El documento describe la importancia del silencio en la francmasonería. Explica que el silencio es una virtud que permite la corrección de defectos, el aprendizaje prudente y la escucha constructiva. También describe cómo el silencio crea una atmósfera propicia para el trabajo interior y el fortalecimiento de los lazos fraternales. Finalmente, señala que el silencio permite la concentración y apertura de canales mentales para una percepción profunda.
1. A.: L.: G.: D.: G.: A.: D.:U.:
EL SILENCIO
Una antigua leyenda enseña que el príncipe BAHZAM, un día cualquiera salió a
cazar cerca de su palacio; en dicha actividad fue sorprendido por la noche,
cuando precisamente buscaba una buena presa. Cansado ya, el príncipe se
sentó debajo de un frondoso árbol con el propósito de tomar respiro; en ese
momento sintió salir de las ramas la voz de un ave; acto seguido Bahzam se
colocó de pie y le disparo con su cerbatana al pajarillo, matándolo enseguida.
Teniendo el joven a sus pies al ave fallecida, medito, suspiro y dijo: “¡Oh!, cuan
hermoso es saber callar y cuidar la lengua! Si esta ave no hubiera hablado, no
habría perecido.”
INTRODUCCION
¿De dónde proviene el silencio como axioma fundamental para el crecimiento del masón, y cuál es su verdadero
significado e importancia?
El aprender a hablar poco, lo justo y necesario, significa fuerza de voluntad, prudencia, carácter templado, dominio
de sí mismo, elevación de espíritu y conocimiento de la gente. Es curioso el ser que habla y cuya palabra sólo es
oída por sí mismo. El hombre que se refugia en el silencio, puede decir: Me callo y así puedo aprender a oír y a
hablar.
La suerte de un hombre está en que él tenga oído, y lengua el otro. Estos son síntomas de un juicio sano, estar
colocado en un buen camino y saber callar sabiamente. La lengua del hombre prudente está colocada detrás de su
corazón, por eso es que medita antes de hablar y, jamás habla si no está asistido por la razón y la certidumbre de
que está guiado por la Verdad; mientras el corazón del ignorante, está detrás de su lengua: habla cuando se le
antoja. La mitad del hombre es su lengua, y su corazón es la otra mitad. Todo lo que queda no es más que una
forma de carne y huesos.
Ernest Hemingway dijo alguna vez que “un individuo se tarda dos años para aprender a hablar y toda una vida para
aprender a callar. Por lo tanto vuelvo al silencio para encontrar la paz, porque debemos ser amos de nuestros
silencios y no esclavos de nuestras palabras”.
2. DESARROLLO
En primer lugar, es necesario precisar queSilencio puede ser definido como la privación voluntaria de la facultad
que tiene el hombre de hablar.
Etimológicamente, silencio proviene del sánscrito-mu- y sus derivaciones –Muka- (mudo) y –musterion-(misterio),
dicha raíz ha sido complementada en Grecia a través de verbo –musin- (que significa cerrar) y su ramificación
museria (silencio) y en Roma con la raíz (mutus), de donde surge el termino mutare o cambiar, por referirse al
silencio que las aves observan durante la renovación de su plumaje.
Luego a partir de ahí se puede colegir, que el concepto de silencio guarda una estrecha relación con el de misterio
y por ende con el secreto masónico; pero estoserá tema de otra plancha, por lo que no es pertinente tratarlo aquí.
El Diccionario Enciclopédico de la Masonería, de Lorenzo FrauAbrines, señala que el silencio "Es una obligación que
se debe observar tanto dentro como fuera de Logia", pero no solo porque así lo disponen los antiguos usos y
costumbres. Los escritores masónicos que han abordado el tema, recomiendan el Silencio como necesario para el
orden y seriedad del trabajo esotérico, todo ello distingue marcadamente las reuniones masónicas de las profanas.
La mejor palabra es aquella que no dice más que la verdad y sólo sepronuncia para hacer un bien. Más vale, pues,
morir por decir la verdad, que vivir protegido por el manto de la mentira. Pero cuán difícil es para el hombre, saber
abstenerse de hablar de lo que no le importa, o no conoce, o no sabe.
Se puede afirmar además que el silencio ha sido una estimada virtud, como parte de los procesos de
perfeccionamiento de la vida interior y elemento vital para el cultivo de virtudes como la perfección de vida, la
prudencia, la capacidad de escuchar y el juicio justo y recto.
El silencio es pues para el masón, una virtud, que conlleva a la corrección de defectos, es parte del trabajo del
cantero, que con cincel y mazo, simboliza y aplica en la práctica, la devastación de su propia Piedra Bruta, la que
trasforma al hombre viejo con sus defectos, en el hombre nuevo.
Para que se entienda mejor lo que significa correctamente el silencio para el masón, se debe acudir a su definición
profana, indicando que es la privación voluntaria de la facultad de hablar. Y en verdad casi todos saben hablar,
pero pocos saben callar.
