llamado.

HISTORIA BÍBLICA
El tema de esta Semana Santa es: “Marcas de Esperanza”. Por medio de las
historias de la Biblia, conoceremos a personas que tuvieron la oportunidad de en-
contrarse con Jesús; cómo fueron estos encuentros y qué consecuencias estos en-
cuentros tuvieron en la vida de cada uno de ellos.
Los pasajes bíblicos han sido extraídos de la Nueva Versión Internacional, pero
pueden utilizar otras versiones que ayuden y faciliten en la comprensión, como la
versión Dios habla hoy o traducción en lenguaje actual.
Es importante que una Biblia esté siempre abierta y visible, y que la persona
encargada de contar la historia muestre a los niños que dicha historia se encuentra
en la Biblia.
Ilustre las historias de la forma que le es posible, haciéndola agradable y atrac-
tiva, pero que refleje con exactitud los hechos bíblicos. Busque el máximo de

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información sobre la historia (Espíritu de Profecía), dando así más contribución
para un buen programa.

APLICACIÓN
En esta parte, el programa parte hacia la contemporaneidad de la historia. Aquí
los niños son llevados a extraer la “lección moral” de la historia presentada, desean-
do también ser marcados por Jesús.

LLAMADO
Esta es la parte más importante del día. Es el momento en que los niños serán
motivados a decidir por lo que es correcto; decidir a ser marcados por Jesús. Para
que esto realmente ocurra, la persona responsable debe decir de forma clara y di-
recta lo que espera que los niños hagan y entonces llevarlos a la decisión.
Este es un momento que no se puede olvidar o abandonar, porque la decisión
del niño en este día es nuestra responsabilidad. Terminar sin que los niños sean
motivados a la decisión, es como un maratonista que corre, pero no quiere cruzar
la línea de llegada.

CONVERSANDO CON JESÚS
Después que los niños han decidido, es muy importante que esta decisión sea
consagrada a Dios. Por eso en este momento, la persona encargada hace una ora-
ción pidiendo que Dios confirme las decisiones que fueron tomadas.

ACTIVIDAD
Cada día tiene una actividad para desarrollar. Algunos días tendrán actividades
de recortes, montaje y collage. Para estos días se necesita la instrucción y ayuda de
los maestros, para evitar cortes y/o dobladuras equivocados que comprometan la
finalización del trabajo. En los días que hay actividades para escribir o dibujar, los
niños podrán trabajar más libremente.

DESAFÍO
Este es el momento en que los niños serán desafiados a cumplir en casa con
alguna tarea que esté relacionada al tema del día.
Esta es la parte donde los niños podrán usar los conocimientos aprendidos
del día y aplicarlos de forma práctica en su casa o con los vecinos. Es importante
que sepan que, al siguiente día, tendrán que relatar como fue el cumplimiento de
este desaf ío.

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REFRIGERIO (opcional)
Los niños, sin duda apreciarán este momento agradable. Entre en contacto con
los miembros de su iglesia y organice un refrigerio saludable y sabroso todas las
noches. Esto es opcional. Use el momento de actividades para que los niños coman
mientras trabajan.
Los refrigerios deben prepararse y envasarse con anticipación para facilitar la
distribución y el consumo. Use de preferencia alimentos de fácil preparación y que
no ensucien el lugar, para mantenerlo limpio.

CANTO FINAL
Elija un cántico relacionado con el tema.

ORACIÓN FINAL
La oración final debe ser breve, siempre agradeciendo por la presencia de los
niños que fueron, reforzando las decisiones tomadas en el llamado y recordando el
desaf ío que tendrán que cumplir en casa.

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1º DÍA - SÁBADO

LAS MARCAS DE
MARÍA
TEMA
• María fue elegida para ser la madre de Jesús.
• Nacimiento de Jesús.
• Elegida y marcada por Jesús.

REFERENCIAS:
• Lucas 1:26-38; Mateo 1:19-24

OBJETIVOS
• Conocer la historia del nacimiento de Jesús
• Reconocer que María, a pesar de ser especial, no debe ser adorada; ella tam-
bién necesita de un Salvador.
• Buscar siempre ser honesto, fiel, verdadero y sumiso a la voluntad de Dios.
• Sentir necesidad de ser marcado por Jesús.

VERSÍCULO
“Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús”
(Lucas 1:31).


1. Alabanza
2. Bienvenida
3. Actividad preparatoria:
Hacer una pequeña votación para elegir al niño más comunicativo del salón (la
elección puede tener otra característica), todos pueden ser candidatos. Distribuya
papeles donde cada uno votará por alguien del salón. Haga el escrutinio e indique
quién fue el niño elegido. Llamarlo que pase al frente y hágale las siguientes pregun-
tas: ¿Cómo te sentiste al ser la persona elegida del salón? ¿Pensaste que ganarías? ¿Por
qué?
Nuestra historia de hoy nos cuenta de una persona que también fue elegida
para una misión muy especial.
4. Canto inicial
5. Oración temática
Orar por papá y mamá, agradeciendo a Dios por haberles dado a ellos la res-
ponsabilidad de cuidar de sus hijos. Pedir que Dios continúe bendiciendo a todos.
6. Historia inicial
Hace muchos años, en China, un príncipe iba a ser coronado rey, pero según las
leyes del país, él debía casarse. Sabiendo esto, decidió hacer un “concurso” entre las se-
ñoritas del palacio y entre quienes pensaban ser dignas de su propuesta de matrimonio.
Una antigua trabajadora del palacio, se puso triste, pues sabía que a su hija le gustaba
mucho el príncipe, pero sabía también que no tenía ninguna posibilidad. Aún así, esta
señorita fue al palacio, donde se juntó con las señoritas más hermosas y ricas de la ciu-
dad, esperó ansiosamente saber qué le diría el príncipe a cada una de ellas.
Finalmente, el príncipe anunció su desaf ío:
Le daré a cada una de ustedes una semilla. Quién dentro de seis meses traiga la
flor más hermosa, será escogida para ser mi esposa y futura emperatriz de China.
El tiempo pasó y aquella señorita cuidaba con mucha paciencia su semilla, de-
seando, como resultado de esta flor, alcanzar el corazón de aquel príncipe. Pasaron
tres meses y nada surgió, ella intentó usar todos los métodos que conocía, pero nada
nació.
Después de seis meses de dedicación, llegó la hora de volver al palacio y presen-
tar sus resultados. A la hora señalada, allí estaba ella, con su maceta vacía, sintién-
dose humillada al ver a las otras pretendientes, cada una con una flor más bella que
la otra, de diversas formas y colores.
Finalmente, llegó el momento esperado y el príncipe observó a cada una de
las pretendientes con mucho cuidado y atención. Después de pasar por todas, una
por una, anunció el resultado, e indicó a aquella joven sencilla, como su futura

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esposa. Nadie comprendió por qué él había elegido justamente a la que nada había
cultivado.
Entonces, calmadamente, el príncipe aclaró:
“Ella fue la única que cultivó la flor y llegó a ser digna de ser una emperatriz: La
flor de la honestidad, pues todas las semillas que entregue eran estériles” .
7. Historia Bíblica
No sé cuáles eran las cualidades que María poseía, pero así como la joven de
nuestra historia, ella fue elegida, ¡fue la privilegiada!
Esta historia está registrada en la Biblia, pero su contexto es mucho más amplio.
María era una joven que así como cualquier otra señorita de su edad, estaba en
edad de casarse, para poder tener que la cuidara y mantuviera. No es que el amor
no fuera importante, sino que la sociedad en esa época no tenía mucha considera-
ción por las mujeres solteras.
María estaba de novia con un joven carpintero llamado José y probablemente
ella ya estaba preparando su ajuar, haciendo las invitaciones y preparativos para el
matrimonio, arreglando su nueva casa, etc.
En un día determinado, María recibió inesperadamente una visita muy diferen-
te: un ángel apareció ante ella y le dijo que quedaría embarazada y tendría un bebé.
Esto sonó muy extraño, ella aún no estaba casada, ¿cómo es que tendría un bebé?
El ángel le explicó que su bebé sería el Mesías, Jesús, el Hijo de Dios, y que ella
había sido elegida para desempeñar esa tarea.
¿Te imaginas qué sorpresa? Ella era la elegida para esta misión y sin duda algu-
na, ella estaba muy feliz. Pero había un problema: ¿Qué diría la gente de ella por
haber quedado embarazada antes de casarse? Y José ¿Qué iba a decir de toda esta
historia?
María no sabía qué respuestas darle a todas estas preguntas, pero ella estaba
segura de una cosa: el ángel le había dicho que el Espíritu Santo estaría con ella; esto
era suficiente. Ella inclinó su cabeza humildemente en señal de respeto y sumisión y
dijo: “Aquí tienes a la sierva del Señor -contestó María- Que él haga conmigo como
me has dicho” (Lucas 1:38).
¡Qué hermosa confianza demostró María! ¡Cuánta fe, sumisión y valor en los
planes divinos que ni ella entendía como ocurrirían!
Al otro día, María fue a conversar con su novio José. En ese tiempo, si una seño-
rita quedaba embarazada antes del matrimonio, debía ser castigada con la muerte
o, por lo menos, el novio, los amigos y los familiares debían abandonarla. Imaginen
la valentía que María tuvo para contarle a José sobre la visita del ángel.
La Biblia nos dice que José la escuchó, pero en su corazón, hizo planes de aban-
donar a María secretamente, para que la noticia de su embarazo no llegase a ser

