Intervención de juanma moreno en el desayuno de El Correo de Andalucía
1. Intervención de Juanma Moreno en el desayuno de El Correo de
Andalucía
Sevilla, 6 de noviembre de 2014
Señoras y señores:
Es para mí una satisfacción estar hoy en El Correo de Andalucía, una
cabecera histórica, con enorme arraigo en esta tierra y que tiene
mucho que decir en el presente y en el futuro.
Me gustaría destacar el estrecho vínculo de este periódico con la
realidad de Sevilla y de Andalucía.
Comparto esa visión general de que atender a lo más cercano y
cotidiano es compatible con la preocupación por el futuro.
Estar pegado al terreno solucionando problemas te permite a la vez
proyectar una sociedad mejor.
Esa cercanía y esa preocupación constante por los problemas del día
a día de sus vecinos caracterizan a los buenos gobernantes, como lo
son nuestros alcaldes, como lo es sin duda el alcalde de Sevilla, Juan
Ignacio Zoido.
No hace falta que les recuerde la situación económica que se encontró
Juan Ignacio cuando llegó al Ayuntamiento de Sevilla. Hablar de ruina
es quedarse corto.
Con su trabajo y el de su equipo, Juan Ignacio ha conseguido darle la
vuelta a la situación. Ha saneado las cuentas y los sevillanos por fin
encaran su futuro como merecen. Por parte del Ayuntamiento y de su
alcalde no va a quedar.
Sevilla tiene por delante una serie de oportunidades de crecimiento
económico y social que necesita aprovechar.
No nos podemos permitir que proyectos de gran impacto para mejorar
la vida de los sevillanos y crear empleo se pierdan por razones
partidistas.
Todos los agentes económicos y sociales y los propios ciudadanos
reclaman que los políticos apartemos diferencias y concentremos
2. esfuerzos en impulsar lo que es bueno para Sevilla. Pondré sólo tres
ejemplos:
· El acuerdo con Altadis que generaría más de 300 puestos de
trabajo directos.
· La modificación del uso de la antigua comisaría de La Gavidia
· O la construcción del nuevo puente de la Torre Pelli
Estas actuaciones ni siquiera requieren inversión alguna por parte de
la Junta. No hay excusa. Por tanto, reclamo del gobierno andaluz
voluntad política y lealtad para atender las necesidades de Sevilla.
La buena gestión de un alcalde no puede estar penalizada por el
partidismo de otra administración.
Son proyectos de futuro, proyectos de ciudad, que deberían contar
con la colaboración leal del gobierno autonómico y que, pueden estar
seguros, yo impulsaré como Presidente de la Junta.
Estamos ante una ciudad en marcha, plenamente dinámica y que mira
al futuro.
Sevilla está dando importantes pasos adelante para que su Puerto sea
un importante motor de la economía andaluza:
· La Zona Franca de Sevilla, que vemos ya como una realidad
cercana, es un proyecto estratégico que será un revulsivo para
la actividad económica de toda la comunidad.
· También el proyecto de Dragado del río, que sería una tremenda
fuente de creación de empleo, está salvando escollos. Estoy
seguro que con la voluntad de colaboración de todos podrá salir
adelante.
El desarrollo de Sevilla no puede pararse, pero junto a los planes
estratégicos hay que poner solución a los muchos problemas que
tienen la ciudad y la provincia.
3. Porque lo que es bueno para Sevilla es bueno para Andalucía. Sevilla
arrastra grave incumplimientos y abandonos por parte de la Junta en
materias tan sensibles como la sanidad, la educación y las
comunicaciones.
· Ahí está el equipo quirúrgico de El Prado, que después de 8
años no es más que un solar baldío.
· O el antiguo Hospital Militar, desmantelado a plena luz del día.
En materia educativa, y como ocurre en toda Andalucía, no hay un
solo pueblo sevillano donde no haya carencias graves. Y hablamos del
futuro, de lo más sagrado, de nuestros hijos.
