PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
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1. AIN - 12- 09 - PREGUNTA - POR QUÉ USTEDES NO CELEBRAN HANUKKAH?
Respetado amigo Crescencio Salcedo. ( Co). Con respecto a su pregunta nos permitimos
comentarle lo siguiente:
¿Qué es la Hanuká?
Hanuká es el aniversario de un suceso histórico de importantes consecuencias para el
pueblo del Todopoderoso en la antigüedad.
De hecho, es digno de notar que en los escritos nazarenos se menciona la Hanuká.
Veamos:
< Juan 10:22, 23 : --Por entonces se celebraba la fiesta de la dedicación [hebreo, januk·káh]
en Jerusalén. Era invierno, y Yahoshúa el Mesías estaba andando por el templo, en la
columnata de Salomón”. >.
El sustantivo hebreo januk·káh significa “inauguración o dedicación”. Veamos:
< Salmos 30 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011 1 Alabanza: Canción para la
dedicación de la Casa. De Dawid. Yo te elogio, Yahweh, porque tú me has puesto en alto, y
no has permitido que mis enemigos se burlen de mí.>
Está claro que esta fiesta ya se celebraba en los días de Yahoshúa el Mesías. El texto no
dice que el Mesías celebraba esta fiesta, como si se comenta de las otras fiestas. Sin
embargo, se observa que respetaba esta tradición y no lanzó ninguna crítica al respecto, o
por lo menos no aparece nada publicado al respecto.
¿Qué origen tiene esta fiesta judía? Para responder a esta pregunta, debemos considerar
algo de historia.
La profanación del templo de YHVH
Como había predicho con siglos de antelación el profeta Daniel, en cierta época de su
historia los judíos fueron dominados por Grecia y, después de la desintegración de ese
imperio, por Egipto y Siria. (Daniel 11:2-16.) Aunque muchos de los gobernantes no judíos
toleraron la adoración a YHVH, hubo una excepción notable: Antíoco IV de Siria.
Para el año 175 a. E.C. Antíoco gobernaba un vasto imperio que abarcaba gente de
diversas costumbres. Con la esperanza de unificar a su pueblo, creó una religión común
para todos y se colocó a sí mismo como “el Todopoderoso Manifiesto”. Pero como YHVH
exige devoción exclusiva, los judíos rehusaron adorar a Antíoco. (Éxodo 20:4-6.) En
consecuencia, Antíoco decidió erradicar esta religión inconformista de los judíos. Al poco
tiempo prohibió sus sacrificios de animales, la observancia del día de reposo, la práctica de
la circuncisión e incluso la lectura de las Escrituras Hebreas, todo bajo pena de muerte.
Hasta se hizo una búsqueda para localizar copias de las Escrituras Hebreas y quemarlas.
2. Sin cejar en su empeño de erradicar la adoración de YHVH, los ejércitos de Antíoco
invadieron Jerusalén, penetraron en el templo de YHVH y saquearon el Lugar Santísimo. El
15 de Kislev de 168 a. E.C. Antíoco edificó un altar al el Todopoderoso griego Zeus sobre el
altar de YHVH que estaba en el patio del templo. Diez días después, el 25 de Kislev, asestó
su último insulto: utilizó el altar para sacrificar cerdos (animales inmundos según la Ley de
YHVH). De hecho, con aquel acto se dedicó el templo a Zeus.
¿Cómo reaccionaron los judíos? De acuerdo con el registro histórico - no inspirado- que
hoy se conoce como 1 Macabeos, muchos judíos cooperaron con sus invasores y
abandonaron la adoración de YHVH, pero hubo otros que mantuvieron su integridad y
murieron como mártires por sus creencias.
Aquel mismo año (168 a. E.C.) algunos judíos comenzaron a luchar contra los sirios con la
esperanza de conseguir libertad para adorar a YHVH. En el año 167 a. E.C., Judas
Macabeo, un sacerdote levita, se erigió en líder de este movimiento de resistencia.
Convencido de que solo podrían obtener la victoria si confiaban en YHVH, Judas reunió a
sus hombres para leer las Escrituras Hebreas y orar.
Durante tres años combatieron contra los sirios, a pesar de que en comparación su grupo
era muy reducido. Asombrosamente, para el año 166 a. E.C. Judas había reconquistado
Jerusalén. Después, los sacerdotes de YHVH pudieron limpiar el templo y edificar un nuevo
altar. Por fin, el 25 de Kislev del año 165 a. E.C., exactamente tres años después de su
profanación, el templo se volvió a dedicar a YHVH.
