El documento discute los problemas que enfrentan los agricultores durante las épocas de lluvia, como daños a los cultivos, bajas cosechas y problemas de salud y económicos. Propone que el Estado ayude a los agricultores a través de subsidios, más oportunidades laborales y de estudio, soluciones de vivienda, herramientas tecnológicas y una mejor infraestructura para los productos agrícolas.