SlideShare a Scribd company logo
1 of 181
REPETICION DE HORROR
UNA NOVELA POR FERNANDO LUTLA
Primera parte
I
Un día normal; los días son normales no hay nada de extraño en ello, para
muchos son días malos para otros son buenos, cada quien los determina de
acuerdo a su estado de ánimo y el lugar donde se encuentran. Tal vez cada quien
se los haga malos por su actitud y su mala vibra. Cualquier momento que fuese
resulto bueno para Bruno, debido a sus años de trabajo, paciencia y estricta
dedicación el recibió un ascenso. Él era especialista en el arreglo de carros, se las
sabía al derecho y al revés. Desde pequeño había mostrado un interés y una
pasión enorme por tal oficio y debido a ello recibió una gran recompensa. Mucho
tiempo sufrió de cansancio, horas largas y agotadoras, las cuales le terminaban
sus energías y solo con llegar a casa buscaba su cama para dormirse. Ahora que
se ha ganado la confianza de sus superiores su jornada de trabajo se reduciría
bastante, su ascenso fue como un premio mayor ya que le sobraría tiempo para
compartir con su esposa e hija, con el cual antes no contaba.
Debido a esto y para completar su satisfacción su sueldo también aumento,
no tanto como él lo deseaba pero si de manera que le hiciera guardar un extra
para necesidades que se presenten en un futuro. La noticia la preparo muy bien
para dársela a Sofía, su esposa, una mujer muy guapa que cayó en un profundo
amor con Bruno; su historia de amor es muy romántica, se conocieron en el lugar
menos esperado, su amor casi fue de primera vista, se empezaron a conocer más
y en un santiamén determinaron que eran el uno para el otro. De dicho amor vino
una hermosa niña de nombre Gloria, cuando Bruno supo que Sofía estaba
embarazada brincó de alegría y no paro hasta cansarse, con ganas de ser padre
espero su llegada muy alegre. Sofía no se quedó atrás y a pesar de la carga que
llevaría en el proceso de formar un hijo no le importo y resistió hasta que dio a luz.
El día de la noticia sobre su ascenso llego, Bruno preparo muy bien
las palabras y cuando Sofía lo supo brinco de alegría, le emociono saber que
conviviría un poco más con su adorado esposo. El tiempo ahora rendiría para
convivir con su pequeña hija además que ella lo adoraba. Por increíble que
parezca la primera palabra que Gloria dijo fue “papá” y además era una niña muy
lista aprendió muchas palabras en muy poco tiempo. Mucho tiempo había pasado
y la pareja había ahorrado dinero, lo hacían con grandes sacrificios, además de
resistir grandes antojos y grandes ganas de comprarse otras cosas; el motivo de
eso era para comprar una casa, conseguir una casa propia era el sueño de
ambos. Vivian en una casa rentada, la dueña era una mujer amargada, era viuda
y nunca tuvo hijos, tres casas le fueron heredadas y eso era todo lo que tenía, su
sustento era el pago de renta de sus inquilinos. Se podía decir que era una mujer
antisocial y peleada con la vida, llena de quejas y que nada le parece, pero la
gente así como sus inquilinos la aguantaban por mera necesidad.
Lo que más deseaban era poder comprar una casa, una casa en donde
hiciesen lo que quieran y sin dar explicaciones; desde que se casaron habían
ahorrado dinero, eran muy especiales con los gastos y guardaban un poco para
cualquier emergencia. El nuevo sueldo de Bruno les proporcionaría un poco más y
así las posibilidades de comprarse una casa aumentaron un poco. Esa noche todo
fue tan maravilloso porque una noticia llego y fue el motivo para que ellos hicieran
el amor como dos adolescentes, sus cuerpos compartieron sudor y ello trajo una
satisfacción para ambos, sus bocas se juntaban y entre ellas se deseaban más y
más. Las manos de ambos recorrían cada parte de sus seres, exploraban zonas
en donde el placer era la principal reacción.
Bruno se presentó a su nueva jornada, ahora las cosas tomarían un curso
diferente, el daría algunas instrucciones a empleados de menos antigüedad que
él, el administra ahora las finanzas y debido a su enorme experiencia el resolvería
los trabajos difíciles en caso de presentarse la necesidad. Aprendió nuevas cosas
y su experiencia crecería más y más; es posible decir que desmesuradamente.
Sofía por su parte casi no trabajaba porque se tenía que hacer cargo de la
niña, su trabajo era más alivianado, le gustaba comprar telas y hacer vestidos para
después venderlos; ese oficio le dejaba muy buenas ganancias, sin embargo,
había ocasiones en que el trabajo estaba escaso, lo bueno de ello era que ella era
su propio jefe. El tiempo se le iba más rápido cuando cuidaba a su hija. Sofía tenía
a su madre una mujer de sesenta años aproximadamente a la cual adoraba
mucho, su nombre era Andrea, ella amaba demasiado a su pequeña nieta, cuando
la visitaba se la pasaba horas conviviendo con ella. Como Andrea vivía sola no
tenía por quien preocuparse o esperar a que alguien llegue, su marido hacia un
buen de tiempo que había fallecido, las dejo con algunos ahorros y que no
quedaran desamparadas; como Sofía era hija única todo la atención fue para ella,
cuando se enteró de que sería abuela la hicieron muy feliz. Andrea tenía su casa
pero Bruno no quiso vivir con ella, deseaba ver sus esfuerzos crecer y conseguirse
un lugar propio para él y su familia. Andrea estuvo de acuerdo aunque insistió
muchas veces en que vivieran con ella porque sentía una terrible soledad y por
esa razón varios días de la semana visitaba a su hija y nieta. Era toda una abuela
feliz cuando jugaba con Gloria las dos parecían una niñas; reían y gritaban, sus
ratos de diversión eran inolvidables.
II
Había pasado algún tiempo, ellos ya se encontraban listos para pagar una
parte de la casa, les llamo la atención una que ya habían visto. Varias ocasiones
visitaron aquel lugar donde estaba localizada, era un lugar alejado del ruidoso
tráfico y las multitudes, un lugar en su mayoría rodeado de vegetación y pequeños
parques. La zona era de lo más agradable para cualquier persona que se parase
ahí. El dinero estaba listo y la joven pareja se dispuso a dar ese enorme paso, lo
desearon de corazón y se les concedió. Esos años que llevaban juntos rindieron
frutos porque ya existía el dinero suficiente para comprarla además de la
perseverancia y las ganas de hacerlo. En un momento libre fueron a ver a la
persona encargada de las ventas para llegar a un acuerdo así como ver el interior
de la casa para determinar si definitivamente les convencería o no. Tomaron su
automóvil yendo a la aventura. El tiempo recorrido fue muy poco llegaron y se
estacionaron en el frente de la casa; al parecer el encargado o la persona que
estaría a cargo de la venta aun no llegaba. Aproximadamente veinte minutos
pasaron y se veía venir un carro un poco lujoso de color negro, también este
automóvil se estacionó junto al carro de Bruno. Abrió la puerta la persona que
venía y era un hombre alto, moreno y su vestimenta era elegante además de traer
un portafolio en la mano.
-¡Hola! ¿Cómo están? Mi nombre es Alberto yo soy el dueño el encargado
de las ventas. A la joven pareja les dio buena vibra el hombre ya que se inspiraba
confianza a simple vista, lo analizaron cuidadosamente y ambos llegaron a la
conclusión de no tener ninguna inconveniencia y entonces le dieron la total
confianza.
- ¡Muy bien gracias! Pues nosotros somos los que estamos interesados en
esta casa y queríamos ver la posibilidad de comprarla. ¿Fue usted la persona con
la que hablamos por teléfono? Contesto Bruno.
- ¡Si señor! Yo les atendí y por eso estoy aquí. Alberto daba confianza hasta
en su manera de contestar.
Alberto saco las llaves de la casa y todos entraron; la casa era de dos
pisos, estaba acorde al tamaño de la familia, al entrar lo primero que sintieron fue
un ambiente muy fresco. En la planta baja se encontraba la sala, la cocina y un
comedor pequeño pero confortable. Esa parte fue inspeccionada, Alberto les
explicaba que la casa no tenía mucho tiempo de haber sido terminada, ellos eran
la segunda familia en interesarse porque ya tenia compradores sin embargo, se
arrepintieron y lógicamente la venta no se llevo acabo. La parte de arriba tenia dos
recamaras y el baño, “la casa nos queda como anillo al dedo” Exclamo Bruno, eso
significa que una habitación para Sofía y el y la otra para Gloria. Después de
platicar con Alberto durante un largo rato sobre los acuerdos, beneficios e
instalaciones se convencieron y tomaron la casa. Todo estaba muy cómodo,
además de la sala que se veía la parte más a disfrutar porque tenía una enorme
ventana y la luz entraba muy bien. Los comentarios finales de Alberto fueron sobre
las buenas condiciones en que se encontraba, la casa no tenia ninguna defecto;
sus instalaciones eran de primera.
Alberto no les dijo la realidad que aconteció en esa casa, estaba seguro de
lo que sus ojos por última vez vieron y determino que ningún problema se
presentaría mas adelante, además de no querer causarles temor a sus nuevos
clientes. La venta se llevo acabo, todos los papeleos estaban en regla y ningún
detalle mínimo les impediría ser los nuevos dueños. Pasaron dos semanas hasta
el día de la mudanza, era un domingo caluroso y a la vez refrescante, estaban
felices con su nuevo hogar. Andrea fue con ellos para celebrar, la mudanza estaba
a cargo de tres hombres fortachones que no tardaron mucho en descargar, se les
veía una experiencia desmesúrale en su oficio. Las cosas quedaron ubicadas en
el lugar correspondiente solamente faltaba acomodarlas. Aquellos jóvenes
recibieron una buena propina y se retiraron, para celebrar Sofía y Andrea
prepararon una comida, para rematar que era domingo y celebrarlo con la nueva
vivienda.
La zona estaba muy tranquila, el silencio predominaba mutuamente, se
podía adivinar que esa zona estaba por más construcción, es decir, en un tiempo
no muy lejano las partes que se veía solo campo se transformarían en nuevas
viviendas, el nombre del lugar nadie lo quisiera recordar, se observaban hermosos
panoramas, cerca de su casa estaban dos pequeños parques que eran para la
diversión de los pequeños, con los juegos clásicos (columpios, resbaladillas, sube
y baja entra algunos otros) cerca de su casa había otras cuatro, tenían casi las
mismas terminaciones y desde afuera era notorio que el numero de habitaciones
era igual. Bruno se extraño de la tranquilidad porque a pesar de los parques no
había ningún niño jugando ya sea solo o con sus papas, cabe mencionar que más
lejos se observaban más casas y un punto importante y creíble era que la flojera
de los padres por no traer a sus hijos al parque.
III
Su nueva casa estaba en completo orden, todas sus respectivas
pertenecías fueron acomodadas muy bien y agregarle una buena limpieza fue lo
que resalto un orden muy eficaz. En la parte de abajo entraba muy bien la luz pero
arriba solamente muy poca debido a las pequeñas ventanas que cada habitación
tenia, la ventana del baño era la mas pequeña de todas para rematar las paredes
estaban pintadas de azul oscuro y obviamente dicho color oscurecía mas. La
noche se veía más aterradora, en la parte de afuera solo una lámpara alumbraba
su calle, mas allá la oscuridad era notoria.
Empezó una nueva semana, debía ser buena porque se estreno la nueva
casa, en su primera noche abundo paz y felicidad; Gloria disfruto su nueva
habitación, sus padres le acomodaron sus juguetes favoritos donde ella mas le
pareció, colocaron en la pared posters de algunos personajes de caricatura que
ella adoraba. La primera semana marcho todo bien, los servicios de la casa fueron
utilizados y no hubo nada de quejas y/o percances. El trabajo de Bruno marchaba
muy bien, entraba a trabajar a las nueve de la mañana y aproximadamente a las
cuatro de la tarde ya estaba en su casa, ya no era como antes que hasta las diez
u once de la noche venia poniendo un pie en casa.
Gloria era una niña y ya casi cumplía tres años y por lo tanto era muy
inquieta, vigilarla era lo que más absorbía tiempo porque su espíritu de
exploración crecía más y más, Sofía estaba atrás de ella constantemente. En la
casa donde rentaban no había escaleras, las piezas que rentaban eran de un solo
piso y no existía ningún problema, en esta ocasión las cosas ya cambiaron porque
quería subir y bajar a cada momento. Una costumbre que tenia algún tiempo era
que Gloria se despertaba a las diez de la mañana, Sofía lo hacia a las nueve y ya
sabia a que hora la niña empezaba a llorar o a reírse sola, sabia que era la hora
de darle un desayuno o cambiarla si es que se hizo del baño. Ella terminaba
atender a Bruno para poder irse y se quedaba el resto del día a disfrutarlo con su
linda bebe. En un momento aprovechable y con ganas de salir, las dos mujeres
salieron a dar una visita a los parques, tenían ganas de estirar un rato los
músculos y que Gloria se distraiga unos instantes. Fue muy extraño porque el
lugar estaba solitario, los columpios se podían mover ligeramente por la fuerza del
viento. Circunstancias por las que los parques estaban en completa soledad
podrían ser muchas y ninguna de las que pensaba Sofía podría ser cierta o tal vez
lograr adivinar una, eso no fue pretexto y salieron de casa a explorar.
Sofía se sentó en uno de los columpios y a su lado sentó a Gloria, eran solo
tres columpios, mientras ella se medio mecía, ayudaba a su hija para deslizarla
cuidadosamente porque si pusiera fuerza se caería. Es una niña muy lista porque
cuando empezaba el columpio a hacer su movimiento ella reía de felicidad, no
lloraba como comúnmente lo haría la mayoría de los niños de su misma edad. Una
mañana calurosa mezclada con un poco de frescura, la tranquilidad de su nuevo
rumbo era muy permanente, no se mostraba alguna señal de escándalo, loa
arboles hablaban porque se escuchaban susurros, algunos pájaros entonando
melodías. Gloria estaba contenta, el columpio la hacia reír tanto que no paraba y
su madre se reía con ella.
Una curiosidad empezó a notarse en los ojos de Sofía, ya que mientras
escuchaba reír a su hija, ella vio algo que llamo su atención, era algo que podía
decirse inesperado o tal vez un milagro. Un niño de seis o siete años, la edad era
lo menos importante, se dirigía hacia ellas tal vez para jugar con Gloria o tal vez
no. Faltaban pocos metros para que llegara con ella, sin embargo, por alguna
razón desconocida se detuvo, lo sorprendente era que aun no le veía la cara, el
niño siempre se mantenía con la cabeza un poco agachada. Sofía era de las
personas que tenían muy buena vista pero no lograba ver su rostro. Lo único que
noto fueron las prendas que usaba parecía que por muchos días no se había
cambiado, se notaba muy sucio e incluso sus pantalones parecían desgarrados,
manchas en su piel principalmente en las de sus pequeños brazos. Por un instante
ella cambio su mirada hacia gloria para preguntarle si vio al niño y para su
sorpresa la respuesta de la niña fue negativa, se preguntaba como era posible si
estaba muy cerca de ellas. Su cabeza dio muchas vueltas porque no era creíble
que solo ella lo viera. Al regresar la mirada hacia el niño la sorpresa que se llevo
fue aun mayor porque ya no estaba, sus ojos se hicieron tan grandes de la
impresión, era algo imposible que ya no estuviera, Sofía no cambio la mirada mas
que por unos veinte segundos. Era un hecho increíble porque el infante en
tampoco tiempo se escondió y lo más sorprendente aun era que no tenia en donde
ocultarse, el lugar era tan amplio que le era imposible y en todo caso que lo
hubiese intentado Sofía se hubiera dado cuenta.
▬ ¿No viste a ese niño Gloria? Ella pregunto con un tono asustadizo
▬ ¡No mami ¿Cuál niño? Esa respuesta la asusto mas porque del haberlo
visto si le hubiese preguntado.
Gloria seguía columpiándose y riendo, Sofía se volvió a sentar en el
columpio de a lado con la mirada agachada y la duda en su mente estaba
creciendo. Pasaron unos cuantos minutos se retiraron del lugar a casa. En la tarde
Bruno llego a casa, tenia mucha hambre, la jornada laboral había sido exhaustiva,
Sofía ya tenia lista una rica comida, Bruno se sentó a comer con unas ganas de
devorar, su apetito era voraz. Sofía se sentó con el para acompañarlo mientras
platicaban. La platica empezó con la aventura que ella tuvo en el parque, mientras
el comía el la escuchaba con gran atención Sofía no se le escapaba ningún detalle
al momento de relatar. Bruno termino de comer y empezó a comentar lo que el
pensaba:
▬Si viste a un niño tal vez era el hijo de un vecino, lo que no me explico es
como se escondió. Tal vez era muy rápido. Esas respuestas no fueron creíbles
para Sofía.
▬No tuvo lugar donde esconderse, si lo hubiera intentado me habría dado
cuenta, solo le quite la mirada por unos segundos. Le molesto que no le creyera.
Después de que el escucho hasta el mas mínimo detalle, la única respuesta
que pudo darle fue sobre su imaginación, la imaginación muchas ocasiones nos
juega grandes trucos. La conclusión de Bruno solo fue eso una visión inesperada,
solo eso no habría otra explicación además el no era muy creyente de esos
hechos paranormales y por el contrario Sofía concluyo que se trato de un pequeño
fantasma, un alma en pena en busca de ayuda.
IV
Noches pasaron tranquilamente, una nueva rutina se empezaba a forjar,
una familia crecía en felicidad. Andrea solía visitar a su hija y acompañarla un
momento además de que amaba desmesuradamente a su nieta. Cuando
terminaba sus labores de hogar las tres empezaban a hacer cosas juntas y se
reían a lo grande. La pequeña niña ya estaba por cumplir tres años y era momento
de que se fuera a la escuela, su educación estaba por comenzar, su vida de
aprender nuevas cosas estaba a la vuelta de la esquina. Sus padres buscaron una
escuela sin embargo, no existía ninguna, solo una estaba adecuada a sus
necesidades pero no estaba nada cerca, la manera de llevarla era en carro.
Todo ese asunto se resolvió y se quedo en la escuela que habían acordado,
la organización fue simple porque Bruno la dejaría en la escuela y el después
emprendería a su trabajo, el horario de ella era cómodo, en la salida Sofía tenia
que recogerla aunque tendría que una larga caminata y no lo vio como un
problema porque aprovecharía esa caminata para hacer ejercicio.
Ya habían pasado dos meses desde que se mudaron a esa casa, todo era
magnifico, hacían en su casa lo que ellos deseaban y no recibían quejas o
prohibiciones. La costumbre mas bonita que tenían era dormir a su pequeña hija y
esperarla hasta que cerrara los ojos, después ellos se iban a dormir a su cama; la
habitación de gloria fue adornada y les quedo muy bien, después de que ella se
dormía cerraban la puerta con cuidado para no despertarla y finalmente ellos se
dirigían a la suya y dormían también como bebes.
En una inesperada ocasión Gloria se durmió como siempre lo hacia
posteriormente sus padres se retiraron adormir, en la madrugada algo los
despertó, Gloria lloraba y gritaba con gran fuerza, ellos se levantaron
apresuradamente de su cama salieron de su habitación y fueron a la de Gloria
encendieron la luz, estaba en su enorme cuna y estaba de pie queriendo salir pero
no podía, sus padres la tomaron y la abrazaron fuerte para que se calmase.
Pasaron varios minutos hasta que se tranquilizo completamente.
▬¿Qué paso mi amor? ¿Por qué lloras? Sofía pregunto apresuradamente.
▬ Un niño, un niño, un niño me estaba viendo. Un niño me estaba viendo.
Cuando escucharon esas respuestas se quedaron atónitos, ambos se echaron
miradas con los ojos abiertos a todo su esplendor. Por una parte era imposible y
otra la imaginación de los niños en inmensa. Otras palabras que también le
impactaron en especial a Sofía era que el niño estaba muy sucio, tenía su ropa
“rompida”. En ese instante la mente de aquella mujer se volvió un laberinto, dichas
palabras de descripción coincidían con las del niño que ella vio en el parque. El
niño aparentaba estar sucio y su prendas lucían desgarradas, eso si fue de mucha
coincidencia.
Esa noche Gloria durmió con sus padres. A la mañana siguiente Gloria
volvió a mencionar que el niño la estaba mirando tan fijamente; poco a poco se iba
acercando a su cuna y cuando estaba justo en frente de ella empezó a llorar y
gritar. Como Bruno era una persona muy escéptica solo califico este hecho como
una pesadilla, normalmente los niños tienen muchas pesadillas y estás son
atribuidas a su imaginación o a lo que diariamente ven.
V
Sofía no dejaba de pensar en aquella descripción, además de ser una
persona que se sugestionaba muy rápido y le gusta llegar al fondo de las cosas.
Días después Sofía comento con su madre esta situación y después de platicar un
largo rato sobre ello la conclusión de su madre fue casi la misma a la de Bruno,
no deberían temer y solamente hay que catalogarlo como pesadillas y la
imaginación de los niños es inmensa.
Gloria estaba muy asustada por algunos días durmió con sus padres
porque el miedo de quedarse sola en su cuarto aun le invadía. No fue mucho el
tiempo que pasó de este acontecimiento, un día Andrea salió a comprar algunas
cosas para la comida y llevo consigo a Gloria, mientras Sofía se quedo en casa
haciendo otros pendientes. Después de estar en la cocina por un rato se dirigió al
baño a lavarse las manos porque había agarrado algo que le pudiese irritar los
ojos, con un descuido y olvidando lo que hubiese hecho podía tocárselos y le
arderían mucho. Se lavo las manos cuidadosamente con jabón y mucha agua, se
enjuago y se seco con una pequeña toalla que estaba a un costado del
lavamanos; su baño era muy pequeño estirándose muy bien se podía tocar de
pared a pared era casi cuadrado. Como era un día algo caluroso se mojo un poco
la cara y con la misma toalla se seco, ahí tenían un pequeño espejo colgado que
servía para admirarse uno mismo. Siempre que nos echamos agua en la cara y
nos secamos cerramos los ojos, con ella paso lo mismo. Abrió los ojos ya para
finalmente verse en dicho espejo y la sorpresa que se llevo fue mayor, atrás de
ella yacía un hombre parado; su aspecto era aterrador, tenía los ojos rojos y esos
ojos mostraban un odio enorme y la expresión de su boca lo confirmaba
completamente. Su vestimenta se aparentaba muy sucia. El tiempo que Sofía lo
vio fue de instantes, al ver dicha sorpresa grito tan fuerte, se cubrió el rostro con
ambas manos permaneció así unos instantes, se dio valor y volteo hacia atrás,
milagrosamente ya nadie estaba, salió corriendo del baño dirigiéndose a la sala y
allí se puso a llorar desmesuradamente.
Llego Andrea y lo primero que vio fue a su hija en un llanto terrible, las
palabras se describieron solas es decir que le afirmo que estaba actuando como si
hubiese visto un fantasma, además de que su cara se veía muy pálida. Al ver a su
madre, le dio abrazo tan fuerte que falto poco para que la lastimara, mientras el
abrazo se estaba llevando acabo sus ganas de llorar crecieron. Se levanto del
sillón y fue a dejar a la niña al cuarto de sus padres, ella regreso para que le
contase que paso.
▬ ¿Qué ha pasado? ¿Por qué lloras?
▬ Si te lo digo nunca me creerías.
- ¡Dime que paso porque me estas asustando, date cuenta que también
puedes asustar a tu hija y que no te vea llorando.
Era muy cierto lo de la niña, ella no debía ser asustada mas de lo que ya le
sucedió, no seria bueno y menos para su edad, Sofía se tranquilizo un poco, su
madre le preparo un te para que se calmara.
▬ ¿Dime que ha pasado? Pregunto Andrea un poco alterada e invadida por
la curiosidad.
▬ Mientras me encontraba preparando algunas cosas para comer, me fui a
lavar las manos al baño, me eche un poco de agua en la cara y al secarme con la
toalla me vi en el espejo y alguien estaba atrás de mi, era un hombre con una
mirada diabólica, se veía muy furioso, se le veían ganas de hacerme algo. Al
escuchar esas palabras Andrea quedo en shock todo le dio vueltas en su cabeza,
no sabia si creer o decir que todo era producto de la imaginación o tal vez que su
hija haya perdido el juicio.
▬ ¿Viste un hombre? Eso no puede ser, tu estabas sola no hay nadie aquí
en tu casa, nadie puede entrar, solo hay una puerta si alguien quisiera entrar te
hubieras dado cuenta. Esa respuesta no fue del agrado de Sofía puesto que la
miraba feo en razón por no creerle y tratarla como una loca. No era mas de
esperarse puesto que en realidad cuando alguien escucha a otra persona sobre la
aparición de algún fantasma no se le cree si no hasta que experimenta en carne
propia.
▬ No se que haya sido pero por favor no me trates como una loca. Sofía
respondió en un tono furioso.
Se calmo completamente y todo esa platica que tuvieron quedo inconclusa
porque la niña quería ver a su mama y quería ver la televisión, desde la habitación
les estaba gritando, quedo pospuesta esa platica. Las mujeres terminaron de
hacer la comida y uno que otro quehacer en la casa. Ese día Bruno regreso muy
tarde a casa por otras obligaciones pendientes, esa misma noche la preocupación
de Andrea por su hija no se le olvidaba, y mejor se quedo a dormir en la habitación
con Gloria. Durante la noche cuando llego Bruno el tema fue el mismo,
comentaron la situación y la atención de el fue llamada ya que no le dio tanta
importancia al caso de Gloria por ser una niña pero al escuchar ese
acontecimiento que le paso a su esposa si era de pensar, también debido al
tiempo que llevaba con ella y nunca le mentiría y no tenia razones de hacerlo.
VI
Creían que estos acontecimientos que sucedieron tanto a Gloria como a
Sofía eran producto de su imaginación, Sofía reflexiono sobre ello y determino esa
decisión. Las cosas regresaban a la tranquilidad porque los dos sustos pasaron
casi al mismo tiempo y obviamente la presión se les vino encima pero ya todo se
tranquilizo aparentemente. Luego de unos días se empezaron a escuchar ruidos
en la casa, la noche era el momento más popular para que sucedieran estas
acciones, en esta ocasión los ruidos los despertaban porque a veces se oían muy
fuertes; en la cocina se escuchaba como si quebraran platos o algunas ollas
cayeran bruscamente, Bruno se despertaba y investigaba y al llegar a donde
supuestamente se origino el ruido no había absolutamente nada y todo estaba en
orden, Sofía era de las personas muy ordenadas, cosas que utilizaba cosas que
lavaba y ponía en su lugar. El regresaba a la cama muy sorprendido y ella le
preguntaba la situación la mas sorprendida era ella porque al decirle que no paso
nada se espantaba mucho mas. Gloria seguía durmiendo con sus padres, su
miedo no desaparecía y lloraba por cualquier cosa. A pesar de todo lo que había
acontecido en los últimos días Bruno se mantenía como una persona escéptica y
sabia que para todo existe una explicación, no hay nada de anormal en este
mundo todo tiene un porque y una razón coherente. Ella como una mujer que le
gusta llegar al fondo de las cosas, deseaba saber que era lo que realmente
pasaba en esa casa pero su intención no era alarmar a su familia o que pensaran
que era una loca obsesiva, cada momento que pasaba su curiosidad parecía un
hijo más porque le daba la debida importancia.
En las noches Bruno y gloria dormían tranquilamente, la única que se
quedaba alerta y con un miedo terrible era Sofía, se acurrucaba muy bien pero
ponía sus oídos a toda alerta, ella era la que escuchaba hasta los mas leves
ruidos los cuales no despertaban a nadie pero ella con un miedo y una atención de
punta los escuchaba muy bien. Toda esta situación iba en aumento cada noche se
escuchabas mas ruidos; alguna de esas noches Bruno no podía dormir y Sofía se
quedo completamente dormida, estaba como desquitando las horas de sueño que
perdió, al costado de la cama tenia un pequeño mueble con una lámpara que no
alumbraba mucho pero si lo necesario para ver algunos papeles que muchas
veces el revisaba por motivos de trabajo, Bruno tomo un libro para distraerse un
rato y agarrar sueño. No fue mucho el transcurso cuando empezaron los ruidos y
al parecer se originaron otra vez de la cocina, su curiosidad fue peor que la de un
gato y fue a echar un pequeño vistazo, procuro no despertar a Sofía y gloria, ellas
estaban durmiendo tan profundamente que nada las despertaría. Bajando las
escaleras cuidadosamente y llevando un pequeño bate de beisbol camino y
camino sin hacer ruido, prendió la luz rápidamente para sorprender al ladrón, por
si se trataba de alguno que anduviera haciendo de las suyas, para su asombro y
desgracia no vio absolutamente nada. Todo estaba en completo orden, regreso a
su cuarto de igual manera sin hacer ningún ruido, se acostó nuevamente pero ya
en el resto de la noche no pudo cerrar los ojos, su mente le daba círculos y no
entendió que realmente paso, todo que do esa noche así. Al día siguiente se fue a
trabajar muy temprano y no comento nada con su esposa.
VII
Sofía deseaba traer a un sacerdote para bendecir la casa y hacer que se
vayan los malos espíritus o esa era su intención, ya empezaban las cosas mas
fuertes de lo normal, el momento mas claro era cuando ella terminaba de hacer
sus labores del hogar y se subía a su habitación con gloria a ver la televisión o
hacer alguna otra cosa, eran desesperantes esos momentos por esas y otras
razones mas quería que todo terminase y quería un sacerdote. Andrea y ella
buscaron uno, la iglesia que conocían les quedaba lejos pero su decisión estaba
firme y emprendieron la marcha para pedirle ayuda. Llegando allá la iglesia se
encontraba cerrada a un costado de la iglesia estaba un pequeño lugar pareciese
que era la oficina, allí se encontraba un hombre de edad sentado en un pequeño
escritorio con papeles, el escritorio estaba en completo desorden y se le notaba al
anciano muy apresurado. Preguntaron donde se podía localizar al sacerdote, le
explicaron el motivo por el cual lo necesitaban, aquel hombre se porto
amablemente y les pidió que esperaran, al parecer el sacerdote ya no tardaba en
llegar porque tenia unos asuntos importantes que atender.
Instantes después entro a la oficina un hombre alto y ya se le veía la edad
por las canas que se mostraban en su cabello. Saludo cordialmente y el otro
hombre le señalo que lo estaban esperando porque lo necesitaban, amablemente
accedió a platicar con ellas. Les pidió que lo siguieran ya que el se dirigía a la
puerta de la iglesia, la abrió y entraron, observaron una leve oscuridad y
caminaron por el largo pasillo hacia el altar, el padre abrió una pequeña puerta
que daba a un pequeño cuarto, la parecer era el vestidor del padre y también tenia
un pequeño escritorio, dejo sus cosas a un costado del escritorio y se sentó a ellas
les pidió lo mismo, se acomodaron.
▬ Antes que nada, mi nombre es Agustín perdón por no presentarme.
▬! Bien! ¿En que puedo servirles? Pregunto amablemente el padre.
. Sofía fue la que tenía que desenvolverse y explicar la situación. ▬ ¡Vera! El
motivo de nuestra visita es que queríamos saber si es posible bendecir nuestra
casa o que nos brindara algo y sea lo que sea. ▬ No tenemos mucho tiempo de
haberla comprado y se escuchan muchos ruidos; mi hija y yo hemos visto cosas y
la verdad son aterradoras, han sido cosas que a mi no se me olvidaran y las
recordare pro el resto de mi vida. ▬ Tengo más miedo por mi hija, ¡No quiero que
le pase nada! Siento que correrá algún peligro si no hago nada.
El padre se quedo con una mirada atónita, demostraba escepticismo, no se
veía muy creíble a lo que acababa de escuchar. – Mire con gusto iré a bendecir su
casa pero sinceramente no creo que haya algo que solo los nervios de ustedes, ya
que es su nueva casa y tal vez por la emoción o tal vez extrañan el antiguo lugar
donde vivían. –Les voy a pedir que piensen que las cosas que escuchen como los
ruidos los tomen como algo normal porque la sugestión les traerá más y ¿creo que
no quieren eso? ¿Verdad? Tomen las cosas con calma y ¡algo muy importante! La
oración ¡les pediré que hagan oración todos los días! Y les aseguro que las cosas
se calmaran, traten de ignorar esas cosas que pasan, no les den la debida
importancia porque de lo contrario podría pasar más. Lleven una vida normal y
olvídenlo, ¡se que será difícil pero les aseguro que les dará resultado.
De inicio esas palabras les trajeron una tranquilidad enorme a las mujeres,
desde que llegaron estaban muy nerviosas y con miedo pero las palabras del
sacerdote les dieron una paz tanto interior y exterior. El padre les indico que en
dos semanas realizaría el favor que le piden ya que se encontraba en otros
asuntos muy importantes. El trato se cerró y ellas se marcharon a casa con mucha
tranquilidad en sus mentes, salieron del lugar con otra expresión en sus rostros
La mayor preocupación era por su hija, ella es la persona mas vulnerable