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pública y María no fuese despreciada. Pero como Dios conoce todos nuestros pen-
samientos, él envió un ángel que visitó a José y le contó todos los detalles de esta
hermosa historia. ¡María era la elegida para ser la madre del Salvador del mundo!
(Mateo 1:19-24).
8. Aplicación
El resto de la historia ya la conocemos, pues todos los años, en la época de Navi-
dad escuchamos la historia sobre el nacimiento de Jesús, de la visita de los pastores
y de los reyes magos ¿recuerdan? Hoy no vamos a recordar sobre el nacimiento de
Jesús, pero si vamos a hablar sobre su mamá.
Hay personas que creen que María, por ser la mujer escogida para ser la madre
de Jesús, hoy pueden considerarla una santa y ella puede interceder por nosotros
ante Dios. Esto no está escrito en la Biblia, pues María así como nosotros, también
necesitó aceptar el sacrificio que Jesús hizo en la cruz. Ella creía y comentaba con
los demás, que el perdón y la salvación de las personas sólo podía ser a través de
Jesús, nuestro único Salvador.
Pero el hecho más importante en María fueron las cualidades que la llevaron a
ser alguien tan especial. Ella no tuvo miedo de las consecuencias y de los posibles
riesgos que involucraban su embarazo. Al contrario, ella creyó totalmente en las
palabras del ángel y aceptó humildemente su misión.
Y al hablar de cualidades, ¿Recuerdan la historia del príncipe que les contamos
al comienzo, que hizo un concurso para elegir a su esposa?
Tanto esa señorita como María, fueron escogidas. ¿Por qué? (esperar la res-
puesta de los niños).
Ellas fueron elegidas porque eran honestas, decían solamente la verdad y no
mentían, aún en las dificultades.
9. Apelación
¡Qué ejemplo hermoso! Tanto a la señorita elegida por el príncipe, como María,
no les importó si las personas se reirían o las abandonarían por decir solamente la
verdad; estaban dispuestas a pagar el precio, pero se mantuvieron siempre del lado
de la verdad.
Yo sé que hay situaciones en las que sus amigos los presionan para que no digan
la verdad. Puede ser una pelota que encontraste en la calle y solamente tú sabes
quién es el dueño. Puede ser una nota baja en el examen que no quieres contar a tus
padres. Puede ser aquella niña bonita de la escuela que seguramente no te va hablar
más, si sabe que eres cristiano (sugiera otros ejemplos que puedan formar parte
de la realidad diaria de los niños).
Qué decidirás hacer:

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¿Buscarás ser honesto y verdadero, aunque para esto tengas la posibilidad de ser
ridiculizado y pasar por mayores dificultades?
• Hoy tienen la opción de elegir quiénes ustedes quieren ser:
• Igual que todos los demás.
• O hacer la diferencia y ser elegido por Jesús.
• Me gustaría que se pongan de pie todos aquellos que quieren decidir hoy, ser
siempre honestos y verdaderos.
• Los que se han puesto de pie, son los que quieren recibir la marca de la es-
peranza que Jesús les quiere dar hoy. Esa marca es: ¡honestidad y veracidad!
10. Conversando con Jesús
Orar por la decisión que los niños tomaron de ser honestos siempre y decir
siempre la verdad. También agradecer a Dios por las decisiones tomadas.
11. Actividad
Hoy uniremos los números y pintaremos. (Distribuir los materiales)
12. Desaf ío
Hacer alguna tarea de casa, de tal manera que sorprendan a los padres.
13. Refrigerio (opcional)
14. Canto final.
15. Oración final.
(Al salir, distribuir el versículo para que los niños lo memoricen).

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2º DÍA - DOMINGO

LAS MARCAS DE
JUAN EL BAUTISTA
TEMA
• Juan predica en el desierto y reconoce que Jesús es el Mesías.
• Bautismo de Jesús.
• Juan el Bautista es marcado por Jesús

REFERENCIAS:
• Mateo 3; Lucas 3; Juan 1:15-34
• El Deseado de todas las gentes, págs. 72-83

OBJETIVOS
• Conocer la historia de la predicación de Juan el Bautista en el desierto y de
cómo él reconoció a Jesús como el Mesías.
• Entender que Juan no buscó ser el Mesías, sino que presentó a Jesús como el
verdadero Mesías.
• Sentir la necesidad de ser marcado por Jesús.

VERSÍCULO
“Yo los bautizo a ustedes con agua para que se arrepientan. Pero el que viene
después de mí es más poderoso que yo, y ni siquiera merezco llevarle las sandalias.
Él los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego” (Mateo 3:11).


1. Alabanza
2. Bienvenida
3. Actividad preparatoria
Preparar con anticipación algunas curiosidades sobre animales, luego, hacer el
juego de ¿Quién soy? Ejemplo: Tengo orejas grandes, soy peludo y me gustan las
zanahorias, ¿Quién soy? (Conejo). Hoy escucharemos una historia de alguien que
las personas no conocían muy bien.
4. Canto inicial
Orar por las personas que no saben quién es Jesús.
6. Historia inicial
Ana y Bianca estaban en el mismo salón de clase y eran muy amigas. Donde
una estaba, a la otra también le gustaba estar. A Ana le gustaba mucho dibujar y
pintar y lo hacía con mucha perfección. Bianca, sin embargo, se dedicaba más a los
deportes.
Un día, la profesora anunció que habría un concurso de dibujo y pintura en la
escuela y que quien ganara, recibiría un buen premio y participaría del concurso
del estado.
Ana se inspiró, pues sabía que tenía posibilidades de ganar, sin embargo, Bianca
dijo que participaría, pero no sabía si tendría alguna posibilidad. Ambas llevaron su
dibujo para pintarlo en casa. Bianca dedicó un tiempo especial para compensar su
falta de talento natural.
Cuando el resultado llegó, la profesora anunció a la ganadora: ¡Felicitaciones
Ana! Eres la ganadora del concurso, ven a recibir tu premio.
Cuando Ana llegó al frente, se dio cuenta que el dibujo ganador no era de ella,
era de Bianca. Ella pudo quedarse callada y ganar el premio tan soñado del concur-
so, porque Bianca había olvidado de poner su nombre en su dibujo.
Profesora—dijo Ana—, yo no puedo recibir este premio, pues este dibujo no es
mío, es de Bianca. Bianca se levantó y abrazó a su amiga, ella allí comprobó que Ana
era realmente una amiga fiel.
En el tiempo de Jesús, también sucedió algo muy parecido. Escuchen la historia:
7. Historia bíblica
Las personas de la ciudad estaban muy inquietas, porque apareció un hombre
muy extraño en la región y estaba en el desierto predicando, muchos iban hasta allá
para escucharlo.

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El asunto era que él les decía a las personas que necesitaban arrepentirse y dejar
las cosas equivocadas que estaban haciendo. Hasta ahí, todo era normal. Pero él
se vestía de manera muy extraña, con pieles de animales, comía langostas y miel
silvestre.
Las personas venían de muy lejos para escucharlo y para ser bautizadas por él.
Luego muchos comenzaron a preguntar: ¿Será que él es el propio Cristo? Viendo
que las personas estaban comentando a su respecto, Juan el Bautista dijo a todos:
“Yo los bautizo a ustedes con agua para que se arrepientan. Pero el que viene des-
pués de mí es más poderoso que yo, […] Él los bautizará con el Espíritu Santo y con
fuego” (Mateo 3:11).
Cierto día, Juan estaba predicando, cuando de repente se detuvo. Las personas
que lo estaban escuchando, vieron a un hombre que se acercaba en dirección del
predicador. El hombre llegó cerca de Juan y le pidió ser bautizado. Pero Juan habló
bien alto para que todas las personas pudieran oírlo: “¡Aquí tienen al Cordero de
Dios, que quita el pecado del mundo!” (Juan 1:29).
Entonces Jesús entró al agua y Juan lo bautizó. En ese momento, el Espíritu
Santo descendió del cielo como si fuese una paloma y una voz se escuchó diciendo:
“¡Este es mi hijo amado!” (Lucas 3:22).
8. Aplicación
¿Ustedes creen que a Juan el Bautista le gustaba que lo compararan con el Me-
sías? (deje que los niños hablen).
¿Por qué Juan no aprovechó y se hizo pasar por el Mesías? ¿Será que él ya no iba
a tener éxito en sus predicaciones y bautismos? Es probable que Juan el Bautista
tuviera mayor éxito, si predicaba al pueblo como si fuera el Mesías, pero esto sería
una mentira, y Juan no quería mentir.
En una universidad, dos amigos que cursaban medicina iban muy bien en los
exámenes y trabajos de la facultad. Al final del semestre ambos tenían las notas más
altas. Faltaba una prueba final del curso de química, pero ellos estaban tan confia-
dos en sus notas que decidieron pasar un fin de semana festejando con amigos de
otra universidad. La fiesta fue grande y también la resaca. Ambos durmieron muy
tarde y llegaron atrasados a la Universidad el lunes, día de la prueba final. En vez
de intentar hacer el examen, buscaron al profesor y le contaron una historia que
inventaron.
Los dos afirmaron que la llanta del carro (automóvil) se les pinchó y no tenían
llanta de repuesto. Según ellos, demoraron en arreglar la llanta por eso que se atra-
saron para el examen. El profesor consideró el caso y concordó con ellos que les
daría una segunda oportunidad de hacer el examen al día siguiente. Ambos estu-
diaron mucho aquella noche y fueron al examen al día siguiente en la hora marcada.

