1. TRABAJO DE ARTE Ángela Molina Cañizares COMPARACION DE DOS OBRAS DEL IMPRESIONISMO Claude Monet – ”Campo de amapolas” Edgar Degas- “Lección de danza”
4. Color: Es significativo que los impresionistas eliminen de su paleta el color negro, lo hacen porque observan que las sombras nunca son negras, sino coloreadas. Al igual, el blanco puro no existe, sino que la luz lo carga de matices innumerables. Apuestan por el color puro, aunque pueden permitirse el mezclarlos directamente sobre la superficie del lienzo. Renoir/ el baile de la Moulin G alette Monet/ regata
5. Ausencia de perspectiva: Los impresionistas abolen el concepto de la perspectiva lineal que había regido el concepto de la pintura hasta entonces, es por ello que desaparece el "primitivo" punto de fuga. Apuestan por una pintura plana y bidimensional porque en realidad es como percibe nuestra retina. Esto ya lo anticipó Manet con su Pífano Manet
6. Apariencias sucesivas. Un mismo tema es pintado repetidas veces sin más cambio que matices de iluminación cromática, de intensidad solar o de espesor de la neblina. El cuadro es simplemente un efecto de luz. Este hecho lleva a que se represente en varias ocasiones un mismo motivo, con la finalidad de captar cómo los cambios de luz transforman ese elemento. El modelo de este propósito es la serie de cinco vistas, en cinco momentos, de la catedral de Ruan por Monet
7. El movimiento El pintor se traslada con el caballete al lugar que quiere pintar para captarlo en un instante concreto, en un momento particular del día que no puede recrear en su estudio. Se busca pues lo fugaz, instantáneo, huyendo de la representación de los modelos que posan. Se busca la representación de la vida urbana en su fugacidad, siempre vista desde posiciones anguladas, tomando balcones como referencia del caballete, para transmitir el nuevo ritmo de la vida en la ciudad. Pissarro
8. La luz Es uno de los elementos fundamentales de la pintura Impresionista. Se busca trasladar al lienzo las sensaciones que se producen cuando la materia es acariciada por la luz. Una luz que diluye las formas, aclara los colores y elimina el claroscuro, alejada de los oscuros interiores que ahora son sustituidos por la luz brillante del sol. La luz tiene la capacidad de transformar una relación entre la luz, el tiempo y el espacio.
9. La pincelada La pincelada impresionista es suelta, rápida y vigorosa. La técnica es dictada por la prisa para plasmar las vibraciones de la atmósfera, utilizan toques de colores claros con poca materia y pinceles finos. Renoir
11. El objetivo de mi trabajo es comparar dos obras del Impresionismo. Los artistas seleccionados son llaman Claude Monet (1840-1926) y Edgar Degas (1834-1917) Lección de danza , 1873-75. Degas Campo de amapolas , 1875. Monet
12. Ambas pinturas son óleo sobre lienzo. Su género son figurativos: la primera obra se trata de un paisaje y la segunda es una escena. En cuanto al tema, Monet representa a su mujer y a su hijo en un campo de amapolas y Degas hace referencia a una clase de ballet. En primer lugar observamos a una bailarina que está de espaldas y a su derecha comprobamos que existe un espacio que integra al espectador en el cuadro, por lo que decimos que no es un cuadro cerrado.
15. 1ºcuadro:Hay sensación de movimiento fluido y rítmico: viene dada por los grupos de puntos que, en la parte superior, se van separando gradualmente según se acercan a la parte inferior del cuadro. 2ªcuadro: podemos apreciarlo en el movimiento de los pies y las manos, así como de la cabeza levantada, la sensación de baile de las muchachas... En esta obra lo fundamental para el artista es captar rápidamente el movimiento del cuerpo humano y no tanto una preocupación por el espacio o el paisaje que ocupan los cuerpos.
16. Monet emplea el “color local”, es el color “real” que nosotros sabemos que tienen los objetos, pero a Monet no le interesa pintar lo que sabemos, sino lo que vemos. Bajo determinadas condiciones de iluminación puede ocurrir que un objeto aparezca con otro color que no es el que debería tener según lo que sabemos de ese objeto (el «color local»), sino que el caprichoso y fugaz reflejo de la luz puede, hacer que su apariencia cambie. Así, el «color local» es un mero convencionalismo. Degas utiliza tonos pastel porque le permite poner en color rápidamente el gesto rápido del dibujo. Hay un reducido número de tonos. El color predominante es el blanco de los vestidos, mientras que el rosa de las zapatillas y de las cintas ocupa un papel secundario. A ese predominio del blanco contrasta el color negro de las cortinas y los sienas de suelo y paredes, que crean un pronunciado contraste entre las tres tonalidades y dan una gran luminosidad y vivacidad. A la vez dan sensación de pureza y limpieza Otro elemento importante es el color. Estos artistas utilizan los colores primarios (amarillo, rojo y azul) y los complementarios (violeta, verde y naranja). No funden los colores, sino que ha de ser el ojo del espectador el que confunda los toques próximos de colores primarios.