así como es la única que tiene mas posibilidades de ver a los malévolos seres.
Mientras esperaban el día en que llegaría el sacerdote trataron de ser fuertes;
Bruno también se entero de la noticia que el padre vendría a bendecirle su casa,
eso le provoco esperanza. Cuando las situaciones se escuchaban más fuertes e
intensas se iban a quedar a la casa de Andrea a pasar la noche. Era preferible
dejar el lugar solo y que las cosas pasen sin que ellos se den cuenta.
Era muy curioso todo lo que sucedía, es sabido que algo estaba ahí y
quería estar solo, le molestaba la compañía. Todas las situaciones se volvieron
mas frecuentes, no importaba la hora ni el clima o el día ya se presentaban con
mayor frecuencia. Podría tratarse de cualquier cosa pero necesitaban averiguarlo
y la familia podría querer o no hacer eso pero lo que mas deseaban era que
desapareciera y que estuviera todo tranquil
VIII
Los momentos calurosos llegaron, el calor hacia sudar el cuerpo y mas
estando encerrado en casa, Sofía y Gloria salieron a dar un paseo al pequeño
parque. La última vez que vieron lo ocurrido ya lo dejaron en el pasado. Las dos
mujeres empezaron a columpiarse y a reír un instante para olvidar las situaciones
escalofriantes que continuaban viviendo. De pronto no muy lejos de donde se
encontraban ellas, venia una mujer, era delgada y de pelo negro y largo, su
vestimenta se mezclaba entre negro y gris, no era de gran estatura pero cuando
Sofía le llego a ver la cara era una mujer muy bonita.
Se sentó en uno de los columpios quedando Sofía en medio, solamente
había cuatro y obviamente uno quedo libre. Esa mujer mostraba una cara de
tristeza y soledad, en ese momento fue cuando se animo a dirigirles la palabra.
.¡Hola! ¿Cómo están? Les pregunto en un tono melancólico
- ¿Son nuevos por aquí verdad? Esta pregunta interrumpió la respuesta de
Sofía quien en el mismo instante estaba vigilando a Gloria.
- Si nos acabamos de mudar aquí y ahorita estamos de paseo. Ya sabes
que el día esta caluroso y aquí se siente fresco.
- ¿Tu también vives por aquí? Pregunto con una curiosidad enorme, Sofía
noto que la cara siempre la traía hacia abajo y lo único que alzaba eran los ojos
pero en muy pocas ocasiones. Gloria estaba con sus risas que casi eran
silenciosas y seguía meciéndose, ella no le puso más atención a la extraña mujer.
- Si mi casa esta alguna calles de aquí, no esta muy lejos. Dicha mujer
sentía ganas de decir muchas cosas sin embargo se las contuvo, se despidió y la
mas grande y preocupante situación que les dijo fue que se anduvieran con mucho
cuidado, protéjanse que les podrían hacer daño. Eso la obligo a levantarse del
columpio y exigirle una explicación, pero ella ya se había puesto de pie antes y
cuando les empezaba a decir las advertencias.
- ¿A que te refieres con eso? ¡Explícate!
La mujer solo empezó a caminar y mientras se alejaba Sofía imploraba que
le dijese más de lo mencionado, todo fue en vano, la mujer no volteo para nada y
ella quería correr a alcanzarla sin embargo, algo le paralizo las piernas, además
de sentir que alguna voz en su interior le decía que no la alcanzase.
Desconcertada se volvió a sentar junto a Gloria, no creía lo que presencio, un
tornado en su mente le alboroto las ideas de una manera terrible.
Por increíble que parezca, en el tiempo que llevaban viviendo no conocían a
ningún vecino y lo peor que ninguno iba a su puerta a saludarlos o darles la
bienvenida solo como cortesía, ese tipo de cosas no eran necesarias, sobre todo
no son típicas o depende el tipo de vecindario o lugar donde se vive, cabe constar
que al menos a alguien llegaran a conocer y saludaran, pero en ese lugar si se
veía la gente aunque muy poca solo que nadie se acercaba a saludar o al menos
un “hola”. A ellos nos les importaba pero si les daba una extrañeza que con nada
podían curársela. Muy temprano se escuchaba el encender de los carros y
algunos murmullos de gente que pasaba cerca o enfrente de su casa.
En le día menos esperado, el sacerdote Agustín toco a su puerta tardo un
poco mas de lo que el prometió ya que sus asuntos eran muy importantes
agregándole lo difícil de dar con la dirección que Sofía le proporciono. Era una
mañana muy hermosa, Sofía se encontraba haciendo los deberes como buena
esposa; al abrirle la puerta sus ojos se llenaron de felicidad y lo saludo muy
amablemente, le dio una gran bienvenida y lo invito a pasar, le ofreció sentarse en
la sala y le ofreció un café. El padre Agustín acepto gustoso y mientras se lo
preparaba observo cuidadosamente cada rincón, quedo muy sorprendido porque
la casa no era muy grande y además de que no tenía mucho tiempo de haber sido
construida. Cuando termino su café, mencionó que sentía una mala presencia o
algo le incomodaba y no era normal; no era normal para el poder sentir presencias
o sentirse observado, es la primera vez que la había ocurrido tal acción.
Por una parte Sofía se sintió un poco de alivio porque ya le confirmaron que
era verdad, los ruidos eran por alguien o algo. En esos momentos le empezó a
describir sobre la entidad que observo mientras estaba en el baño, eso fue lo que
hasta ahorita le dio el peor de sus impactos. El hombre puso mucha atención a su
relato y los ojos los abrió a todo lo que daba. El sacerdote se levanto y empezó a
hacer lo que prometió, empezó a rezar y bendecir la casa, lo realizo de una
manera muy rápida, cada rincón de la caza que pisaba decía oraciones, Sofía
estaba tras el y de igual manera repitiendo las oraciones. Después de varios
minutos dijo que cumplió su deber y que siguiera conservando su fe y pensar
positivamente y así se descubrirá si todo termino o no.
El sacerdote Agustín se retiro pidiéndole pensamientos positivos y buena
actitud, nada de peleas, ni discusiones ya que todo eso puede ser un medio de
alimento para algunos malos aires. Por ultimo le ofreció mas ayuda por si algo
mas se prestase, en caso de necesitarla ya sabia donde buscarlo.
IX
La situación se calmo por unos días, la familia durmió tranquilamente,
recordaban a cada instante las palabras del padre, de pensar positivamente y no
sugestionarse. Todos pensaban que todo se termino sin embargo, los ruidos y las
molestias regresaron en lo menos inesperado, lo peor era que Gloria veía a un
niño y de manera muy constante, su gran susto paso y se quedo en el pasado y
nuevamente lo veía y de una manera constante, ella trato de ser mas fuerte de lo
normal, no podía mostrar debilidad alguna frente a su hija porque ella era la fuente
de su fortaleza. Intentos y mas intentos poco a poco lo conseguía hasta que no le
daba miedo y solo le comentaba a su madre puesto que la consideraba sus
mejores oídos para desahogarse y sentir un poco de mas apoyo aparte del de su
hija y su esposo.
Cuando ella le preguntaba por la descripción física, ella trataba de dar los
detalles y las coincidencias con el niño que vieron la otra ocasión en el parque era
mucha. Le causo mucha indignación, su preocupación y miedos querían
despertar nuevamente. Muy a menudo ella lo comentaba con Bruno y los dos
pensaban en otras soluciones; ya que empezaron a preocuparse mas porque la
buena acción del padre calmo la situación por un corto periodo de tiempo. Una
noche Bruno no llego a dormir a casa debido a una invitación de una fiesta con
algunos compañeros de trabajo; Sofía no tuvo ningún problema con ello, la cama
fue totalmente para ella y obviamente Gloria durmió con ella. En el transcurso de
la madrugada Sofía cayo en un profundo sueño y pareciese que ni el ruido mas
fuerte podía despertarla, fue muy extraño porque ella era de las personas que al
dormir tenia el sueño muy ligero; eso le pasaba desde que era una niña solo que
nunca le preocupo o le dio alguna importancia. Deseaba abrir los ojos pero los
sentía muy pesados al igual que su cuerpo, además de querer moverse pero todo
era en vano, sentía como si una roca gigante la tuviese encima y no la dejase
mover ni un dedo. Después de unos instantes abrió los ojos sin embargo su
inmovilidad continuaba; a su lado veía a Gloria quien descansaba profundamente,
vio como la pequeña dormía tan tranquilamente y sin ningún problema. Algo
empezó a llamar la atención de Sofía, eso le dio mucho susto porque no lo veía
como algo normal. Llego a ver eso como una tercera dimensión o una alucinación
de mal gusto, observaba como poco a poco se iba alejando de ella, la distancia
entre ella y su hija era mayor, pareciese que la cama tenia muchos metros de
largo, ella luchaba y luchaba por hacer algo no obstante aun sentía su cuerpo tan
pesado como si tuviese una roca encima. Lo peor de esto era que se le volvió a
manifestar aquel hombre que vio en el baño, era el mismo ella no lo olvido y no lo
olvidara, lo podía ver claramente estaba junto a Gloria, ella no estaba al pendiente
de la situación, tenia los ojos cerrados todavía se encontraba en un profundo
sueño, Sofía trato de gritar pero su inmovilidad estaba presente, empezó a llorar
fríamente. Ese malévolo hombre la tomo entre sus brazos y la empezó a acercar
su cara a la de ella queriéndole dar un bezo en una de sus mejillas, Gloria no abría
los ojos y no reaccionaba a tal situación, mientras la sostenía a Sofía la miraba de
una manera horrible; sus ojos los tenia llenos de maldad. Ella no sabia que hacer,
sus ganas de pelear contra el le vinieron a su mente y a su voluntad, ella lo miraba
y sus ojos decían el deseo de lanzarse contra el y golpearlo con las manos o con
lo que ella pudiese, por un momento recordó las palabras del sacerdote sobre
mantener la oración. Ella empezó a hacerlo, se acordó de lo primero que le vino a
la mente y pensando positivamente de que le daría resultado, poco a poco sentía
movilidad hasta que dio un grito tan fuerte que despertó y se levanto tan
bruscamente de la cama. Estaba muy sudorosa en toda la cara, tomo algo que
estaba cerca y se limpio el sudor. Las lagrimas ya le habían llegado al cuello, lo
que la tranquilizo fue ver a Gloria que estaba aun costado suyo. Gloria despertó y
vio a su medre llorar y obviamente ella lloro también. Inmediatamente ella abrazo
a la pequeña con toda su fuerza, mientras eso pasaba ella le mencionaba los
motivos de su llanto, Gloria estaba mirándola fijamente, tenía una expresión de
desconcierto en su rostro. Los minutos transcurrieron y todo quedo en una
pesadilla, una de las más desagradables pesadillas que había tenido en su entera
vida.
▬ ¡No pasa nada mi vida! Tuve una terrible pesadilla. Gloria abrazo mas fuerte
a su madre y poco falto para que se pusiera a llorar con ella. En el preciso
momento que se levanto con la niña en sus brazos, se puso los primeros zapatos
que vio y se dirigía a la parte de abajo, inesperadamente la puerta de la habitación
estaba atorada porque no podía abrirla con su hija en las manos le costaba mas
trabajo, varios intentos y fue imposible, era ilógico puesto que casi no se ponía el
seguro y para ponerlo era del lado donde estaba ella.
- ▬ Sintió una presencia atrás de ella, un aire de respiro y como un tronar
de dientes. Gloria muy acurrucada al pecho de su madre no daba cuenta de
nada. Sentía esa respiración cada vez mas y mas cerca, se quedo atónita no
movía ni un solo dedo, trato de voltear de reojo y analizar que pasaba,
sorpresivamente un ser estaba atrás de ella podía ver algo extraño, la silueta de
una persona o un ser demoniaco todavía no estaba segura, el valor le nació del
corazón para voltear raídamente, nada mas que los pequeños ruidos de la calle
predominaban y algunos cuantos ruidos extra y sin importancia, se dirigió a la
cama a sentarse y tomar un poco de calma y reducir su alteración, al dar el
primer paso hacia su cama sintió una fuerza descomunal; una fuerza bruta que
la golpeo por atrás, aventándola hacia la cama y cayendo completamente boca
abajo, mientras sentía el golpe pensó en que era imposible lo que sintió, Gloria
empezó a llorar porque ambas fueron lanzadas, ellas flotaron como cuarenta
centímetros, ambas cayeron sin hacerse daño pero el susto ya lo tenían, si
hubiesen caído en le suelo seguramente se hubiesen lastimado. Sofía al caer
reacciono rápidamente volteando hacia a tras y ver que es lo que la aventó de
esa manera, Gloria llorando se pego con su madre abrazándola tan fuertemente
como queriéndole enterrar los dedos al cuerpo. Se abrazaron y se cubrieron con
las sabanas.
X
Sus miedos habían florecido y llegado a toda luz, los siguientes días fueron
de miedo, ella sentía que algo macabro le iba a pasar en cualquier momento.
Soñado a aquel hombre de aspecto maléfico le indico que su intención era
lastimarlas, tanto a ella y a su hija. Bruno supo la historia de lo ocurrido, no
encontró las palabras adecuadas para plantear una solución o al menos consolar
a su esposa. Varias ocasiones ella reprochaba el esfuerzo del sacerdote, al no
mostrar ningún resultado o mejoría busco a alguien para maldecir.
Muchas ocasiones Gloria se encontraba hablando sola, mientras ella
jugaba en su cuarto con sus muñecas, Sofía llegaba y la sorprendía teniendo esa
charla sin nadie ni nada mas que ver salvo a ella, la única respuesta que ella daba
“con mi amigo” después de varias ocasiones ya se volvió rutina y las
descripciones que le planteaba coincidían mucho con el niño que vio en le parque.
Haciendo conclusiones finales era muy probable que hubiese dos presencias en
su casa; la del niño y la del hombre desagradable de mala mirada, así era como
Sofía lo nombro. Solamente faltaba determinar la razón por la que estaban
alojados ahí; de que existía una razón era cierto, ¿pero cual? Eso se preguntaba
Sofía.
En el momento menos indicado el sacerdote Agustín toco a la puerta, fue
en un día nublado, las nubes tapaban todo el cielo y no se veía el mínimo rayo de
sol, muchos adivinarían que llovería pero no fue así, solo fue un día que a las
personas les hace pensar en algo que por ende es lógico y cambiaria luego. Todo
lucia en tranquilidad y las calles estaban silenciosas. En esta ocasión llego
acompañado por otro hombre, vestía totalmente de negro, tenía muchos collares
y pulseras. Su mirada era fría y fija, muy sorprendida Sofía los invito a pasar se
sentaron el la sala y les ofreció algo de tomar. Aquel hombre fue presentado por
el sacerdote y solamente le dijo el pseudónimo de Yohn, quizás su nombre era
Juan o Jonás. El padre empezó a explicar el motivo de su visita, la vez pasada
cuando vino a bendecir la casa sintió una terrible pesadez en su cuerpo además,
de algo maligno, algo o alguien con bastante fuerza que no se podría ir así de
simple. Yohn tenía una profesión o era experto en cosas relacionadas a lo
sobrenatural; desde muy joven logro desarrollar una habilidad en la cual podía
establecer contacto con seres perdidos o almas en pena, también lograba
descubrir presencias que se rehúsan a darse a conocer y que están ocultas sin
mostrar el más mínimo problema o todo lo contrario descubrir presencias que
molestaban y aterraban a los inquilinos. El sacerdote le encargo que determinase
cual es la causa principal de las cosas que atormentaban a dicha familia. El
hombre se puso de pie, pidió permiso para observar toda la casa y recorrerla
entonces no fue problema para Sofía, ella espero sentada en el sillón con Gloria
en sus brazos mientras el padre y Yohn estaban analizando la cada rincón y cada
centímetro. Ella se notaba muy impaciente, Gloria no daba crédito del todo a lo
que estaba pasando solo le hacia preguntas a su mama referentes así esas
personas eran conocidas; su única respuesta a todas las preguntas era que si y si
y si.
La última parte a analizar obviamente fue la de arriba, ya eran minutos
transcurridos hasta que bajaron, analizaron cada pequeño cuarto existente en esa
casa. El hombre pidió que se sentara en la mesa para decirle las noticias
encontradas. Fue muy sorprendente tal hallazgo que el realizo. Solamente busco
las palabras adecuadas para decirle y que no se exaltase. Dos entidades yacían
ahí; una de ellas era bastante poderosa, y era el causante de todos los sonidos
extraños, era una presencia que deseaba atormentar y hacer mucho daño, la otra
no sabia si buena o mala seria pero lo que aseguro fue que no tenia intenciones
de perjudicarlos esa presencia no tenia un gran poder solo se alojo para poder
ayudar a alguien o algo pero no tenia la intención de asustar a nadie; tal vez
aunque muy poco probable deseaba ayudarlos a luchar contra la agresiva sin
embargo, las respuestas a algunas preguntas andaban a flote. Algo que Yohn les
aseguro sobre los entes fue una lucha que llevaban acabo entre si.
XI
Los momentos de tensión se volvieron de mucha más tensión, a causa de
toda la información que supieron sus miedos se pusieron al borde. Sofía la
principal persona que sufría por estas deducciones. Lo mas prudente vender la
casa, mientras debían buscar otra y ello significaba tiempo, una decisión y tal vez
la decisión que estaban de acuerdo y la mejor, era ir a vivir por algunos días o por
algunos meses a la casa de Andrea. Bruno se sentía desolado al saber que el
logro que hizo en mucho tiempo, su patrimonio y su lugar en el futuro le duraría
poco, deseaba un lugar de paz y tranquilidad para su hija, sin en cambio se sentía
mal en su interior por haberle fallado de esa manera. Empezaron a establecerse
los acuerdos, la joven pareja llego a un acuerdo y recurrirían a la ayuda. Toda la
casa se ordeno y se hizo lo posible para que no pasara nada porque se quedaría
sola por algunos momentos, también llegaron al acuerdo de que se estaría
checando constantemente. La casa fue cerrada en su totalidad para que nadie
intentase meterse a robar, hacer vandalismo o hacer alguna fechoría. La mente
de Sofía vagaba e investigaba por saber quienes o que estaban acechándolos.
Andrea no tenia el más mínimo inconveniente por recibirlos, al contrario le pareció
perfecto.
Los momentos pasaron como el agua, ya llevaban algunos días de no
acercarse a la casa hasta que llego el momento de ir a explorar y esperar el
milagro de que todo haya quedado en un sueño, empezar desde cero, borrar la
memoria y dejarlo en una mala experiencia que quedara en el olvido. Llegaron a
la casa y después de haber echado un gran vistazo a todas las cosas se llego a la
conclusión de que todo estaba en orden, ningún rasgo de aparente actividad o
movimiento. Muchas cosas supusieron y sabían que las cosas que sucedían se
debían a algo que anduviese ahí, en esta ocasión no ocurrió nada, y tenían una
tarea que cumplir y con las debidas indicaciones que los expertos les dieron
porque tal vez las cosas que allí abundaban les molestaba solamente personas;
es decir que prefieren la soledad y aquello se podría marchar a otro plano de
existencia o eso era lo que ellos creían. Entonces tenían que entrar en ese mundo
y luchar.
Andrea era otra persona mas que ya entraba en la preocupación, ya
enterada de todos los acontecimientos se ofreció a ayudar en lo que pudiese y
obviamente su principal preocupación era Gloria además de saber que ella podía
ver al niño e incluso hablaba con el. En las mañanas Andrea permanecía con
Sofía mientras Gloria se encontraba en la escuela, ya cuando era el momento de
salir, las dos la recogían, esperando con ansiedad en la puerta de la escuela.
Andrea regresaba a su casa ya casi de noche cuando ya faltaban unas horas para
que Bruno llegara, inclusive unos días si se quedaba con ellos por que el tiempo
pasaba rápido y no lo notaba.
El momento de que Andrea descubriera que algo abundaba en la casa
llego, la situación de darse cuenta por si misma se encontraba próxima, tal vez
hubiese sido mejor que no pero ella de antemano presentía que también le
pasaría algo. Mientras la pequeña se encontraba en la escuela, Sofía prepararía
una rica comida para cuando Bruno regresase, ella salió a comprar los productos
necesarios para llevar a cabo lo que quería y pidió a Andrea que permaneciera
en casa por un momento. Ella al quedarse sola lo primero que hizo fue subir a la
habitación de Gloria y arreglarla; muchas muñecas estaban en el suelo,
peluches, además de que piso uno por equivocación pero afortunadamente le
muñeco no recibió ningún daño, acomodo cada pequeño detalle de esa
habitación que pertenecía a su amada nieta. Minutos pasaron y se le ofreció un
vaso de agua, su boca quería agua fresca, salió de la habitación con dirección a
las escaleras; sus pies se colocaron perfectamente en los escalones empezaba
a mover uno de sus pies para ponerlo en el siguiente escalón, logro apoyarse del
pequeño barandal sin embargo, algo sintió en su espalda que casi la hace volar,
ella no pudo hacer nada para evitarlo, sintió un par de manos que la tocaron la
espalda de una manera tan salvaje, la caída fue demasiado fuerte, no hubo
tiempo para sostenerse de algo para evitar caer, ella quedo tendida en el piso
bocabajo, inmediatamente llego al estado de inconsciencia, tiempo para gritar de
dolor o algún quejido no se presento, en su frente se postraba sangre que poco
a poco en el suelo un pequeño charco se formaba.
Sofía tardo treinta minutos en volver, ella toco la puerta pero no recibió
respuesta, espero mas y no había nada, tardo un poco en sacar las llaves de su
bolsa y abrir. Entro cómodamente gritándole a su madre pero nada al entrar y
cerrar la puerta vio a su madre en el suelo, ella grito tan fuerte que casi se lastima
la garganta, soltó las cosas que traía en las manos, se acerco para auxiliarla pero
no sabia que hacer; la levanto en sus brazos y le limpio la sangre con un pañuelo,
la sangre seguía brotando. Tomo el teléfono y llamo a una ambulancia, ella
seguía sin mostrar reacciones de vida. La ambulancia llego e inmediatamente
bajaron un hombre y una mujer, auxiliaron y prepararon a Andrea para llevarla al
hospital. Sofía fue informada del hospital al que la llevarían pero primero localizo a
Bruno para pedirle que fuera a recoger a la niña al colegio mientras ella
acompañaría a su madre al hospital. Bruno no lo pensó dos veces e
inmediatamente salió de su trabajo para ir a recoger a su hija, más tarde ella le
hablaría para darle la dirección del hospital donde la estaban atendiendo.
Gloria salió de la escuela y afuera ya la estaba esperando su padre, ella
corrió hacia el muy contenta, le cayo un poco extraño verlo, era la primera vez
que su padre se presento, debido a sus deberes el no podía ir por su hija pero en
esta ocasión y debido a la gravedad tuvo que ser así, sin embargo, eran malas
noticias pero la inocencia de la niña no veía otra cosa, su padre la abrazo con
mucha fuerza; cargo la mochila y a ella también y se marcharon. Regreso a casa
porque no recibía ninguna llamada de su esposa, ella prometió avisarle todo
sobre el estado de su madre.
Su teléfono sonó y su alivio llego, noto que era la llamada de Sofía,
inmediatamente contesto, escucho la información que necesitaba y salió de la
casa, tomo su auto y llevo a Gloria consigo. Sofía estaba en la sala de espera, la
situación fue de mucha emergencia porque que llegando al hospital rápidamente
la internaron y a ella no le dieron ni siquiera un saludo. Cuando Bruno llego, Sofía
estaba esperando con ansias alguna noticia, cuando vio a Bruno y se pequeña
hija corrió inmediatamente a abrazarlos, algunas lagrimas le brotaban de sus ojos,
Bruno expreso unas palabras de consuelo a su amada.
Tomaron asiento y ella le narro lo que sabia, como vio a su madre cuando
regreso del súper, la historia era corta y para Bruno era incompleta. Todo lo que
escucho no le decía nada, la respuesta al accidente estaba aun en el aire, solo
esperar a que Andrea recobrase el conocimiento y ver el desenlace. Dos horas
exactas pasaron, por increíble que parezca el tiempo se pasó de una manera tan
lenta, ya casi el sol terminaba de ocultarse y una fría noche se avecinaba. Una
enfermera muy bonita y con su uniforme con un blanco impecable menciono el
nombre de su madre, Sofía levanto de su asiento rápidamente y corrió a donde se
encontraba la enfermera.
- ¡Es mi madre! ¡Señorita por favor dígame como esta! Muy precipitada y
nerviosa se mostro, se pego mucho a la enfermera y la tomo de los hombros. La
enfermera solo le agarro las manos y pidió calma
- ¡Cálmese! Su madre esta fuera de peligro, recibió golpes muy fuertes en
varias partes de su cuerpo y necesita mucho reposo. Solo vine a avisarles para
que se tranquilicen, en un momento mas podrán subir a verla. Un respiro en sus
corazones llego, ella inmediatamente abrazo a Bruno quien tenía a Gloria dormida
en sus brazos; su ambiente y tensión cambio. La noche se hizo presente horas y
horas transcurrieron. El hospital no paraba, mucho movimiento, voces, gente que
expresaba tristeza en sus rostros; acontecía todo lo que es conocido en los
hospitales.
Ya de madrugada Sofía decidió quedarse en el hospital hasta esperar
noticias de su madre, Bruno regreso a casa porque Gloria necesitaba descansar,
el también necesitaba un poco de descanso, el trabajo requería de su presencia y
por lo tanto no debiese fallar. Casi a las cinco de la mañana otra de las
enfermeras llamo a Sofía para avisarle que ya podía subir con su madre, ella
recobro el conocimiento y podía pronunciar pocas palabras, requería muchos
cuidados y además de que quería ver a su hija y nieta amada.
Subió inmediatamente a donde le indico la enfermera, lo más rápido que
pudo, nada podía detenerla. Se encontraba hasta el tercer piso. En la habitación
también había otros cuatro pacientes más, todos dormían o tal vez estaban
anestesiados, dos de los pacientes tenían un familiar al lado que les hacía gran
compañía. Sofía ubico a su madre y se dirigió hacia ella, le beso la frente y le dio
un fuerte abrazo como pudo. Andrea apenas si podía abrir los ojos y pronunciar
unas palabras; trato de decirle algo a su hija, sin embargo, ella no las entendió.
Una pequeña silla postrada al lado sirvió para que Sofía se sentase, miraba a su
madre fijamente quien realizaba esfuerzos por hablar.
XII
Pasaron tres noches las cuales Sofía permaneció en el hospital, por
pequeños momentos iba a casa a bañarse y cambiarse de ropa. Su madre mostro
una mejoría increíble, se recuperaba de aquellos golpes satisfactoriamente y era
capaz de hablar aunque muy poco. Bruno la cuidaba por unos instantes ya que su
trabajo le impedía estar mucho tiempo, además de que el era la principal fuente
de ingresos no le podía fallar a su familia. La señora comía lo que el hospital le
proporcionaba, su recuperación fue mas rápido de lo que se pensó, ella aburrida
de ese lugar quería irse a casa, era de las personas que pensaba que los
hospitales terminan de rematar a la gente. Faltaban unos momentos para que
saliera del hospital el doctor dio ordenes de que se cuidase muy bien para
terminar su recuperación. Mientras esperaban Sofía empezó la interrogación
sobre lo que ocasiono su accidente. Su madre empezó a recordar, los ojos se le
fijaban en otra orbita, miraba el techo, miraba el suelo y su mente estaba
procesando la información.
-Solo recuerdo que cuando tu fuiste a comprar tus cosas, yo subí a la
habitación de Gloria, su habitación estaba desordenada y arreglar sus cosas no
estuvo de mas, pero me tarde un poco en hacerlo que me dieron ganas de tomar
un vaso con agua, me dirigí hacia las escaleras y algo o alguien me empujo y no
pude evitar la caiga. Al escuchar esas palabras lo primero que vino a su mente
fue sobre aquellas manifestaciones que vivían en su casa y la intención que
tenían era de molestarlos, todo lo dejo en un simple pensamiento después que su
madre muestre una recuperación total hablaría con ella mas a fondo.
Todavía tenia muchas dificultades para ponerse de pie, requería la ayuda de
su hija, quien además la a ayudo a cambiarse la ropa. El doctor autorizo su salida,
los días fueron largos y las preocupaciones fueron tan temidas, pero al fin de
cuentas todo salió bien, aquella mujer mostro una resistencia increíble así como
una recuperación majestuosa. Sofía aguanto las ganas de llorar para que su hija
no notase la preocupación, todos mostraron fortaleza.
Regresaron a casa, Bruno fue por ellas al hospital, entraron a casa
respirando un poco de calma, inclusive sin saber si las situaciones paranormales
seguían allí o ya no. Acomodaron a Andrea en la sala, se decidió que se quedase
con ellos mientras se mejora, de lo contrario en su casa y sola no podría
sostenerse cuando necesite algo o ir al baño. Bruno acomodo las cosas
necesarias para que ella estuviese cómoda, ella estaba muy agradecida por todo
lo que ya habían hecho por ella. Gloria abrazaba a su abuelita con mucha fuerza y
le daba muchos besos. Andrea sentía una tremenda felicidad por disfrutar a su
nieta.
XIII
Paso un mes tan rápido como el correr del viento, Andrea ya estaba mucho
mejor, ya caminaba muy bien y no necesitaba ninguna muleta o algún bastón. Al
mismo tiempo que se recupero, le vino a la mente la situación que vivió y no
deseaba estar en esa casa más tiempo. Se alteraba cuando veía las escaleras a
tal grado que ya no subía, lo único que hacia era permanecer en la sala
esperando a que le trajeran cosas o contemplando las rutinas como se
desenvolvían. El miedo la invadía otra vez, y esta vez Sofía le pidió que narrara
como sucedieron las cosas.
Andrea se preparo para marcharse a su casa, ya extrañaba cada rincón, su
hija la ayudo a prepararse, mientras eso pasaba Andrea recordaba a detalle cada
situación, cada preciso momento que la llevo a tener esa gran accidente, los
recuerdos tanto buenos como malos regresaban a su mente, el shock estaba por
comenzar. Solo esperaron a que llegara Bruno para que la llevara en el auto y
también porque tenía algunas cosas que llevarse.
-Ahora si madre, ¿cuéntame que fue lo que realimente te paso? ¿Por qué te
caíste de las escaleras? ¿Por qué no tuviste cuidado alguno? Toda apresurada
pregunto Sofía, no dejaba pausas a sus preguntas. Las respuestas a las
preguntas llegarían en el momento en que ella fuese narrando los hechos.
-¡Todo fue tan repentino hija! Te repito que en el momento en que te
marchaste a comprar lo que necesitabas, yo me decidí a arreglar la habitación de
mi querida nieta. Sabes que hay un desorden y tú no lo limpias, lo mejor era que
yo lo hiciese para que no te apresuraras y todo marchara tranquilo, solamente
subí y me dispuse a hacer lo que tenia que hacer. Acomode cosas y mas cosas,
me dio mucha sed, a mi edad pues ya me canso muy rápido y se me ofreció un
vaso de agua así que me dirigí a las escaleras. Todo estaba tranquilo, no sentía
algo, no estaba mareada o algún padecimiento que me atacase para que yo
cayera. Coloque los pies en el escalón, dispuse a poner uno de mis pies en el
siguiente pero recuerdo que al ponerlo sentí unas manos en mi espalda, fue tan
brusco que por poco salía volando. ¡No pude evitar la caída!
Todas esas palabras dejaron en shock a Sofía quien se acordó de las
cosas que acontecían y esos seres vez fueron la causa de su accidente. El temor
a permanecer en dicha casa ya se encontraba a tope, toda la familia
principalmente Sofía no deseaban permanecer un minuto mas allí. Se
intercambiaron palabras entre Bruno, Sofía y Andrea; se requería tomar una
decisión. Como Andrea no soporto estas un segundo mas en la casa, se
marcharon con ella a hospedarse un momento. La casa se podrían en venta, todo
se quedo en orden, cada espacio de aquella casa se quedo en orden y limpio, las
cosas fueron colocadas en su lugar correspondiente, algunas cosas llevaban
candado y les fue puesto. Solo llevaron consigo principalmente ropa
La puerta la cerraron con doble seguro y algunas cosas mas, tomaron el
automóvil y emprendieron la marcha hacia la casa de Andrea. Todo en orden y
todo en su lugar, se marcharon con cierta tranquilidad por sus pertenecías que
estaban seguras. Llegaron a casa de Andrea y ella gustosa les dio una de las
habitaciones para que allí pasaran las noches; los tres compartirían una
habitación, ya que la casa no era muy grande.
Varias noches fuera de su propia casa se esfumaron, todo estaba en calma;
sin embargo, Sofía tenia sueños constantemente en los que miraba a ese niño;
ese niño que se le manifestó por primera vez y que Gloria veía constantemente, lo
raro de este asunto era que no le daba miedo a comparación del otro, tan solo de
imaginárselo le temblaban hasta los nervios. Este pequeño ser al parecer tenia la
intención de comunicarse con ella, siempre que se aparecía en sus sueños le
extendía la mano pero ella no se atrevía a dársela, además de verlo a el, veía un
gran espacio como si fuese una habitación enorme, solamente que tenia muy
poca luz y esa poca de luz emergía del pequeño. En otras ocasiones se
