El documento propone una visión de una "Euskadi 2.0" basada en valores democráticos como la transparencia, la participación ciudadana y la innovación continua. Plantea que los actuales sistemas políticos ya no reflejan a los ciudadanos ni promueven la democracia directa. Una Euskadi 2.0 sería más equitativa y armoniosa, equilibrando la soberanía política y social a través de la innovación gradual y la mejora continua basada en valores como la equidad y la sostenibilidad.