Desde la clínica que tratan las “dependencias químicas” hasta las etiquetas de “sin productos químicos añadidos” en las comidas, la química y los productos químicos parecen ya una parte integral de la vida, aunque no siempre sean referencias positivas. De hecho, todos los objetos materiales, seres vivos o inanimados, se componen de productos químicos.
Al manipular los materiales que les rodean, los seres humanos siempre han practicado la química. Entre prácticas antiguas están el esmaltado de cerámicas, la fundición de minerales para obtener metales y aleaciones, el curtido de pieles, el teñido de telas y la fabricación de queso, vino, cerveza y jabón.
Con la ciencia moderna, los químicos pueden descomponer la materia en sus componentes más pequeños (átomos) y reagrupar estos componentes en materiales inexistentes en la naturaleza y que tienen propiedades nunca vistas. También, se pueden entender y controlar los procesos fundamentales de la vida, también para entender, los procesos que deterioran el medio ambiente, como la formación del smog y la destrucción de la capa de ozono, entre muchos otro.
1. Química: una ciencia para el siglo XXI
Como se mencionó anteriormente, la química es el estudio de las propiedades de
la materia y los cambios que estos sufren. Comúnmente es considerada como la
ciencia central por estar relacionada con muchas áreas de la actividad humana.
El desarrollo acelerado de tecnología durante el siglo XX brindó los medios para
estudiar lo inapreciable a simple vista. El uso de computadoras especiales,
permitió a los químicos analizar la estructura de los átomos y las moléculas
(unidades fundamentales de la química), y diseñen nuevas sustancias con
propiedades específicas. Es indudable que la química mantendrá una función
determinante en todas las áreas de la ciencia y la tecnología.
Estudio de la química
En comparación con otras disciplinas, es común creer que la química es más complicada. Dicha percepción se justifica hasta
cierto punto, por ejemplo, ciertamente es una disciplina con un vocabulario muy especializado. Sin embargo, ya está
familiarizado con el tema mucho más de lo que usted supone.
Ciudad Bolívar, Venezuela Código: InfoQuiGen-CB-01 / Revisión: 00
La Ciencia Central
#MicroClasesDeCastro / Noviembre, 2021 / Por: José Luis Castro Soto
Referencias Bibliográficas
Brown, T., LeMay, H., Murphy, C., Bursten, B., & Woodward, P. (2014). Química, la ciencia central (Decimosegunda ed.).
Naucalpan de Juárez, México: Pearson Educación de México, S.A. de C.V.
Chang, R., & Goldsby, K. (2017). Química (Duodécima ed.). México, D. F., México: McGraw-Hill Interamericana Editores, S.A.
Petrucci, R., Henrring, F., Madura, J., & Bissonnette, C. (2011). Química General (Decima ed.). Madrid, España: Pearson
Educación.
Rizzotto, M. (2007). Diccionario de Química General e Inorgánica. Rosario, Argentina: Corpus Editorial y Distribuidora.
Whitten, K., Davis, R., Peck, M., & Stanley, G. (2015). Química (Decima ed.). Madrid, España: Cengage Learning Editores.
@jlcastros78 Micro Clases de Castro
José Luis Castro Soto @MicroClasesDeCastro
@MClasesDeCastro
Introducción
Desde la clínica que tratan las “dependencias químicas” hasta las etiquetas de “sin productos químicos añadidos” en las
comidas, la química y los productos químicos parecen ya una parte integral de la vida, aunque no siempre sean referencias
positivas. De hecho, todos los objetos materiales, seres vivos o inanimados, se componen de productos químicos.
Al manipular los materiales que les rodean, los seres humanos siempre han
practicado la química. Entre prácticas antiguas están el esmaltado de cerámicas,
la fundición de minerales para obtener metales y aleaciones, el curtido de pieles,
el teñido de telas y la fabricación de queso, vino, cerveza y jabón.
Con la ciencia moderna, los químicos pueden descomponer la materia en sus
componentes más pequeños (átomos) y reagrupar estos componentes en
materiales inexistentes en la naturaleza y que tienen propiedades nunca vistas.
