Los aplausos tronaron en todos los costados del auditorio, los asistentes parados le dieron la bienvenida al veterano profesor Peter Higgs (ingles), porque su propuesta teórica estaría a punto de ser corroborada, la existencia del bosón de Higgs. El científico, tambaleó, se sonrojó con cierta inocencia y humildad, y solo atinó a agradecer y secarse algunas lágrimas inoportunas que pretendieron denunciar su emoción y alegría;