Lo mismo ocurre con infraestructuras vitales para la modernización de
Sevilla y su área metropolitana:
· Todavía estamos esperando las líneas 2, 3 y 4 del Metro, y los
tranvías de Alcalá de Guadaíra, Dos Hermanas y El Aljarafe.
Pero que no crean los sevillanos que son los únicos abandonados por
la Junta de Andalucía. Por toda nuestra geografía, en las ocho
provincias que he recorrido sin descanso, las quejas de los andaluces
son unánimes.
Me lo cuentan los médicos, los profesores, los agricultores, los
parados, los estudiantes. Me he reunido con más de tres mil personas,
cara a cara, en estos meses. Y la frustración es generalizada.
Tenemos un gobierno de la Junta que no gestiona, que no escucha a
los ciudadanos y que no piensa en el futuro de nuestra tierra. Es muy
difícil recordar una decisión o una medida del ejecutivo autonómico en
el último año para mejorar la vida de los andaluces.
Y créanme, hay muchas cosas que mejorar en Andalucía. No
podemos conformarnos, no podemos resignarnos. Yo no pienso
hacerlo. Porque yo, como ustedes, pienso en el futuro.
Andalucía ha recibido en los últimos años 80.000 millones de euros de
fondos europeos.
4. Ese dinero tenía que haber servido para ponernos en cabeza en
muchos asuntos, para reducir el paro, para crear oportunidades para
nuestros jóvenes, para tener una educación líder.
Sin embargo, el inmovilismo y la incapacidad para utilizar los recursos
propios y los que nos llegan de fuera, son un freno al desarrollo
económico y la creación de empleo en Andalucía.
La última EPA ha sido un auténtico ‘jarro de agua fría’ para la
complacencia y arrogancia instaladas hoy en San Telmo:
· En Andalucía aumenta el paro en 18.800 personas mientras en
España baja en casi 200.000
· Además, este incremento se ceba fundamentalmente con las
mujeres andaluzas, que acumulan casi el 90% de la subida.
¿Dónde están las políticas de igualdad del gobierno andaluz?
Andalucía está perdiendo oportunidades de empleo que otras
comunidades aprovechan. Y los resultados están ahí:
· La brecha con el conjunto de España se acerca ya a los doce
puntos.
· En el último año en nuestra comunidad se reduce el paro cuatro
veces menos que en el conjunto de España. (2 % frente al 8 %)
· Hay una referencia que me gustaría destacar por su cercanía y
porque su punto de partida es muy similar al nuestro. Se trata de
Extremadura, que ha logrado reducir sus cifras de paro nada
menos que un 18% frente al poco más del 2% que lo hace
nuestra comunidad. Nueve veces menos.
El desempleo y cómo combatirlo es nuestra obsesión. En este gran
objetivo tenemos que poner todo nuestro tesón, nuestro ingenio y
nuestra voluntad.
Yo no me voy a cansar de proponer un Gran Pacto por el Empleo,
que siente las bases de las reformas estructurales que necesitamos
para hacer una Andalucía más competitiva:
· hacen falta políticas consensuadas entre el gobierno
autonómico, los partidos políticos, agentes sociales y
económicos, las corporaciones locales y el Tercer Sector.
· Es necesario también que las políticas de empleo sean
supervisadas y evaluadas para saber si realmente generan
5. empleo y reorientarlas si no es así. Y también para garantizar el
buen uso del dinero público.
· Hay que impulsar planes específicos para aquellos con más
dificultades para encontrar trabajo, como son los jóvenes y las
mujeres.
· Y por supuesto apoyar a los emprendedores y a los sectores
productivos creadores de empleo com más seguridad jurídica,
deshaciendo la maraña legislativa y con menos burocracia.
Me preocupa que a pesar de la crudeza de la realidad que estamos
viviendo, en Andalucía ha retrocedido el espíritu de consenso y la
voluntad de llegar a pactos positivos para los ciudadanos.
Se pierden el tiempo, la energía y los recursos en el enfrentamiento
estéril con todo el mundo: con el Gobierno de España, con los
ayuntamientos, con las organizaciones sociales.
