La inflación en Venezuela ha reducido la capacidad de compra de su moneda, el bolívar. La inflación ocurre cuando hay un exceso de dinero en circulación, lo que genera una presión de demanda que aumenta los precios. En Venezuela, los precios suben pero los salarios no lo hacen al mismo ritmo, por lo que cada vez se necesitan más bolívares para comprar la misma canasta de bienes. Esto significa que el poder de compra del bolívar ha disminuido a medida que la inflación continúa.