manifestaba un viento fuerte que el niño se alejaba de ella y antes el pronunciaba
unas palabras y ella no las entendía debido a ese viento, entonces era cuando
ella despertaba, muchas ocasiones tuvo ese sueño, no pasaba nada mas que
solo sueños, las demás cosas se tranquilizaron. En la casa de Andrea no se
presentaba algo fuera de lo ordinario. Un momento de paz se sintió en sus
corazones.
XIV
Se discutió mucho sobre la casa, que iban a hacer con ella, todas las noches
que regresaba Bruno empezaban a discutir cual seria el destino de su patrimonio;
lo conservarían o lo venderían. La decisión final fue venderla, era lo mejor y con lo
que recibiesen, comprarían otra en un lugar diferente, lejos de la pesadilla que
aun Vivian.
Pasaron algunas semanas y regresaron a casa para echar una mirada y
volver a habitarla; su esperanza de ver que ya no hubiese nada crecía más y más,
cada momento pensaban en un milagro y en que todo solo fue una pesadilla.
Regresaron a su casa y entraron como si nada, quitaron los seguros de la puerta
principal y entraron, y lo que vieron quizás no lo olvidarían nunca. La casa era un
completo desorden, la mesa del comedor estaba volteada y las sillas igual,
rápidamente fueron a la cocina y los utensilios tirados en el suelo, las cosas
delicadas como vasos, platos se encontraron en el piso hechos pedazos. Un
completo desorden aconteció, inmediatamente se dirigieron a las habitaciones y la
sorpresa fue la misma, todo lo que adornaba las habitaciones fue encontrado en
completo desorden. Lo primero y lo mas lógico que pensaron fue que la casa fue
robada, algunos maleantes entraron y se llevaron objetos de valor y por tal motivo
dejaron la casa en un desastre total. Una interrogante mas apareció, ellos se
dieron cuenta de que la puerta y la ventana no se encontraron forzadas ni
dañadas, se encontraron como se dejaron y las cosas de valor también fueron
encontradas; entonces la posibilidad de un robo poco a poco se fue descartando.
Otra vez sus mentes volvieron a pensar lo mismo, especialmente la de Sofía
quien dedujo que las entidades eran las responsables de estos actos tan
barbaros. Bruno quería pensar que algo mas realista pudo pasar, la idea de las
entidades le estaba dando miedo y el trataba de pensar menos en eso.
Trabajaron arduamente para volver a poner las cosas en su lugar y limpiar la
casa, todo esto les llevo horas y horas de limpieza. A pesar del miedo que les
invadía, ya todos mostraban una actitud de ya no aguantar, estaban cansados de
tales hechos, un momento en el que se mezclo la furia y el miedo crecía y crecía
en su interior. Solamente y la única alternativa era esperar a que alguien
comprase la casa y se marchen lejos a empezar otra vida. Su esperanza de que
las presencias que causaban daño desaparezcan ya no existían, lo mejor era irse
muy lejos y tomarlo como una pesadilla y como una mala aventura de la vida. Los
días pasaban y se quedaban marcados en la mente de la familia, cosas que
nunca olvidaran y tal vez el tiempo nunca les ayudaría a olvidar.
Llego el momento más difícil, las cosas que pasaban especialmente en la
noche acontecían con tal intensidad, algunas de esas noches mejor no dormían,
intentaron retar a la entidad pero algo en su interior les rogaba de no intentarlo.
La última pesadilla de Sofía en donde volvió a ver a aquel hombre de
aspecto desagradable llego, el lugar donde se desarrollo su pesadilla era de
mucho miedo porque veía al hombre y a tras de el se manifestaban las puertas
del infierno; o al menos eso era lo que se creía, ella lo veía señalándola y
acercándosele poco a poco. Huía muy aterrada sin embargo no lograba lo logro
porque la alcanzo y la tomo en sus brazos, en ese momento cuando la tomo
bruscamente sintió su cuerpo quemarse, únicamente grito con toda su fuerza. La
tomo y puso su cara en frente de la suya. -- ¡lárgate y huye mientras puedas!, de
lo contrario tu hija será mía y sufrirá, ustedes no podrán hacer nada.
La casa fue ordenada y lista para venderse, lo único a esperar es
contactarse con Alberto y ver que se podía hacer, además de que les consiguiese
un comprador, lamentablemente mucho tiempo transcurrió y las veces que se
intento contactarlo no se lograron, únicamente ellos supieron que se encontraba
en unos viajes de negocios.
Segunda parte
I
Andrea les ofreció que vivieran con ella mientras localizaban a Alberto y
encontraban un comprador, ellos resignados aceptaron, tomaron algunas de las
pertenencias que mas necesitan y se fueron con ella. En algunos momentos
Bruno se dirigía a visitar la casa para ver que todo estuviese en orden, también
vigilar que ningún maleante se acercase a la casa con sus malas intenciones. Los
días que Bruno salía temprano de trabajar, pasaba a la casa a verificar que todo
estuviera bien, muchas de esas ocasiones regresaba pasaba de rápido porque
era tarde y a pesar de ellos se daba el lujo de echar un vistazo.
Después de algunas semanas Sofía, Gloria y Andrea visitaron la casa para
hacer limpieza, era más seguro que mucho polvo se impregno en sus muebles y
algunas cosas así que era momento de hacer limpieza. El día fue un sábado en la
mañana, salieron de la casa de Andrea y se dirigieron a su destino, Andrea ya
estaba muy bien de salud, sus heridas sanaron increíblemente, ningún
inconveniente tenía en acompañarla, era una mujer fuerte porque quería enfrentar
sus miedos regresando al lugar en donde ocurrió su accidente. Gloria no se daba
cuenta de la situación, solamente veía a ese niño, pero miedo no le daba, lo único
que hacia era decirle a su madre pero debido a su inocencia ella no asimilaba que
Sofía entraba en estado de preocupación. Dos razones existían para
preocuparse, una de ellas Sofía ya la había experimentado, el enemigo de sus
sueños la amenazo y trato de hacerle un daño, ya sabia que quería a Gloria, lo
que aun no sabia era la razón. La otra era el niño que regularmente Gloria veía, la
única vez que ella misma logro verlo fue en el parque, podría haber más pero no
lo recordaba del todo, su principal preocupación era la presencia mas poderosa,
presentía que aunque la casa se vendiera, ella tenia que enfrentarlo de algún
modo.
Las actividades a realizar eran variadas como se pensó, la mayoría de las
cosas de la estaban sucias principalmente los muebles, el polvo en todas partes y
por lo tanto debía ser limpiado. El tiempo de que empezaron a hacer limpieza fue
muy poco cuando tocaron a la puerta, Sofía dejo un momento lo que hacia y se
dirigió a ver quien tocaba; al abrir se llevo una gran sorpresa, Alberto quien no
era localizado por fin apareció.
-¡Esto si es un verdadero milagro! Dijo Sofía con un tono no tan agradable.
-¡Buenos días! Como han estado, me imagino que bien. – Me permitirá
pasar.
- ¡Si! ¡Adelante!
Alberto entro a la casa y se sentó en uno de los sillones de la sala, saludo a
Andrea y ella lo saludo también. En otro de los sillones se sentaron las mujeres y
empezaron a charlar.
¿Cómo les ha ido en su nueva casa? ¿Todo este bien?
▬ Hemos tratado de localizarlo desde hace varios días, queríamos comentar
con usted algunas cosas, tal vez le parezcan ilógicas pero se las tenemos que
decir porque esto ya llego al límite. La cara de Alberto cambio de expresión
rotundamente, traía una sonrisa y repentinamente le desapareció,
▬ ¡No me espante Sofía! ¡Explíqueme que sucede! ¡Por favor!
▬ Solamente unos días todo marcho bien, aparentaba a ser un gran
comienzo para nosotros y empezar a construir nuestra felicidad aquí. Todo
cambio repentinamente; ¡fue un golpe duro para nosotros! Sofía estaba
desconcertada y le venían a la mente los momentos más horrible que vivió.
Alberto sentía que Sofía actuaba y que el momento lo quería hacer mas
tenso y poner más emocionante la situación, por un momento llego a pensar que
perdió el juicio y que estaba loca. Sentía como si le quisiesen jugar una broma de
muy mal gusto.
▬ ¡Sofía por favor dígame! ¿Qué pasa?
Ella trato de acomodar las palabras y tratar de hacer creíble el mensaje. ▬
Mire la verdad las cosas que han sucedido para mi no tienen explicación lógica,
yo he visto cosas que me han aterrado, cosas que nunca en mi vida pensé que
me pasaran. Andrea solo escuchaba la conversación y esperaba el momento para
intervenir con su veredicto.
Sofía empezó con la primera experiencia que fue sobre ver a ese hombre o
demonio, la primera vez que lo vio fue en el baño, y a partir de ese momento lo
veía mas en sus pesadillas, ella le comento que sus intenciones eran hacerle
daño. La cara del Alberto parecía estar congelada, no parpadeaba, solamente
miraba a Sofía fijamente; lo que daba a demostrar era que no le creía ni un poco,
y solamente le ponía atención por respeto.
▬ Esa es una parte de lo que ha pasado, la otra es que mi hija ve
constantemente a un niño, yo no lo puedo ver, sin embargo, ella me dice y me lo
señala. Entiendo que los niños tengan imaginación pero que lo vea en cualquier
parte y en cualquier momento se me hace ya muy extraño.
En la expresión de Alberto ya se veía una desesperación, ya no tenia mas
deseos de seguir escuchándola.
▬ ¡Mire! No quiero ser grosero pero estas cosas que me dice me suenan
algo irrealistas, y en parte no creo mucho en ello, y sinceramente no se que
decirle, no se exactamente como contestarle, ¡discúlpeme! De verdad se lo digo.
Sofía se sintió muy mal, al no creerle sentía un coraje en su interior y
además tenia muchas ganas de decirle algunas cosas y dichas cosas no serian
nada agradables, mejor se quedo callada.
Andrea entro en acción y tomo su turno para hablar. ▬ ¡Mira joven Alberto!
Hace poco salimos de una situación, esta situación fue de lo mas triste para mi
hija y para su familia; yo tuve un accidente en esta casa, caí de las escaleras,
pero no caí por descuido sino porque sentí claramente que alguien me empujo y
para que me crea o no, nadie se encontraba en casa en ese momentos. Sentí
claramente que alguien me empujo y sabe usted que no tendría porque mentirle,
además mi hija también no tendría porque hacerlo, mucho menos jugarle una
broma de mal gusto. De la misma manera Alberto se quedo mirando a Andrea,
también no podía creer que era lo que pasaba.
▬ ¡Esto que me dicen es increíble! No lo puedo creer, no lo puedo creer y
no lo puedo creer. Las palabras que escucho las quería dejar en el olvido,
regresar el tiempo que transcurrió mientras las escuchaba, quería volver al
momento en donde toco la puerta y que lo recibiesen con alegría y la digan que
todo marcha bien en casa. Se imagino esa situación por unos segundos pero
acabo rápido porque le seguían diciendo cosas. Por ese momento no puso nada
de atención.
▬ ¿Qué nos puede decir de las personas que vivieron antes en esta casa?
Esa pregunta la alcanzo a escuchar en el momento que empezó a ponerles
atención. Un pequeño murmuro salió de su boca y trato de evadir la pregunta. El
sabia una serie de cosas y dichas cosas debían quedarse con el, no debían ser
contadas.
▬ ¡Bueno! Me tengo que ir, tengo otros compromisos y no puedo llegar
tarde. Sus ojos expresaban ganas de salir corriendo de la vista de ellas, Andrea
noto los nervios que inmediatamente le brotaron al hacer esa pregunta.
Evadiendo las ultimas palabras que le dijeron tomo su portafolio y se dirigió a la
puerta, por educación Sofía se también se paro y lo acompaño.
▬ ¡un gusto platicar con ustedes! Otra ocasión los vendré a ver, tengo unos
asuntos pero les prometo que otra ocasión vendré. Se marcho, se despidió de
manera caballerosa, Sofía le abrió la puerta, salió y cerró nuevamente. ▬ ¡no
puedo creer que nos haya tomado como unas locas! Explotaron sus
inconformidades, además de sentir que nos les puso la atención debida. Andrea
también se desconcertó un poco, las ganas de haberle dicho un par de cosas
quedaron en sus bocas. En la última parte de la charla precisamente cuando no
les puso atención fue lo que mas les molesto además de darse cuenta de que
algo le preocupo, algo sabio, tal vez un secreto, muchas interrogantes y nada de
respuestas, todo se movía nuevamente.
II
La casa fue ordenada, toco impecable, el orden, parecía como nueva la
casa. Bruno pasó por ellas para marcharse a la casa de Andrea, tenían miedo y
ya no querían quedarse mas en ese lugar, querían hablar con Alberto de ese
tema pero debido a su prisa y a su actitud se les olvido por completo esa parte.
Bruno se entero de la situación y también se incomodo con las reacciones de
aquel hombre, esperaría también una oportunidad para hablar con el.
▬ ¡Al parecer no les creyó nada de lo que le platicaron! Tendré que hablar
con el lo hare muy seriamente, no importa el tiempo que nos tardemos en hablar,
le planteare la situación y pediré que nos proporcione algunas facilidades para
poder vender la casa. Al siguiente día mientras estaba trabajando, Bruno busco
un pequeño lapso de tiempo para hablar por teléfono con Alberto, pedirle unos
instantes para hablar con el personalmente. Alberto le contesto de una manera
amable y se pusieron de acuerdo para verse, el lugar seria casa y el tiempo en la
tarde, hasta ese entonces Bruno pensó en las palabras correctas para dirigirse a
el.
Llego el día y todos fueron a casa, toda la mañana las mujeres se quedaron
en casa de Andrea, se pusieron a hacer infinidad de cosas, Bruno pasaría a
recogerlas y irían a aquella casa maldita, tal como Sofía la había nombrado.
Como quedaron de verse a una hora exacta, Bruno pasó a recogerlas con gran
anticipación, ya era la tarde noche, el sol se escondió totalmente. Solamente les
toco el claxon y ellas salieron listas, se subieron al carro y emprendieron a su
destino.
▬ Hablaremos y le pediremos ayuda de cómo vender la casa, si existe la
posibilidad de que nos ayude a conseguir compradores. Fueron las palabras que
menciono Bruno mientras encendió y movió el carro. Sospechaban de antemano
que seria muy difícil, sobretodo les pediría un argumento creíble para vender la
casa, algo lógico y que no este fuera de lo normal. ▬ ¡Espero que en esta
ocasión nos crea! No quiero volver a ver sus gestos que nos quiere tomar a locos.
Con Bruno presente cambiarían un poco las cosas, el punto principal es vender la
casa y empezar de nuevo lejos de las pesadillas y las malas experiencias.
Llegaron unos cuantos minutos antes de la hora acordada, Alberto aun no
llegaba, bajaron todos del automóvil Andrea se dirigió a abrir la puerta de la casa
y prender las luces, Sofía cargando a Gloria en sus brazos y Bruno bajo del
automóvil y lo aseguro, se dirigieron a la casa. Ya casi era de noche, prepararon
café para acompañar la platica, se sentaron a esperar en la sala, las luces
estaban ya prendidas para que cuando Alberto llegase se diera cuenta de que
estaban en la casa. Ya habían pasado mas de quince minutos y Alberto no
llegabas la hora en la que quedo de llegar paso, Bruno salió a echar un vistazo
para ver si llegaba, para su sorpresa estaba bajando de su carro, lo saludo con
movimiento de manos, cerro su coche y se dirigió hacia el, se saludaron y
pasaron a la casa.
III
Alberto vio a toda la familia reunida, entro y vio a todos sentados y se sentía
como el centro de atención, se sintió observado fijamente; lo invitaron a sentarse,
le ofrecieron una taza de café a lo cual el acepto gustoso. Después de
acomodarse y sentarse cada quien en el lugar que le correspondiese empezaron
con el principal punto de la reunión.
▬ He hablado con ustedes anteriormente y las razones por las que quieren
vender la casa a mi no se me hacen lógicas, con esto no estoy tratando de decir
nada, simplemente no se si creerles o tal vez la verdadera razón no me la quieren
decir. Inmediatamente Alberto digo esto para hacer pensar a la familia e incitarlos
a que dijesen la verdad. ▬ ¡Pues! La verdad las razones ya se las comentaron en
la plática pasada. Exclamo Bruno. Usted sabe como es el trato que le damos y
decirle mentiras no tendría ningún caso, le pido que nos crea porque si hubiese
otra razón ya se la hubiésemos confesado. Tal vez el escuchar a un hombre
hablar era lo que el necesitaba, cuando Sofía y su madre le manifestaron las
razones el no creyó nada y en esta ocasión al escucharlo de la boca de Bruno,
cambio un poco de parecer y le otorgo credibilidad. Tenia una manera de ser no
tan agradable, después de todo esto que escucho accedió a ayudarles a vender la
casa; se ofreció a conseguirles compradores, se dedicaría a buscar personas
interesadas en la casa y en el momento en que tenga noticias les avisaría.
La platica se alargo porque platicaron de otros temas, Alberto explico las
razones por las que se ausento y las aventuras que paso, muchos negocios que
atender, tenia a su cargo otra zona en donde se empezarían construir mas casas,
administraba como iban las construcciones y también le correspondía dar algunas
instrucciones. Posteriormente se enfocaron a la conversación sobre las casa, de
nuevo Alberto espero por otra razón o saber si ya se habían arrepentido de la
decisión que tomaron. No obstante la situación seguía siendo la misma y la
decisión ya tomada y forjada sin que el más grande pretexto cambiarían de
opinión.
▬ ¿Cuál fue la razón por la que los antiguos habitantes decidieron vender la
casa? Me imagino que la razón fueron los mismos problemas. Esa pregunta puso
muy pálido a Alberto, sentía que las cosas saldrían a flote y que lo que tanto
quería guardar y dejar en el pasado estaba apunto de ser sabido, por mas que se
oculten las cosas, en algún momento saldrán a la luz. Alberto lo único que
menciono fue que se aburrieron y la vendieron, no estuvieron mucho tiempo
habitándola, algo no les gusto y se marcharon.
La discusión no se hizo más grande, ya estaba decidido lo que se tenía que
hacer y Alberto no menciono ninguna objeción, quedaron convencidos de lo que
les platico sobre los antiguos dueños de la casa. O por ahora seria una respuesta
pasajera. Alberto se despidió amablemente, salió de casa y abordo su auto. Poco
después la familia salió de casa antes aseguraron bien la puerta de casa y
empezaron a abordar el automóvil, emprendieron el viaje de regreso a la casa de
Andrea.
Avanzaron algunos metros, todo bien, Sofía iba al lado de Bruno, ella
comentaba algunas palabras sobre lo anterior, discutiendo todo lo necesario y
requerido y cuando alguien compre la casa no haya problemas para cerrar el
trato. Unos instantes después todos iban en silencio, en el camino que seguían
para llegar a la casa de Andrea hay un pequeño tramo que esta muy oscuro, solo
son unos metros pero se hacían eternos porque lo único que se veía eran las
luces que alumbraban el camino. Mirando fijamente por el cristal algo llamo la
atención de Sofía, Bruno disminuyo la velocidad un poco, Sofía pudo ver
claramente a un hombre vestido de negro, la cara no pudo verla pero ella sentía
una mirada fija y muy pesada, como llamo tanto su atención que ese lapso de
tiempo se hizo eterno, aquella presencia empezó a flotar y se dirigió hacia el
carro, voló tan rápidamente que dio una impresión de que se estrello contra el
carro, sus manos las puso en el vidrio y se quedo mirando a Sofía; sus ojos eran
rojos ella de la impresión grito tan fuerte, los demás con miradas de haber tenido
una gran sorpresa, Bruno se asusto del grito que casi pierde el control del
vehículo.
Salieron de ese trayecto oscuro y se detuvo en un lugar para ver que era lo
sucedido. ▬ ¿Qué te pasa Sofía? ¿Por qué gritaste? ▬ ¡A caso no viste ese
demonio que casi se estrello con el carro. La mujer muy aterrada temblaba de una
manera increíble, Andrea y Gloria estaban tan sorprendidas que al solo
escucharla les entro un miedo enorme. Andrea le volvió a preguntar que paso ya
que quería asegurarse de escucharla nuevamente y verificar l que dijo antes, la
respuesta fue la misma, al parecer nadie vio a ese ente solamente ella fue la de
ese momento tan desagradable. Bruno pidió calma y emprendió el camino a casa.
llegando allá ella seguía muy aterrada y las manos le temblaban con mucha
fuerza, no podía controlar sus nervios, se apoyo con Bruno para poder bajar del
vehículo, el con sus brazos la apoyo y la ayudo a entrar a la casa. Atrás de ellos
venían Andrea y Gloria quien ya venia soñolienta, solo era cuestión de llevarla a
la cama y quedaría completamente dormida. Al ver la situación de Sofía Andrea
se encargo de llevarla a la cama para que durmiese además para que no
escuchara lo que su hija tenia que decir con respecto a su mal momento. Gloria
se quedo dormida en una de las habitaciones, inmediatamente Andrea se dirigió a
la sala donde estaban Bruno y Sofía, ella aun en estado de shock, estaba
sudando mucho; Bruno le toco sus manos y las sintió completamente frías. ▬
¿Qué fue lo que paso? ¿Qué viste? Su madre le pregunto, ella también tenia
muchas ganas de saber las cosas, su duda se transformo en una preocupación.
▬ Vi algo que voló en dirección hacia nosotros, fue en esa parte que esta muy
oscura, se acerco mucho a la puerta y le vi malas intenciones, tal vez quería que
chocáramos o algo así ¡no se no se no se! Al borde de las lagrimas, se aferro a
los brazos de Bruno y se quedo con el un largo momento. Todos ya le creyeron, al
parecer todos ya habían vivido sensaciones paranormales y entendieron por lo
que Sofía estaba pasando.
Esa noche tranquila de algún modo, Bruno estuvo al pendiente de ella casi
todas la noche, el no durmió y aun así se marcho temprano hacia sus deberes. En
la mañana ella despertó mas relajada, su madre le preparo un café, en la
habitación se sentaron a platicar de lo acontecido anteriormente, concluyeron que
no se merecían lo que estaban pasando, cosas que para muchos no existen en
este mundo y que no las creen y que a ellos les pase todo lo contrario. Sofía
dedujo que aunque la casa la vendieran eso que los molestaba no los dejarían en
paz.
IV
Pasaron varios días y Alberto todavía no daba buenas noticias, todo se
encontraba mejor, Sofía ya había superado su crisis y el susto que recibió se
marcho. Esperanzados a recibir buenas noticias porque querían vivir como un
matrimonio común, ya no deseaban causarle molestias a Andrea, aunque para
ella ningún problema, al contrario le daba gusto ver a su nieta todos los días.
Todos los día que pasaron y que pasaran sin recibir noticias no les hacia perder la
esperanza de recibir una buena notica.
Alberto se encontraba descansando en su casa, le toco un día de merecido
descanso, tenia muchos asuntos que atender pero esta ocasión se tomo un
descanso, su casa era muy bonita y muy grande, le gustaban los espacios
amplios además de que le gustaba coleccionar diversos objetos era entonces por
ellos que requería espacios grandes. En su descanso se la paso mirando
televisión, le gustaba mirar noticias y enterarse de los nuevos acontecimientos de
cada día, era un hombre muy raro ya que aun no tenia hijos y no se casaba.
Tenía muchos lujos, deseaba disfrutarlos solo por ahora y pensaba que mas
adelante vendría una persona especial con quien compartirlos. Su habitación era
lo mejor de toda la casa, enorme y con detalles caros, una cama matrimonial para
el solo podía dormir y extenderse a todo lo que daba, algunos adornos como
juguetes y lo principal, un enorme espejo que daba al frente de su cama, cerca del
espejo que casi abarcaba una pared estaba su televisión que también era muy
grande, por esa razón el podía verse a si mismo acostado en cama y viendo la
televisión. En uno de esos momentos se le ocurrió ir a su cocina por un bocadillo,
el trayecto hacia su cocina estaba un poco largo, dejo la televisión prendida y se
dirigió a su destino. Antes de eso se le ocurrió pasar al sanitario y lavarse las
manos y tal vez ponerse agua en la cara porque el día había sido caluroso. Todo
normal, fue a su cocina y tomo lo que deseaba, regreso a su habitación y para su
sorpresa la televisión estaba apagada, su mirada desconcertada no se hizo
esperar, puso sus bocadillos y su soda en la cama y la prendió nuevamente. Se
acostó y se dispuso a mirar nuevamente la televisión, miraba algún programa que
hablaba de las cosas de superación personal, muy raro en el pero como no
encontró nada entretenido quería escuchar algunas estupideces. Mirando
fijamente el programa algo desvió su mirada hacia el enorme espejo.
Alguna persona postrada en el espejo, aparentaba estar a un lado de su
cama y por ese motivo miro en ese punto pero no se encontraba nadie solamente
el espejo lo reflejaba. El susto era enorme que la soda que tenia en la mano se le
rego por toda la cama y sus bocadillos cayeron al piso. La tención creció y la
presencia tanto como el se quedaban mirando fijamente. Por increíbles esfuerzos
se puso de pie sin dejar de mirarle, se acerco un poco al espejo, la persona
reflejada hacia lo mismo casi parecían ir al mismo paso, tenia la mirada un poco
abajo y Alberto no podía distinguir bien su rostro. Esa presencia poco a poco iba
levantando la cara, Alberto daba un paso cada dos minutos, el miedo lo hacia
quedarse paralizado y las ganas de desmayarse o gritar afortunadamente se la
aguanto y se le fueron. Quedaron frente a frente y La distancia entre los dos era
de un metro, su mirada de Alberto quedo mas atónita porque finalmente reconoció
a ese ser; flexiono las rodillas un poco pero pudo mantenerse en pie, no se dejo
vencer por el miedo. Al parecer se trataba del mismo ser que acosaba a Sofía,
Alberto lo pudo ver y lo único que digo fue “Tu estas muerto” solamente esas
palabras salieron de su boca quería decir mas pero todo su cuerpo se paralizo, el
ser lo miro fijamente y le mostro una sonrisa tenebrosa, nada mas se reía sin
hacer o decir nada, un corto tiempo paso y se sintió un viento en la habitación, el
ser desapareció y justo en ese preciso momento de su desaparición el viento
creció y se hizo mas fuerte a tal grado de que el espejo se rompió de una parte y
pequeños trozo empezaron a volar. Tanta fue la fuerza que algunos pedazos
alcanzaron a Alberto quien inmediatamente se cubrió para evitar que le hiciesen
algún daño. Sus nervios en punta ya lo estaban derribando, cuando miro hacia el
espejo, ya nadie estaban, la presencia desapareció. Todo esto lo tomo como una
pesadilla y un mal momento, se puso sus zapatos y salió de casa, pensó que para
recuperarse era mejor salir de casa que quedarse ahí.
Tomo su automóvil y fue a un lugar despejado, un lugar amplio y con mucha
vegetación, para respirar aire puro y despejar su mente un poco por lo acontecido.
Detuvo su auto móvil en el lugar que el sintió el indicado y se puso a pensar en
ello, todo ese momento de miedo lo quiso dejar en una alucinación, o su
imaginación le jugo una broma de muy mal gusto. Varios minutos pasaron y se
tranquilizo completamente, el color de su piel lo recupero debido a la palidez que
tenía, sus nervios se calmaron, encendió un cigarrillo. Suspiraba porque se sentía
aliviado sin embargo, algo le vino a su mente y fue las pláticas que tuvo
anteriormente con Bruno y Sofía, entonces pensó en otro punto importante que le
hizo tener una lógica; debido a lo que escucho le vino todo eso, su mente estaba
pensando en eso y le hizo una especie de escenificación que el no deseaba pero
que se tuvo que llevar a cabo por lo poderoso de la mente.
Lo peor le vino cuando noto que lo que vio era alguien conocido pero que
según el ya estaba muerto, entonces todo se convirtió en una gran incógnita, las
platicas que entablo con Sofía y Bruno fueron sobre ese tipo de cosas y es
cuando todo tenia un poco de credibilidad, nada de eso le había pasado, entonces
ya empezó a darles un poco de razón. El creía que eran locuras pero ya no mas,
recordaba paso a paso de todo lo que platico con ellos y sentía una gran culpa
por no creerles, decidió que era el momento de pedirles disculpas.
Alberto quería pedir disculpas a como diera lugar, se sentía fatal por sus
acciones, tenia que investigar que era lo que Sofía veía; sentía miedo por que
fuese la misma entidad que el había visto en el espejo y si es así entonces para el
todo tendría sentido.
Tercera parte
El inicio
I
Exitoso el hombre que decidió enfocar su vida a la construcción de hogares
y ayudar a las familias dándoles muchas facilidades de pagos, empezó con
algunas cuantas y por cierto muy bien terminadas, decoradas y de excelente
calidad. Empezando con el pie derecho llegaron las primeras personas a comprar
dichas viviendas, era entonces cuando se disponían a hacer más. Debido al éxito
compraba grandes áreas libres para llevar acabo mas construcciones; su nombre
Carlos, Don Carlos un hombre de edad madura tenia un hijo llamado Alberto
quien se encontraba estudiando aun, su madre de Alberto murió hace algunos
años debido a una enfermedad incurable. Ese acontecimiento impacto a Alberto y
su padre pero supieron como superarlo y seguir adelante.
Alberto termino sus estudios y su padre hizo una gran fortuna con las
construcción de casas, ya tenia varias vendidas, continuaba haciendo más y
Alberto intervino para heredar el esfuerzo de su padre y darle continuidad, ese
momento cuando decidió continuar con ese gran negocio y dejo atrás lo
aprendido de los estudios y decidió dar su vida a ello.
Un día de esos de mucha actividad, aparecieron unos clientes dispuestos a
adquirir una casa, lo localizaron y llegaron a un trato, la casa era bonita y
pequeña, ya que la familia que la quería comprar constaba solamente de la pareja
y un niño de siete años, el niño era muy callado al igual que la esposa y el que
siempre se la pasaba hablando y poniendo reglas era el hombre. En el momento
en que contactaron a Alberto para hacer un trato y que el les ofreciese una casa
disponible, el se la paso hablando y la esposa solo decía si a todo lo que el decía
pero sin pronunciar una sola palabra, Alberto sospecho que era un hombre
posesivo y se sentía demasiado hombre para tomar solo las decisiones aunque
sentía que el también tenia cola que le pisen y eso que el no tenia novia aun.
Después de sus observaciones y sus planteamientos opto por darles una
gran oportunidad para venderles una casa, una que se acoplara a sus
necesidades y que el espacio sea el adecuado ya que eran una familia pequeña.
Todo resulto muy bien, el plan a lo acordado fue excelente, la familia empezó a
habitar su casa nueva, era una zona muy bonita con algunos parques cerca, las
calles tranquilas, la vegetación adornaba el bonito lugar. La última vez que Alberto
vio a la familia la esposa tenia como moretones en el cuello, parecía como si
alguien la hubiese querido estrangular. Cada vez más Alberto llegaba a la
conclusión de que su marido la maltrataba muy mal. Por otra parte el niño o el hijo
de la pareja mostraba una tranquilidad enorme, no mostraba una sonrisa y no
tenía deseos de jugar, pareciese como si no tuviera ningún amigo. La curiosidad
de Alberto era muy grande y decidió llegar hasta lo último de la situación.
II
La familia empezó a habitar la casa, Alberto decidió ayudar a la familia en
cuanto a la mudanza, eran pocas sus pertenencias, a simple vista aparentaban
ser una familia humilde. No se sabía cual era el oficio que desempeñaba ese
hombre; la esposa y su pequeño hijo permanecían en casa. todo un misterio era
esa familia, el padre de Alberto ya se sentía muy cansado para continuar y decidió
que definitivamente le encargaría todo a su único hijo, son embargo, cada que se
presentase la oportunidad le daba algunos consejos para que hiciese bien las
cosas; con frecuencia Alberto le contaba a su padre de la familia misteriosa, le
contaba de sus sospechas y suposiciones, el escuchaba atento a todo pero el
consejo que el determino darle era que los asuntos íntimos y personales de cada
familia no le corresponden a el. Cada familia tiene una privacidad y una manera
de vivir que cualquier persona ajena no puede intervenir.
Solo lo tomaba como una curiosidad ya que su padre tenia mucha razón
pero a pesar de ello el lo único que quería era saber que pasaba y nada mas.
Como era un hombre muy listo tenia que buscar estrategias para que la familia en
especial el hombre no se diese cuenta. Pasaron algunos días y todo aparentaba
estar tranquilo, sin embargo cuando Alberto pasaba de vez en cuando por la casa
y echaba un vistazo y en una de esas ocasiones vio salir a la mujer a comprar
algunas cosas, la observo cuidadosamente y noto que tenia un golpe en la cara,
ella lo quiso tapar con una gorra en pero Alberto pudo darse cuanta de ello.
Inmediatamente se marcho para que la chica no se diese cuenta de su presencia.
Mientras manejaba iba pensando que su marido era un golpeador violento o era
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR
REPETICIÓN DE HORROR

