1. LOS PADRES Y LA DISCIPLINA POSITIVA
LA COMUNICACIÓN
La comunicación es un proceso básico del ser humano. Es una
herramienta imprescindible en nuestra vida y elemento esencial en nuestra
realización personal. El ser humano vive en comunicación, nace de la
comunicación y en la comunicación.
Podemos considerar la comunicación como toda información que damos
o recibimos en nuestro entorno, independientemente del medio utilizado.
Tipos de comunicación:
La comunicación puede darse en 3 modalidades diferentes que
pueden, o no, interactuar entre ellas:
 La comunicación intrapersonal o la comunicación consigo mismo/a: Es un
tipo de comunicación que se está produciendo constantemente en nuestro
interior, son los propios pensamientos, sentimientos, emociones o
sensaciones corporales.
 La comunicación no verbal: Es la que no se transmite a través del lenguaje
oral o escrito. Nuestra postura corporal, los movimientos del cuerpo, de la
cabeza, de las manos, la expresión de nuestra cara, la mirada, el ritmo y el
tono de voz... están diciendo algo de nosotros/as. El mensaje a través de la
comunicación no verbal constituye la manera de decir las cosas, cómo las

2. decimos más que lo que decimos. Es el tipo de comunicación ideal para
expresar sentimientos y emociones.
 La comunicación verbal: utiliza como soporte el lenguaje, tanto oral como
escrito y se divide en dos sectores:
a) La comunicación expresiva que abarca la palabra y la escritura.
b) La comunicación receptiva que consiste en escuchar y leer.
Cuando la comunicación es sincera existe concordancia entre el
mensaje que trasmitimos no verbalmente y el trasmitido verbalmente. Pero
al percibir incoherencia entre los dos mensajes es conveniente hacer caso al
no verbal, porque éste no está bajo control.
La primera fase de la comunicación es la considerada como “táctil” ,
ya que desde la concepción se da una comunicación entre la madre y el feto
basada en el tacto (ejemplo: la madre acaricia la tripa con las manos). La
segunda fase se centrará en la “comunicación no verbal”, teniendo en
cuenta que desde el nacimiento hasta aproximadamente un año y medio el
niño/a no puede comunicarse mediante el lenguaje. Y por último, la tercera
fase es la “comunicación verbal”, donde el lenguaje se va perfeccionando.
Aún así, el lenguaje no representará la comunicación en su totalidad dado
que hasta este momento entre madre/padre e hijo/a la comunicación, y por
consiguiente, la satisfacción de necesidades, ha sido básicamente lograda no
verbalmente.
Siempre estamos comunicando, lo queramos o no; es decir, no es posible no
comunicar. Toda situación entre personas supone comunicación (ejemplo: el
silencio ante una pregunta o duda no tenida en cuenta, puede significar
descalificación o desinterés para la otra persona). Los gestos, la disposición
personal, el modo de vestir o acercarse, las relaciones espaciales suponen no

3. sólo elementos de la comunicación sino hechos comunicativos. El estilo de
comunicación afecta directamente a nuestro modo de ser y a nuestro modo
de relacionarnos.
Comunicamos por tanto, no sólo conceptos sino sentimientos,
emociones, decisiones, convicciones...
Las personas hacemos lecturas diferentes de los mensajes que
recibimos según nuestra edad y situación, características personales,
entorno social, costumbres culturales, etc.
Esto nos marcará un estilo comunicativo que determinará en gran
parte las relaciones que estableceremos en nuestro entorno familiar. No
debemos olvidar que este estilo puede modificarse: el cambio es posible en
todas las edades.
OBSTACULIZADORES DE LA COMUNICACIÓN
1. Objetivos contradictorios.
2. Lugar o momento inadecuado.
3. Estados emocionales que perturban la atención y comprensión de
los mensajes.
4. Acusaciones, amenazas y/o exigencias.
5. Preguntas de reproche.
6. Declaraciones de tipo “deberías”.
7. Inconsistencia de los mensajes.
8. Cortes de conversación.
9. Etiquetas.
10. Generalizaciones (siempre, nunca…).
11. Consejo prematuro y no pedido.
12. Utilización de términos vagos.