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El profesor puso a ambos en salones separados y les entregó la prueba. Cuando
comenzaron a responder el examen, se dieron cuenta que la primera pregunta era
muy fácil y valía cinco puntos. Animados, respondieron la primera pregunta y vol-
tearon la página. En la segunda página había sólo una pregunta. “¿Cuál de los cuatro
neumáticos del carro (automóvil) se pinchó?” La respuesta valía 95 puntos.
.
9. Llamado
Las mentiras no nos llevan a ningún lugar. Ya sea para esconder algo o pasarse
por otra persona, ¡siempre será mentira y no vale la pena! Hay un dicho que dice “la
mentira tiene patas cortas” Pero quiero decirles que no sólo las piernas son cortas
.
cuando hay una mentira, el carácter, el amor y principalmente la vida son cortas
también. Si nosotros esperamos vivir para siempre con Jesús, debemos dejar la
mentira y el engaño y vivir solamente en la verdad, cueste lo que cueste.
En este momento, desearía saber cuántos aquí les gustaría actuar como Juan el
Bautista, hablar siempre la verdad. Si deseas ser siempre verdadero, ponte de pie y
voy a orar por tu decisión.
Orar agradeciendo por las decisiones tomadas por los niños y pedir que Dios
confirme esas decisiones, para que ellos tengan humildad y valentía para testificar
de Jesús para otros niños.
11. Actividad
La actividad de hoy es un dibujo para que ustedes pinten. ¡Quiero ver a todos
pintando bien bonito!
12. Desaf ío
Invitar y traer a su mejor amigo para el programa del día siguiente.
14. Canto final
15. Oración final
(Al salir, distribuir el versículo para que los niños memoricen).

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3º DÍA - LUNES

LAS MARCAS DE
NATANAEL
TEMA
• Felipe encuentra a Jesús y lleva a su amigo Natanael para que también se en-
cuentre con Jesús.
• Natanael es marcado por Jesús.

REFERENCIAS:
• Juan 1:43-51

OBJETIVOS
• Conocer la historia del encuentro de Felipe y de Natanael con Jesús.
• Llevar a los amigos para que se encuentren con Jesús y sean marcados por él.

VERSÍCULO
“Felipe buscó a Natanael y le dijo: Hemos encontrado a Jesús de Nazaret, el hijo
de José, aquel de quien escribió Moisés en la ley, y de quien escribieron los profetas”
(Juan 1:45).


1. Bienvenida
2. Alabanza
Hacer pasar al frente a los niños que trajeron a sus amigos a la reunión, para que
ellos los presenten al grupo diciendo: el nombre, la edad, hace cuanto tiempo son ami-
gos, donde vive, etc.
Hoy nuestra historia bíblica cuenta de una persona que tenía un gran amigo y des-
pués de hacer un gran descubrimiento, fue rápidamente a contarle a ese amigo.
4. Canto inicial
Orar por los amigos de los niños.
6. Historia inicial
Hace muchos años, en los Estados Unidos, un joven llamado Roger, estaba regre-
sando para su casa y estaba pidiendo jale (dedo) en una carretera, cuando un auto de
último modelo (un Mercedes o un Ferrari, etc.) paró cerca de él y le preguntó: ¿Vas
para Chicago? - Voy cerca de Chicago - respondió Roger entrando al carro con mucho
cuidado -¿Usted vive allá?- preguntó Roger - Sí, vivo allá y soy comerciante. Mi nom-
bre es Hanover. El viaje continuó y Roger sintió el deseo de hablar de Jesús para este
empresario, pero al mismo tiempo se sentía avergonzado y tímido y decidió dejar para
después. Pasaron unos 30 minutos y él no aguantó más y comenzó a hablar:
Sr. Hanover, dijo Roger, me gustaría comentarle algo muy importante, entonces le
presentó a su nuevo amigo de modo muy discreto y atrayente y de la necesidad de una
entrega personal a Cristo. Concluyó con una apelación para que el Sr. Hanover recibiera
a Cristo como su Salvador y Señor.
El Sr. Hanover, que había hablado muy poco, durante el testimonio de Roger, con-
dujo el carro a un costado de la carretera y se detuvo. Y en ese momento, entregó su vida
a Cristo. “Esto es lo más maravilloso que me ha sucedido - dijo con lágrimas en los ojos.
Pocos kilómetros más adelante, el Sr. Hanover dejó a Roger en su ciudad y siguió su
destino. Pasaron cinco años y Roger sintió deseos de saber cómo estaba el Sr. Hanover. Fue
hasta Chicago y buscó la empresa. Quedó sorprendido al ser recibido por la Sra. Hanover,
y más sorprendido aún, cuando ella le contó que el Sr. Hanover después que se encontró
con él, continuó algunos kilómetros más adelante, sufrió un accidente y murió.
7. Historia Bíblica
Saben niños, así como Roger no perdió su única oportunidad y marcó la vida de ese
hombre, presentándole a Jesús, la Biblia también nos cuenta de un joven llamado Felipe y
de su amigo, llamado Natanael. ¿Alguien aquí ha escuchado hablar de estos dos amigos?
Generalmente cuando hablamos de amigos, escuchamos la historia de David y Jo-
natán, de Pablo y Silas, pero hoy quiero contarles quiénes fueron Felipe y Natanael.

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Felipe y Natanael vivieron en el tiempo cuando Juan el Bautista estaba predicando
en el desierto y las personas iban hasta allá para escucharlo predicar. Ellos eran estu-
diosos de la Biblia (Sólo existía el Antiguo Testamento en esa época), y esperaban
ansiosamente al Mesías.
Un día, Felipe y Natanael estaban escuchando a Juan el Bautista, cuando de repente
llegó un hombre, y toda la atención de las personas se volvieron para él. Juan el Bautista
detuvo su sermón, su rostro se iluminó y dijo: “He aquí el Cordero de Dios” (Juan 1:29).
Natanael miró a ese hombre (Jesús) y quedó impresionado. ¿Cómo ese hombre que
mostraba ser tan pobre y trabajador podría ser el Mesías? Él se retiró para un bosque
tranquilo, con el fin de meditar sobre lo que acababa de oír por parte de Juan el Bautista
y que le había dado tanta esperanza y convicción. Allá en ese bosque, Natanael oró, pi-
diendo al cielo que si aquel hombre era realmente el Mesías, qué tuviera esa seguridad.
Felipe sabía donde oraba su amigo (pues ya habían orado allá en otras ocasio-
nes), al llegar allí, él le dijo: “Hemos encontrado a Jesús de Nazaret, el hijo de José, aquel
de quien escribió Moisés en la ley, y de quien escribieron los profetas” (Juan 1:45).
Natanael entendió que esta era la respuesta de su oración, pero se acordó de la fisio-
nomía de Jesús y el prejuicio surgió en su corazón (Juan 1:46-47). “¡De Nazaret! - replicó
Natanael - ¿Acaso de allí puede salir algo bueno?” Felipe no entró en discusión. Sola-
mente dijo: “Ven a ver. Cuando Jesús vio que Natanael se le acercaba, comentó: -Aquí
tienen a un verdadero israelita, en quien no hay falsedad” .
Natanael quedó muy sorprendido y le preguntó a Jesús cómo es que lo conocía. En-
tonces Jesús le dijo que antes que Felipe lo llamase, él ya lo había visto orando en el bosque.
Esto fue suficiente para Natanael. Él ahora no tenía más dudas de que Jesús era real-
mente el Mesías. Jesús acababa de marcar para siempre y muy profundamente la vida
de Natanael. El encuentro que su amigo le había arreglado con Jesús, fue el momento
más importante de su vida.
8. Aplicación
¿Se han dado cuenta que Jesús conoce toda nuestra vida?, así como vio a Natanael
orando allá en el bosque, también sabe todo sobre nuestra vida y quiénes son nuestros
amigos. Dios sabe a quién trajiste hoy aquí, pero saben ¿qué más aprendí con esta histo-
ria? Que Jesús desea que nosotros contemos de él a nuestros amigos. Él desea que lleve-
mos las marcas de esperanza a nuestros amigos para que ellos también sean marcados,
así como sucedió con Natanael.
El 8 de setiembre de 1860 hubo una terrible tempestad en el Lago Michigan que
amenazaba hundir a un barco de pasajeros. En la playa, había un grupo de estudiantes
que estaba observando todo. Cuando el barco comenzó a partirse, uno de los estudian-
tes llamado Edward W. Spencer, vio a una señora agarrada a un pedazo de barco, pero
Spencer no sólo se quedó observando el naufragio, sino que se sacó su casaca y se lanzó
a las aguas agitadas, nadó hasta el barco y trajo a la señora hasta la playa.

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Spencer nadó repetidas veces y trajo a varios náufragos hasta la playa, hasta que sus
fuerzas se agotaron y él mismo cayó desmayado en la playa, exhausto. Como resultado
de sus esfuerzos 17 vidas se salvaron, pero el acto heroico casi le costó la vida.
¿Ustedes creen que Spencer conocía o era amigo de aquellas personas que él ayudó
a salvar? ¿Por qué él se arriesgó tanto para salvarlas?
Tú aprecias a tu amigo que vino hoy contigo ¿Verdad? Tengo un desafío para ti
en esta noche: cada uno de ustedes recibirá esta Guía de Estudio de la Biblia (Tener
a mano un Estudio Bíblico Infantil y otro juvenil) para que sus amigos completen
junto a ustedes, así ustedes tendrán más tiempo para estar juntos y podrán darle a su
amigo la oportunidad de encontrarse con Jesús. (Distribuir a cada pareja de amigos
un Estudio Bíblico Infantil o Juvenil y dar las instrucciones de cómo utilizarlo).
9. Llamado
Ahora que ustedes tienen la Guía de Estudios, quiero saber cuántos aquí desean que
su mejor amigo conozca a Jesús. ¡Levanten sus manos! Ahora quiero ver que se pongan
de pie, cuántos de ustedes quieren completar esta Guía de Estudios con su mejor amigo.
Ahora la pregunta es para los amigos que vinieron hoy a visitarnos. ¿Cuántos de
ustedes quieren aceptar la propuesta de estudiar la Biblia con su mejor amigo? Vayan
hasta su amigo y denle un abrazo.
Oremos ahora por tantas hermosas amistades que tenemos aquí, y pidamos que
Dios bendiga las decisiones que se tomaron.
Orar por las decisiones tomadas y pedir que Dios los ayude a organizarse de modo
que logren completar toda la Guía de Estudios que recibieron.
11. Actividad
Hoy haremos una actividad práctica muy interesante. Los amigos podrán ayu-
darlos. Recortaremos, pegaremos y armaremos a los dos personajes de la historia: a
Felipe y Natanael. Tú puedes ser Felipe y tu amigo Natanael. Cada uno podrá llevar
su personaje a casa y cuando se reúnan para completar la Guía de Estudios, lleven el
personaje, para que los amigos puedan encontrarse nuevamente, ¿correcto? (Dis-
tribuir los materiales y coordinar la actividad).
12. Desaf ío
Iniciar a completar la Guía de Estudios junto con su mejor amigo.
13. Refrigerio (opcional).
14. Cántico final.
15. Oración final.
(A la salida, distribuir el versículo para que los niños memoricen).