More Related Content

Similar to REPETICIÓN DE HORROR

RESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHO
RESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHORESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHO
RESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHONelly Piedra
 
Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas
Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas
Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas Doris Reyes
 
Reporte de lectura de la obra el no.
Reporte de lectura de la obra el no.Reporte de lectura de la obra el no.
Reporte de lectura de la obra el no.Maria Jaramillo
 
Cuentos de Familia I
Cuentos de Familia ICuentos de Familia I
Cuentos de Familia IEuwith Romero
 
442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.
442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.
442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.Maria Jaramillo
 
La Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika Ángel
La Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika ÁngelLa Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika Ángel
La Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika ÁngelErika Angel
 
442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.
442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.
442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.Maria Jaramillo
 
Padre 01
Padre 01Padre 01
Padre 01seov
 
Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...
Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...
Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...Fernando Edmundo Sobenes Buitrón
 
PINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptx
PINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptxPINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptx
PINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptxPaty Michel
 

Similar to REPETICIÓN DE HORROR (20)

RESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHO
RESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHORESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHO
RESUMEN DE OBRA "ONCE MINUTOS" DE PAULO COELHO
 
Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas
Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas
Revista Informática El Niño con el Pijama de Rayas
 
Reporte lite
Reporte liteReporte lite
Reporte lite
 
Reporte lite
Reporte liteReporte lite
Reporte lite
 
Kilima 92 - Marzo 2012
Kilima 92 - Marzo 2012Kilima 92 - Marzo 2012
Kilima 92 - Marzo 2012
 
Reporte de lectura de la obra el no.
Reporte de lectura de la obra el no.Reporte de lectura de la obra el no.
Reporte de lectura de la obra el no.
 
