Este documento discute el modelo antropológico tripartito de cuerpo, alma y espíritu. Argumenta que Rielo subraya la unidad de un espíritu que asume las funciones del alma y del cuerpo, dando sentido a la naturaleza humana. También explica que el espíritu se define por su relación con el Sujeto Absoluto y es lo que hace al ser humano racional, libre y responsable.