La Revolución Industrial tuvo lugar en dos fases. La primera entre 1760 y 1840 en Inglaterra y se caracterizó por innovaciones técnicas como la máquina de vapor, transformaciones agrícolas y demográficas, y el crecimiento de los sectores textil e industrial. La segunda entre 1850 y 1914 expandió el uso de nuevas fuentes de energía como el petróleo y la electricidad, y vio el desarrollo de industrias químicas y alimentarias, así como nuevas formas de organización del trabajo y financiamiento de empresas a gran escal