Los discursos amables, las fotos y el marketing político no son
suficientes. Nunca van a lograr atajar el problema del paro y, como se
está comprobando, no reducen las diferencias sociales sino que las
agrandan.
El demoledor informe de Cáritas conocido esta semana nos pone a
ante la evidencia de una tasa de exclusión del 38,3 por ciento. La
segunda más alta de España. La cuarta parte de los andaluces viven
en situación de exclusión social. Y lo que es más grave, un millón
sufre exclusión severa. 334.000 hogares andaluces acumulan graves
problemas que les impide vivir con dignidad.
Ahora más que nunca es necesaria una Ley de Inclusión Social que
garantice unos ingresos mínimos a los que más lo necesitan. Es una
promesa eternamente prometida y no cumplida.
Las prioridades del gobierno autonómico van por otro camino, en el
que importa más la ideología que las personas.
Ahí están los 18 millones de euros para un banco público mientras se
recorta en sanidad, educación y políticas sociales
O se rechaza la negociación para que los empleados públicos
recuperen el dinero perdido en los últimos años.
6. Tenemos un presupuesto cercano a los 30.000 millones de euros que
año tras año se traiciona con una ejecución vergonzante. A 30 de
septiembre:
· Las políticas de empleo sólo se han ejecutado al 23,8%
· Y hay 2.285 millones pendientes de invertir en apoyo a los
sectores productivos.
En los últimos años, la Industria ha perdido peso en la economía
sevillana y andaluza:
· La reindustrialización es para mí un objetivo irrenunciable. Si
para Europa es prioritario para Andalucía mucho más.
· La Universidad –Sevilla tiene dos instituciones de prestigio-debe
actuar como palanca de una industria moderna
vinculada al I+D.
· Está demostrado que los territorios con más industria
soportan mejor las crisis económicas y tienen mayor fortaleza
en el empleo.
Esa apuesta por la industria, tiene que mirar especialmente al campo
andaluz.
La Agricultura necesita una revolución de modernidad que debe venir
de la mano de la industria agroalimentaria.
· El campo andaluz requiere políticas de apoyo más decididas
por parte del Gobierno de la JA.
· Necesitamos innovación tecnológica y ganar dimensión,
fomentando las fusiones de empresas y cooperativas.
· Eso nos permitirá ser mucho más competitivos, tanto en
costes de producción como en comercialización y promoción.
· Y nos dará fuerza para negociar con las grandes cadenas de
distribución y para exportar más.
7. Estas políticas son las que deben impulsar nuestro desarrollo y tirar
del carro del empleo. Si no hay una apuesta clara, seguiremos sin dar
oportunidades a miles de familias andaluzas.
El Presupuesto para 2015 va camino de convertirse en otra
oportunidad perdida para cambiar el rumbo.
· Lo que debería ser un instrumento de recuperación será un
obstaculo al empleo.
· Por eso ayer presenté una enmienda a la totalidad. Los
andaluces no podemos permitirnos este conformismo de la
Junta.
Gobernar es tomar decisiones para mejorar la vida de la gente. Un
buen gobernante es el que cambia lo que no funciona en vez de
empeñarse en repetir errores. Llevamos más de dos años y medio de
legislatura y hemos cambiado el titular de la Presidencia pero no las
políticas.
Tenemos que impulsar el progreso de nuestra tierra con reformas. Y
no podemos seguir siendo los españoles que más impuestos
pagamos.
He propuesto una Reforma Fiscal Autonómica que permitiría a cada
andaluz con rentas medias y bajas tener 400 euros más en su bolsillo
cada año.
Lo que se sumaría a la bajada de impuestos aprobada por el Gobierno
de la Nación.
Es decepcionante que el ejecutivo andaluz haya despachado con
trazo grueso nuestra propuesta por motivos ideológicos.
Se trata de una reforma fiscal muy completa, que aborda todos los
impuestos de competencia autonómica y que ha sido elaborada por
expertos en la materia.
Una reforma basada en la realidad de Andalucía, que impulsaría el
empleo y el consumo, y que está pensada principalmente en las
familias que menos recursos tienen.