Cuentos de Familia I
Cuentos de Familia ICuentos de Familia I
Cuentos de Familia I
 
442 jaramillo martínez
442 jaramillo martínez442 jaramillo martínez
442 jaramillo martínez
 
442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.
442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.
442 Jaramillo Martínez Ma. de los ángeles.
 
La Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika Ángel
La Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika ÁngelLa Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika Ángel
La Mujer del Vampiro (Cap. 1) - Érika Ángel
 
442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.
442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.
442 jaramillo martínez ma. de los ángeles.
 
Donde estan mis valores (1)
Donde estan mis valores (1)Donde estan mis valores (1)
Donde estan mis valores (1)
 
Proyecto expresion-oral
Proyecto expresion-oralProyecto expresion-oral
Proyecto expresion-oral
 
Padre 01
Padre 01Padre 01
Padre 01
 
Pedrito
PedritoPedrito
Pedrito
 
Kilima 123 - Agosto 2019
Kilima 123 - Agosto 2019Kilima 123 - Agosto 2019
Kilima 123 - Agosto 2019
 
Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...
Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...
Capítulo II de la novela: "El Visitante Maligno II" de Fernando Edmundo Soben...
 
PINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptx
PINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptxPINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptx
PINGÜI SE CAMBIA DE CASA.pptx
 
Bloque 2 Variantes de un cuento
Bloque 2 Variantes de un cuentoBloque 2 Variantes de un cuento
Bloque 2 Variantes de un cuento
 