La masonería simboliza el silencio, utilizando una sus sabias herramientas simbólicas: Ella es la LLANA, con la cual
debe extender cuidadosamente una capa homogénea y consistente, sobre los propios defectos y de
3. lossemejantes, de la misma forma que lo haría un masón operativo, sobre los defectos de una edificación, tratando
de sacar provecho de lo realmente importante y constructivo de sus aciertos. Igualmente, el silencio tiene muchos
otros significados en los diversos ritos masónicos. Pero al ser estos aun misterios para los aprendices, es necesario
encontrarlos a través del crecimiento, lento, seguro y firme, tal como se vivió en la Cámara de Reflexión: con
Soledad, Silencio, e Introspección.
Así, el silencio y la compostura deben ser primordiales en todos los actos y tenidas Masónicas;lo que es requisito
indispensable de observancia por todos los Francmasones, ya sea en el seno de la Logia o en la Sociedad Profana,
para no revelar lo que se ha jurado guardar; y no deberá hacerlo obligado por los reglamentos ni por los Estatutos
Generales de la Autoridad, sino porque así lo mandan los cánones de la buena educación.
Los estudiosos de la hermandad, recomiendan esta virtud, para que sea notable la diferenciaexistente entre una
reunión profana y otra eminentemente masónica. Así, al silencio se le considera una virtud, por la cual se logra la
corrección y rectificación de los defectos y tendencias que, como humanos, todos poseen. Por esta disciplina se
aprende a ser prudentes e indulgentes con las faltas que se observan.
La historia de la masonería, en relación al silencio del primer grado, enseñaque solo bastaría entender su
simbología paraentenderla génesis de las sociedades humanas; en efecto los primeros hombres, no tenían
lenguaje propiamente dicho. He aquí el argumento del por qué algunos francmasones señalan que el aprendiz no
debe hablar en logia.
Y en efecto
¿Qué tendría que decir?
¿Podría enseñar?
Antes es menester, que el aprendiz por su edad, en que apenas abre los ojos, escuche y observe.
La razón de ser de esta actitud contemplativa, debe inspirar al aprendiz y al masón en general, no es otra que la de
potenciar sus posibilidades espirituales, las que se encuentran siempre latentes. En otras palabras, en el silencio se
encuentra la posibilidad de crecimiento. Sise aísla de las influencias exteriores, se abren los canales de
concentración, observa, escucha y contempla, está aprendiendo a ver la luz, y esto, de por sí, es un proceso que
entraña una gran fuerza de voluntad.
4. La primera palabra pronunciada por el venerable maestro esSilencio la que pronuncia al momento de abrir los
Trabajos, seguida de la expresión “en logia”. Con ello, se intenta resaltar la importancia del silencio iniciático como
requisito previo para el desarrollo de la labor masónica.
Pero, ¿Qué enseña dicha palabra? Sin duda ella lleva al hombre a entronizarse en un mundo que está más allá de
lo que perciben los sentidos; ayuda a abrir el corazón y el entendimiento, para recibir los frutos de la espiritualidad
y del conocimiento; ayuda a sintonizar a cada masón en la misma frecuencia; en fin, el silencio al inicio de toda
tenida permite una unión mística y la posibilidad de enlazar las mejores energías, que deben ser utilizadas en tan
altruistas trabajos.
La primera vez que un aprendiz se enfrenta en la Orden al Silencio iniciático, es al momento de ingresar como
profano en la Cámara de Reflexiones, cuando a petición del Experto el recipiendario debe observar todo lo que se
encuentra al interior, reflexionar sobre la impresión que le provoca cada cosa y el conjunto. Cuando se les enseña,
que sólo a través de la contemplación, se puede acceder a las primeras verdades. Mismas, que es necesario
desentrañar poco a poco a través del crecimiento interior.
Poco después, el Recipiendario vuelve a toparse con él silencio, cuando pasa por las pruebas de los elementos
restantes, que deben desarrollarse también en silencio.
De igual forma, al prestar el juramento, se adquiere la obligación de callar, especialmente cuando se indica que no
se deben revelar los secretos de la orden ni la palabra enseñada, al mundo profano; allí, el silencio simboliza la
discreción y la disciplina del masón, así como su lealtad frente a sí mismo y sus hermanos. Un viejo adagio
hermético sobre el punto señala: “los labios de la sabiduría están mudos fuera de los oídos de la comprensión”;
por ello, el buen masón prefiere que le corten la garganta antes que romper su silencio.
"El Silencio practicado con una actitud iniciática, se eleva al rango de Virtud, pues gracias a él es posible aprender a
ser prudente, diligente, moderado y discreto, observar constructivamente las faltas y aprovechar los aciertos de
los demás para bien propio y colectivo.
Al iniciar los Trabajosdel taller los HH.: quedan en silencio, tratando de relajarse y dejar a un lado sus asuntos
profanos, preparándose para el trabajo esotérico.Cada H.: medita, y se impregna de esa atmósfera de calma, y así
se coloca en condiciones de tallar su piedra bruta.Momentos después, el VM.: llama al silencio a todos los HH.:,
anunciando el inicio de los Trabajos; el M.: de Ceremonias comienza su labor: verifica que todos los presentes
estén en sus puestos y con los distintivos de su respectiva calidad masónica y verifica con que el Templo esté a
cubierto de toda indiscreción profana.
