José Mariano Jiménez nació en 1781 en San Luis Potosí y se trasladó a la Ciudad de México para estudiar ingeniería de minas. Trabajó como empleado de minas en Guanajuato y se unió al movimiento de independencia de México. Su cabeza fue expuesta junto con las de otros líderes independentistas hasta que México logró la independencia. Sus restos fueron trasladados a varios lugares importantes de la Ciudad de México hasta ser analizados recientemente en el Museo Nacional de Historia.