Polos opuestos
Polos opuestosPolos opuestos
Polos opuestos
 

REPETICIÓN DE HORROR

  • 1. REPETICION DE HORROR UNA NOVELA POR FERNANDO LUTLA Primera parte I Un día normal; los días son normales no hay nada de extraño en ello, para muchos son días malos para otros son buenos, cada quien los determina de acuerdo a su estado de ánimo y el lugar donde se encuentran. Tal vez cada quien se los haga malos por su actitud y su mala vibra. Cualquier momento que fuese resulto bueno para Bruno, debido a sus años de trabajo, paciencia y estricta dedicación el recibió un ascenso. Él era especialista en el arreglo de carros, se las sabía al derecho y al revés. Desde pequeño había mostrado un interés y una pasión enorme por tal oficio y debido a ello recibió una gran recompensa. Mucho tiempo sufrió de cansancio, horas largas y agotadoras, las cuales le terminaban sus energías y solo con llegar a casa buscaba su cama para dormirse. Ahora que se ha ganado la confianza de sus superiores su jornada de trabajo se reduciría bastante, su ascenso fue como un premio mayor ya que le sobraría tiempo para compartir con su esposa e hija, con el cual antes no contaba. Debido a esto y para completar su satisfacción su sueldo también aumento, no tanto como él lo deseaba pero si de manera que le hiciera guardar un extra para necesidades que se presenten en un futuro. La noticia la preparo muy bien
  • 2. para dársela a Sofía, su esposa, una mujer muy guapa que cayó en un profundo amor con Bruno; su historia de amor es muy romántica, se conocieron en el lugar menos esperado, su amor casi fue de primera vista, se empezaron a conocer más y en un santiamén determinaron que eran el uno para el otro. De dicho amor vino una hermosa niña de nombre Gloria, cuando Bruno supo que Sofía estaba embarazada brincó de alegría y no paro hasta cansarse, con ganas de ser padre espero su llegada muy alegre. Sofía no se quedó atrás y a pesar de la carga que llevaría en el proceso de formar un hijo no le importo y resistió hasta que dio a luz. El día de la noticia sobre su ascenso llego, Bruno preparo muy bien las palabras y cuando Sofía lo supo brinco de alegría, le emociono saber que conviviría un poco más con su adorado esposo. El tiempo ahora rendiría para convivir con su pequeña hija además que ella lo adoraba. Por increíble que parezca la primera palabra que Gloria dijo fue “papá” y además era una niña muy lista aprendió muchas palabras en muy poco tiempo. Mucho tiempo había pasado y la pareja había ahorrado dinero, lo hacían con grandes sacrificios, además de resistir grandes antojos y grandes ganas de comprarse otras cosas; el motivo de eso era para comprar una casa, conseguir una casa propia era el sueño de ambos. Vivian en una casa rentada, la dueña era una mujer amargada, era viuda y nunca tuvo hijos, tres casas le fueron heredadas y eso era todo lo que tenía, su sustento era el pago de renta de sus inquilinos. Se podía decir que era una mujer antisocial y peleada con la vida, llena de quejas y que nada le parece, pero la gente así como sus inquilinos la aguantaban por mera necesidad.
  • 3. Lo que más deseaban era poder comprar una casa, una casa en donde hiciesen lo que quieran y sin dar explicaciones; desde que se casaron habían ahorrado dinero, eran muy especiales con los gastos y guardaban un poco para cualquier emergencia. El nuevo sueldo de Bruno les proporcionaría un poco más y así las posibilidades de comprarse una casa aumentaron un poco. Esa noche todo fue tan maravilloso porque una noticia llego y fue el motivo para que ellos hicieran el amor como dos adolescentes, sus cuerpos compartieron sudor y ello trajo una satisfacción para ambos, sus bocas se juntaban y entre ellas se deseaban más y más. Las manos de ambos recorrían cada parte de sus seres, exploraban zonas en donde el placer era la principal reacción. Bruno se presentó a su nueva jornada, ahora las cosas tomarían un curso diferente, el daría algunas instrucciones a empleados de menos antigüedad que él, el administra ahora las finanzas y debido a su enorme experiencia el resolvería los trabajos difíciles en caso de presentarse la necesidad. Aprendió nuevas cosas y su experiencia crecería más y más; es posible decir que desmesuradamente. Sofía por su parte casi no trabajaba porque se tenía que hacer cargo de la niña, su trabajo era más alivianado, le gustaba comprar telas y hacer vestidos para después venderlos; ese oficio le dejaba muy buenas ganancias, sin embargo, había ocasiones en que el trabajo estaba escaso, lo bueno de ello era que ella era su propio jefe. El tiempo se le iba más rápido cuando cuidaba a su hija. Sofía tenía a su madre una mujer de sesenta años aproximadamente a la cual adoraba mucho, su nombre era Andrea, ella amaba demasiado a su pequeña nieta, cuando la visitaba se la pasaba horas conviviendo con ella. Como Andrea vivía sola no
  • 4. tenía por quien preocuparse o esperar a que alguien llegue, su marido hacia un buen de tiempo que había fallecido, las dejo con algunos ahorros y que no quedaran desamparadas; como Sofía era hija única todo la atención fue para ella, cuando se enteró de que sería abuela la hicieron muy feliz. Andrea tenía su casa pero Bruno no quiso vivir con ella, deseaba ver sus esfuerzos crecer y conseguirse un lugar propio para él y su familia. Andrea estuvo de acuerdo aunque insistió muchas veces en que vivieran con ella porque sentía una terrible soledad y por esa razón varios días de la semana visitaba a su hija y nieta. Era toda una abuela feliz cuando jugaba con Gloria las dos parecían una niñas; reían y gritaban, sus ratos de diversión eran inolvidables. II Había pasado algún tiempo, ellos ya se encontraban listos para pagar una parte de la casa, les llamo la atención una que ya habían visto. Varias ocasiones visitaron aquel lugar donde estaba localizada, era un lugar alejado del ruidoso tráfico y las multitudes, un lugar en su mayoría rodeado de vegetación y pequeños parques. La zona era de lo más agradable para cualquier persona que se parase ahí. El dinero estaba listo y la joven pareja se dispuso a dar ese enorme paso, lo desearon de corazón y se les concedió. Esos años que llevaban juntos rindieron frutos porque ya existía el dinero suficiente para comprarla además de la perseverancia y las ganas de hacerlo. En un momento libre fueron a ver a la persona encargada de las ventas para llegar a un acuerdo así como ver el interior de la casa para determinar si definitivamente les convencería o no. Tomaron su automóvil yendo a la aventura. El tiempo recorrido fue muy poco llegaron y se
  • 5. estacionaron en el frente de la casa; al parecer el encargado o la persona que estaría a cargo de la venta aun no llegaba. Aproximadamente veinte minutos pasaron y se veía venir un carro un poco lujoso de color negro, también este automóvil se estacionó junto al carro de Bruno. Abrió la puerta la persona que venía y era un hombre alto, moreno y su vestimenta era elegante además de traer un portafolio en la mano. -¡Hola! ¿Cómo están? Mi nombre es Alberto yo soy el dueño el encargado de las ventas. A la joven pareja les dio buena vibra el hombre ya que se inspiraba confianza a simple vista, lo analizaron cuidadosamente y ambos llegaron a la conclusión de no tener ninguna inconveniencia y entonces le dieron la total confianza. - ¡Muy bien gracias! Pues nosotros somos los que estamos interesados en esta casa y queríamos ver la posibilidad de comprarla. ¿Fue usted la persona con la que hablamos por teléfono? Contesto Bruno. - ¡Si señor! Yo les atendí y por eso estoy aquí. Alberto daba confianza hasta en su manera de contestar. Alberto saco las llaves de la casa y todos entraron; la casa era de dos pisos, estaba acorde al tamaño de la familia, al entrar lo primero que sintieron fue un ambiente muy fresco. En la planta baja se encontraba la sala, la cocina y un comedor pequeño pero confortable. Esa parte fue inspeccionada, Alberto les explicaba que la casa no tenía mucho tiempo de haber sido terminada, ellos eran la segunda familia en interesarse porque ya tenia compradores sin embargo, se
  • 6. arrepintieron y lógicamente la venta no se llevo acabo. La parte de arriba tenia dos recamaras y el baño, “la casa nos queda como anillo al dedo” Exclamo Bruno, eso significa que una habitación para Sofía y el y la otra para Gloria. Después de platicar con Alberto durante un largo rato sobre los acuerdos, beneficios e instalaciones se convencieron y tomaron la casa. Todo estaba muy cómodo, además de la sala que se veía la parte más a disfrutar porque tenía una enorme ventana y la luz entraba muy bien. Los comentarios finales de Alberto fueron sobre las buenas condiciones en que se encontraba, la casa no tenia ninguna defecto; sus instalaciones eran de primera. Alberto no les dijo la realidad que aconteció en esa casa, estaba seguro de lo que sus ojos por última vez vieron y determino que ningún problema se presentaría mas adelante, además de no querer causarles temor a sus nuevos clientes. La venta se llevo acabo, todos los papeleos estaban en regla y ningún detalle mínimo les impediría ser los nuevos dueños. Pasaron dos semanas hasta el día de la mudanza, era un domingo caluroso y a la vez refrescante, estaban felices con su nuevo hogar. Andrea fue con ellos para celebrar, la mudanza estaba a cargo de tres hombres fortachones que no tardaron mucho en descargar, se les veía una experiencia desmesúrale en su oficio. Las cosas quedaron ubicadas en el lugar correspondiente solamente faltaba acomodarlas. Aquellos jóvenes recibieron una buena propina y se retiraron, para celebrar Sofía y Andrea prepararon una comida, para rematar que era domingo y celebrarlo con la nueva vivienda.
  • 7. La zona estaba muy tranquila, el silencio predominaba mutuamente, se podía adivinar que esa zona estaba por más construcción, es decir, en un tiempo no muy lejano las partes que se veía solo campo se transformarían en nuevas viviendas, el nombre del lugar nadie lo quisiera recordar, se observaban hermosos panoramas, cerca de su casa estaban dos pequeños parques que eran para la diversión de los pequeños, con los juegos clásicos (columpios, resbaladillas, sube y baja entra algunos otros) cerca de su casa había otras cuatro, tenían casi las mismas terminaciones y desde afuera era notorio que el numero de habitaciones era igual. Bruno se extraño de la tranquilidad porque a pesar de los parques no había ningún niño jugando ya sea solo o con sus papas, cabe mencionar que más lejos se observaban más casas y un punto importante y creíble era que la flojera de los padres por no traer a sus hijos al parque. III Su nueva casa estaba en completo orden, todas sus respectivas pertenecías fueron acomodadas muy bien y agregarle una buena limpieza fue lo que resalto un orden muy eficaz. En la parte de abajo entraba muy bien la luz pero arriba solamente muy poca debido a las pequeñas ventanas que cada habitación tenia, la ventana del baño era la mas pequeña de todas para rematar las paredes estaban pintadas de azul oscuro y obviamente dicho color oscurecía mas. La noche se veía más aterradora, en la parte de afuera solo una lámpara alumbraba su calle, mas allá la oscuridad era notoria.
  • 8. Empezó una nueva semana, debía ser buena porque se estreno la nueva casa, en su primera noche abundo paz y felicidad; Gloria disfruto su nueva habitación, sus padres le acomodaron sus juguetes favoritos donde ella mas le pareció, colocaron en la pared posters de algunos personajes de caricatura que ella adoraba. La primera semana marcho todo bien, los servicios de la casa fueron utilizados y no hubo nada de quejas y/o percances. El trabajo de Bruno marchaba muy bien, entraba a trabajar a las nueve de la mañana y aproximadamente a las cuatro de la tarde ya estaba en su casa, ya no era como antes que hasta las diez u once de la noche venia poniendo un pie en casa. Gloria era una niña y ya casi cumplía tres años y por lo tanto era muy inquieta, vigilarla era lo que más absorbía tiempo porque su espíritu de exploración crecía más y más, Sofía estaba atrás de ella constantemente. En la casa donde rentaban no había escaleras, las piezas que rentaban eran de un solo piso y no existía ningún problema, en esta ocasión las cosas ya cambiaron porque quería subir y bajar a cada momento. Una costumbre que tenia algún tiempo era que Gloria se despertaba a las diez de la mañana, Sofía lo hacia a las nueve y ya sabia a que hora la niña empezaba a llorar o a reírse sola, sabia que era la hora de darle un desayuno o cambiarla si es que se hizo del baño. Ella terminaba atender a Bruno para poder irse y se quedaba el resto del día a disfrutarlo con su linda bebe. En un momento aprovechable y con ganas de salir, las dos mujeres salieron a dar una visita a los parques, tenían ganas de estirar un rato los músculos y que Gloria se distraiga unos instantes. Fue muy extraño porque el lugar estaba solitario, los columpios se podían mover ligeramente por la fuerza del
  • 9. viento. Circunstancias por las que los parques estaban en completa soledad podrían ser muchas y ninguna de las que pensaba Sofía podría ser cierta o tal vez lograr adivinar una, eso no fue pretexto y salieron de casa a explorar. Sofía se sentó en uno de los columpios y a su lado sentó a Gloria, eran solo tres columpios, mientras ella se medio mecía, ayudaba a su hija para deslizarla cuidadosamente porque si pusiera fuerza se caería. Es una niña muy lista porque cuando empezaba el columpio a hacer su movimiento ella reía de felicidad, no lloraba como comúnmente lo haría la mayoría de los niños de su misma edad. Una mañana calurosa mezclada con un poco de frescura, la tranquilidad de su nuevo rumbo era muy permanente, no se mostraba alguna señal de escándalo, loa arboles hablaban porque se escuchaban susurros, algunos pájaros entonando melodías. Gloria estaba contenta, el columpio la hacia reír tanto que no paraba y su madre se reía con ella. Una curiosidad empezó a notarse en los ojos de Sofía, ya que mientras escuchaba reír a su hija, ella vio algo que llamo su atención, era algo que podía decirse inesperado o tal vez un milagro. Un niño de seis o siete años, la edad era lo menos importante, se dirigía hacia ellas tal vez para jugar con Gloria o tal vez no. Faltaban pocos metros para que llegara con ella, sin embargo, por alguna razón desconocida se detuvo, lo sorprendente era que aun no le veía la cara, el niño siempre se mantenía con la cabeza un poco agachada. Sofía era de las personas que tenían muy buena vista pero no lograba ver su rostro. Lo único que noto fueron las prendas que usaba parecía que por muchos días no se había cambiado, se notaba muy sucio e incluso sus pantalones parecían desgarrados,
  • 10. manchas en su piel principalmente en las de sus pequeños brazos. Por un instante ella cambio su mirada hacia gloria para preguntarle si vio al niño y para su sorpresa la respuesta de la niña fue negativa, se preguntaba como era posible si estaba muy cerca de ellas. Su cabeza dio muchas vueltas porque no era creíble que solo ella lo viera. Al regresar la mirada hacia el niño la sorpresa que se llevo fue aun mayor porque ya no estaba, sus ojos se hicieron tan grandes de la impresión, era algo imposible que ya no estuviera, Sofía no cambio la mirada mas que por unos veinte segundos. Era un hecho increíble porque el infante en tampoco tiempo se escondió y lo más sorprendente aun era que no tenia en donde ocultarse, el lugar era tan amplio que le era imposible y en todo caso que lo hubiese intentado Sofía se hubiera dado cuenta. ▬ ¿No viste a ese niño Gloria? Ella pregunto con un tono asustadizo ▬ ¡No mami ¿Cuál niño? Esa respuesta la asusto mas porque del haberlo visto si le hubiese preguntado. Gloria seguía columpiándose y riendo, Sofía se volvió a sentar en el columpio de a lado con la mirada agachada y la duda en su mente estaba creciendo. Pasaron unos cuantos minutos se retiraron del lugar a casa. En la tarde Bruno llego a casa, tenia mucha hambre, la jornada laboral había sido exhaustiva, Sofía ya tenia lista una rica comida, Bruno se sentó a comer con unas ganas de devorar, su apetito era voraz. Sofía se sentó con el para acompañarlo mientras platicaban. La platica empezó con la aventura que ella tuvo en el parque, mientras el comía el la escuchaba con gran atención Sofía no se le escapaba ningún detalle
  • 11. al momento de relatar. Bruno termino de comer y empezó a comentar lo que el pensaba: ▬Si viste a un niño tal vez era el hijo de un vecino, lo que no me explico es como se escondió. Tal vez era muy rápido. Esas respuestas no fueron creíbles para Sofía. ▬No tuvo lugar donde esconderse, si lo hubiera intentado me habría dado cuenta, solo le quite la mirada por unos segundos. Le molesto que no le creyera. Después de que el escucho hasta el mas mínimo detalle, la única respuesta que pudo darle fue sobre su imaginación, la imaginación muchas ocasiones nos juega grandes trucos. La conclusión de Bruno solo fue eso una visión inesperada, solo eso no habría otra explicación además el no era muy creyente de esos hechos paranormales y por el contrario Sofía concluyo que se trato de un pequeño fantasma, un alma en pena en busca de ayuda. IV Noches pasaron tranquilamente, una nueva rutina se empezaba a forjar, una familia crecía en felicidad. Andrea solía visitar a su hija y acompañarla un momento además de que amaba desmesuradamente a su nieta. Cuando terminaba sus labores de hogar las tres empezaban a hacer cosas juntas y se reían a lo grande. La pequeña niña ya estaba por cumplir tres años y era momento
  • 12. de que se fuera a la escuela, su educación estaba por comenzar, su vida de aprender nuevas cosas estaba a la vuelta de la esquina. Sus padres buscaron una escuela sin embargo, no existía ninguna, solo una estaba adecuada a sus necesidades pero no estaba nada cerca, la manera de llevarla era en carro. Todo ese asunto se resolvió y se quedo en la escuela que habían acordado, la organización fue simple porque Bruno la dejaría en la escuela y el después emprendería a su trabajo, el horario de ella era cómodo, en la salida Sofía tenia que recogerla aunque tendría que una larga caminata y no lo vio como un problema porque aprovecharía esa caminata para hacer ejercicio. Ya habían pasado dos meses desde que se mudaron a esa casa, todo era magnifico, hacían en su casa lo que ellos deseaban y no recibían quejas o prohibiciones. La costumbre mas bonita que tenían era dormir a su pequeña hija y esperarla hasta que cerrara los ojos, después ellos se iban a dormir a su cama; la habitación de gloria fue adornada y les quedo muy bien, después de que ella se dormía cerraban la puerta con cuidado para no despertarla y finalmente ellos se dirigían a la suya y dormían también como bebes. En una inesperada ocasión Gloria se durmió como siempre lo hacia posteriormente sus padres se retiraron adormir, en la madrugada algo los despertó, Gloria lloraba y gritaba con gran fuerza, ellos se levantaron apresuradamente de su cama salieron de su habitación y fueron a la de Gloria encendieron la luz, estaba en su enorme cuna y estaba de pie queriendo salir pero
  • 13. no podía, sus padres la tomaron y la abrazaron fuerte para que se calmase. Pasaron varios minutos hasta que se tranquilizo completamente. ▬¿Qué paso mi amor? ¿Por qué lloras? Sofía pregunto apresuradamente. ▬ Un niño, un niño, un niño me estaba viendo. Un niño me estaba viendo. Cuando escucharon esas respuestas se quedaron atónitos, ambos se echaron miradas con los ojos abiertos a todo su esplendor. Por una parte era imposible y otra la imaginación de los niños en inmensa. Otras palabras que también le impactaron en especial a Sofía era que el niño estaba muy sucio, tenía su ropa “rompida”. En ese instante la mente de aquella mujer se volvió un laberinto, dichas palabras de descripción coincidían con las del niño que ella vio en el parque. El niño aparentaba estar sucio y su prendas lucían desgarradas, eso si fue de mucha coincidencia. Esa noche Gloria durmió con sus padres. A la mañana siguiente Gloria volvió a mencionar que el niño la estaba mirando tan fijamente; poco a poco se iba acercando a su cuna y cuando estaba justo en frente de ella empezó a llorar y gritar. Como Bruno era una persona muy escéptica solo califico este hecho como una pesadilla, normalmente los niños tienen muchas pesadillas y estás son atribuidas a su imaginación o a lo que diariamente ven.
  • 14. V Sofía no dejaba de pensar en aquella descripción, además de ser una persona que se sugestionaba muy rápido y le gusta llegar al fondo de las cosas. Días después Sofía comento con su madre esta situación y después de platicar un largo rato sobre ello la conclusión de su madre fue casi la misma a la de Bruno, no deberían temer y solamente hay que catalogarlo como pesadillas y la imaginación de los niños es inmensa. Gloria estaba muy asustada por algunos días durmió con sus padres porque el miedo de quedarse sola en su cuarto aun le invadía. No fue mucho el tiempo que pasó de este acontecimiento, un día Andrea salió a comprar algunas cosas para la comida y llevo consigo a Gloria, mientras Sofía se quedo en casa haciendo otros pendientes. Después de estar en la cocina por un rato se dirigió al baño a lavarse las manos porque había agarrado algo que le pudiese irritar los ojos, con un descuido y olvidando lo que hubiese hecho podía tocárselos y le arderían mucho. Se lavo las manos cuidadosamente con jabón y mucha agua, se enjuago y se seco con una pequeña toalla que estaba a un costado del lavamanos; su baño era muy pequeño estirándose muy bien se podía tocar de pared a pared era casi cuadrado. Como era un día algo caluroso se mojo un poco la cara y con la misma toalla se seco, ahí tenían un pequeño espejo colgado que
  • 15. servía para admirarse uno mismo. Siempre que nos echamos agua en la cara y nos secamos cerramos los ojos, con ella paso lo mismo. Abrió los ojos ya para finalmente verse en dicho espejo y la sorpresa que se llevo fue mayor, atrás de ella yacía un hombre parado; su aspecto era aterrador, tenía los ojos rojos y esos ojos mostraban un odio enorme y la expresión de su boca lo confirmaba completamente. Su vestimenta se aparentaba muy sucia. El tiempo que Sofía lo vio fue de instantes, al ver dicha sorpresa grito tan fuerte, se cubrió el rostro con ambas manos permaneció así unos instantes, se dio valor y volteo hacia atrás, milagrosamente ya nadie estaba, salió corriendo del baño dirigiéndose a la sala y allí se puso a llorar desmesuradamente. Llego Andrea y lo primero que vio fue a su hija en un llanto terrible, las palabras se describieron solas es decir que le afirmo que estaba actuando como si hubiese visto un fantasma, además de que su cara se veía muy pálida. Al ver a su madre, le dio abrazo tan fuerte que falto poco para que la lastimara, mientras el abrazo se estaba llevando acabo sus ganas de llorar crecieron. Se levanto del sillón y fue a dejar a la niña al cuarto de sus padres, ella regreso para que le contase que paso. ▬ ¿Qué ha pasado? ¿Por qué lloras? ▬ Si te lo digo nunca me creerías. - ¡Dime que paso porque me estas asustando, date cuenta que también puedes asustar a tu hija y que no te vea llorando.
  • 16. Era muy cierto lo de la niña, ella no debía ser asustada mas de lo que ya le sucedió, no seria bueno y menos para su edad, Sofía se tranquilizo un poco, su madre le preparo un te para que se calmara. ▬ ¿Dime que ha pasado? Pregunto Andrea un poco alterada e invadida por la curiosidad. ▬ Mientras me encontraba preparando algunas cosas para comer, me fui a lavar las manos al baño, me eche un poco de agua en la cara y al secarme con la toalla me vi en el espejo y alguien estaba atrás de mi, era un hombre con una mirada diabólica, se veía muy furioso, se le veían ganas de hacerme algo. Al escuchar esas palabras Andrea quedo en shock todo le dio vueltas en su cabeza, no sabia si creer o decir que todo era producto de la imaginación o tal vez que su hija haya perdido el juicio. ▬ ¿Viste un hombre? Eso no puede ser, tu estabas sola no hay nadie aquí en tu casa, nadie puede entrar, solo hay una puerta si alguien quisiera entrar te hubieras dado cuenta. Esa respuesta no fue del agrado de Sofía puesto que la miraba feo en razón por no creerle y tratarla como una loca. No era mas de esperarse puesto que en realidad cuando alguien escucha a otra persona sobre la aparición de algún fantasma no se le cree si no hasta que experimenta en carne propia. ▬ No se que haya sido pero por favor no me trates como una loca. Sofía respondió en un tono furioso.
  • 17. Se calmo completamente y todo esa platica que tuvieron quedo inconclusa porque la niña quería ver a su mama y quería ver la televisión, desde la habitación les estaba gritando, quedo pospuesta esa platica. Las mujeres terminaron de hacer la comida y uno que otro quehacer en la casa. Ese día Bruno regreso muy tarde a casa por otras obligaciones pendientes, esa misma noche la preocupación de Andrea por su hija no se le olvidaba, y mejor se quedo a dormir en la habitación con Gloria. Durante la noche cuando llego Bruno el tema fue el mismo, comentaron la situación y la atención de el fue llamada ya que no le dio tanta importancia al caso de Gloria por ser una niña pero al escuchar ese acontecimiento que le paso a su esposa si era de pensar, también debido al tiempo que llevaba con ella y nunca le mentiría y no tenia razones de hacerlo. VI Creían que estos acontecimientos que sucedieron tanto a Gloria como a Sofía eran producto de su imaginación, Sofía reflexiono sobre ello y determino esa decisión. Las cosas regresaban a la tranquilidad porque los dos sustos pasaron casi al mismo tiempo y obviamente la presión se les vino encima pero ya todo se tranquilizo aparentemente. Luego de unos días se empezaron a escuchar ruidos en la casa, la noche era el momento más popular para que sucedieran estas acciones, en esta ocasión los ruidos los despertaban porque a veces se oían muy fuertes; en la cocina se escuchaba como si quebraran platos o algunas ollas
  • 18. cayeran bruscamente, Bruno se despertaba y investigaba y al llegar a donde supuestamente se origino el ruido no había absolutamente nada y todo estaba en orden, Sofía era de las personas muy ordenadas, cosas que utilizaba cosas que lavaba y ponía en su lugar. El regresaba a la cama muy sorprendido y ella le preguntaba la situación la mas sorprendida era ella porque al decirle que no paso nada se espantaba mucho mas. Gloria seguía durmiendo con sus padres, su miedo no desaparecía y lloraba por cualquier cosa. A pesar de todo lo que había acontecido en los últimos días Bruno se mantenía como una persona escéptica y sabia que para todo existe una explicación, no hay nada de anormal en este mundo todo tiene un porque y una razón coherente. Ella como una mujer que le gusta llegar al fondo de las cosas, deseaba saber que era lo que realmente pasaba en esa casa pero su intención no era alarmar a su familia o que pensaran que era una loca obsesiva, cada momento que pasaba su curiosidad parecía un hijo más porque le daba la debida importancia. En las noches Bruno y gloria dormían tranquilamente, la única que se quedaba alerta y con un miedo terrible era Sofía, se acurrucaba muy bien pero ponía sus oídos a toda alerta, ella era la que escuchaba hasta los mas leves ruidos los cuales no despertaban a nadie pero ella con un miedo y una atención de punta los escuchaba muy bien. Toda esta situación iba en aumento cada noche se escuchabas mas ruidos; alguna de esas noches Bruno no podía dormir y Sofía se quedo completamente dormida, estaba como desquitando las horas de sueño que perdió, al costado de la cama tenia un pequeño mueble con una lámpara que no alumbraba mucho pero si lo necesario para ver algunos papeles que muchas
  • 19. veces el revisaba por motivos de trabajo, Bruno tomo un libro para distraerse un rato y agarrar sueño. No fue mucho el transcurso cuando empezaron los ruidos y al parecer se originaron otra vez de la cocina, su curiosidad fue peor que la de un gato y fue a echar un pequeño vistazo, procuro no despertar a Sofía y gloria, ellas estaban durmiendo tan profundamente que nada las despertaría. Bajando las escaleras cuidadosamente y llevando un pequeño bate de beisbol camino y camino sin hacer ruido, prendió la luz rápidamente para sorprender al ladrón, por si se trataba de alguno que anduviera haciendo de las suyas, para su asombro y desgracia no vio absolutamente nada. Todo estaba en completo orden, regreso a su cuarto de igual manera sin hacer ningún ruido, se acostó nuevamente pero ya en el resto de la noche no pudo cerrar los ojos, su mente le daba círculos y no entendió que realmente paso, todo que do esa noche así. Al día siguiente se fue a trabajar muy temprano y no comento nada con su esposa. VII Sofía deseaba traer a un sacerdote para bendecir la casa y hacer que se vayan los malos espíritus o esa era su intención, ya empezaban las cosas mas fuertes de lo normal, el momento mas claro era cuando ella terminaba de hacer sus labores del hogar y se subía a su habitación con gloria a ver la televisión o hacer alguna otra cosa, eran desesperantes esos momentos por esas y otras razones mas quería que todo terminase y quería un sacerdote. Andrea y ella
  • 20. buscaron uno, la iglesia que conocían les quedaba lejos pero su decisión estaba firme y emprendieron la marcha para pedirle ayuda. Llegando allá la iglesia se encontraba cerrada a un costado de la iglesia estaba un pequeño lugar pareciese que era la oficina, allí se encontraba un hombre de edad sentado en un pequeño escritorio con papeles, el escritorio estaba en completo desorden y se le notaba al anciano muy apresurado. Preguntaron donde se podía localizar al sacerdote, le explicaron el motivo por el cual lo necesitaban, aquel hombre se porto amablemente y les pidió que esperaran, al parecer el sacerdote ya no tardaba en llegar porque tenia unos asuntos importantes que atender. Instantes después entro a la oficina un hombre alto y ya se le veía la edad por las canas que se mostraban en su cabello. Saludo cordialmente y el otro hombre le señalo que lo estaban esperando porque lo necesitaban, amablemente accedió a platicar con ellas. Les pidió que lo siguieran ya que el se dirigía a la puerta de la iglesia, la abrió y entraron, observaron una leve oscuridad y caminaron por el largo pasillo hacia el altar, el padre abrió una pequeña puerta que daba a un pequeño cuarto, la parecer era el vestidor del padre y también tenia un pequeño escritorio, dejo sus cosas a un costado del escritorio y se sentó a ellas les pidió lo mismo, se acomodaron. ▬ Antes que nada, mi nombre es Agustín perdón por no presentarme. ▬! Bien! ¿En que puedo servirles? Pregunto amablemente el padre. . Sofía fue la que tenía que desenvolverse y explicar la situación. ▬ ¡Vera! El motivo de nuestra visita es que queríamos saber si es posible bendecir nuestra
  • 21. casa o que nos brindara algo y sea lo que sea. ▬ No tenemos mucho tiempo de haberla comprado y se escuchan muchos ruidos; mi hija y yo hemos visto cosas y la verdad son aterradoras, han sido cosas que a mi no se me olvidaran y las recordare pro el resto de mi vida. ▬ Tengo más miedo por mi hija, ¡No quiero que le pase nada! Siento que correrá algún peligro si no hago nada. El padre se quedo con una mirada atónita, demostraba escepticismo, no se veía muy creíble a lo que acababa de escuchar. – Mire con gusto iré a bendecir su casa pero sinceramente no creo que haya algo que solo los nervios de ustedes, ya que es su nueva casa y tal vez por la emoción o tal vez extrañan el antiguo lugar donde vivían. –Les voy a pedir que piensen que las cosas que escuchen como los ruidos los tomen como algo normal porque la sugestión les traerá más y ¿creo que no quieren eso? ¿Verdad? Tomen las cosas con calma y ¡algo muy importante! La oración ¡les pediré que hagan oración todos los días! Y les aseguro que las cosas se calmaran, traten de ignorar esas cosas que pasan, no les den la debida importancia porque de lo contrario podría pasar más. Lleven una vida normal y olvídenlo, ¡se que será difícil pero les aseguro que les dará resultado. De inicio esas palabras les trajeron una tranquilidad enorme a las mujeres, desde que llegaron estaban muy nerviosas y con miedo pero las palabras del sacerdote les dieron una paz tanto interior y exterior. El padre les indico que en dos semanas realizaría el favor que le piden ya que se encontraba en otros asuntos muy importantes. El trato se cerró y ellas se marcharon a casa con mucha tranquilidad en sus mentes, salieron del lugar con otra expresión en sus rostros
