PIAR v 015. 2024 Plan Individual de ajustes razonables
Inteligencia logico matematico
1. INTELIGENCIA LOGICO MATEMATICO
La inteligencia lógico matemática implica la capacidad de utilizar de manera casi natural el
cálculo, las cuantificaciones, proposiciones o hipótesis etc., es decir el razonamiento lógico.
Esta inteligencia está más desarrollada en los contadores, matemáticos, programadores de
computadora, analistas de sistemas o personas quienes emplean los números y el
razonamiento de manera efectiva.
Incluye:
Cálculos matemáticos.
Pensamiento numérico.
Solucionar problemas, para comprender conceptos abstractos.
Razonamiento y comprensión de relaciones.
Entre las edades de cero a cuatro años, los niños desarrollan los primeros cimientos que le
permitirán entender la lógica y los conceptos matemáticos. Durante esta etapa los juegos de
estimulación pueden traer muchos beneficios, siendo simples y cotidianos como hacer
torres de cubos, unir cuentas con un pasador, contar los juguetes, clasificarlos, etc.
Aunque es en la escuela donde los niños empiezan a reconocer los símbolos numéricos y
algo más complicado: Relacionar la cantidad de cosas con cada número y hacer conjuntos
abstrayendo lo que tienen en común o porque son diferentes, es en casa, en etapas
anteriores, cuando el niño empezará el aprendizaje de las matemáticas, al ir descubriendo
dónde hay más dulces y cuál barra de chocolate es más grande o al jugar agrupando
piedritas o carritos.
A los niños con inteligencia lógico-matemática les encanta:
Los niños, que sobresalen en la inteligencia lógico-matemática piensan en forma numérica
o en términos de patrones y secuencias lógicas, en su pubertad, evidencian una gran
capacidad de pensar de forma altamente abstracta y lógica, analizan con facilidad
planteamientos y problemas. En etapas superiores destacan en su habilidad para hacer
cálculos numéricos, estadísticas y presupuestos con entusiasmo.
Les encantan hacer preguntas acerca de fenómenos naturales, computadoras y tratan de
descubrir las respuestas a los problemas difíciles.
Necesitan:
Cosas para manipular.
Cosas para explorar y pensar.
Cosas para investigar.
Cosas para clasificar, seriar, comparar.
Cómo estimular:
Generar ambientes propicios para la concentración y la observación.
2. Explorar, manipular, vivenciar cualidades de los objetos.
Descubrir los efectos sobre las cosas.
Descubrir sus características.
Identificar, comparar, clasificar, seriar objetos de acuerdo a sus características.
Jugar a las adivinanzas ¿quién se fue?
Definir sensorialmente las cosas a partir de preguntas:
o ¿Cómo se siente?
o ¿A qué se parece?
o ¿Qué no es?
o ¿Qué te recuerda?
Incluir en nuestro hablar cotidiano conceptos de secuencia temporal:
o “Primero”
o “Después”
o “Por último”
Realizar juegos de repartir uno a uno.