El Calendario Azteca tenía dos calendarios principales. El primero tenía 365 días divididos en 18 meses de 20 días cada uno, con los últimos 5 días considerados de mala suerte. El segundo calendario tenía 260 días divididos en 20 períodos, cada uno asociado con un significado como cocodrilo o sustento. Los aztecas usaban estos calendarios para llevar el tiempo y dar significado a cada día.