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4º DÍA - MARTES

LAS MARCAS DE
BARTIMEO
TEMA
• Bartimeo fue persistente y Jesús curó su ceguera.
• Bartimeo es marcado por Jesús.

REFERENCIAS:
• Lucas 18:35-43

OBJETIVOS
• Conocer la historia del milagro de curación de Bartimeo.
• Entender que necesitamos ser valientes y persistentes en nuestra búsqueda
de Jesús.
• Sentir necesidad de ser marcado por Jesús.

VERSÍCULO
“¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí! - gritó el ciego” (Lucas 18:38).


1. Alabanza
2. Bienvenida
Usar una venda para cerrar los ojos de los niños y distribuirlos por el salón
(sacar las sillas, mesas y otros objetos que puedan lastimarse). Con anticipa-
ción inflar los globos y poner algunos dulces dentro de ellos. Lanzar a lo alto todos
los globos y cada niño intentará encontrar y reventar los globos abrazándolos.
Cuando no hay más globos, retirar la venda de los ojos de los niños y preguntarles:
- ¿Fue fácil encontrar los globos? ¿Por qué?
- ¿Cuál fue la sensación de no poder ver?
La Historia bíblica de hoy nos cuenta de una persona que no veía porque era
ciego y Jesús lo sanó.
4. Canto inicial
Orar por los problemas y dificultades que los niños enfrentan. Dar oportunidad
a los niños para que hagan sus pedidos de oración.
6. Historia inicial
Helen Keller fue una persona muy famosa que, a pesar de ser ciega, sorda y
muda (o sea que no veía, no oía, ni hablaba), logró aprender a hablar, estudió y ter-
minó la universidad; aprendió a nadar, remar y a montar caballo. Un día, Helen
Keller presentó un discurso, y cuando terminó, el auditorio la aplaudió mucho. En
medio de los aplausos, Helen comenzó a tocar palmas también, con mucha ale-
gría. Era evidente que de alguna manera, Helen había percibido el entusiasmo del
auditorio.
Una vez que los aplausos cesaron, el presidente de la reunión le preguntó por
intermedio de Ann Sullivan (su profesora que siempre la acompañaba), cómo pudo
sentir los aplausos, siendo que no podía ver ni oír. - “Por las vibraciones en mis pies”
,
explicó Helen.
Ella pudo sentir por las vibraciones del suelo, que la gente aplaudía. Yo no sé si
eso fue también lo que Bartimeo sintió cuando la multitud comenzó a aproximarse
de él, pero sabemos que él percibió. ¡Veamos su historia!
Bartimeo era una persona que desde pequeño siempre había sido víctima de
discriminación. En los tiempos bíblicos, la gente creía que si alguien estaba enfer-
mo, representaba que la persona estaba haciendo mal las cosas, por eso Dios lo
estaba castigando.

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Pobre Bartimeo. Ya se imaginaron, él intentando jugar con los otros niños de su
barrio y ellos regañándolo: “¡Sal de aquí! ¡No queremos jugar contigo! ¡Eres un niño
malo por eso que estás ciego!
Imagínense a Bartineo, cuando era adolescente. Ninguna muchacha quería
enamorar con él, pues tenía miedo de ser castigada por Dios también y llegar a
tener algún tipo de enfermedad. Ni la propia familia de Bartimeo lo aceptaba, de
modo que él se sentaba al borde del camino, pidiendo limosnas para poder com-
prar algo de comida y no morir de hambre.
Un día él escuchó a las personas que hablaban, que pasaría por su ciudad un
hombre llamado Jesús que curaba a las personas, que había alimentado a miles de
personas y que hasta a muertos él los había resucitado. En el corazón de Bartimeo
nació una gran esperanza: -si tuviera oportunidad de encontrarme con ese Jesús, ¿y
si ese Jesús me curase?
Con estos pensamientos en mente, Bartimeo se dirigió al borde del camino por
donde sabía que Jesús pasaría. La Biblia no cuenta los detalles, pero me imagino
que ese día Bartimeo no pudo dormir, ni tomarse una siesta, él debía estar atento
para no perder su gran oportunidad.
De repente, así como Helen Keller, sintió que se aproximaba mucha gente.
Podía oír, como las voces de las personas se escuchaban cada vez más cerca, y el
corazón de Bartimeo ahora latía con mucha más rapidez. Entendiendo que las per-
sonas ya estaban pasando por cerca de él (y nadie le hacía caso), él comenzó a
gritar: “¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí!” (Lucas 18:38).
La multitud que seguía pasando cerca de él ignorándolo, ahora se sintieron
incómodos por los gritos de alguien tan despreciable, y que incluso podría inco-
modar a Jesús. Ellos trataron de que Jesús no escuchara a ese pobre pecador como
Bartimeo, de modo que lo obligaron a callarse.
Bartimeo que toda la vida siempre tuvo que guardar silencio y retirarse de los
lugares públicos, ahora él decidió no hacer caso a esa gente que siempre lo ignora-
ba, y comenzó a gritar aún más fuerte: “¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí!”
(Lucas 18:38).
La Biblia nos cuenta que Jesús se detuvo y toda la multitud tuvo que detenerse
también. Al acercarse Jesús a Bartimeo, me imagino que la gente abrió espacio para
que Jesús pudiera llegar cerca y así mandarle callar a Bartimeo. Pero cuál fue la
sorpresa que tuvieron, cuando Jesús le pregunta a Bartimeo:
“¿Qué quieres que haga por ti?” (Lucas 18:41). Esta pregunta sonó en los oídos
de Bartimeo como una linda sinfonía: Jesús estaba hablando con él. Sin esperar ni un
segundo más, Bartimeo expresó en palabras, el deseo de toda su vida: “Señor, quiero
ver” (Lucas 18:41 up). Lo que sucedió luego, marcó para siempre la vida de Bartimeo.
Jesús simplemente respondió: “¡Recibe la vista! Tu fe te ha sanado” (Lucas 18:42).

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La Biblia nos dice que Bartimeo comenzó a seguir a Jesús, dando gracias a Dios
por todo lo que le sucedió. ¡Él había recibido la marca de la esperanza! Su fe y su
perseverancia habían sido recompensadas y ahora ya no podía permanecer en
silencio.
8. Aplicación
¿Qué ustedes creen que hubiera pasado a Bartimeo si se hubiera quedado ca-
llado y no hubiera insistido en clamar a gran voz cuando las personas le pidieron
que se callara?
¿Ya intentaste hacer alguna cosa y pocas o nadie pensó que iban a funcionar?
¿Qué hiciste? ¿Desististe o continuaste con perseverancia?
Tomás, estudiante de Ingeniería caminaba por una calle, cuando un jovencito
se le aproximó con un folleto en la mano.
¿Acepta este folletito? Preguntó el niño. Contiene un mensaje para usted.
Mirando para el folleto, Tomás vio que era religioso. No estaba interesado y no
le gustó el haber sido detenido en la calle por un folleto.
¿Por qué incomodas a las personas con tu religión? —preguntó el hombre—.
Soy perfectamente capaz de cuidarme por mí mismo.
Como el niño continuó con la mano extendida, Tomás tomó el folleto brusca-
mente, lo rompió y lo puso en su bolsillo. El niño dio media vuelta y continuó su
camino muy triste. Pero Tomás no pudo apartar los ojos de aquel niño.
Dirigiéndose hacia la puerta, el muchacho inclinó su cabeza y oró silenciosa-
mente. Tomás observaba y notó que lágrimas corrían por el rostro del niño. El co-
razón de Tomás fue conmovido. Allí estaba alguien que se preocupaba tanto por él,
a punto de ofrecerle un folleto, y él lo había rechazado. A partir de ese momento, la
vida de Tomás tomó un rumbo diferente. En vez de convertirse en ingeniero, llegó
a ser un misionero en Sudamérica.
Muchas veces, al igual que este niño (que ni sabemos su nombre), las personas
nos van a rechazar y no querrán oír de Jesús, pero debemos ser como Bartimeo: él
no desistió cuando le pidieron que callase, fue perseverante como el niño de la his-
toria, y así alcanzó el más grande deseo de toda su vida: ¡Llegar a ver nuevamente!
9. Llamado
Yo no sé qué cosas deseas en la vida: algunas pueden ser querer pasar de año,
otros recibir una bicicleta, otros pueden hasta querer que sus padres dejen de pe-
lear. Yo no sé, pero Jesús si sabe, así como sabía que Bartimeo deseaba ver.
En este momento, ustedes van a recibir un pedazo de papel (entregar un

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pedazo de papel a cada niño). Piensen por un momento y luego escriban en ese
papel, cuál es el deseo más grande de tu corazón. Después de escribir, doblen el
papel y colóquenlo aquí en esta caja (dar tiempo para que los niños escriban).
Ahora, quiero ver que se pongan de pie los que desean orar con mucha perse-
verancia todos los días, por el deseo que está escrito en el papel.
Agradecer a Dios por las decisiones de los niños y orar por los pedidos que los
niños escribieron en los papeles. Pedir que Dios dé cada día más perseverancia para
enfrentar los problemas y dificultades.
11. Actividad
La vida de Bartimeo antes de ser curada era como un laberinto, sin sentido y sin
saber a dónde realmente estaba yendo.
Hoy ayudaremos a Bartimeo a encontrar a Jesús en este laberinto (distribuir
las hojas a los niños).
12. Desaf ío
Encontrar alguna persona de la familia o de la vecindad que esté pasando por
alguna necesidad (alimentos, ropas, amistad, cariño, etc.) y ayudarla.
14. Cántico final.
15. Oración final.