También, se pueden entender y controlar los procesos fundamentales de la vida,
también para entender, los procesos que deterioran el medio ambiente, como la
formación del smog y la destrucción de la capa de ozono, entre muchos otro.
Uno de los atractivos de aprender química es ver cómo los
principios químicos se aplican a todos los aspectos de
nuestras vidas, desde las actividades cotidianas, como
cocinar, hasta procesos más complejos, como el desarrollo
de medicamentos para curar el cáncer.
La química es una ciencia activa y en evolución que tiene
importancia vital en nuestro planeta, tanto en la naturaleza
como en la sociedad. Aunque sus raíces son antiguas, la
química es en todos sentidos una ciencia moderna. Estudia
la materia y los cambios que experimenta.
De hecho, la química es el centro de muchos intereses público: desde el mejoramiento de la medicina, la protección del
medio ambiente, y el suministro de ¡necesidades básicas como alimento y vestido entre muchos otros.
El propósito de estas capsulas informativa, es hacer que usted comience a pensar como químico, que vea el mundo
macroscópico, lo que podemos ver y tocar directamente, y visualice las partículas y fenómenos del mundo microscópico que
no podemos experimentar sin la tecnología moderna y nuestra imaginación, que inicie la aventura.
En otras palabras, los químicos con frecuencia ven algo (en el mundo macroscópico) y piensan en algo más (en el mundo
microscópico). Por ejemplo, al observar los clavos oxidados, un químico piensa en las propiedades básicas de los átomos
de hierro y la forma en que interaccionan dichas unidades con otros átomos y moléculas para producir un cambio.
El laboratorio de cerámica de Böttger, en el castillo de Albert, en Sajonia. Johann Friedrich Böttger (4 de febrero de 1682 - 13 de
marzo de 1719) fue un alquimista alemán se le atribuye ser el primer europeo en la creación de la porcelana de pasta dura en 1708.
Vista molecular simplificada de la formación de herrumbre (Fe203) a partir de hierro (Fe) y moléculas de oxigeno
(O2). En realidad, el proceso requiere agua y la herrumbre también contiene moléculas de agua.
Fuente: Chang, R., & Goldsby, K. (2017).
Fe
02
Fe203
Al principio es factible que le confunda que su profesor de
química alternen de manera continua entre los mundos
microscópico y macroscópico. Simplemente debe tener
presente que los datos de las investigaciones químicas
provienen de observaciones de fenómenos a gran escala,
si bien las explicaciones suelen radicar en el mundo
microscópico invisible e imaginario de átomos y moléculas.
De hecho, la química es parte central de nuestro estilo de vida; a falta de ella,
nuestra vida sería más breve en lo que llamaremos condiciones primitivas: sin
automóviles, sin electricidad, sin tintes de cabello, sin pegamentos, sin
computadoras, ni calidad de productos, entre muchas otras comodidades.
Si usted cocina, ¡entonces sin saberlo, es un químico en
acción! Gracias a su experiencia en la cocina, sabe que el
aceite y el agua no se mezclan y, si deja hervir el agua en
llegará un momento en que se evapore por completo, y se
lleva agua al congelador suficiente tempo, obtendrá hielo.
También, cuando usa bicarbonato de sodio en la
elaboración de tortas; una olla a presión para disminuir el
tiempo de cocción, exprimir un limón sobre el pescado para
minimizar su olor, entre otros. Todos los días observamos
esos cambios sin pensar en química.
La química casi siempre está en contacto con cada aspecto de nuestra vida, cultura y medio ambiente. Su campo
de estudio abarca el aire que respiramos, el alimento que ingerimos, los líquidos que bebemos, la ropa que vestimos,
la casa en que vivimos y los servicios de transporte y combustible que utilizamos, así como a nuestros semejantes.
“Química es la ciencia que estudia la materia, sus propiedades, los cambios que
experimenta y los cambios energéticos que acompañan a esos procesos”.