Aunque Judas todavía tenía que seguir luchando contra los sirios en Galilea, el gozo por la
rededicación del templo fue tan grande que el Macabeo instituyó una celebración anual de
ocho días de duración en la fecha de su aniversario, que llegó a conocerse como la fiesta
de la dedicación (Hanuká).
NOTA: Esta fiesta no forma parte del pacto original que el Todopoderoso hizo con Israel.
Pero llegó a formar parte de la tradición de los judíos, tal como la fiesta del Purim años
antes. (Ester 9:26, 27.) Al igual que el Purim, la fiesta de la Hanuká se celebra con
canciones y oraciones en las sinagogas. Pero por otro lado, las tres grandes fiestas de
peregrinación obligatorias según el pacto (la Pascua, la fiesta de las semanas o
Pentecostés y la fiesta de las cabañas) requieren desplazarse al templo de Jerusalén.
(Deuteronomio 16:16.)
Con el transcurso de los años se añadieron más tradiciones y costumbres a esas fiestas
tradicionales. El historiador Josefo dice que para el siglo I E.C. ya se la conocía como la
fiesta de las luminarias, si bien no se sabe con certeza cuál fue el origen de esta costumbre.
Cierta versión afirma que conmemora un milagro que ocurrió en la re-dedicación del templo.
Según la tradición, cuando llegó el momento de volver a encender el candelabro del templo
de YHVH, aunque la cantidad de aceite ceremonialmente limpio que quedaba solo bastaba
para un día, milagrosamente duró ocho días.
Desde el siglo I a. E.C. en las casas judías se enciende una candela el primer día de la
fiesta, dos el segundo día e iban aumentando hasta llegar a ocho, práctica que siguen
observando hoy día los judíos.
3. ¿Es verídica la historia del aceite milagroso o es tan solo una leyenda sin fundamento?
¿Apoyaba el Todopoderoso la rebelión de Judas Macabeo contra Siria? ¿Hubo apoyo
divino?
En las Escrituras Hebreas inspiradas no se registra ninguna declaración directa de que
YHVH le diese a Judas la victoria o dirigiese la reparación y re-dedicación del templo. Por
supuesto, como estos sucesos ocurrieron después de completarse las Escrituras Hebreas,
no era posible que apareciese en ellas ningún comentario al respecto.
Ni Yahoshúa el Mesías ni sus discípulos comentaron sobre esos sucesos, de modo que
tampoco indicaron si el Todopoderoso apoyó a Judas Macabeo o no.
Pero en los escritos nazarenos sí se registra el cumplimiento que tuvieron las profecías
mesiánicas de las Escrituras Hebreas en el ministerio de Yahoshua el Mesías. Algunas de
estas profecías requerían que el templo estuviese en funciones para cuando se presentase
el Mesías. (Daniel 9:27; Ageo 2:9; compárese Salmo 69:9 con Juan 2:16, 17.)
¿Debe celebrarse esta fiesta tradicional?
El discípulo Shaul (Pablo) nos dice lo siguiente:
< Colosenses 2: 16 Por tanto, que nadie los juzgue en asuntos de comida o de bebida, o en
cuanto a días de fiesta, lunas nuevas o días de reposo. 17 Estas cosas son sólo una
representación de los bienes que vendrán, pero la realidad pertenece al Mashíaj.>.
Indudablemente esto se refiere a las Fiestas de Lev 23 y a otras ordenadas en la Torah. El
texto está en verbo singular, presente. Por otro lado, ningún emisario en los escritos
nazarenos menciona en forma clara ni a Hanukka ni a Purin en sus textos, como fiestas que
ellos celebraran. Aunque la re-dedicación del templo fue un suceso importante en la historia
del pueblo judio de la antigüedad, no hay razón para que nosotros actualmente
conmemoremos Hanuká. Más en cuanto a los elementos fuera de Torah y otros que se
manejan como un candelero de 9 brazos, comidas especiales, regalitos y otros elementos
plenamente relacionados con otras tradiciones paganas de otros pueblos. Pero respetamos
esta tradición del pueblo judio, así como su tradición acerca de Purim.
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Amigo Crescencio, para servirle.
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