Este documento describe las características de las buenas prácticas en el uso de las TIC en centros educativos. Una buena práctica incorpora métodos innovadores, aporta beneficios tangibles, está bien descrita y sistematizada, y se puede transferir a otros contextos. Además, las buenas prácticas suponen una transformación positiva de las formas habituales de funcionamiento y constituyen el germen de un cambio en las prácticas tradicionales.