1. NUESTROS QUERIDOS Y NUESTRAS QUERIDAS. JUEVES 25º.
Después de 23 años gobernando en nuestro pueblo, la estrategia del señor Alcalde y de su grupo de gobierno
es ya archiconocida. Un año más venimos a ser espectadores del populismo y la manipulación de un sector de
la población, con fines puramente electoralistas. Hablo de los mayores (y jubilados por enfermedad) que están
invitados a la cena anual con actuación incluida, para continuar riéndose de los queridos y queridas
marmolejeños y marmolejeñas.
Nada. En eso se resume la política real hacia estos colectivos por parte de quien nos gobierna.
Solo una hermandad, la de La Esperanza y Jesús Preso, tuvo el coraje de habilitar un espacio para que los
mayores se relacionaran y pasaran un rato fuera de sus hogares. Crearon un espacio para ellos, pensando en
que sus vidas y su importancia no son para unos días sino para todo el año.
Llevamos años conociendo experiencias de otras poblaciones en las que se dinamiza este colectivo dándole a
elegir entre un amplio abanico de ocupaciones, talleres, cursos, etc., etc., durante todo el año. ¿Qué tenemos
de eso en Marmolejo? Nada.
La Teleasistencia y la Ayuda a Domicilio es otra medalla que se autoimponen pero en la que no tiene que ver
nada ni su gestión ni su iniciativa.
La Residencia y Centro de Día de La Plaza de la Campiña, que lleva años deteriorándose sin concluir y sin que
sepamos porqué esa demora, se ha diseñado de espaldas a las necesidades reales de la población. Las
habitaciones escasas, y el centro de día pensado única y exclusivamente para jugar al tute.
A todo eso sumémosle la distancia que para un mayor y no tanto puede suponer bajar allí todos los días.
Repito, de espaldas a las necesidades reales de este colectivo.
Parece ser que algo se ha rectificado y que el "segundo" centro de día (que esperemos ver terminado antes
que el primero) se ha planificado pensando más allá del tute. Lo veremos.
Mientras tanto ¿qué se les propone desde el Ayuntamiento? Unos días al año de distracción y una cena
amenizada; convocada con carta personalizada y repartida por varios jóvenes del "empleo juvenil" haciendo
prácticas de cartero.
Estoy seguro que, antes que eso, estas personas dentro de su natural bondad no desearían nada para sí,
desearían otras cosas. Por ejemplo no ver a sus nietos tratados como ganado durante la feria en ese "espacio"
para el botellón.
O ver a sus hijos aliviados tras cobrar la deuda añeja que el Ayuntamiento tiene con sus negocios. O no verlos
partir a más de mil kilómetros dejando a su familia atrás para
ganar un jornal. O que no fueran tratados peor por no pensar
como quien les monta la cena.
Pero quizás, puestos a pedir, pedirían poder subir a las gradas
del pabellón a ver a sus nietos jugar, o poder entregar un papel
en el registro sin tener que subir 25 escalones.
Los jubilados y personas mayores no necesitan unos días de
pobre dedicación e imaginación. Necesitan mucho más.
Si realmente quieren hacer un homenaje a los mayores
escuchen lo que tienen que decirles y no los traten como
herramienta electoralista.
Ahora les tocará rasgarse las vestiduras por estas últimas
palabras a "los de siempre", pero ¿acaso no iba una mujer de
sus listas del PSOE en las pasadas elecciones preguntando casa
por casa a personas mayores si querían que le ayudaran a
votar? ¿Qué listado utilizaban para realizar esta acción
descarada? ¿Quizás la que han manejado para enviar estas
invitaciones? Denigrante. Es una opinión.
A su disposición. Un saludo.
Antonio Manuel Herrera Casado
Candidato a la alcaldía de Marmolejo