Mi plan contempla deducciones para impulsar la educación: idiomas,
material de estudios, cursos de postgrados y ayudas para estudiar en
otra provincia.
8. El efecto inmediato de la reforma es un ahorro global de 450 millones
de euros, que produciría una importante inyección de liquidez en la
economía.
Los expertos estiman que se generaría una actividad económica de
3.000 millones de euros y un incremento del empleo en más de 50.000
personas en nuestra comunidad.
Queremos, además, acabar con el Impuesto de Sucesiones y
Donaciones, que es injusto y abusivo, destruye empleo y riqueza, y
está provocando un auténtico éxodo fiscal: más de 5.000 andaluces
tuvieron que renunciar el año pasado a sus herencias por los
impuestos de la Junta.
Lo peor que nos puede pasar es no hacer nada, dejar las cosas como
están.
Llevo ocho meses haciendo propuestas para mejorar la vida de los
andaluces y sólo he recibido silencios, descalificaciones e incluso
anuncios de querellas.
Los ciudadanos reclaman respuestas claras y si los grandes partidos
no somos capaces de dárselas, las buscarán en opciones que
pondrían en jaque no sólo la estabilidad económica sino también los
valores de la convivencia que hemos construido.
Las encuestas reflejan que los ciudadanos están insatisfechos con la
política, y con los partidos que principalmente la protagonizan. Es
decir, PP y PSOE.
Esta insatisfacción es consecuencia de haber tomado medidas muy
duras durante la crisis, y también de la percepción de corrupción
generalizada.
Todos sabemos que no estamos frente a una infección del conjunto
del sistema político. Pero no se puede negar que los casos de
corrupción conocidos son indignantes y están causando un gran
malestar e irritación. Malestar e irritación que comprendemos, que
compartimos y que nos obligan a reaccionar, todavía más.
Y yo me comprometo a hacerlo con humildad y sentido de la exigencia
democrática.
El PP es percibido como útil y eficaz contra la crisis económica y para
garantizar la estabilidad institucional. Y queremos ser también útiles
para todas aquellas personas que quieren más regeneración política.
9. El Plan contra la Corrupción que le he remitido por escrito a la
señora Díaz no es una propuesta improvisada, sino el compendio de
muchas medidas que llevamos tiempo reclamando. Y algunas otras
que muestran que estamos dispuestos a ser más exigentes todavía.
Son medidas
· para mejorar la gestión y el control de los fondos públicos,
· para ofrecer a los ciudadanos un Buen Gobierno que actúe
con ejemplaridad y austeridad,
· y también medidas en el ámbito interno de mi partido. Nadie
que sea encausado por corrupción tiene cabida en el PP
andaluz.
Ese es mi compromiso.
Estoy dispuesto a liderar la regeneración democrática en Andalucía y
a luchar contra la corrupción con la celeridad, la contundencia y la
exigencia que demandan los ciudadanos.
Creo que sería muy positivo que la señora Díaz reflexionara y
aceptara por una vez sentarse con el PP a hablar de Andalucía.
Como partido de gobierno desde hace más de tres décadas, el PSOE
andaluz debería ser el primer interesado en aceptar la mano tendida
que le ofrecemos.
Mi único empeño es proponer soluciones para que los andaluces vivan
mejor.
· con más oportunidades de empleo
· con unos servicios públicos de calidad
· y con una vida pública limpia y honesta que no les avergüence a
diario.
Mi proyecto para Andalucía es un proyecto de cooperación, que
escuche y tenga en cuenta el sentimiento, las ideas y las aspiraciones
de los ciudadanos.
Un proyecto en el que cada provincia cuente, en el que aprovechemos
las potencialidades y ventajas de todas, y forjemos nuevas alianzas de
cooperación.
10. El progreso de Andalucía debe ser el de cada una de sus provincias,
cada una de sus grandes ciudades y también de sus pueblos.
Avanzaremos más si lo hacemos todos juntos.
Estoy convencido de que la Andalucía que queremos, cada día está
más cerca y sé que el Partido Popular es la esperanza de una mayoría
que quiere un gobierno mejor. Muchas gracias.