SlideShare a Scribd company logo
1 of 1
Download to read offline
Ser hombres y mujeres celestiales
7º Domingo Ordinario – Ciclo C
Las lecturas de hoy son impactantes, pues nos muestran hasta qué cimas puede llegar la nobleza
humana. En la primera encontramos a David, que está proscrito en los montes. Una noche llega hasta
el campamento del rey Saúl, que lo está persiguiendo. Todos duermen, el rey está a su alcance,
dormido e indefenso, podría matarlo. Pero no lo hace y respeta su vida. ¿Qué hombre perseguido
perdería la oportunidad de deshacerse de su enemigo?
En el evangelio, Jesús nos habla de un amor que parece imposible: amor al enemigo, piedad con los
que nos quieren mal, generosidad con los que abusan de nosotros, perdón a los que nos maltratan…
Porque si amamos a los que nos aman, si somos amables con los que nos caen bien, ¿qué hay de
especial en nosotros? ¡Cualquiera lo haría!
Es curioso. Solemos decir que fallar, equivocarse, pecar y ser mezquinos, a fin de cuentas, ¡es humano!
Incluso parece que se elogia y se valora la mediocridad y la pequeñez de alma. ¡Es tan común! En
cambio, un amor incondicional, generoso, que perdona todo; un gesto como el de David o la
magnanimidad de Jesús perdonando a sus verdugos, nos parecen sobrehumanos. O más bien
“inhumanos”. Pensamos que son actitudes heroicas, pero que no van con nuestra naturaleza. Algunos,
más cínicos, lo consideran una locura o una especie de desequilibrio mental.
Pero ¿es realmente así? ¿Acaso no es el amor heroico lo que justamente nos hace más humanos? ¿No
es la superación de nuestras tendencias e instintos lo que nos distingue de los animales y nos hace
más personas? ¿No está inscrito en nuestra naturaleza un deseo innato de crecer y superar nuestros
límites? ¿Acaso no es humano aspirar a la verdad, a la belleza, a un bien mayor?
Claro que lo es. Jesús no nos pide nada inhumano ni imposible, porque conoce nuestra naturaleza.
San Pablo lo explica con palabras muy bellas. Somos seres físicos, animales, por supuesto. Pero en
nosotros también hay una parte espiritual que aspira a trascender. Somos seres espirituales, “hombres
de cielo”. Somos terrenales y celestiales a la vez.
Por nacimiento hemos recibido toda nuestra herencia genética, familiar, histórica… Nuestra parte
terrenal incluye nuestra biología y nuestra psicología, lo que nos configura como quienes somos. Pero
Jesús nos invita a un renacimiento: entrar en la vida celestial, en el reino de su Padre. Y en este
renacimiento podemos dar un paso más allá y empezar de nuevo, sin lastres ni ataduras. Podemos
llegar a esa meta a la que todos aspiramos. Es una meta alta, porque Dios ha insuflado el deseo de
cielo en nosotros. Jesús nos enseña el camino. Es un sendero cuesta arriba, pero abierto a paisajes
bellísimos. Sólo quien lo recorre lo sabe: es difícil amar al enemigo, perdonar a quien te ha traicionado,
ser generoso con el que te pide y delicado con quien te ofende cada día… Tampoco se trata de
exponernos inútilmente, por supuesto, sino de no abrigar odio ni resentimiento en el corazón. ¡La
venganza también es una esclavitud! En cambio ¡cuán libre y cuán dichosa se siente el alma, cuando
elegimos amar como Jesús nos propone! Ser semejantes a Dios, en esto, no nos quitará humanidad,
sino al contrario: nos hará vivir una vida totalmente humana, profunda e intensa, como nunca hayamos
podido imaginar. Nos hará vivir una vida que ya es un poco divina: la vida que Jesús posee, la vida
que nos ofrece a todos.

More Related Content

What's hot (20)

Domingo Sagrada Familia A 26/12/2010
Domingo Sagrada Familia A 26/12/2010Domingo Sagrada Familia A 26/12/2010
Domingo Sagrada Familia A 26/12/2010
 
Seguimiento jesus
Seguimiento jesusSeguimiento jesus
Seguimiento jesus
 
¿Qué hace Dios?
¿Qué hace Dios?¿Qué hace Dios?
¿Qué hace Dios?
 