4. 13. Ignorar mensajes importantes.
14. Juzgar los mensajes.
15. Interpretar y “hacer diagnósticos de personalidad”.
16. Disputa sobre diferentes versiones de sucesos pasados.
17. Justificación excesiva de las propias posiciones.
18. No hablar claro.
19. No escuchar.
20.Otras.
FACILITADORES DE LA COMUNICACIÓN
1. Lugar o momento adecuado.
2. Estados emocionales facilitadores.
3. Escuchar activamente.
4. Empatizar.
5. Hacer preguntas abiertas o específicas.
6. Petición de parecer.
7. Declaración de deseos, opiniones y sentimientos.
8. Mensajes consistentes.
9. Aceptación de las críticas constructivas.
10. Información positiva.
11. Ser recompensante.
12. Utilización del mismo código.
13. Expresar sentimientos.
14. Otras.

5. ESCUCHA ACTIVA Y EMPÁTICA
Beneficios:
- Permite poder seguir comunicándonos.
- Les entendemos mejor, sin considerar nuestros sus problemas.
- Cuando nos detenemos y escuchamos a alguien le estamos diciendo
“eres importante”, lo que dices me interesa, tú me interesas”.
Puntos a tener en cuenta antes de escuchar:
- Asegurarnos que estamos preparados/as para oírle.
- Prestar toda la atención al hijo/a.
- Minimizar las distracciones.
- Ser un oyente activo.
- Invitar a hablar al hijo/a.
Qué escuchar:
1. Escucha el núcleo central de la historia: Retroalimenta el
núcleo de la historia y no te distraigas con detalles.
2. No pienses que has de arreglar las cosas: El principal desafío
que supone escuchar a los/as hijos/as es abstenerse de hacer
sugerencias, dar consejos o resolver el problema. Cuando los/as
hijos/as cuentan un problema es demasiado frecuente que
los/as padres/madres les interrumpan rápidamente sugiriendo
la solución. Es probable que el/la hijo/a no esté tanto pidiendo
una solución como comunicando una experiencia.
3. Atender y responder a los sentimientos: Cuando escuchemos a
nuestro/a hijo/a, deberemos prestar atención no sólo a sus
palabras, sino también a los sentimientos que expresa; por
ejemplo, buscar pistas en su postura física y tono de voz.
Consiste en:
- Ponerse en la posición o punto de vista de la otra persona.
- Recoger el mensaje completo.
- Darle a entender que le estamos escuchando.

6. PUNTOS PARA RECORDAR
1. La disciplina ayuda a los niños-as a aprender a cooperar. Les ayuda a
tener control sobre sí mismos-as.
2. Las claves para la disciplina efectiva son:
- Demostrar que respetamos a nuestro hijo-a y que nos
respetamos a nosotros mismos-as.
- Contar con la cooperación de nuestro hijo-a.
- Ofrecerle alternativas.
- Imponer consecuencias.
3. En vez de dar órdenes, fija límites y ofrece alternativas. Los límites
y las alternativas les hacen controlarse.
4. Una consecuencia tiene lugar cuando el niño-a elige. Las consecuencias
son una forma de fijar límites y ofrecer alternativas porque:
- demuestran respeto por ti y por tu hijo-a
- son apropiadas para el mal comportamiento
- son para malas elecciones no para niños-a malos-as
- se trata del presente no del pasado
- son firmes y cordiales
- permiten elegir
5. Para utilizar las consecuencias ofrece alternativas. Entonces sigue
hasta el final dejando que el niño-a actúe basándose en su elección.
6. Unas normas para utilizar las consecuencias son:
- Ser firme a la vez que bondadoso
- Hablar menos y hacer más
- No pelear, no darse por vencido
- Usar palabras respetuosas
- Respetar la elección
- Cuando no hay alternativa, dilo bien claro pero no más alto
- Deja que el niño-a se haga responsable de su elección
- No te preocupes por lo que piensen los demás
- Mantente serena-o
7. Ten paciencia contigo mismo y con tu hijo-a.