  • 22. La mayor preocupación era por su hija, ella es la persona mas vulnerable así como es la única que tiene mas posibilidades de ver a los malévolos seres. Mientras esperaban el día en que llegaría el sacerdote trataron de ser fuertes; Bruno también se entero de la noticia que el padre vendría a bendecirle su casa, eso le provoco esperanza. Cuando las situaciones se escuchaban más fuertes e intensas se iban a quedar a la casa de Andrea a pasar la noche. Era preferible dejar el lugar solo y que las cosas pasen sin que ellos se den cuenta. Era muy curioso todo lo que sucedía, es sabido que algo estaba ahí y quería estar solo, le molestaba la compañía. Todas las situaciones se volvieron mas frecuentes, no importaba la hora ni el clima o el día ya se presentaban con mayor frecuencia. Podría tratarse de cualquier cosa pero necesitaban averiguarlo y la familia podría querer o no hacer eso pero lo que mas deseaban era que desapareciera y que estuviera todo tranquil VIII Los momentos calurosos llegaron, el calor hacia sudar el cuerpo y mas estando encerrado en casa, Sofía y Gloria salieron a dar un paseo al pequeño parque. La última vez que vieron lo ocurrido ya lo dejaron en el pasado. Las dos mujeres empezaron a columpiarse y a reír un instante para olvidar las situaciones escalofriantes que continuaban viviendo. De pronto no muy lejos de donde se encontraban ellas, venia una mujer, era delgada y de pelo negro y largo, su
  • 23. vestimenta se mezclaba entre negro y gris, no era de gran estatura pero cuando Sofía le llego a ver la cara era una mujer muy bonita. Se sentó en uno de los columpios quedando Sofía en medio, solamente había cuatro y obviamente uno quedo libre. Esa mujer mostraba una cara de tristeza y soledad, en ese momento fue cuando se animo a dirigirles la palabra. .¡Hola! ¿Cómo están? Les pregunto en un tono melancólico - ¿Son nuevos por aquí verdad? Esta pregunta interrumpió la respuesta de Sofía quien en el mismo instante estaba vigilando a Gloria. - Si nos acabamos de mudar aquí y ahorita estamos de paseo. Ya sabes que el día esta caluroso y aquí se siente fresco. - ¿Tu también vives por aquí? Pregunto con una curiosidad enorme, Sofía noto que la cara siempre la traía hacia abajo y lo único que alzaba eran los ojos pero en muy pocas ocasiones. Gloria estaba con sus risas que casi eran silenciosas y seguía meciéndose, ella no le puso más atención a la extraña mujer. - Si mi casa esta alguna calles de aquí, no esta muy lejos. Dicha mujer sentía ganas de decir muchas cosas sin embargo se las contuvo, se despidió y la mas grande y preocupante situación que les dijo fue que se anduvieran con mucho cuidado, protéjanse que les podrían hacer daño. Eso la obligo a levantarse del columpio y exigirle una explicación, pero ella ya se había puesto de pie antes y cuando les empezaba a decir las advertencias. - ¿A que te refieres con eso? ¡Explícate!
  • 24. La mujer solo empezó a caminar y mientras se alejaba Sofía imploraba que le dijese más de lo mencionado, todo fue en vano, la mujer no volteo para nada y ella quería correr a alcanzarla sin embargo, algo le paralizo las piernas, además de sentir que alguna voz en su interior le decía que no la alcanzase. Desconcertada se volvió a sentar junto a Gloria, no creía lo que presencio, un tornado en su mente le alboroto las ideas de una manera terrible. Por increíble que parezca, en el tiempo que llevaban viviendo no conocían a ningún vecino y lo peor que ninguno iba a su puerta a saludarlos o darles la bienvenida solo como cortesía, ese tipo de cosas no eran necesarias, sobre todo no son típicas o depende el tipo de vecindario o lugar donde se vive, cabe constar que al menos a alguien llegaran a conocer y saludaran, pero en ese lugar si se veía la gente aunque muy poca solo que nadie se acercaba a saludar o al menos un “hola”. A ellos nos les importaba pero si les daba una extrañeza que con nada podían curársela. Muy temprano se escuchaba el encender de los carros y algunos murmullos de gente que pasaba cerca o enfrente de su casa. En le día menos esperado, el sacerdote Agustín toco a su puerta tardo un poco mas de lo que el prometió ya que sus asuntos eran muy importantes agregándole lo difícil de dar con la dirección que Sofía le proporciono. Era una mañana muy hermosa, Sofía se encontraba haciendo los deberes como buena esposa; al abrirle la puerta sus ojos se llenaron de felicidad y lo saludo muy amablemente, le dio una gran bienvenida y lo invito a pasar, le ofreció sentarse en la sala y le ofreció un café. El padre Agustín acepto gustoso y mientras se lo preparaba observo cuidadosamente cada rincón, quedo muy sorprendido porque
  • 25. la casa no era muy grande y además de que no tenía mucho tiempo de haber sido construida. Cuando termino su café, mencionó que sentía una mala presencia o algo le incomodaba y no era normal; no era normal para el poder sentir presencias o sentirse observado, es la primera vez que la había ocurrido tal acción. Por una parte Sofía se sintió un poco de alivio porque ya le confirmaron que era verdad, los ruidos eran por alguien o algo. En esos momentos le empezó a describir sobre la entidad que observo mientras estaba en el baño, eso fue lo que hasta ahorita le dio el peor de sus impactos. El hombre puso mucha atención a su relato y los ojos los abrió a todo lo que daba. El sacerdote se levanto y empezó a hacer lo que prometió, empezó a rezar y bendecir la casa, lo realizo de una manera muy rápida, cada rincón de la caza que pisaba decía oraciones, Sofía estaba tras el y de igual manera repitiendo las oraciones. Después de varios minutos dijo que cumplió su deber y que siguiera conservando su fe y pensar positivamente y así se descubrirá si todo termino o no. El sacerdote Agustín se retiro pidiéndole pensamientos positivos y buena actitud, nada de peleas, ni discusiones ya que todo eso puede ser un medio de alimento para algunos malos aires. Por ultimo le ofreció mas ayuda por si algo mas se prestase, en caso de necesitarla ya sabia donde buscarlo. IX
  • 26. La situación se calmo por unos días, la familia durmió tranquilamente, recordaban a cada instante las palabras del padre, de pensar positivamente y no sugestionarse. Todos pensaban que todo se termino sin embargo, los ruidos y las molestias regresaron en lo menos inesperado, lo peor era que Gloria veía a un niño y de manera muy constante, su gran susto paso y se quedo en el pasado y nuevamente lo veía y de una manera constante, ella trato de ser mas fuerte de lo normal, no podía mostrar debilidad alguna frente a su hija porque ella era la fuente de su fortaleza. Intentos y mas intentos poco a poco lo conseguía hasta que no le daba miedo y solo le comentaba a su madre puesto que la consideraba sus mejores oídos para desahogarse y sentir un poco de mas apoyo aparte del de su hija y su esposo. Cuando ella le preguntaba por la descripción física, ella trataba de dar los detalles y las coincidencias con el niño que vieron la otra ocasión en el parque era mucha. Le causo mucha indignación, su preocupación y miedos querían despertar nuevamente. Muy a menudo ella lo comentaba con Bruno y los dos pensaban en otras soluciones; ya que empezaron a preocuparse mas porque la buena acción del padre calmo la situación por un corto periodo de tiempo. Una noche Bruno no llego a dormir a casa debido a una invitación de una fiesta con algunos compañeros de trabajo; Sofía no tuvo ningún problema con ello, la cama fue totalmente para ella y obviamente Gloria durmió con ella. En el transcurso de la madrugada Sofía cayo en un profundo sueño y pareciese que ni el ruido mas fuerte podía despertarla, fue muy extraño porque ella era de las personas que al dormir tenia el sueño muy ligero; eso le pasaba desde que era una niña solo que
  • 27. nunca le preocupo o le dio alguna importancia. Deseaba abrir los ojos pero los sentía muy pesados al igual que su cuerpo, además de querer moverse pero todo era en vano, sentía como si una roca gigante la tuviese encima y no la dejase mover ni un dedo. Después de unos instantes abrió los ojos sin embargo su inmovilidad continuaba; a su lado veía a Gloria quien descansaba profundamente, vio como la pequeña dormía tan tranquilamente y sin ningún problema. Algo empezó a llamar la atención de Sofía, eso le dio mucho susto porque no lo veía como algo normal. Llego a ver eso como una tercera dimensión o una alucinación de mal gusto, observaba como poco a poco se iba alejando de ella, la distancia entre ella y su hija era mayor, pareciese que la cama tenia muchos metros de largo, ella luchaba y luchaba por hacer algo no obstante aun sentía su cuerpo tan pesado como si tuviese una roca encima. Lo peor de esto era que se le volvió a manifestar aquel hombre que vio en el baño, era el mismo ella no lo olvido y no lo olvidara, lo podía ver claramente estaba junto a Gloria, ella no estaba al pendiente de la situación, tenia los ojos cerrados todavía se encontraba en un profundo sueño, Sofía trato de gritar pero su inmovilidad estaba presente, empezó a llorar fríamente. Ese malévolo hombre la tomo entre sus brazos y la empezó a acercar su cara a la de ella queriéndole dar un bezo en una de sus mejillas, Gloria no abría los ojos y no reaccionaba a tal situación, mientras la sostenía a Sofía la miraba de una manera horrible; sus ojos los tenia llenos de maldad. Ella no sabia que hacer, sus ganas de pelear contra el le vinieron a su mente y a su voluntad, ella lo miraba y sus ojos decían el deseo de lanzarse contra el y golpearlo con las manos o con lo que ella pudiese, por un momento recordó las palabras del sacerdote sobre mantener la oración. Ella empezó a hacerlo, se acordó de lo primero que le vino a
  • 28. la mente y pensando positivamente de que le daría resultado, poco a poco sentía movilidad hasta que dio un grito tan fuerte que despertó y se levanto tan bruscamente de la cama. Estaba muy sudorosa en toda la cara, tomo algo que estaba cerca y se limpio el sudor. Las lagrimas ya le habían llegado al cuello, lo que la tranquilizo fue ver a Gloria que estaba aun costado suyo. Gloria despertó y vio a su medre llorar y obviamente ella lloro también. Inmediatamente ella abrazo a la pequeña con toda su fuerza, mientras eso pasaba ella le mencionaba los motivos de su llanto, Gloria estaba mirándola fijamente, tenía una expresión de desconcierto en su rostro. Los minutos transcurrieron y todo quedo en una pesadilla, una de las más desagradables pesadillas que había tenido en su entera vida. ▬ ¡No pasa nada mi vida! Tuve una terrible pesadilla. Gloria abrazo mas fuerte a su madre y poco falto para que se pusiera a llorar con ella. En el preciso momento que se levanto con la niña en sus brazos, se puso los primeros zapatos que vio y se dirigía a la parte de abajo, inesperadamente la puerta de la habitación estaba atorada porque no podía abrirla con su hija en las manos le costaba mas trabajo, varios intentos y fue imposible, era ilógico puesto que casi no se ponía el seguro y para ponerlo era del lado donde estaba ella. - ▬ Sintió una presencia atrás de ella, un aire de respiro y como un tronar de dientes. Gloria muy acurrucada al pecho de su madre no daba cuenta de nada. Sentía esa respiración cada vez mas y mas cerca, se quedo atónita no movía ni un solo dedo, trato de voltear de reojo y analizar que pasaba, sorpresivamente un ser estaba atrás de ella podía ver algo extraño, la silueta de
  • 29. una persona o un ser demoniaco todavía no estaba segura, el valor le nació del corazón para voltear raídamente, nada mas que los pequeños ruidos de la calle predominaban y algunos cuantos ruidos extra y sin importancia, se dirigió a la cama a sentarse y tomar un poco de calma y reducir su alteración, al dar el primer paso hacia su cama sintió una fuerza descomunal; una fuerza bruta que la golpeo por atrás, aventándola hacia la cama y cayendo completamente boca abajo, mientras sentía el golpe pensó en que era imposible lo que sintió, Gloria empezó a llorar porque ambas fueron lanzadas, ellas flotaron como cuarenta centímetros, ambas cayeron sin hacerse daño pero el susto ya lo tenían, si hubiesen caído en le suelo seguramente se hubiesen lastimado. Sofía al caer reacciono rápidamente volteando hacia a tras y ver que es lo que la aventó de esa manera, Gloria llorando se pego con su madre abrazándola tan fuertemente como queriéndole enterrar los dedos al cuerpo. Se abrazaron y se cubrieron con las sabanas. X Sus miedos habían florecido y llegado a toda luz, los siguientes días fueron de miedo, ella sentía que algo macabro le iba a pasar en cualquier momento. Soñado a aquel hombre de aspecto maléfico le indico que su intención era lastimarlas, tanto a ella y a su hija. Bruno supo la historia de lo ocurrido, no encontró las palabras adecuadas para plantear una solución o al menos consolar
  • 30. a su esposa. Varias ocasiones ella reprochaba el esfuerzo del sacerdote, al no mostrar ningún resultado o mejoría busco a alguien para maldecir. Muchas ocasiones Gloria se encontraba hablando sola, mientras ella jugaba en su cuarto con sus muñecas, Sofía llegaba y la sorprendía teniendo esa charla sin nadie ni nada mas que ver salvo a ella, la única respuesta que ella daba “con mi amigo” después de varias ocasiones ya se volvió rutina y las descripciones que le planteaba coincidían mucho con el niño que vio en le parque. Haciendo conclusiones finales era muy probable que hubiese dos presencias en su casa; la del niño y la del hombre desagradable de mala mirada, así era como Sofía lo nombro. Solamente faltaba determinar la razón por la que estaban alojados ahí; de que existía una razón era cierto, ¿pero cual? Eso se preguntaba Sofía. En el momento menos indicado el sacerdote Agustín toco a la puerta, fue en un día nublado, las nubes tapaban todo el cielo y no se veía el mínimo rayo de sol, muchos adivinarían que llovería pero no fue así, solo fue un día que a las personas les hace pensar en algo que por ende es lógico y cambiaria luego. Todo lucia en tranquilidad y las calles estaban silenciosas. En esta ocasión llego acompañado por otro hombre, vestía totalmente de negro, tenía muchos collares y pulseras. Su mirada era fría y fija, muy sorprendida Sofía los invito a pasar se sentaron el la sala y les ofreció algo de tomar. Aquel hombre fue presentado por el sacerdote y solamente le dijo el pseudónimo de Yohn, quizás su nombre era Juan o Jonás. El padre empezó a explicar el motivo de su visita, la vez pasada cuando vino a bendecir la casa sintió una terrible pesadez en su cuerpo además,
  • 31. de algo maligno, algo o alguien con bastante fuerza que no se podría ir así de simple. Yohn tenía una profesión o era experto en cosas relacionadas a lo sobrenatural; desde muy joven logro desarrollar una habilidad en la cual podía establecer contacto con seres perdidos o almas en pena, también lograba descubrir presencias que se rehúsan a darse a conocer y que están ocultas sin mostrar el más mínimo problema o todo lo contrario descubrir presencias que molestaban y aterraban a los inquilinos. El sacerdote le encargo que determinase cual es la causa principal de las cosas que atormentaban a dicha familia. El hombre se puso de pie, pidió permiso para observar toda la casa y recorrerla entonces no fue problema para Sofía, ella espero sentada en el sillón con Gloria en sus brazos mientras el padre y Yohn estaban analizando la cada rincón y cada centímetro. Ella se notaba muy impaciente, Gloria no daba crédito del todo a lo que estaba pasando solo le hacia preguntas a su mama referentes así esas personas eran conocidas; su única respuesta a todas las preguntas era que si y si y si. La última parte a analizar obviamente fue la de arriba, ya eran minutos transcurridos hasta que bajaron, analizaron cada pequeño cuarto existente en esa casa. El hombre pidió que se sentara en la mesa para decirle las noticias encontradas. Fue muy sorprendente tal hallazgo que el realizo. Solamente busco las palabras adecuadas para decirle y que no se exaltase. Dos entidades yacían ahí; una de ellas era bastante poderosa, y era el causante de todos los sonidos extraños, era una presencia que deseaba atormentar y hacer mucho daño, la otra no sabia si buena o mala seria pero lo que aseguro fue que no tenia intenciones
  • 32. de perjudicarlos esa presencia no tenia un gran poder solo se alojo para poder ayudar a alguien o algo pero no tenia la intención de asustar a nadie; tal vez aunque muy poco probable deseaba ayudarlos a luchar contra la agresiva sin embargo, las respuestas a algunas preguntas andaban a flote. Algo que Yohn les aseguro sobre los entes fue una lucha que llevaban acabo entre si. XI Los momentos de tensión se volvieron de mucha más tensión, a causa de toda la información que supieron sus miedos se pusieron al borde. Sofía la principal persona que sufría por estas deducciones. Lo mas prudente vender la casa, mientras debían buscar otra y ello significaba tiempo, una decisión y tal vez la decisión que estaban de acuerdo y la mejor, era ir a vivir por algunos días o por algunos meses a la casa de Andrea. Bruno se sentía desolado al saber que el logro que hizo en mucho tiempo, su patrimonio y su lugar en el futuro le duraría poco, deseaba un lugar de paz y tranquilidad para su hija, sin en cambio se sentía mal en su interior por haberle fallado de esa manera. Empezaron a establecerse los acuerdos, la joven pareja llego a un acuerdo y recurrirían a la ayuda. Toda la casa se ordeno y se hizo lo posible para que no pasara nada porque se quedaría sola por algunos momentos, también llegaron al acuerdo de que se estaría checando constantemente. La casa fue cerrada en su totalidad para que nadie
  • 33. intentase meterse a robar, hacer vandalismo o hacer alguna fechoría. La mente de Sofía vagaba e investigaba por saber quienes o que estaban acechándolos. Andrea no tenia el más mínimo inconveniente por recibirlos, al contrario le pareció perfecto. Los momentos pasaron como el agua, ya llevaban algunos días de no acercarse a la casa hasta que llego el momento de ir a explorar y esperar el milagro de que todo haya quedado en un sueño, empezar desde cero, borrar la memoria y dejarlo en una mala experiencia que quedara en el olvido. Llegaron a la casa y después de haber echado un gran vistazo a todas las cosas se llego a la conclusión de que todo estaba en orden, ningún rasgo de aparente actividad o movimiento. Muchas cosas supusieron y sabían que las cosas que sucedían se debían a algo que anduviese ahí, en esta ocasión no ocurrió nada, y tenían una tarea que cumplir y con las debidas indicaciones que los expertos les dieron porque tal vez las cosas que allí abundaban les molestaba solamente personas; es decir que prefieren la soledad y aquello se podría marchar a otro plano de existencia o eso era lo que ellos creían. Entonces tenían que entrar en ese mundo y luchar. Andrea era otra persona mas que ya entraba en la preocupación, ya enterada de todos los acontecimientos se ofreció a ayudar en lo que pudiese y obviamente su principal preocupación era Gloria además de saber que ella podía ver al niño e incluso hablaba con el. En las mañanas Andrea permanecía con Sofía mientras Gloria se encontraba en la escuela, ya cuando era el momento de salir, las dos la recogían, esperando con ansiedad en la puerta de la escuela.
  • 34. Andrea regresaba a su casa ya casi de noche cuando ya faltaban unas horas para que Bruno llegara, inclusive unos días si se quedaba con ellos por que el tiempo pasaba rápido y no lo notaba. El momento de que Andrea descubriera que algo abundaba en la casa llego, la situación de darse cuenta por si misma se encontraba próxima, tal vez hubiese sido mejor que no pero ella de antemano presentía que también le pasaría algo. Mientras la pequeña se encontraba en la escuela, Sofía prepararía una rica comida para cuando Bruno regresase, ella salió a comprar los productos necesarios para llevar a cabo lo que quería y pidió a Andrea que permaneciera en casa por un momento. Ella al quedarse sola lo primero que hizo fue subir a la habitación de Gloria y arreglarla; muchas muñecas estaban en el suelo, peluches, además de que piso uno por equivocación pero afortunadamente le muñeco no recibió ningún daño, acomodo cada pequeño detalle de esa habitación que pertenecía a su amada nieta. Minutos pasaron y se le ofreció un vaso de agua, su boca quería agua fresca, salió de la habitación con dirección a las escaleras; sus pies se colocaron perfectamente en los escalones empezaba a mover uno de sus pies para ponerlo en el siguiente escalón, logro apoyarse del pequeño barandal sin embargo, algo sintió en su espalda que casi la hace volar, ella no pudo hacer nada para evitarlo, sintió un par de manos que la tocaron la espalda de una manera tan salvaje, la caída fue demasiado fuerte, no hubo tiempo para sostenerse de algo para evitar caer, ella quedo tendida en el piso bocabajo, inmediatamente llego al estado de inconsciencia, tiempo para gritar de
  • 35. dolor o algún quejido no se presento, en su frente se postraba sangre que poco a poco en el suelo un pequeño charco se formaba. Sofía tardo treinta minutos en volver, ella toco la puerta pero no recibió respuesta, espero mas y no había nada, tardo un poco en sacar las llaves de su bolsa y abrir. Entro cómodamente gritándole a su madre pero nada al entrar y cerrar la puerta vio a su madre en el suelo, ella grito tan fuerte que casi se lastima la garganta, soltó las cosas que traía en las manos, se acerco para auxiliarla pero no sabia que hacer; la levanto en sus brazos y le limpio la sangre con un pañuelo, la sangre seguía brotando. Tomo el teléfono y llamo a una ambulancia, ella seguía sin mostrar reacciones de vida. La ambulancia llego e inmediatamente bajaron un hombre y una mujer, auxiliaron y prepararon a Andrea para llevarla al hospital. Sofía fue informada del hospital al que la llevarían pero primero localizo a Bruno para pedirle que fuera a recoger a la niña al colegio mientras ella acompañaría a su madre al hospital. Bruno no lo pensó dos veces e inmediatamente salió de su trabajo para ir a recoger a su hija, más tarde ella le hablaría para darle la dirección del hospital donde la estaban atendiendo. Gloria salió de la escuela y afuera ya la estaba esperando su padre, ella corrió hacia el muy contenta, le cayo un poco extraño verlo, era la primera vez que su padre se presento, debido a sus deberes el no podía ir por su hija pero en esta ocasión y debido a la gravedad tuvo que ser así, sin embargo, eran malas noticias pero la inocencia de la niña no veía otra cosa, su padre la abrazo con mucha fuerza; cargo la mochila y a ella también y se marcharon. Regreso a casa
  • 36. porque no recibía ninguna llamada de su esposa, ella prometió avisarle todo sobre el estado de su madre. Su teléfono sonó y su alivio llego, noto que era la llamada de Sofía, inmediatamente contesto, escucho la información que necesitaba y salió de la casa, tomo su auto y llevo a Gloria consigo. Sofía estaba en la sala de espera, la situación fue de mucha emergencia porque que llegando al hospital rápidamente la internaron y a ella no le dieron ni siquiera un saludo. Cuando Bruno llego, Sofía estaba esperando con ansias alguna noticia, cuando vio a Bruno y se pequeña hija corrió inmediatamente a abrazarlos, algunas lagrimas le brotaban de sus ojos, Bruno expreso unas palabras de consuelo a su amada. Tomaron asiento y ella le narro lo que sabia, como vio a su madre cuando regreso del súper, la historia era corta y para Bruno era incompleta. Todo lo que escucho no le decía nada, la respuesta al accidente estaba aun en el aire, solo esperar a que Andrea recobrase el conocimiento y ver el desenlace. Dos horas exactas pasaron, por increíble que parezca el tiempo se pasó de una manera tan lenta, ya casi el sol terminaba de ocultarse y una fría noche se avecinaba. Una enfermera muy bonita y con su uniforme con un blanco impecable menciono el nombre de su madre, Sofía levanto de su asiento rápidamente y corrió a donde se encontraba la enfermera. - ¡Es mi madre! ¡Señorita por favor dígame como esta! Muy precipitada y nerviosa se mostro, se pego mucho a la enfermera y la tomo de los hombros. La enfermera solo le agarro las manos y pidió calma
  • 37. - ¡Cálmese! Su madre esta fuera de peligro, recibió golpes muy fuertes en varias partes de su cuerpo y necesita mucho reposo. Solo vine a avisarles para que se tranquilicen, en un momento mas podrán subir a verla. Un respiro en sus corazones llego, ella inmediatamente abrazo a Bruno quien tenía a Gloria dormida en sus brazos; su ambiente y tensión cambio. La noche se hizo presente horas y horas transcurrieron. El hospital no paraba, mucho movimiento, voces, gente que expresaba tristeza en sus rostros; acontecía todo lo que es conocido en los hospitales. Ya de madrugada Sofía decidió quedarse en el hospital hasta esperar noticias de su madre, Bruno regreso a casa porque Gloria necesitaba descansar, el también necesitaba un poco de descanso, el trabajo requería de su presencia y por lo tanto no debiese fallar. Casi a las cinco de la mañana otra de las enfermeras llamo a Sofía para avisarle que ya podía subir con su madre, ella recobro el conocimiento y podía pronunciar pocas palabras, requería muchos cuidados y además de que quería ver a su hija y nieta amada. Subió inmediatamente a donde le indico la enfermera, lo más rápido que pudo, nada podía detenerla. Se encontraba hasta el tercer piso. En la habitación también había otros cuatro pacientes más, todos dormían o tal vez estaban anestesiados, dos de los pacientes tenían un familiar al lado que les hacía gran compañía. Sofía ubico a su madre y se dirigió hacia ella, le beso la frente y le dio un fuerte abrazo como pudo. Andrea apenas si podía abrir los ojos y pronunciar unas palabras; trato de decirle algo a su hija, sin embargo, ella no las entendió.
  • 38. Una pequeña silla postrada al lado sirvió para que Sofía se sentase, miraba a su madre fijamente quien realizaba esfuerzos por hablar. XII Pasaron tres noches las cuales Sofía permaneció en el hospital, por pequeños momentos iba a casa a bañarse y cambiarse de ropa. Su madre mostro una mejoría increíble, se recuperaba de aquellos golpes satisfactoriamente y era capaz de hablar aunque muy poco. Bruno la cuidaba por unos instantes ya que su trabajo le impedía estar mucho tiempo, además de que el era la principal fuente de ingresos no le podía fallar a su familia. La señora comía lo que el hospital le proporcionaba, su recuperación fue mas rápido de lo que se pensó, ella aburrida de ese lugar quería irse a casa, era de las personas que pensaba que los hospitales terminan de rematar a la gente. Faltaban unos momentos para que saliera del hospital el doctor dio ordenes de que se cuidase muy bien para terminar su recuperación. Mientras esperaban Sofía empezó la interrogación sobre lo que ocasiono su accidente. Su madre empezó a recordar, los ojos se le fijaban en otra orbita, miraba el techo, miraba el suelo y su mente estaba procesando la información. -Solo recuerdo que cuando tu fuiste a comprar tus cosas, yo subí a la habitación de Gloria, su habitación estaba desordenada y arreglar sus cosas no estuvo de mas, pero me tarde un poco en hacerlo que me dieron ganas de tomar
  • 39. un vaso con agua, me dirigí hacia las escaleras y algo o alguien me empujo y no pude evitar la caiga. Al escuchar esas palabras lo primero que vino a su mente fue sobre aquellas manifestaciones que vivían en su casa y la intención que tenían era de molestarlos, todo lo dejo en un simple pensamiento después que su madre muestre una recuperación total hablaría con ella mas a fondo. Todavía tenia muchas dificultades para ponerse de pie, requería la ayuda de su hija, quien además la a ayudo a cambiarse la ropa. El doctor autorizo su salida, los días fueron largos y las preocupaciones fueron tan temidas, pero al fin de cuentas todo salió bien, aquella mujer mostro una resistencia increíble así como una recuperación majestuosa. Sofía aguanto las ganas de llorar para que su hija no notase la preocupación, todos mostraron fortaleza. Regresaron a casa, Bruno fue por ellas al hospital, entraron a casa respirando un poco de calma, inclusive sin saber si las situaciones paranormales seguían allí o ya no. Acomodaron a Andrea en la sala, se decidió que se quedase con ellos mientras se mejora, de lo contrario en su casa y sola no podría sostenerse cuando necesite algo o ir al baño. Bruno acomodo las cosas necesarias para que ella estuviese cómoda, ella estaba muy agradecida por todo lo que ya habían hecho por ella. Gloria abrazaba a su abuelita con mucha fuerza y le daba muchos besos. Andrea sentía una tremenda felicidad por disfrutar a su nieta. XIII
  • 40. Paso un mes tan rápido como el correr del viento, Andrea ya estaba mucho mejor, ya caminaba muy bien y no necesitaba ninguna muleta o algún bastón. Al mismo tiempo que se recupero, le vino a la mente la situación que vivió y no deseaba estar en esa casa más tiempo. Se alteraba cuando veía las escaleras a tal grado que ya no subía, lo único que hacia era permanecer en la sala esperando a que le trajeran cosas o contemplando las rutinas como se desenvolvían. El miedo la invadía otra vez, y esta vez Sofía le pidió que narrara como sucedieron las cosas. Andrea se preparo para marcharse a su casa, ya extrañaba cada rincón, su hija la ayudo a prepararse, mientras eso pasaba Andrea recordaba a detalle cada situación, cada preciso momento que la llevo a tener esa gran accidente, los recuerdos tanto buenos como malos regresaban a su mente, el shock estaba por comenzar. Solo esperaron a que llegara Bruno para que la llevara en el auto y también porque tenía algunas cosas que llevarse. -Ahora si madre, ¿cuéntame que fue lo que realimente te paso? ¿Por qué te caíste de las escaleras? ¿Por qué no tuviste cuidado alguno? Toda apresurada pregunto Sofía, no dejaba pausas a sus preguntas. Las respuestas a las preguntas llegarían en el momento en que ella fuese narrando los hechos. -¡Todo fue tan repentino hija! Te repito que en el momento en que te marchaste a comprar lo que necesitabas, yo me decidí a arreglar la habitación de mi querida nieta. Sabes que hay un desorden y tú no lo limpias, lo mejor era que
  • 41. yo lo hiciese para que no te apresuraras y todo marchara tranquilo, solamente subí y me dispuse a hacer lo que tenia que hacer. Acomode cosas y mas cosas, me dio mucha sed, a mi edad pues ya me canso muy rápido y se me ofreció un vaso de agua así que me dirigí a las escaleras. Todo estaba tranquilo, no sentía algo, no estaba mareada o algún padecimiento que me atacase para que yo cayera. Coloque los pies en el escalón, dispuse a poner uno de mis pies en el siguiente pero recuerdo que al ponerlo sentí unas manos en mi espalda, fue tan brusco que por poco salía volando. ¡No pude evitar la caída! Todas esas palabras dejaron en shock a Sofía quien se acordó de las cosas que acontecían y esos seres vez fueron la causa de su accidente. El temor a permanecer en dicha casa ya se encontraba a tope, toda la familia principalmente Sofía no deseaban permanecer un minuto mas allí. Se intercambiaron palabras entre Bruno, Sofía y Andrea; se requería tomar una decisión. Como Andrea no soporto estas un segundo mas en la casa, se marcharon con ella a hospedarse un momento. La casa se podrían en venta, todo se quedo en orden, cada espacio de aquella casa se quedo en orden y limpio, las cosas fueron colocadas en su lugar correspondiente, algunas cosas llevaban candado y les fue puesto. Solo llevaron consigo principalmente ropa La puerta la cerraron con doble seguro y algunas cosas mas, tomaron el automóvil y emprendieron la marcha hacia la casa de Andrea. Todo en orden y todo en su lugar, se marcharon con cierta tranquilidad por sus pertenecías que estaban seguras. Llegaron a casa de Andrea y ella gustosa les dio una de las
  • 42. habitaciones para que allí pasaran las noches; los tres compartirían una habitación, ya que la casa no era muy grande. Varias noches fuera de su propia casa se esfumaron, todo estaba en calma; sin embargo, Sofía tenia sueños constantemente en los que miraba a ese niño; ese niño que se le manifestó por primera vez y que Gloria veía constantemente, lo raro de este asunto era que no le daba miedo a comparación del otro, tan solo de imaginárselo le temblaban hasta los nervios. Este pequeño ser al parecer tenia la intención de comunicarse con ella, siempre que se aparecía en sus sueños le extendía la mano pero ella no se atrevía a dársela, además de verlo a el, veía un gran espacio como si fuese una habitación enorme, solamente que tenia muy poca luz y esa poca de luz emergía del pequeño. En otras ocasiones se manifestaba un viento fuerte que el niño se alejaba de ella y antes el pronunciaba unas palabras y ella no las entendía debido a ese viento, entonces era cuando ella despertaba, muchas ocasiones tuvo ese sueño, no pasaba nada mas que solo sueños, las demás cosas se tranquilizaron. En la casa de Andrea no se presentaba algo fuera de lo ordinario. Un momento de paz se sintió en sus corazones. XIV Se discutió mucho sobre la casa, que iban a hacer con ella, todas las noches que regresaba Bruno empezaban a discutir cual seria el destino de su patrimonio;
