Presentacion III ACTIVIDADES DE CONTROL. IV UNIDAD..pdf
Responsabilidad social empresaria y capital social
1. Responsabilidad Social Empresaria y Capital Social:
La paradoja de las 2 monedas de oro.
Cuenta una antigua leyenda del Indostán que había una vez un Genio de Lámpara, propiedad
de un joven monarca que regía sabiamente a su pueblo. Tan contento estaba el Genio con su
amo que le dijo: -Viendo como gobiernas a tu gente y tus constantes ejemplos de generosidad,
esta vez quiero yo premiarte haciéndote inmensamente rico, sólo tienes que pedírmelo.
El joven príncipe luego de pensarlo unos instantes le respondió: -Si de verdad deseas que sea
inmensamente rico, haz que cada vez que meta la mano en mi saco de monedas para ayudar a
un necesitado, salgan 2: una para él y otra para mí, pues la única forma en la que realmente
alcance una riqueza genuina será con el bienestar de mi pueblo.
Gustó tanto al Genio el pedido del Príncipe que lo concedió de inmediato trayendo
prosperidad y alegría a la comarca.
En esta historia parece que el gobernante entiende perfectamente que no es posible la
satisfacción de las propias necesidades materiales y de consumo, si estas no vienen de la mano
del progreso y la satisfacción simétrica con el entorno. Algo así ocurre con el Capital Social de
las empresas cuando hablamos de Rse.
Este Capital Social se diferencia del otro tipo de Capital de conformación societario,
fundamentalmente porque a diferencia de este, el Capital Social no se agota con su empleo
sino que por el contrario se multiplica al ponerse en juego con los diversos actores de la
comunidad. Este fenómeno se apalanca con la denominada Licencia Social, que es el permiso
de facto que brinda una comunidad a la operatoria de una organización, reconociéndola como
un miembro de aportes positivos a su devenir cotidiano.
En esta línea podemos abrevar en las definiciones de Bordieu, quien define al Capital Social:
«…como un conjunto de recursos disponibles para el individuo derivados de su participación en
redes sociales…» entendiendo por estas últimas la vinculación inter sistémica entre empresa y
sociedad. Aquí la empresa aporta como generador de valor material, pero también simbólico,
excediendo lo meramente monetario –contribuciones impositivas, pe- y transformándose en
su rol de ciudadano corporativo en una actor clave para el progreso de la comunidad, como lo
redefine el Banco Mundial: «…el Capital Social excede como definición de aplicación
exclusivamente asistencialista y busca en este sentido ubicar como actor principal al propio
destinatario de estos beneficios…». Estos beneficios como aportes no materiales a las cadenas
de valor hacen que se generen nociones de pertenencia a un grupo, propiedades comunes y
que estén unidos por vínculos relativamente permanentes y estables.
Sólo las Grandes Empresas, y no sólo las Empresas Grandes, que lo entiendan como el Joven
Príncipe, prosperarán en el tiempo y serán reconocidas por la sociedad y ese Gran Genio que
guía nuestra conducta interior.
Lic. Marcelo Berlato: Es licenciado en Relaciones Públicas, egresado de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora
y actualmente conduce las investigaciones del Observatorio de Opinión Pública de la UdeMM donde es profesor
titular de Teoría de la Opinión Pública. Con sólida experiencia práctica en el sector privado, público y no
gubernamental como Consultor en Comunicaciones Integradas y RSE, es especialista certificado por el programa
Valor AMIA-BID participando como capacitador. Conocido disertante se destacan sus ciclos Comunicación y
Empresa desde al año 2009 en UdeMM, donde se abordaron las problemáticas organizacionales desde las
comunicaciones integradas hasta el psicoanálisis organizacional. Es egresado de la 3er edición del PIFFRSE.