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5º DÍA - MIÉRCOLES

LAS MARCAS DE
JUDAS
TEMA
• Judas recibe muchas oportunidades para cambiar, pero prefiere traicionar a
Jesús.
• Santa Cena.
• Judas no aceptó ser marcado por Jesús.

REFERENCIAS:
• Mateo 26:14-16; 20-25; 47-56; 27:3-10; Marcos 14:10, 11; 17-21; 43-50.
• El Deseado de todas las gentes, pág. 663-670.

OBJETIVOS
• Conocer la historia de las oportunidades ofrecidas a Judas y cómo él las
desperdició.
• Conocer la historia de la Cena en que Jesús lavó los pies de sus discípulos,
inclusive los de Judas.
• Reconocer diariamente que Jesús ofrece oportunidades de ser marcados por él.

VERSÍCULO
“Todavía estaba hablando Jesús cuando se apareció una turba, y al frente iba uno
de los doce, el que se llamaba Judas. Éste se acercó a Jesús para besarlo” (Lucas 22:47).


1. Alabanzas
2. Bienvenida
Ponerse de acuerdo de antemano con dos niños (mayores) para que simulen
una discusión, donde uno acusa al otro por traición, por haber contado un secreto
particular a otro. El otro, en un primer momento negó, pero luego admitió que
contó el secreto y pide disculpas.
Explique a los niños que esto no es verdad, pero que fue acordado, porque la
historia bíblica de hoy, habla de una traición, no de un secreto, sino de una vida.
4. Canto inicial
Orar por las elecciones que los niños deben tomar todos los días, para que no
pierdan las buenas oportunidades.
6. Historia inicial
Ana y su familia vivían en un lugar donde había muchos árboles enormes (ro-
bles) en los terrenos vecinos. En cada terreno, esos hermosos árboles altos adorna-
ban y daban sombra para los residentes. A Ana le gustaba jugar en un columpio que
sus padres habían instalado en uno de esos robles.
Una mañana, después de una gran tormenta, Ana salió para la Escuela y vio que
un enorme roble había caído durante la tormenta y la calle estaba bloqueada. Ellos
tuvieron que hacer un desvío por otra calle y así poder llegar a la escuela.
Ana pasó parte de la mañana preocupada pensando ¿por qué un árbol tan fuer-
te pudo caer durante la tormenta? Cuando su papá fue a recogerla de la escuela,
ella inmediatamente le preguntó por qué el árbol había caído. Su papá le pidió que
esperara un poquito y condujo su automóvil hasta donde el árbol aún continuaba
caído allí y los bomberos estaban cortando sus enormes ramas para luego poder
retirarlo del camino:
“Observa bien el árbol” —le dijo el papá, mientras bajaban del carro (automó-
vil). Ana llegó muy cerca del árbol y pudo ver que a pesar de su majestuosa aparien-
cia, estaba podrido por dentro.
En la Biblia encontramos una historia de un hombre muy parecido con este
roble, era igual a los otros por fuera, pero por dentro, estaba completamente podri-
do. Este hombre se llamaba Judas. Muchos de nosotros tenemos una imagen muy
negativa de Judas. Algunos hasta lo dibujan de forma grotesca, como si fuera un
demonio. Pero Judas fue una persona común, como tú y yo, pero que no aprovechó
y rechazó todas las oportunidades que le fueron dadas.

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Jesús sabía quién era Judas, pero aún así, no lo rechazó, no le “echó en cara” lo
que era, ni lo excluyó del grupo de discípulos. Sin embargo, Judas se presentaba
como una persona muy buena, estaba preocupado solamente consigo mismo y no
percibió todo lo que estaba perdiendo. Recordemos algunas de las muchas opor-
tunidades que Judas perdió:
1º OPORTUNIDAD: Ser parte del grupo especial de los discípulos. No fue
Jesús quién eligió a Judas como su discípulo, por el contrario, él pidió seguir a Jesús,
Jesús no lo rechazó, ni lo acogió, pero pronunció sólo estas palabras: “Las zorras tie-
nen madrigueras y las aves tienen nidos […], pero el Hijo del hombre no tiene dónde
recostar la cabeza” (Lucas 9:58). Es que Judas creía que si Jesús era realmente el Me-
sías, uniéndose a los discípulos podría asegurar un alto cargo en el nuevo reino.
2º OPORTUNIDAD: Andar al lado de Jesús tres años y medio y aprender
personalmente de Jesús. En muchas ocasiones, Jesús procuró demostrar a Judas
que la ambición por riquezas debería ser abandonada, pero en todas las ocasiones,
Judas no atendió al llamado de su Maestro.
3º OPORTUNIDAD: Jesús lava los pies de Judas en la Santa Cena. Esta his-
toria es bien conocida: los discípulos no quieren hacer el servicio de siervo y Jesús
toma una palangana y una toalla y comienza a lavar los pies de todos los discípulos,
inclusive de Judas, que lo iría a traicionar dentro de pocos minutos. ¡Qué oportuni-
dad de ver el amor de Jesús y abandonar sus planes!
4º OPORTUNIDAD: Jesús entregó pan mojado para Judas, simbolizando co-
nocer sus planes de traición. Al entregar Jesús ese pedazo de pan a Judas, le estaba
diciendo que conocía quién era realmente Judas, pero que aún había tiempo para
cambiar de idea. ¡Otra oportunidad desperdiciada!
5º OPORTUNIDAD: Jesús y sus discípulos están en el Jardín del Getsemaní
y Judas llega con los soldados que van a arrestar a Jesús. Al verlo, Jesús hace un lla-
mado más a Judas: “Amigo, ¿a qué vienes?” (Mateo 26:50). Jesús lo llamó de amigo
para que Judas entendiese que aún había esperanza. ¡Él aún podía recibir las marcas
de la esperanza!
Después de estas y de tantas otras oportunidades desperdiciadas, Judas salió
apresuradamente gritando: ¡Es tarde! ¡Es tarde!” Sentía que no podría presenciar la
crucifixión de Jesús y atormentado por el remordimiento, se fue y se ahorcó.
8. Llamado
Las decisiones que tomamos todos los días pueden hacer la diferencia entre la
vida y la muerte, al final de nuestra vida. A veces somos tentados a pensar que las
cosas pequeñas no hacen mucha diferencia, pero ¿recuerdan la historia del árbol?
Sin duda, este no se pudrió de un día para el otro, sino que fue de poquito a poquito
cada día, hasta que todo su interior se pudrió.

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Elegir a nuestras compañías y amigos, también influencia nuestro futuro. Un
erudito y maestro no permitía que sus hijos, aún ya crecidos se asociaran con per-
sonas que él percibía que no eran correctas y verdaderas.
Un día, su hija, cansada de tantas prohibiciones, fue a hablar con su papá: “Que-
rido papá —dijo ella— al prohibirme visitar a Lucinda, me juzgas muy infantil, pues
aunque Lucinda es vanidosa y envidiosa, esta visita no me expone a ningún peligro” .
El padre en silencio tomó un carbón del horno y le entregó a su hija: “recíbelo
hija, no te va a quemar” La hija extendió la mano y en cuanto tocó al carbón, su mano
.
quedó sucia y manchada, ensuciando su vestido también. “No se puede ser lo sufi-
cientemente cuidadoso cuando tratamos con un carbón” —dijo la hija, avergonzada.
“Es verdad”— concordó el padre. Como puedes ver hija, el carbón aunque no
queme, mancha. Lo mismo sucede con nosotros cuando nos asociamos a las per-
sonas que no tienen buena reputación.
9. Llamado
Por eso nuestras decisiones son muy importantes. Lo que elijo hoy, define lo
que seré cuando sea adulto. Pero no siempre tenemos la sabiduría para tomar bue-
nas decisiones. Probablemente Judas pensaba que estaba haciendo una buena elec-
ción, rechazando las oportunidades que Jesús le ofrecía. Pero al negar ser marcado
por Jesús, automáticamente eligió ser marcado por Satanás.
Hoy quiero ver si aquí hay algún niño que quiere pedir a Jesús que le ayude a
hacer buenas decisiones. ¿Les gustaría ponerse de pie y mostrar a todos su decisión?
Agradecer a Dios por las decisiones y orar para que él confirme la decisión de
los niños de buscar la ayuda divina al hacer sus elecciones y tomar las decisiones.
11. Actividad
¿Ustedes saben cuántas monedas de plata Judas recibió para traicionar a Jesús?
Hoy haremos una actividad para llegar hasta las monedas. (distribuir las hojas a
los niños).
12. Desaf ío
Contar la historia de hoy para un amigo.
13. Refrigerio (opcional).
14. Canto final
15. Oración final.

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6º DÍA - JUEVES

LAS MARCAS DE
SIMÓN
TEMA
• Simón de Cirene lleva la cruz de Jesús
• Él es marcado para siempre por Jesús.

