El documento describe la reforma agraria implementada en Venezuela durante el gobierno de Rómulo Betancourt en 1960. El objetivo principal de la reforma era eliminar el sistema latifundista existente y establecer un sistema de dotación de tierras vinculado a recursos financieros. La reforma fortaleció el desarrollo agrícola y de cría de animales en las zonas rurales, aunque este enfoque cambió luego con el crecimiento de la industria petrolera.