  • 43. lo conservarían o lo venderían. La decisión final fue venderla, era lo mejor y con lo que recibiesen, comprarían otra en un lugar diferente, lejos de la pesadilla que aun Vivian. Pasaron algunas semanas y regresaron a casa para echar una mirada y volver a habitarla; su esperanza de ver que ya no hubiese nada crecía más y más, cada momento pensaban en un milagro y en que todo solo fue una pesadilla. Regresaron a su casa y entraron como si nada, quitaron los seguros de la puerta principal y entraron, y lo que vieron quizás no lo olvidarían nunca. La casa era un completo desorden, la mesa del comedor estaba volteada y las sillas igual, rápidamente fueron a la cocina y los utensilios tirados en el suelo, las cosas delicadas como vasos, platos se encontraron en el piso hechos pedazos. Un completo desorden aconteció, inmediatamente se dirigieron a las habitaciones y la sorpresa fue la misma, todo lo que adornaba las habitaciones fue encontrado en completo desorden. Lo primero y lo mas lógico que pensaron fue que la casa fue robada, algunos maleantes entraron y se llevaron objetos de valor y por tal motivo dejaron la casa en un desastre total. Una interrogante mas apareció, ellos se dieron cuenta de que la puerta y la ventana no se encontraron forzadas ni dañadas, se encontraron como se dejaron y las cosas de valor también fueron encontradas; entonces la posibilidad de un robo poco a poco se fue descartando. Otra vez sus mentes volvieron a pensar lo mismo, especialmente la de Sofía quien dedujo que las entidades eran las responsables de estos actos tan barbaros. Bruno quería pensar que algo mas realista pudo pasar, la idea de las entidades le estaba dando miedo y el trataba de pensar menos en eso.
  • 44. Trabajaron arduamente para volver a poner las cosas en su lugar y limpiar la casa, todo esto les llevo horas y horas de limpieza. A pesar del miedo que les invadía, ya todos mostraban una actitud de ya no aguantar, estaban cansados de tales hechos, un momento en el que se mezclo la furia y el miedo crecía y crecía en su interior. Solamente y la única alternativa era esperar a que alguien comprase la casa y se marchen lejos a empezar otra vida. Su esperanza de que las presencias que causaban daño desaparezcan ya no existían, lo mejor era irse muy lejos y tomarlo como una pesadilla y como una mala aventura de la vida. Los días pasaban y se quedaban marcados en la mente de la familia, cosas que nunca olvidaran y tal vez el tiempo nunca les ayudaría a olvidar. Llego el momento más difícil, las cosas que pasaban especialmente en la noche acontecían con tal intensidad, algunas de esas noches mejor no dormían, intentaron retar a la entidad pero algo en su interior les rogaba de no intentarlo. La última pesadilla de Sofía en donde volvió a ver a aquel hombre de aspecto desagradable llego, el lugar donde se desarrollo su pesadilla era de mucho miedo porque veía al hombre y a tras de el se manifestaban las puertas del infierno; o al menos eso era lo que se creía, ella lo veía señalándola y acercándosele poco a poco. Huía muy aterrada sin embargo no lograba lo logro porque la alcanzo y la tomo en sus brazos, en ese momento cuando la tomo bruscamente sintió su cuerpo quemarse, únicamente grito con toda su fuerza. La tomo y puso su cara en frente de la suya. -- ¡lárgate y huye mientras puedas!, de lo contrario tu hija será mía y sufrirá, ustedes no podrán hacer nada.
  • 45. La casa fue ordenada y lista para venderse, lo único a esperar es contactarse con Alberto y ver que se podía hacer, además de que les consiguiese un comprador, lamentablemente mucho tiempo transcurrió y las veces que se intento contactarlo no se lograron, únicamente ellos supieron que se encontraba en unos viajes de negocios. Segunda parte I Andrea les ofreció que vivieran con ella mientras localizaban a Alberto y encontraban un comprador, ellos resignados aceptaron, tomaron algunas de las pertenencias que mas necesitan y se fueron con ella. En algunos momentos Bruno se dirigía a visitar la casa para ver que todo estuviese en orden, también vigilar que ningún maleante se acercase a la casa con sus malas intenciones. Los
  • 46. días que Bruno salía temprano de trabajar, pasaba a la casa a verificar que todo estuviera bien, muchas de esas ocasiones regresaba pasaba de rápido porque era tarde y a pesar de ellos se daba el lujo de echar un vistazo. Después de algunas semanas Sofía, Gloria y Andrea visitaron la casa para hacer limpieza, era más seguro que mucho polvo se impregno en sus muebles y algunas cosas así que era momento de hacer limpieza. El día fue un sábado en la mañana, salieron de la casa de Andrea y se dirigieron a su destino, Andrea ya estaba muy bien de salud, sus heridas sanaron increíblemente, ningún inconveniente tenía en acompañarla, era una mujer fuerte porque quería enfrentar sus miedos regresando al lugar en donde ocurrió su accidente. Gloria no se daba cuenta de la situación, solamente veía a ese niño, pero miedo no le daba, lo único que hacia era decirle a su madre pero debido a su inocencia ella no asimilaba que Sofía entraba en estado de preocupación. Dos razones existían para preocuparse, una de ellas Sofía ya la había experimentado, el enemigo de sus sueños la amenazo y trato de hacerle un daño, ya sabia que quería a Gloria, lo que aun no sabia era la razón. La otra era el niño que regularmente Gloria veía, la única vez que ella misma logro verlo fue en el parque, podría haber más pero no lo recordaba del todo, su principal preocupación era la presencia mas poderosa, presentía que aunque la casa se vendiera, ella tenia que enfrentarlo de algún modo. Las actividades a realizar eran variadas como se pensó, la mayoría de las cosas de la estaban sucias principalmente los muebles, el polvo en todas partes y por lo tanto debía ser limpiado. El tiempo de que empezaron a hacer limpieza fue
  • 47. muy poco cuando tocaron a la puerta, Sofía dejo un momento lo que hacia y se dirigió a ver quien tocaba; al abrir se llevo una gran sorpresa, Alberto quien no era localizado por fin apareció. -¡Esto si es un verdadero milagro! Dijo Sofía con un tono no tan agradable. -¡Buenos días! Como han estado, me imagino que bien. – Me permitirá pasar. - ¡Si! ¡Adelante! Alberto entro a la casa y se sentó en uno de los sillones de la sala, saludo a Andrea y ella lo saludo también. En otro de los sillones se sentaron las mujeres y empezaron a charlar. ¿Cómo les ha ido en su nueva casa? ¿Todo este bien? ▬ Hemos tratado de localizarlo desde hace varios días, queríamos comentar con usted algunas cosas, tal vez le parezcan ilógicas pero se las tenemos que decir porque esto ya llego al límite. La cara de Alberto cambio de expresión rotundamente, traía una sonrisa y repentinamente le desapareció, ▬ ¡No me espante Sofía! ¡Explíqueme que sucede! ¡Por favor! ▬ Solamente unos días todo marcho bien, aparentaba a ser un gran comienzo para nosotros y empezar a construir nuestra felicidad aquí. Todo cambio repentinamente; ¡fue un golpe duro para nosotros! Sofía estaba desconcertada y le venían a la mente los momentos más horrible que vivió.
  • 48. Alberto sentía que Sofía actuaba y que el momento lo quería hacer mas tenso y poner más emocionante la situación, por un momento llego a pensar que perdió el juicio y que estaba loca. Sentía como si le quisiesen jugar una broma de muy mal gusto. ▬ ¡Sofía por favor dígame! ¿Qué pasa? Ella trato de acomodar las palabras y tratar de hacer creíble el mensaje. ▬ Mire la verdad las cosas que han sucedido para mi no tienen explicación lógica, yo he visto cosas que me han aterrado, cosas que nunca en mi vida pensé que me pasaran. Andrea solo escuchaba la conversación y esperaba el momento para intervenir con su veredicto. Sofía empezó con la primera experiencia que fue sobre ver a ese hombre o demonio, la primera vez que lo vio fue en el baño, y a partir de ese momento lo veía mas en sus pesadillas, ella le comento que sus intenciones eran hacerle daño. La cara del Alberto parecía estar congelada, no parpadeaba, solamente miraba a Sofía fijamente; lo que daba a demostrar era que no le creía ni un poco, y solamente le ponía atención por respeto. ▬ Esa es una parte de lo que ha pasado, la otra es que mi hija ve constantemente a un niño, yo no lo puedo ver, sin embargo, ella me dice y me lo señala. Entiendo que los niños tengan imaginación pero que lo vea en cualquier parte y en cualquier momento se me hace ya muy extraño. En la expresión de Alberto ya se veía una desesperación, ya no tenia mas deseos de seguir escuchándola.
  • 49. ▬ ¡Mire! No quiero ser grosero pero estas cosas que me dice me suenan algo irrealistas, y en parte no creo mucho en ello, y sinceramente no se que decirle, no se exactamente como contestarle, ¡discúlpeme! De verdad se lo digo. Sofía se sintió muy mal, al no creerle sentía un coraje en su interior y además tenia muchas ganas de decirle algunas cosas y dichas cosas no serian nada agradables, mejor se quedo callada. Andrea entro en acción y tomo su turno para hablar. ▬ ¡Mira joven Alberto! Hace poco salimos de una situación, esta situación fue de lo mas triste para mi hija y para su familia; yo tuve un accidente en esta casa, caí de las escaleras, pero no caí por descuido sino porque sentí claramente que alguien me empujo y para que me crea o no, nadie se encontraba en casa en ese momentos. Sentí claramente que alguien me empujo y sabe usted que no tendría porque mentirle, además mi hija también no tendría porque hacerlo, mucho menos jugarle una broma de mal gusto. De la misma manera Alberto se quedo mirando a Andrea, también no podía creer que era lo que pasaba. ▬ ¡Esto que me dicen es increíble! No lo puedo creer, no lo puedo creer y no lo puedo creer. Las palabras que escucho las quería dejar en el olvido, regresar el tiempo que transcurrió mientras las escuchaba, quería volver al momento en donde toco la puerta y que lo recibiesen con alegría y la digan que todo marcha bien en casa. Se imagino esa situación por unos segundos pero acabo rápido porque le seguían diciendo cosas. Por ese momento no puso nada de atención.
  • 50. ▬ ¿Qué nos puede decir de las personas que vivieron antes en esta casa? Esa pregunta la alcanzo a escuchar en el momento que empezó a ponerles atención. Un pequeño murmuro salió de su boca y trato de evadir la pregunta. El sabia una serie de cosas y dichas cosas debían quedarse con el, no debían ser contadas. ▬ ¡Bueno! Me tengo que ir, tengo otros compromisos y no puedo llegar tarde. Sus ojos expresaban ganas de salir corriendo de la vista de ellas, Andrea noto los nervios que inmediatamente le brotaron al hacer esa pregunta. Evadiendo las ultimas palabras que le dijeron tomo su portafolio y se dirigió a la puerta, por educación Sofía se también se paro y lo acompaño. ▬ ¡un gusto platicar con ustedes! Otra ocasión los vendré a ver, tengo unos asuntos pero les prometo que otra ocasión vendré. Se marcho, se despidió de manera caballerosa, Sofía le abrió la puerta, salió y cerró nuevamente. ▬ ¡no puedo creer que nos haya tomado como unas locas! Explotaron sus inconformidades, además de sentir que nos les puso la atención debida. Andrea también se desconcertó un poco, las ganas de haberle dicho un par de cosas quedaron en sus bocas. En la última parte de la charla precisamente cuando no les puso atención fue lo que mas les molesto además de darse cuenta de que algo le preocupo, algo sabio, tal vez un secreto, muchas interrogantes y nada de respuestas, todo se movía nuevamente. II
  • 51. La casa fue ordenada, toco impecable, el orden, parecía como nueva la casa. Bruno pasó por ellas para marcharse a la casa de Andrea, tenían miedo y ya no querían quedarse mas en ese lugar, querían hablar con Alberto de ese tema pero debido a su prisa y a su actitud se les olvido por completo esa parte. Bruno se entero de la situación y también se incomodo con las reacciones de aquel hombre, esperaría también una oportunidad para hablar con el. ▬ ¡Al parecer no les creyó nada de lo que le platicaron! Tendré que hablar con el lo hare muy seriamente, no importa el tiempo que nos tardemos en hablar, le planteare la situación y pediré que nos proporcione algunas facilidades para poder vender la casa. Al siguiente día mientras estaba trabajando, Bruno busco un pequeño lapso de tiempo para hablar por teléfono con Alberto, pedirle unos instantes para hablar con el personalmente. Alberto le contesto de una manera amable y se pusieron de acuerdo para verse, el lugar seria casa y el tiempo en la tarde, hasta ese entonces Bruno pensó en las palabras correctas para dirigirse a el. Llego el día y todos fueron a casa, toda la mañana las mujeres se quedaron en casa de Andrea, se pusieron a hacer infinidad de cosas, Bruno pasaría a recogerlas y irían a aquella casa maldita, tal como Sofía la había nombrado. Como quedaron de verse a una hora exacta, Bruno pasó a recogerlas con gran anticipación, ya era la tarde noche, el sol se escondió totalmente. Solamente les
  • 52. toco el claxon y ellas salieron listas, se subieron al carro y emprendieron a su destino. ▬ Hablaremos y le pediremos ayuda de cómo vender la casa, si existe la posibilidad de que nos ayude a conseguir compradores. Fueron las palabras que menciono Bruno mientras encendió y movió el carro. Sospechaban de antemano que seria muy difícil, sobretodo les pediría un argumento creíble para vender la casa, algo lógico y que no este fuera de lo normal. ▬ ¡Espero que en esta ocasión nos crea! No quiero volver a ver sus gestos que nos quiere tomar a locos. Con Bruno presente cambiarían un poco las cosas, el punto principal es vender la casa y empezar de nuevo lejos de las pesadillas y las malas experiencias. Llegaron unos cuantos minutos antes de la hora acordada, Alberto aun no llegaba, bajaron todos del automóvil Andrea se dirigió a abrir la puerta de la casa y prender las luces, Sofía cargando a Gloria en sus brazos y Bruno bajo del automóvil y lo aseguro, se dirigieron a la casa. Ya casi era de noche, prepararon café para acompañar la platica, se sentaron a esperar en la sala, las luces estaban ya prendidas para que cuando Alberto llegase se diera cuenta de que estaban en la casa. Ya habían pasado mas de quince minutos y Alberto no llegabas la hora en la que quedo de llegar paso, Bruno salió a echar un vistazo para ver si llegaba, para su sorpresa estaba bajando de su carro, lo saludo con movimiento de manos, cerro su coche y se dirigió hacia el, se saludaron y pasaron a la casa.
  • 53. III Alberto vio a toda la familia reunida, entro y vio a todos sentados y se sentía como el centro de atención, se sintió observado fijamente; lo invitaron a sentarse, le ofrecieron una taza de café a lo cual el acepto gustoso. Después de acomodarse y sentarse cada quien en el lugar que le correspondiese empezaron con el principal punto de la reunión. ▬ He hablado con ustedes anteriormente y las razones por las que quieren vender la casa a mi no se me hacen lógicas, con esto no estoy tratando de decir nada, simplemente no se si creerles o tal vez la verdadera razón no me la quieren decir. Inmediatamente Alberto digo esto para hacer pensar a la familia e incitarlos a que dijesen la verdad. ▬ ¡Pues! La verdad las razones ya se las comentaron en la plática pasada. Exclamo Bruno. Usted sabe como es el trato que le damos y decirle mentiras no tendría ningún caso, le pido que nos crea porque si hubiese otra razón ya se la hubiésemos confesado. Tal vez el escuchar a un hombre hablar era lo que el necesitaba, cuando Sofía y su madre le manifestaron las razones el no creyó nada y en esta ocasión al escucharlo de la boca de Bruno, cambio un poco de parecer y le otorgo credibilidad. Tenia una manera de ser no tan agradable, después de todo esto que escucho accedió a ayudarles a vender la casa; se ofreció a conseguirles compradores, se dedicaría a buscar personas interesadas en la casa y en el momento en que tenga noticias les avisaría.
  • 54. La platica se alargo porque platicaron de otros temas, Alberto explico las razones por las que se ausento y las aventuras que paso, muchos negocios que atender, tenia a su cargo otra zona en donde se empezarían construir mas casas, administraba como iban las construcciones y también le correspondía dar algunas instrucciones. Posteriormente se enfocaron a la conversación sobre las casa, de nuevo Alberto espero por otra razón o saber si ya se habían arrepentido de la decisión que tomaron. No obstante la situación seguía siendo la misma y la decisión ya tomada y forjada sin que el más grande pretexto cambiarían de opinión. ▬ ¿Cuál fue la razón por la que los antiguos habitantes decidieron vender la casa? Me imagino que la razón fueron los mismos problemas. Esa pregunta puso muy pálido a Alberto, sentía que las cosas saldrían a flote y que lo que tanto quería guardar y dejar en el pasado estaba apunto de ser sabido, por mas que se oculten las cosas, en algún momento saldrán a la luz. Alberto lo único que menciono fue que se aburrieron y la vendieron, no estuvieron mucho tiempo habitándola, algo no les gusto y se marcharon. La discusión no se hizo más grande, ya estaba decidido lo que se tenía que hacer y Alberto no menciono ninguna objeción, quedaron convencidos de lo que les platico sobre los antiguos dueños de la casa. O por ahora seria una respuesta pasajera. Alberto se despidió amablemente, salió de casa y abordo su auto. Poco después la familia salió de casa antes aseguraron bien la puerta de casa y empezaron a abordar el automóvil, emprendieron el viaje de regreso a la casa de Andrea.
  • 55. Avanzaron algunos metros, todo bien, Sofía iba al lado de Bruno, ella comentaba algunas palabras sobre lo anterior, discutiendo todo lo necesario y requerido y cuando alguien compre la casa no haya problemas para cerrar el trato. Unos instantes después todos iban en silencio, en el camino que seguían para llegar a la casa de Andrea hay un pequeño tramo que esta muy oscuro, solo son unos metros pero se hacían eternos porque lo único que se veía eran las luces que alumbraban el camino. Mirando fijamente por el cristal algo llamo la atención de Sofía, Bruno disminuyo la velocidad un poco, Sofía pudo ver claramente a un hombre vestido de negro, la cara no pudo verla pero ella sentía una mirada fija y muy pesada, como llamo tanto su atención que ese lapso de tiempo se hizo eterno, aquella presencia empezó a flotar y se dirigió hacia el carro, voló tan rápidamente que dio una impresión de que se estrello contra el carro, sus manos las puso en el vidrio y se quedo mirando a Sofía; sus ojos eran rojos ella de la impresión grito tan fuerte, los demás con miradas de haber tenido una gran sorpresa, Bruno se asusto del grito que casi pierde el control del vehículo. Salieron de ese trayecto oscuro y se detuvo en un lugar para ver que era lo sucedido. ▬ ¿Qué te pasa Sofía? ¿Por qué gritaste? ▬ ¡A caso no viste ese demonio que casi se estrello con el carro. La mujer muy aterrada temblaba de una manera increíble, Andrea y Gloria estaban tan sorprendidas que al solo escucharla les entro un miedo enorme. Andrea le volvió a preguntar que paso ya que quería asegurarse de escucharla nuevamente y verificar l que dijo antes, la respuesta fue la misma, al parecer nadie vio a ese ente solamente ella fue la de
  • 56. ese momento tan desagradable. Bruno pidió calma y emprendió el camino a casa. llegando allá ella seguía muy aterrada y las manos le temblaban con mucha fuerza, no podía controlar sus nervios, se apoyo con Bruno para poder bajar del vehículo, el con sus brazos la apoyo y la ayudo a entrar a la casa. Atrás de ellos venían Andrea y Gloria quien ya venia soñolienta, solo era cuestión de llevarla a la cama y quedaría completamente dormida. Al ver la situación de Sofía Andrea se encargo de llevarla a la cama para que durmiese además para que no escuchara lo que su hija tenia que decir con respecto a su mal momento. Gloria se quedo dormida en una de las habitaciones, inmediatamente Andrea se dirigió a la sala donde estaban Bruno y Sofía, ella aun en estado de shock, estaba sudando mucho; Bruno le toco sus manos y las sintió completamente frías. ▬ ¿Qué fue lo que paso? ¿Qué viste? Su madre le pregunto, ella también tenia muchas ganas de saber las cosas, su duda se transformo en una preocupación. ▬ Vi algo que voló en dirección hacia nosotros, fue en esa parte que esta muy oscura, se acerco mucho a la puerta y le vi malas intenciones, tal vez quería que chocáramos o algo así ¡no se no se no se! Al borde de las lagrimas, se aferro a los brazos de Bruno y se quedo con el un largo momento. Todos ya le creyeron, al parecer todos ya habían vivido sensaciones paranormales y entendieron por lo que Sofía estaba pasando. Esa noche tranquila de algún modo, Bruno estuvo al pendiente de ella casi todas la noche, el no durmió y aun así se marcho temprano hacia sus deberes. En la mañana ella despertó mas relajada, su madre le preparo un café, en la habitación se sentaron a platicar de lo acontecido anteriormente, concluyeron que
  • 57. no se merecían lo que estaban pasando, cosas que para muchos no existen en este mundo y que no las creen y que a ellos les pase todo lo contrario. Sofía dedujo que aunque la casa la vendieran eso que los molestaba no los dejarían en paz. IV Pasaron varios días y Alberto todavía no daba buenas noticias, todo se encontraba mejor, Sofía ya había superado su crisis y el susto que recibió se marcho. Esperanzados a recibir buenas noticias porque querían vivir como un matrimonio común, ya no deseaban causarle molestias a Andrea, aunque para ella ningún problema, al contrario le daba gusto ver a su nieta todos los días. Todos los día que pasaron y que pasaran sin recibir noticias no les hacia perder la esperanza de recibir una buena notica. Alberto se encontraba descansando en su casa, le toco un día de merecido descanso, tenia muchos asuntos que atender pero esta ocasión se tomo un descanso, su casa era muy bonita y muy grande, le gustaban los espacios amplios además de que le gustaba coleccionar diversos objetos era entonces por ellos que requería espacios grandes. En su descanso se la paso mirando televisión, le gustaba mirar noticias y enterarse de los nuevos acontecimientos de cada día, era un hombre muy raro ya que aun no tenia hijos y no se casaba. Tenía muchos lujos, deseaba disfrutarlos solo por ahora y pensaba que mas
  • 58. adelante vendría una persona especial con quien compartirlos. Su habitación era lo mejor de toda la casa, enorme y con detalles caros, una cama matrimonial para el solo podía dormir y extenderse a todo lo que daba, algunos adornos como juguetes y lo principal, un enorme espejo que daba al frente de su cama, cerca del espejo que casi abarcaba una pared estaba su televisión que también era muy grande, por esa razón el podía verse a si mismo acostado en cama y viendo la televisión. En uno de esos momentos se le ocurrió ir a su cocina por un bocadillo, el trayecto hacia su cocina estaba un poco largo, dejo la televisión prendida y se dirigió a su destino. Antes de eso se le ocurrió pasar al sanitario y lavarse las manos y tal vez ponerse agua en la cara porque el día había sido caluroso. Todo normal, fue a su cocina y tomo lo que deseaba, regreso a su habitación y para su sorpresa la televisión estaba apagada, su mirada desconcertada no se hizo esperar, puso sus bocadillos y su soda en la cama y la prendió nuevamente. Se acostó y se dispuso a mirar nuevamente la televisión, miraba algún programa que hablaba de las cosas de superación personal, muy raro en el pero como no encontró nada entretenido quería escuchar algunas estupideces. Mirando fijamente el programa algo desvió su mirada hacia el enorme espejo. Alguna persona postrada en el espejo, aparentaba estar a un lado de su cama y por ese motivo miro en ese punto pero no se encontraba nadie solamente el espejo lo reflejaba. El susto era enorme que la soda que tenia en la mano se le rego por toda la cama y sus bocadillos cayeron al piso. La tención creció y la presencia tanto como el se quedaban mirando fijamente. Por increíbles esfuerzos se puso de pie sin dejar de mirarle, se acerco un poco al espejo, la persona
  • 59. reflejada hacia lo mismo casi parecían ir al mismo paso, tenia la mirada un poco abajo y Alberto no podía distinguir bien su rostro. Esa presencia poco a poco iba levantando la cara, Alberto daba un paso cada dos minutos, el miedo lo hacia quedarse paralizado y las ganas de desmayarse o gritar afortunadamente se la aguanto y se le fueron. Quedaron frente a frente y La distancia entre los dos era de un metro, su mirada de Alberto quedo mas atónita porque finalmente reconoció a ese ser; flexiono las rodillas un poco pero pudo mantenerse en pie, no se dejo vencer por el miedo. Al parecer se trataba del mismo ser que acosaba a Sofía, Alberto lo pudo ver y lo único que digo fue “Tu estas muerto” solamente esas palabras salieron de su boca quería decir mas pero todo su cuerpo se paralizo, el ser lo miro fijamente y le mostro una sonrisa tenebrosa, nada mas se reía sin hacer o decir nada, un corto tiempo paso y se sintió un viento en la habitación, el ser desapareció y justo en ese preciso momento de su desaparición el viento creció y se hizo mas fuerte a tal grado de que el espejo se rompió de una parte y pequeños trozo empezaron a volar. Tanta fue la fuerza que algunos pedazos alcanzaron a Alberto quien inmediatamente se cubrió para evitar que le hiciesen algún daño. Sus nervios en punta ya lo estaban derribando, cuando miro hacia el espejo, ya nadie estaban, la presencia desapareció. Todo esto lo tomo como una pesadilla y un mal momento, se puso sus zapatos y salió de casa, pensó que para recuperarse era mejor salir de casa que quedarse ahí. Tomo su automóvil y fue a un lugar despejado, un lugar amplio y con mucha vegetación, para respirar aire puro y despejar su mente un poco por lo acontecido. Detuvo su auto móvil en el lugar que el sintió el indicado y se puso a pensar en
  • 60. ello, todo ese momento de miedo lo quiso dejar en una alucinación, o su imaginación le jugo una broma de muy mal gusto. Varios minutos pasaron y se tranquilizo completamente, el color de su piel lo recupero debido a la palidez que tenía, sus nervios se calmaron, encendió un cigarrillo. Suspiraba porque se sentía aliviado sin embargo, algo le vino a su mente y fue las pláticas que tuvo anteriormente con Bruno y Sofía, entonces pensó en otro punto importante que le hizo tener una lógica; debido a lo que escucho le vino todo eso, su mente estaba pensando en eso y le hizo una especie de escenificación que el no deseaba pero que se tuvo que llevar a cabo por lo poderoso de la mente. Lo peor le vino cuando noto que lo que vio era alguien conocido pero que según el ya estaba muerto, entonces todo se convirtió en una gran incógnita, las platicas que entablo con Sofía y Bruno fueron sobre ese tipo de cosas y es cuando todo tenia un poco de credibilidad, nada de eso le había pasado, entonces ya empezó a darles un poco de razón. El creía que eran locuras pero ya no mas, recordaba paso a paso de todo lo que platico con ellos y sentía una gran culpa por no creerles, decidió que era el momento de pedirles disculpas. Alberto quería pedir disculpas a como diera lugar, se sentía fatal por sus acciones, tenia que investigar que era lo que Sofía veía; sentía miedo por que fuese la misma entidad que el había visto en el espejo y si es así entonces para el todo tendría sentido. Tercera parte
  • 61. El inicio I Exitoso el hombre que decidió enfocar su vida a la construcción de hogares y ayudar a las familias dándoles muchas facilidades de pagos, empezó con algunas cuantas y por cierto muy bien terminadas, decoradas y de excelente calidad. Empezando con el pie derecho llegaron las primeras personas a comprar dichas viviendas, era entonces cuando se disponían a hacer más. Debido al éxito compraba grandes áreas libres para llevar acabo mas construcciones; su nombre Carlos, Don Carlos un hombre de edad madura tenia un hijo llamado Alberto quien se encontraba estudiando aun, su madre de Alberto murió hace algunos años debido a una enfermedad incurable. Ese acontecimiento impacto a Alberto y su padre pero supieron como superarlo y seguir adelante. Alberto termino sus estudios y su padre hizo una gran fortuna con las construcción de casas, ya tenia varias vendidas, continuaba haciendo más y Alberto intervino para heredar el esfuerzo de su padre y darle continuidad, ese momento cuando decidió continuar con ese gran negocio y dejo atrás lo aprendido de los estudios y decidió dar su vida a ello. Un día de esos de mucha actividad, aparecieron unos clientes dispuestos a adquirir una casa, lo localizaron y llegaron a un trato, la casa era bonita y pequeña, ya que la familia que la quería comprar constaba solamente de la pareja y un niño de siete años, el niño era muy callado al igual que la esposa y el que
  • 62. siempre se la pasaba hablando y poniendo reglas era el hombre. En el momento en que contactaron a Alberto para hacer un trato y que el les ofreciese una casa disponible, el se la paso hablando y la esposa solo decía si a todo lo que el decía pero sin pronunciar una sola palabra, Alberto sospecho que era un hombre posesivo y se sentía demasiado hombre para tomar solo las decisiones aunque sentía que el también tenia cola que le pisen y eso que el no tenia novia aun. Después de sus observaciones y sus planteamientos opto por darles una gran oportunidad para venderles una casa, una que se acoplara a sus necesidades y que el espacio sea el adecuado ya que eran una familia pequeña. Todo resulto muy bien, el plan a lo acordado fue excelente, la familia empezó a habitar su casa nueva, era una zona muy bonita con algunos parques cerca, las calles tranquilas, la vegetación adornaba el bonito lugar. La última vez que Alberto vio a la familia la esposa tenia como moretones en el cuello, parecía como si alguien la hubiese querido estrangular. Cada vez más Alberto llegaba a la conclusión de que su marido la maltrataba muy mal. Por otra parte el niño o el hijo de la pareja mostraba una tranquilidad enorme, no mostraba una sonrisa y no tenía deseos de jugar, pareciese como si no tuviera ningún amigo. La curiosidad de Alberto era muy grande y decidió llegar hasta lo último de la situación. II
  • 63. La familia empezó a habitar la casa, Alberto decidió ayudar a la familia en cuanto a la mudanza, eran pocas sus pertenencias, a simple vista aparentaban ser una familia humilde. No se sabía cual era el oficio que desempeñaba ese hombre; la esposa y su pequeño hijo permanecían en casa. todo un misterio era esa familia, el padre de Alberto ya se sentía muy cansado para continuar y decidió que definitivamente le encargaría todo a su único hijo, son embargo, cada que se presentase la oportunidad le daba algunos consejos para que hiciese bien las cosas; con frecuencia Alberto le contaba a su padre de la familia misteriosa, le contaba de sus sospechas y suposiciones, el escuchaba atento a todo pero el consejo que el determino darle era que los asuntos íntimos y personales de cada familia no le corresponden a el. Cada familia tiene una privacidad y una manera de vivir que cualquier persona ajena no puede intervenir. Solo lo tomaba como una curiosidad ya que su padre tenia mucha razón pero a pesar de ello el lo único que quería era saber que pasaba y nada mas. Como era un hombre muy listo tenia que buscar estrategias para que la familia en especial el hombre no se diese cuenta. Pasaron algunos días y todo aparentaba estar tranquilo, sin embargo cuando Alberto pasaba de vez en cuando por la casa y echaba un vistazo y en una de esas ocasiones vio salir a la mujer a comprar algunas cosas, la observo cuidadosamente y noto que tenia un golpe en la cara, ella lo quiso tapar con una gorra en pero Alberto pudo darse cuanta de ello. Inmediatamente se marcho para que la chica no se diese cuenta de su presencia. Mientras manejaba iba pensando que su marido era un golpeador violento o era