La verdadera-navidad-es
La verdadera-navidad-esLa verdadera-navidad-es
La verdadera-navidad-es
 
6. el seguimiento de cristo
6. el seguimiento de cristo6. el seguimiento de cristo
6. el seguimiento de cristo
 
El mal y su remedio
El mal y su remedioEl mal y su remedio
El mal y su remedio
 
1 Domingo Cuaresma - A
1 Domingo Cuaresma - A1 Domingo Cuaresma - A
1 Domingo Cuaresma - A
 
Domingo vigésimo segundo TO. 2014
Domingo vigésimo segundo TO. 2014Domingo vigésimo segundo TO. 2014
Domingo vigésimo segundo TO. 2014
 
El ciego de nacimiento
El ciego de nacimientoEl ciego de nacimiento
El ciego de nacimiento
 
Dom26 b12cas
Dom26 b12casDom26 b12cas
Dom26 b12cas
 
Domingo 4º de cuaresma reflexión 2011
Domingo 4º de cuaresma reflexión 2011Domingo 4º de cuaresma reflexión 2011
Domingo 4º de cuaresma reflexión 2011
 
Cuaresma 4ta- abiert@s o cerrad@s a la luz
Cuaresma 4ta- abiert@s o cerrad@s a la luzCuaresma 4ta- abiert@s o cerrad@s a la luz
Cuaresma 4ta- abiert@s o cerrad@s a la luz
 
La Pedagogía de Jesús
La Pedagogía de JesúsLa Pedagogía de Jesús
La Pedagogía de Jesús
 
9 y-si-le-hablo-a-otras-personas-de-jesús-y-no-pasa-nada1
9 y-si-le-hablo-a-otras-personas-de-jesús-y-no-pasa-nada19 y-si-le-hablo-a-otras-personas-de-jesús-y-no-pasa-nada1
9 y-si-le-hablo-a-otras-personas-de-jesús-y-no-pasa-nada1
 
Dios es amor i (presentación)
Dios es amor i (presentación)Dios es amor i (presentación)
Dios es amor i (presentación)
 
Domingo 24 t. o. asun
Domingo 24 t. o. asunDomingo 24 t. o. asun
Domingo 24 t. o. asun
 
Bo Pastor
Bo PastorBo Pastor
Bo Pastor
 
Dom pascua c 4 10 asun
Dom pascua c 4 10 asunDom pascua c 4 10 asun
Dom pascua c 4 10 asun
 
V Domingo de Pascua
V Domingo de PascuaV Domingo de Pascua
V Domingo de Pascua
 
IV Domingo de Cuaresma - Ciclo A
IV Domingo de Cuaresma - Ciclo AIV Domingo de Cuaresma - Ciclo A
IV Domingo de Cuaresma - Ciclo A
 

Similar to 7 Domingo Ordinario - C

Similar to 7 Domingo Ordinario - C (20)

14 Domingo Ordinario - A
14 Domingo Ordinario - A14 Domingo Ordinario - A
14 Domingo Ordinario - A
 
2º Domingo de Pascua - B
2º Domingo de Pascua - B2º Domingo de Pascua - B
2º Domingo de Pascua - B
 
7º domingo ordinario - A
7º domingo ordinario - A7º domingo ordinario - A
7º domingo ordinario - A
 
23 Domingo Ordinario - C
23 Domingo Ordinario - C23 Domingo Ordinario - C
23 Domingo Ordinario - C
 
4 Domingo de Pascua - B
4 Domingo de Pascua - B4 Domingo de Pascua - B
4 Domingo de Pascua - B
 
Retiro desde Caleruega: Adviento y Navidad 2020
Retiro desde Caleruega: Adviento y Navidad 2020Retiro desde Caleruega: Adviento y Navidad 2020
Retiro desde Caleruega: Adviento y Navidad 2020
 
Ensayo Jesus Mi Salvador
Ensayo Jesus Mi SalvadorEnsayo Jesus Mi Salvador
Ensayo Jesus Mi Salvador
 
31 Domingo Ordinario - C
31 Domingo Ordinario - C31 Domingo Ordinario - C
31 Domingo Ordinario - C
 
32 domingo ordinario - C
32 domingo ordinario  - C32 domingo ordinario  - C
32 domingo ordinario - C
 
29 Domingo Ordinario - B
29 Domingo Ordinario - B29 Domingo Ordinario - B
29 Domingo Ordinario - B
 
Tarea bienaventuranzas
Tarea bienaventuranzasTarea bienaventuranzas
Tarea bienaventuranzas
 
20 domingo ordinario c
20 domingo ordinario c20 domingo ordinario c
20 domingo ordinario c
 
tema los que olvidan.pdf
tema los que olvidan.pdftema los que olvidan.pdf
tema los que olvidan.pdf
 
4º Domingo Pascua - A
4º Domingo Pascua - A4º Domingo Pascua - A
4º Domingo Pascua - A
 
.ser xto
.ser xto   .ser xto
.ser xto
 
31/08/2014
31/08/201431/08/2014
31/08/2014
 
José Luis Caravias. Cristo nuestra esperanza
José Luis Caravias. Cristo nuestra esperanzaJosé Luis Caravias. Cristo nuestra esperanza
José Luis Caravias. Cristo nuestra esperanza
 
30 Domingo Ordinario - C
30 Domingo Ordinario - C30 Domingo Ordinario - C
30 Domingo Ordinario - C
 
6º domingo b t.o.
6º domingo b   t.o.6º domingo b   t.o.
6º domingo b t.o.
 