17. Sin embargo, Degas utiliza una sorprendente riqueza de color, influenciado por la sutil armonización cromática de los grabados japoneses, tendió más tarde hacia un mayor equilibrio entre las masas y el color, lo que influiría notablemente en la renovación de la pintra de su tiempo. En Monet , la consistencia de la luz natural en las figuras, los árboles y las flores, tan maravillosamente lograda como la gracia espontánea de las actitudes y los movimientos, es un triunfo del color Monet Degas
18. La luz La iluminación de la escena combina magistralmente la luz del fondo con la sombra del camino en el primer plano. Las sombras del camino están realizadas a base de pinceladas de un intenso color rosado que contrasta con el verde de la vegetación y hace vibrar todo el conjunto. La luz es natural, llega desde varias direcciones y se infiere por los reflejos en los trajes de las bailarinas
19. La línea En ambas obras prevalece el color sobre la línea. En Monet no se aprecia la línea, sólo hay manchas, mientras que en el de Degas se aprecia la línea y las formas.
20. La pincelada En el campo de amapolas la pincelada es suelta, rápida y vigorosa. Monet trabaja a gran velocidad. La técnica está dictada por la prisa. En la clase de danza, la pincelada no es tan suelta ya que Degas pinta en su taller de memoria y con su nueva visión fotográfica, llega a la captación de lo instantáneo. Ambos pintores, para plasmar las vibraciones de la atmósfera, coinciden en utilizar toques yuxtapuestos de colores, con poca materia y pinceles finos.
21. El volumen El volumen no tiene gran importancia en estos artistas. Aunque en estas obras se aprecia la profundidad, al haber contraste de colores y al situar personajes al fondo. Hay sensación de espacio, la luz es natural y las figuras presentan escorzos.
23. Técnico al aire libre Monet huye de los talleres al campo. Esta predilección por los lugares abiertos viene impuesto por la temática, pero sobre todo, por ver y reproducir puros los colores.
24. Sin embargo, Degas fue todo lo contrario a la pintura al aire libre, realizó sus paisajes en el taller, casi de memoria, con lo que se apartó por completo de las premisas impresionistas; se interesa más por la iluminación interior, de sombras más cambiantes y duras.
25. Sobre el campo de amapolas y Monet: Este campo estaba cerca de Argenteuil, donde vivía Monet. en el artista se observan brillantes flores en el verde se aleja como un mar hasta el horizonte, establece sola línea de composición con las siluetas de los árboles. Monet, un pintor de grandes manchas. El tema del campo es uno de los motivos preferidos de los impresionistas, ya que permite infinitas modulaciones. El autor ha tomado varios temas bajo diferentes títulos: caminar en la pradera, campo de amapolas. Abandonando gradualmente la figura humana, no sólo se centra en los estudios de la luz y la atmósfera. Monet tiene una gran nitidez en los ojos, de hecho, es necesaria para entender el exacto tono beige y blanco que destacan sobre las praderas de éste aterciopelado especialmente al comienzo del verano. Monet agrega brillo. Y utiliza el rojo con el verde porque sabe que contrastan mucho.
26. Sobre la clase de danza y Degas: Degas acudía con asiduidad a la Ópera de París, como espectador, pero también entre bastidores, a la sala de la danza, donde lo introdujo un amigo músico de orquesta. Las bailarinas ejerciendo durante los ensayos o en reposo, se convierten en el tema de predilección de Degas, incansablemente recuperado con numerosas variaciones en las poses y los gestos. Más que el escenario y las luces de candilejas, es el trabajo previo que le interesa: en entrenamiento. Aquí, la sesión se acaba: las alumnas están agotados, se estiran, se contorsionan para rascarse la espalda, arreglan su peinado o su ropa, un pendiente, un lazo, poco atentas al inflexible profesor, retrato de Jules Perrot, antiguo maestro de ballet. Degas ha observado con atención los gestos más espontáneos, naturales y anodinos, momentos de pausa, cuando la concentración se afloja y el cuerpo se relajan, tras el esfuerzo de un aprendizaje extenuante y de un rigor implacable.