REFERENCIAS:
• Mateo 27:32; Marcos 15:21; Lucas 23:26

OBJETIVOS
• Conocer la historia del juicio de Jesús y de cómo Simón llevó la cruz.
• Tener un encuentro definitivo con Jesús, y decidir prepararse para el
bautismo.

VERSÍCULO
“Cuando se lo llevaban, echaron mano de un tal Simón de Cirene, que volvía
del campo, y le cargaron la cruz para que la llevara detrás de Jesús” (Lucas 23:26).


1. Alabanza
2. Bienvenida
Pida que dos personas hagan una escenificación sin el conocimiento de los
niños. Una de ellas caminará por el salón llevando una caja llena de pequeños ar-
tículos (piedritas, botones, granos, cuentas, papel picado). Pedir a otro alumno
que desparrame el contenido de la caja sobre el piso.
Pida a un niño del salón que junte todo lo desparramado. Observe si más niños
tienen la iniciativa de ayudar.
Pregunte al niño que se le pidió que juntara las cosas: ¿Qué sentiste al tener que
juntar las cosas, a pesar de no tener nada que ver con lo sucedido?
Pregunte al resto de la clase: ¿Qué sintieron al ver a alguien poniendo orden a la
confusión, a pesar de no tener ninguna culpa de lo que aconteció?
Nuestra historia de hoy es sobre Simón, uno que ayudó a Jesús a llevar una carga pesada.
4. Canto inicial
Orar por las personas que sufren y que dependen de otras personas para que
les ayuden.
Simón era un hombre casado y tenía dos hijos. Él nació en una ciudad llamada
Cirene, situada en la costa de África. No sabemos su edad, pero sabemos que estaba
con un gran problema, ya que sus dos hijos habían decidido seguir a un grupo de
personas que decían que el Hijo de Dios había venido a la tierra, que hacía milagros,
curaba a las personas y hasta resucitaba a los muertos. Simón no sabía cómo sus
hijos podían ser tan inocentes para creer en una historia como esta; aún más, ese tal
Jesús había nacido en Nazaret y todos conocían a sus padres: José y María.
Con estos pensamientos en mente, Simón fue a trabajar en el campo. Me ima-
gino que decidió trabajar duro para que esos pensamientos sobre Jesús salieran
de su mente. Sus hijos le habían contado como Jesús trataba a las personas, como
las amaba y como los líderes judíos tenían celos de Jesús. ¡En lo profundo de sus
corazones, sus hijos tenían razón! ¿Sería éste el tan esperado Mesías de quien tanto
hablaban los judíos? Si era cierto, ¿por qué lo trataban de esa manera?
Mientras Simón comenzaba un día normal de trabajo, al otro lado, en Jerusalén,
ocurría otra historia muy diferente: La noche anterior, Jesús había estado en el Jar-
dín del Getsemaní, donde en gran agonía, oró a su Padre, al punto de transformar
su sudor en gotas de sangre. Luego, Judas llegó con un grupo enfurecido y Jesús fue
arrestado y los discípulos huyeron.

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Por la mañana, cuando aún estaba oscuro, Anás y Caifás interrogaron a Jesús,
intentando encontrarle algo para condenarlo. Llegaron hasta a sobornar a testigos
falsos, que decían que Jesús apoyaba la rebelión y buscaba un gobierno separado.
Pero esos testimonios no eran verdaderos.
Caifás preguntó directamente a Jesús, si él era el Cristo. Jesús, que hasta ahora
había permanecido en silencio, levantó su mirada y una luz celestial iluminó su
pálido semblante: “Tú lo has dicho -respondió Jesús-. Pero yo les digo a todos: De
ahora en adelante verán ustedes al Hijo del Hombre sentado a la derecha del Todo-
poderoso, y viniendo en las nubes del cielo” (Mateo 26:64).
En esta situación, Jesús sufre el trato más inhumano que un criminal pueda
sobrellevar. Pero aún un dolor más profundo iba a sufrir, uno de sus discípulos lo
decepcionaría.
Debido al frío, se encendió una fogata y un grupo de personas se reunió cerca
del fuego. Fue en esa escena que Pedro se mezcló con la multitud, esperando no ser
reconocido. Sin embargo, una criada de Caifás le preguntó si él era uno de los dis-
cípulos de Jesús. Apresuradamente, Pedro dijo que no conocía a Jesús. Al ir a otro
lugar, por segunda y tercera vez, alguien le pregunta sobre su relación con Jesús,
lo que Pedro niega repetidamente. En ese momento, Pedro oye al gallo cantar y su
mirada se cruza con la de Jesús. Pedro siente profundamente el tremendo error y
sale llorando.
Cuando amaneció, los líderes judíos se reunieron y condenaron a Jesús, lo mal-
trataron terriblemente, tanto que los soldados romanos tuvieron que ayudar para
que Jesús no fuera despedazado por los líderes judíos.
Entonces llevaron a Jesús ante Pilato, que era gobernador romano. Pilato se im-
presionó con la serenidad de Jesús. “¿Quién es este hombre y para qué lo trajeron?
¿Qué acusaciones hay contra él?” Los líderes judíos dijeron que ya habían condena-
do a Jesús, pero que necesitaban el permiso romano. Pilato estaba muy sorprendido
con Jesús y le hizo algunas preguntas, pero el silencio fue su respuesta. Más im-
presionado aún, Pilato declaró: “Lo he sacado para que sepan que no lo encuentro
culpable de nada” (Juan 19:4).
La multitud enfurecida acusa a Pilato de estar en contra de César, por no querer
condenar a Jesús. Pilato que no sabe qué más hacer, decide enviar a Jesús a Herodes,
el mismo que ya había mandado matar a Juan el Bautista.
Herodes interrogó a Jesús, que se mantuvo en profundo silencio, de igual forma
que ante Pilato. Herodes quedó convencido de la inocencia de Jesús, pero luego se
irritó con su silencio y después de ridiculizarlo, lo devolvió a Pilato.
Pilato estaba enojado por la situación, y queriendo librarse de Jesús, propuso
que él y Barrabás fuesen presentados ante el pueblo para que ellos eligieran a quién
liberar. Barrabás era un criminal que estaba preso. Como un rugido de animales

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feroces, vino la respuesta del pueblo: “¡Llévate a ése! ¡Suéltanos a Barrabás! (Lucas
23:18). “¿Y qué voy a hacer con el que ustedes llaman el rey de los judíos? —les pre-
guntó Pilato” (Marcos 15:12). “¡Crucif ícalo! —gritaron” (Marcos 15:13).
.
Pilato entregó a Jesús para ser golpeado y ridiculizado. Le colocaron una co-
rona de espinas en su cabeza, lo vistieron con un manto de púrpura y se burlaban
diciendo: ¡Salve rey de los judíos! Pilato trató dos veces más de soltar a Jesús, pero el
pueblo solamente aumentaba el alboroto, así que Pilato concordó con las deman-
das de la multitud. Se lavó las manos en público, prefiriendo no arriesgar su posi-
ción y decidió entregar a Jesús para ser crucificado. La noticia de la condenación
se extendió rápidamente por toda Jerusalén y personas de todas las clases fueron a
presenciar la crucifixión.
Al regresar de su arduo trabajo, Simón de repente se encuentra rodeado de
una gran multitud, y sin darse cuenta terminan llevándolo a la fuerza hacia el lado
opuesto de su casa. Tras el alboroto, Simón observa el motivo del bullicio: un hom-
bre terriblemente golpeado estaba cargando una cruz; era tan pesada y el hombre
estaba tan débil que el peso era mayor que sus fuerzas. A pesar de oír que era un
criminal, Simón se compadece al ver el sufrimiento de ese pobre hombre. Sus pen-
samientos son brutalmente interrumpidos por los soldados romanos. En cuestión
de segundos toman la pesada cruz de los hombros debilitados de Jesús y la ponen
sobre los de Simón, obligándolo a cargar la cruz de Jesús.
Simón tiene la oportunidad de mirar a Jesús y reconocer a la misma perso-
na que sus hijos tanto le mencionaron. Y Simón reconoce en los ojos de Jesús, el
mismo amor del que sus hijos tanto le habían hablado.
En vez de reclamar por el peso de la cruz, Simón ahora se siente privilegiado y
agradecido por la oportunidad de ser marcado para siempre con las marcas de la
esperanza.
7. Aplicación
Saben niños, nadie en el mundo sigue siendo el mismo después de haber tenido
un encuentro con Jesús. El encuentro con Jesús aún hoy continúa cambiando la
vida de las personas. No importa las circunstancias, el lugar, o las condiciones.
En el siglo XVI, en Escocia, John Welsh fue perseguido por predicar sobre Jesús.
Él había escapado durante algún tiempo, pero ahora no había ningún lugar seguro
donde esconderse, por lo que oró y pidió a Dios un plan. Esa noche, Welsh tocó la
puerta de su gran enemigo y como no fue reconocido, fue recibido con amabilidad.
En la conversación de la noche, el dueño de la casa se quejó de que no podía capturar
a un hombre llamado Welsh que él lo consideraba un rebelde y agente de Satanás.
“Yo sé donde ese Welsh va a predicar mañana - dijo el propio Welsh, si usted
quiere, puedo colocarlo en sus manos” “Nada me daría más placer” - dijo el dueño
.
de casa.

