Destacándose sobre la cortina negra que apenas deja ver un diminuto y misterioso paisaje,la dama dirige su mirada más allá del marco que limita nuestro mundo y el suyo.Sus ojos,algo achinados por la concentración,hablan y su color negro delata ese pensamiento ya material que tanto atrae;sus labios,apretados y finos,repiten la intención de los ojos ,como para aclararnos que no hay marcha atrás.