5. La Palabra y el Silencio como en la música, son usados con Orden, Ritmo y Armonía: En trabajos abiertos, y una vez
obtenida la autorización de su respectivo dignatario, debiendo los demás escuchar en silencio, con atención y
actitud receptiva y fraternal, lo que ayuda también y en su caso, a preparar una respuesta ordenada y consciente.
Elmasón que usa la Palabra deberá estar en Pie y al Orden y Dirigirse al VM.:, evitará el abuso en el tiempo. Al
finalizar los trabajos cada Dignatarios anuncia el regreso del Silencio a su respectiva Columna y el Orador iniciando
así la preparación de los HH.: para regresar al mundo profano.
Antes de clausurar los Trabajos el VM.: recuerda la promesa del silencio sobre lo percibido por los sentidos a lo
largo de la Tenida. Esto, desde luego no solo debe tomarse en sentido literal, sino también en sentido alegórico y
simbólico.
El silencio en la Cadena de Unión crea una atmósfera cálida, de vinculación fraternal, que va fortificando los lazos,
a medida que se practican juntos y en armonía.
En la Francmasonería, el Silencio del Aprendiz está lejos de constituir una medida vejatoria o autoritaria, tendiente
a frustrar o a hacer menos al recién iniciado. Al contrario, es un instrumento educativo, de formación iniciática,
que por tanto debe asumirse con plena conciencia sus beneficios.
Un trabajo de introspección, dirigido a la búsqueda de sí mismo, para conseguir el equilibrio interior, comienza con
el manejo y control del silencio. De ahí que todas las Ceremonias Masónicas se lleven a cabo en ese silencio que da
tranquilidad y cálida comodidad para el desarrollo del trabajo interior.
Pero y cuando termina el silencio?
En pasos perdidos y durante el ágape fraternal de costumbre al final de cada Tenida, los Aprendices pueden
comentar, etc. todo lo que deseen sobre los temas tratados en esa ocasión o derivados de alguna lectura o
experiencia vividas entre una tenida y otra. En todo caso, siempre los MM.: tienen el compromiso de aclarar las
dudas, y orientarlos para su avance en el camino de la verdadera Iniciación masónica.
El avance de las tele comunicaciones y medios como la Internet, brindan a los aprendices una cantidad inagotable
de libros e información documental, lo que permite al que se interese, el adquirir una visión más amplia y un
avance más rápido en el conocimiento de todo aquello que en su conjunto puede ser llamado "información
masónica".Sin embargo, cabe señalar que esta información constituye solo una parte -de forma, no de fondo- de lo
que puede ser llamado en su conjunto "lo masónico" o mejor aún de "el Saber Masónico".
6. Sin embargo sobre este particular se puede señalar taxativamente que en Masonería existen muchas cosas que
por su propia naturaleza no se pueden enseñar en los libros, los videos, ni en la Internet. La experiencia iniciática,
El efecto transformador experimentado al participar en la ejecución de los Rituales, el Amor Fraternal derivado del
trabajo esotérico, la Tolerancia y en general el pleno ejercicio de la libertad de conciencia en tanto que integrantes
de la ética masónica, solo pueden aprenderse (aprehenderse) en los Trabajos de Logia.
AMODO DE CONCLUSIÓN
La concentración, y el silencio permiten la apertura de canales mentales. En efecto, la ausencia de la palabra
permite al cerebro utilizar su energía, a escuchar y observar con profundidad. La percepción de los sentidos puede
llegar a ser tal que pueden llegar a captarse sensaciones y emociones que pueden ser imperceptibles en
circunstancias profanas habituales.
Solo la unificación de la voluntad y la concentración son capaces de lograr el verdadero silencio constructor, que
suprime el miedo, vence la timidez, controla las energías vitales. Así todo trabajo de introspección, dirigido a la
búsqueda de sí para conseguir el equilibrio interior, comienza por el manejo del Silencio.
La observancia del silencio, del masón hace crecer en su vida interior, la capacidad de escuchar, acrecentar poco a
poco su buen juicio y saber tener piedad y sana compasión de los defectos de los demás, y a partir de su cambio
interior, será una persona integral, hombre de bien y varón probado en el duro pero bello andar en la vida.
Frente a nuestra Piedra Bruta a medio devastar, en el silencio, hablara la voz interior, esa voz que interroga y
señala, esa voz que en el silencio con uno mismo, se expresa como conciencia e induce a recordar, el momento
primero de la Iniciación como eternos Aprendices, en el contacto silente e impresionante de la permanencia en la
Cámara de Reflexiones.
El Silencio conduce cada día, a ver más Luz, a tener más compasión, a recordar que en Logia el silencio, abre la
puerta espiritual a lo Trascendente, y lleva en el día a día, a una mayor indulgencia hacia los semejantes y al
reconocimiento de las propias limitaciones, pero a la vez a la certeza de que se es imperfecto, pero perfectible.
S.:F.:U.:
Freddy Ponce