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Al día siguiente, Welsh y su anfitrión caminaron hasta el lugar donde los fieles
habían acordado reunirse. Welsh lo invitó sentarse en la única silla disponible (silla
que Welsh había dispuesto especialmente para él). Entonces comenzó a predi-
car sobre el amor de Dios por los pecadores. Habló con un poder tan convincente
e impresionante que el corazón de su enemigo se conmovió.
Al finalizar la reunión, Welsh dijo: “Señor, yo soy Welsh. Lléveme y captúreme,
haga lo que usted quiere. ¡Su ex enemigo, ahora su amigo y converso, se negó!
8. Llamado
Todos necesitamos un día encontrarnos con Cristo, de lo contrario, la vida no
valdrá la pena. Todo el sufrimiento que Jesús soportó, de nada servirá, si no tene-
mos un encuentro personal con él. Así como Simón, nuestra vida debe ser cambia-
da y esto, sin duda, solamente sucederá cuando definitivamente nos encontremos
con Jesús y entreguemos nuestra vida enteramente a él.
Sé que algunos de ustedes ya son bautizados, por lo tanto ya demostraron pú-
blicamente el encuentro que tuvieron con Jesús. Pero hay juveniles que todavía no
han sido bautizados.
¿A cuántos les gustaría hoy tener un encuentro con Jesús? ¿A cuántos les gus-
taría demostrar a las otras personas, que se están preparando para el bautismo? Me
gustaría orar con ustedes en este momento, confirmando así la decisión que han
tomado.
Agradecer a Dios por las decisiones al bautismo y pedir que Dios confirme cada
una de ellas.
10. Actividad
Hoy tengo una actividad diferente para ustedes. Es una carta enigmática, y
quiero ver quién puede descifrar los códigos y saber el mensaje escrito. (Distribuir
las hojas a los niños).
11. Desaf ío
Hagamos como Simón, ayudemos a mamá en una tarea que ella hace todos los días.
13. Canto final
14. Oración final

39

7º DÍA - VIERNES

LAS MARCAS DEL
CENTURIÓN
TEMA
• Jesús es crucificado y muere.

REFERENCIAS:
• Mateo 27:54; Lucas 23:47; Marcos 15:39, 44 y 45.

OBJETIVOS
• Conocer la historia de la crucifixión y de la muerte de Jesús.
• Reconocer que el centurión, a pesar de no conocer a Jesús pudo identificarlo,
incluso en una situación tan desfavorable.
• Aceptar las situaciones indeseables, creyendo que a través de ellas, Dios nos
puede enseñar muchas cosas.
• Desear ser marcado por Jesús.

VERSÍCULO
“Y el centurión que estaba frente a Jesús, al oír el grito y ver cómo murió, dijo:
¡Verdaderamente este hombre era el Hijo de Dios!” (Marcos 15:39).


1. Alabanza
2. Bienvenida
4. Canto inicial
Por el regreso de Jesús, para que sea lo más breve posible y que estemos
preparados.
6. Historia inicial
Un hombre que estaba siendo perseguido en un bosque por varios ladrones
que querían robarle, entró corriendo en una abertura de la montaña sin saber que
se trataba de un callejón sin salida. Sin tener para donde ir y no pudiendo regresar,
se escondió detrás de un pequeño arbusto, se inclinó y clamó:
“Oh Dios ten misericordia de mí, pon un ángel a la entrada de esta ranura. ¡Sólo
tú puedes salvarme! Mientras escuchaba el ruido de los pasos pesados de sus per-
seguidores acercándose, vio que una araña comenzó a tejer su tela a la entrada del
lugar donde se había escondido. Cuando los ladrones llegaron al lugar, uno de ellos
dijo a los demás: ¡Allí no entró, tiene tela de araña! ¡Vayamos por aquí! y se fueron.
Dios usa maneras muy extrañas para ayudar a sus hijos. Ayer vimos los detalles
del juicio, la decisión de la muerte de Jesús y cómo Simón le ayudó a Jesús a cargar
la pesada cruz.
Hoy, me gustaría que ustedes presten atención a los detalles de esta historia,
y descubrirán como Dios usó una situación diferente, para marcar la vida de una
persona.
Ayer vimos los detalles del juicio y la decisión de la muerte de Jesús, y como
Simón ayudó a llevar la pesada cruz.
Hoy quiero que me acompañen, imaginando los detalles de la siguiente escena:
Simón ayudando a Jesús, lleva la cruz hasta el lugar de la ejecución. Los dos ladro-
nes reaccionan contra aquellos que lo colocan en la cruz, sin embargo Jesús no
ofrece resistencia.
Sus manos están extendidas sobre la cruz, traen el martillo y los clavos, y cuan-
do los clavos son introducidos en la carne, Jesús permanece sereno, pero grandes
gotas de sudor aparecen en su rostro. Mientras los soldados ejecutan la terrible
obra, Jesús ora por sus enemigos. “Padre, perdónalos, porque no saben lo que
hacen” (Lucas 23:34).

41


Una vez que terminan de clavar a Jesús en la cruz, los hombres fuertes levantan
la cruz y con gran violencia ponen la cruz dentro del lugar preparado. Esto trae
gran sufrimiento para Jesús, pero él no pronuncia ningún reclamo. Pilato manda
escribir sobre la cabeza de Jesús: “Jesús Nazareno, Rey de los judíos” Mientras tanto,
.
los soldados romanos se reparten entre si las ropas de Jesús, y sobre su túnica, echan
suertes (pues estaba tejida de arriba abajo sin costuras).
Luego se le ofrece a Jesús una bebida diferente para aliviarle el dolor, pero Jesús
no lo acepta. Los sacerdotes, príncipes y escribas se unen al pueblo para burlarse de
Jesús: “Salvó a otros -decían-, ¡pero no puede salvarse a sí mismo! Que baje ahora de
la cruz ese Cristo, el rey de Israel, para que veamos y creamos” (Marcos 15:31-32).
En ese momento, se oyó una voz… ¿De quién sería? Es la voz de uno de los
ladrones, que arrepentido, recuerda las escenas del juicio de Jesús, donde notó el
porte divino de Jesús, su misericordioso perdón a los lo atormentaban en la cruz y
reconoce en Jesús al Salvador del mundo y exclama: “Jesús, acuérdate de mí cuando
vengas en tu reino” (Lucas 23:42). Luego se oye una voz, pronunciada por labios
casi ya sin vida, esta voz es la de Jesús que le promete: “Te aseguro que hoy estarás
conmigo en el paraíso” (Lucas 23:43).
Se acerca el medio día y de repente, todo comienza a cambiar, el día está extre-
madamente oscuro, como si fuese de noche. No hay ningún eclipse ni otra causa
natural para esta oscuridad, que puede ser comparada como una noche sin luna ni
estrellas.
Las burlas se acaban y un terror se apodera de la multitud que rodea la cruz.
Hombres, mujeres y niños caen postrados hasta cerca de las tres de la tarde. En ese
momento, se oye la voz de Jesús: “Elí, Elí, ¿lama sabactani? (Mateo 27:46 pp.). Jesús
es mal interpretado por los sacerdotes que piensan que él está llamando a Elías,
pero en verdad, Jesús está queriendo decir: ““Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has
desamparado?” (Mateo 27:46 up).
Hay silencio alrededor de la cruz. El sol vuelve a brillar, pero en la cruz, las ti-
nieblas aún continúan. De repente, la sombra desaparece de la cruz y se oye la voz
de Jesús: “¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu!! (Lucas 23:46). Una luz
envuelve la cruz y el rostro de Jesús brilla con una gloria semejante a la del sol. Incli-
nando entonces la cabeza sobre el pecho, Jesús expira.
Todo está terminado… ¿Vámonos? ¡No! esperen… hay alguien hablando alguna
cosa: “Verdaderamente este hombre era justo” (Lucas 23:47). ¿Quién habló esto? -
Fue un centurión romano que viendo todo lo que ocurría se convenció que Jesús
era inocente y que acababa de morir el hijo de Dios.
Centurión era un título dado a un oficial del ejército romano que comandaba
un grupo de cien soldados. Este centurión era el comandante del pelotón de eje-
cución de Pilato. Sin duda él ya había conducido a miles de sentenciados a la cruz,
pero en ese viernes, él vio algo inusual, Jesús hizo una diferencia en su vida.

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¿No se han impresionado con el hecho de que hasta un pagano, haya visto algo
inusual, disponiéndose de esa manera a ver en él un ser divino? Un soldado pagano
llevó a alguien que él juzgaba culpable y que debía ser crucificado. Ahora refirién-
dose a esa misma persona, él dice: “este hombre era justo” - es decir, era inocente.
8. Aplicación
Emily era una hermosa niña de 3 años de edad. Ella vivía en los Estados Unidos y
su familia era cristiana. Ellos iban todas las semanas a la iglesia y hacían el culto familiar.
Emily era muy feliz, amaba a su familia y admiraba los ojos azules de su papá,
su mamá y sus hermanos. Todos en la casa de Emily tenían los ojos azules. Todos,
menos ella. El sueño de Emily era tener los ojos azules como el mar ¡Ah, cómo
Emily deseaba eso!
Un día, en la iglesia, escuchó decir: ¡Dios responde a todas las oraciones! Emily
pasó todo el día pensando en ello…Por la noche, antes de acostarse, se arrodilló al
lado de su cama y oró: “Padre amado, gracias porque creaste el mar que es tan boni-
to. Gracias por mi familia, gracias por mi vida. Me gusta mucho todas las cosas que
hiciste y haces, pero te pido un gran favor… cuando me despierte mañana, quiero
tener los ojos azules como los de mi mamá; en el nombre de Jesús, amén” .
Al despertar al día siguiente, corrió al espejo para ver cuál era el color de sus ojos;
continuaban siendo castaños. Emily quedó muy decepcionada, porque su pedido no
fue atendido. Pero en ese día, Emily aprendió que “No” también es una respuesta.
Años más tarde, Emily fue una misionera en la india. Ella “compraba niños para Dios”
(los niños eran vendidos por sus familias que pasaban hambre, para ser sacrificados
en el templo, entonces Emily los “compraba” para librarlos de esos sacrificios).
Pero para poder entrar en los templos de la India, sin ser reconocida como ex-
tranjera, tenía que disfrazarse de hindú: se pasaba polvo de café por la piel, cubría
sus cabellos, se vestía como las mujeres del lugar y entraba libremente a los lugares
que vendían niños. Emily podía caminar tranquila en todo el “mercado infantil” ,
pues aparentaba ser hindú.
Un día, una amiga misionera la miró disfrazándose y le dijo: Emily, ¿has pensa-
do qué harías para disfrazarte si tuvieras los ojos azules como los de toda tu familia?
Esa amiga no sabía cuánto Emily había llorado en la infancia por no tener los
ojos azules. Ahora Emily pudo por fin entender el por qué del “no” de Dios hacía
tantos años.
9. Llamado
Seguramente, cuando Emily era pequeña, nunca imaginó que un día Dios usa-
ría el color de sus ojos para ayudar a las personas.
El centurión romano, también no imaginaba que Dios usaría la muerte de su
hijo para mostrarle que Jesús era el Mesías.

