Este documento critica la falta de empatía hacia los grupos vulnerables en la sociedad. Señala que en una pandemia, las personas mayores, discapacitadas y sin hogar son las más afectadas porque a nadie les importan. También critica la idea de que deberíamos votar quién vive o muere, lo que llevaría al fascismo eugenésico. Finalmente, lamenta que nuestra sensibilidad rara vez se pone al servicio de defender a los más necesitados.