La propuesta establece que las frecuencias de comunicación se distribuyan en partes iguales entre los medios comunitarios (33%), públicos (33%) y privados (33%). También propone exigir la profesionalización en el periodismo y la excelencia en todos los medios, incluidos los comunitarios. Además, establece que la programación de radio debe ser al menos 50% de autores nacionales, salvo en radios temáticas, pagando los derechos de autor correspondientes.