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Hay veces en nuestra vida, suceden algunas cosas que no podemos entender en
ese momento. Pero creer que Dios nos está guiando, aunque no sea de la manera
como deseamos, esto es tener fe. Y la Biblia nos dice que si tenemos fe, agradamos
a Dios.
Emily no más se quejó por el color de sus ojos, y el centurión pudo ver la inocen-
cia de Jesús, aunque en medio de una situación tan desagradable.
¡Qué ejemplo para nosotros! A veces, cuando las cosas no funcionan de la ma-
nera como esperamos, pasamos a reclamar, y algunos niños hasta maldicen.
Hoy tengo una pregunta muy especial: ¿A cuántos de ustedes les gustaría deci-
dir no reclamar más en las situaciones dif íciles y pedir que Dios aumente su fe, para
que puedan ver lo que Dios desea en su vida?
Orar por la decisión tomada, pidiendo que Dios ayude a los niños en este
compromiso.
11. Actividad
Hoy tenemos una actividad bien interesante: Hay dos centuriones. Deben
comparar a los dos y encontrar 7 errores. (Distribuir las hojas y los materiales).
12. Desaf ío
Obsequiar a un amigo, el centurión romano y contarle la historia que aprendió.
14. Canto final.
15. Oración final.
(A la salida, distribuir el versículo a los niños para que memoricen).

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8º DÍA - SÁBADO

MARCAS DE
ESPERANZA
TEMA
• Resurrección de Jesús.
• Presentación de Jesús en el camino de Emaús.
• Señales del regreso de Jesús.

REFERENCIAS:
• Mateo 27:62-66; Marcos 16; Lucas 24.

OBJETIVOS
• Conocer la historia de la resurrección de Jesús, su conversación con los discí-
pulos y las señales de su venida.
• Reconocer que la Biblia muestra claramente las señales del regreso de Jesús y
que estas ya están ocurriendo.
• Desear prepararse para el regreso de Jesús.

VERSÍCULO
“Entonces, comenzando por Moisés y por todos los profetas, les explicó lo que
se refería a él en todas las Escrituras” (Lucas 24:27).


1. Alabanza
2. Bienvenida
Invitar a algunas personas adultas (algunas que los niños conocen y otras que
no conocen). Estas personas estarán detrás de algo, de modo que los niños no las
vean. Ellas dirán alguna cosa y los niños intentarán identificar quién fue quien habló.
4. Canto inicial
Orar agradeciendo por la resurrección de Jesús y por la certeza de su venida.
6. Historia inicial
En cierta ocasión, viajando por Europa, un famoso pintor perdió su pasa-
porte, cuando llegó al servicio de aduanas, el guarda le pidió sus documentos de
viaje, él trató de explicarle lo que le había sucedido: “Soy Paul Gustave Doré -dijo
él, y perdí mi pasaporte, apreciaré que me deje pasar, debo atender compromisos
importantes” .
“No intente hacerme de tonto - dijo el guarda, usted no es la primera persona
que pierde el pasaporte e intenta hacerse pasar por alguien importante” El pintor
.
suplicó para que el guarda comprendiera, pero fue en vano. Finalmente, un oficial
se acercó y dijo: “Si usted es realmente el pintor que dice ser, tome este lápiz y dibuje
a ese grupo de agricultores allí. En cuestión de minutos, el gran artista diseñó una
figura de semejanza impresionante. Incluso antes de concluir el diseño, el oficial
convencido de que realmente era el famoso artista, le permitió la entrada al país.
La Biblia nos cuenta de una persona que también no fue reconocida… Sólo que no
fue por personas extrañas, sino por sus mejores amigos. Veamos:
Ese viernes había sido realmente muy, pero muy triste, los discípulos habían
perdido a un compañero (Judas se ahorcó) y también habían presenciado la cruel e
inhumana muerte de su Maestro y Señor. Había motivos suficientes para el lamen-
to y para estar desanimados, por eso habían pasado el sábado reunidos.
Ahora ya siendo domingo, dos discípulos deciden ir a Emaús, una aldea cerca
de Jerusalén. Deciden ir hasta allá pues necesitaban caminar un poco para poner
en orden los últimos acontecimientos. En sus mentes, muchas informaciones apa-
recían simultáneamente, haciendo imposible poder pensar con claridad.
Ellos habían visto la muerte de Jesús en la cruz, pero ahora tenían la informa-
ción de que algunas mujeres habían ido al sepulcro y habían visto la piedra remo-
vida y un ángel les había dicho que Jesús había resucitado. También tenían la infor-
mación de María, que al estar llorando cerca del sepulcro, había visto y oído que

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Jesús conversaba con ella y le decía que avisara que él quería encontrarse con los
discípulos en Galilea.
Con todo esto en mente, ellos tristemente comenzaron a caminar, iban conver-
sando sobre todas las cosas que habían ocurrido. De repente, un extraño se les acer-
ca y va caminando con ellos, al ver la tristeza del corazón de los discípulos les pre-
gunta: “¿Por qué están preocupados ustedes? ¿Por qué están tristes?” Ellos entonces
comienzan a contar los acontecimientos que les agobiaba el corazón, comentando
cuánto esperaban que Jesús hubiera venido para rescatar al pueblo de Israel.
El extraño les explica la Biblia, y comenzando desde Moisés, les muestra a estos
dos discípulos, todo lo que los profetas escribieron sobre el Mesías, y que estaba
predicho que él sufriría y moriría.
Increíblemente, los discípulos no reconocen a este extraño y cuando llegan a
Emaús, lo invitan para que se quede con ellos. Solamente cuando Jesús levanta sus
manos para bendecir el alimento, es que ellos reconocen a su tan amado Maestro,
que al mismo instante, desaparece de ante ellos. De pronto, la tristeza, el cansancio
y el hambre desaparecen y ellos vuelven corriendo por todo el camino que habían
caminado tan penosamente. Ahora la distancia es recorrida en poco tiempo, pues
la noticia debe ser contada a los demás en esa misma noche. La tristeza de todos
ahora es cosa del pasado. Ellos llegan a comprender las enseñanzas de Jesús y a
disfrutar de unos días en compañía del Maestro. En ese tiempo que les restaba para
estar juntos, antes de que Jesús suba al cielo, Jesús trató de consolar a sus amigos,
confirmándoles la fe e invitándoles a ser sus testigos y a permanecer unidos y llenos
del poder del Espíritu Santo.
8. Aplicación
Saben niños, Jesús todavía no regresó y así como los discípulos esperaron, no-
sotros también estamos esperando. Pero analicemos las señales que Jesús dijo que
sucederían antes de que él regrese.
¿Alguien aquí ha escuchado hablar de alguna guerra? ¿Han visto noticias en la
TV de algún terremoto? ¿En algún lugar del mundo existe algún niño con hambre?
¿Quién aquí ha visto los noticieros de la TV sobre asaltos, crímenes o cosas pareci-
das? (deje que los niños respondan y participen).
Observen que todo esto son señales de que Jesús está realmente volviendo.
Algunas personas dicen así: Pero esto siempre ocurrió, siempre hubo terremotos,
guerras, etc. En parte, ellas tienen razón, realmente estos hechos siempre sucedie-
ron, pero observemos lo siguiente:
En el siglo XVI - hubo 4 grandes terremotos.
En el siglo XVII - fueron 10 terremotos
En el siglo XVIII - hubo 16 grandes terremotos.

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En el siglo XIX - hubo 41 terremotos.
En el siglo XX - hubo 96 grandes terremotos (hasta 1997).
Ahora vean los datos que saqué de Internet, que muestran la situación actual:
(investigue con anticipación en Internet datos actuales sobre estos hechos y
presente a los niños). Estos datos nos muestran que ¡Jesús nunca estuvo tan cerca
de volver!
9. Llamado
No tengo dudas de que seremos los que veremos a Jesús regresar, así como la
Biblia dice en Mateo 24:34 ¡Nosotros somos esa generación! ¿Cuántos de ustedes
quieren ver a Jesús regresar?
Ahora quiero que se pongan de pie todos los que desean hacer la voluntad de
Dios y prepararse para el regreso de Jesús.
Orar agradeciendo por las decisiones tomadas, y pedir que Dios confirme la
decisión de cada uno, mostrando cada día, como deben actuar para estar listos
cuando Jesús vuelva.
11. Actividad
La actividad de hoy es muy interesante: vamos a seguir el camino, para llegar a
Jesús, y estar listos cuando Ël venga.
12. Desaf ío
Llamar a un amigo para jugar con el juego de memoria y aprovechar para con-
tarle la historia.
Servir un pequeño refrigerio para los niños.
14. Canto final
Marcas de Esperanza.
15. Oración final

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