5 Domingo Cuaresma - B
5 Domingo Cuaresma - B5 Domingo Cuaresma - B
5 Domingo Cuaresma - B
 

More from JoaquinIglesias

More from JoaquinIglesias (20)

2º Domingo de Adviento - ciclo C
2º Domingo de Adviento - ciclo C2º Domingo de Adviento - ciclo C
2º Domingo de Adviento - ciclo C
 
Anunciación del Señor - A
Anunciación del Señor - AAnunciación del Señor - A
Anunciación del Señor - A
 
Sagrado Corazón de Jesús - A
Sagrado Corazón de Jesús - ASagrado Corazón de Jesús - A
Sagrado Corazón de Jesús - A
 
Santiago Apóstol
Santiago ApóstolSantiago Apóstol
Santiago Apóstol
 
San Juan Bautista
San Juan BautistaSan Juan Bautista
San Juan Bautista
 
34 Domingo Ordinario - C
34 Domingo Ordinario - C34 Domingo Ordinario - C
34 Domingo Ordinario - C
 
San José - A
San José - ASan José - A
San José - A
 
Todos los Santos - A
Todos los Santos - ATodos los Santos - A
Todos los Santos - A
 
San pedro y San Pablo A
San pedro y San Pablo ASan pedro y San Pablo A
San pedro y San Pablo A
 
Fieles Difuntos A
Fieles Difuntos AFieles Difuntos A
Fieles Difuntos A
 
Asunción de María A
Asunción de María AAsunción de María A
Asunción de María A
 
Inmaculada Concepción de María
Inmaculada Concepción de María Inmaculada Concepción de María
Inmaculada Concepción de María
 
10 domingo ordinario - A
10 domingo ordinario - A10 domingo ordinario - A
10 domingo ordinario - A
 
33 Domingo Ordinario - C
33 Domingo Ordinario - C33 Domingo Ordinario - C
33 Domingo Ordinario - C
 
32 Domingo Ordinario - C
32 Domingo Ordinario - C32 Domingo Ordinario - C
32 Domingo Ordinario - C
 
29 Domingo Ordinario - C
29 Domingo Ordinario - C29 Domingo Ordinario - C
29 Domingo Ordinario - C
 
28 Domingo Ordinario - C
28 Domingo Ordinario - C28 Domingo Ordinario - C
28 Domingo Ordinario - C
 
27 Domingo Ordinario - C
27 Domingo Ordinario - C27 Domingo Ordinario - C
27 Domingo Ordinario - C
 
26 Domingo Ordinario - C
26 Domingo Ordinario - C26 Domingo Ordinario - C
26 Domingo Ordinario - C
 
25 Domingo Ordinario - C
25 Domingo Ordinario - C25 Domingo Ordinario - C
25 Domingo Ordinario - C
 

Recently uploaded

PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdf
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdfPARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdf
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdfAntonio Miguel Salas Sierra
 
Salmo 50 un salmo de mucha bendicion para todos
Salmo 50 un salmo de mucha bendicion para todosSalmo 50 un salmo de mucha bendicion para todos
Salmo 50 un salmo de mucha bendicion para todospregonerodejusticia2
 
Agenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdf
Agenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdfAgenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdf
Agenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdfPr. David Xolo
 
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxPARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxAntonio Miguel Salas Sierra
 
Jesus predico a los espiritus encarcelados"
Jesus predico a los espiritus encarcelados"Jesus predico a los espiritus encarcelados"
Jesus predico a los espiritus encarcelados"JOSE GARCIA PERALTA
 
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptxRecuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptxjenune
 
EL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdf
EL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdfEL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdf
EL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdfOscar Briones
 
CARTA de Dios para ti. Dios hablando contigo
CARTA  de Dios para ti. Dios hablando contigoCARTA  de Dios para ti. Dios hablando contigo
CARTA de Dios para ti. Dios hablando contigomrosemt8596
 
Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada
Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada  Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada
Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada Opus Dei
 
"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23
"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23
"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23JOSE GARCIA PERALTA
 
Estudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdf
Estudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdfEstudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdf
Estudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdfMCARRANZA2
 
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptxRecuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptxjenune
 
La Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguir
La Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguirLa Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguir
La Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguirpregonerodejusticia2
 
tratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdf
tratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdftratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdf
tratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdfalexramires797
 
GUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdf
GUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdfGUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdf
GUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdfAntonio Miguel Salas Sierra
 

Recently uploaded (20)

PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdf
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdfPARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdf
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdf
 
Salmo 50 un salmo de mucha bendicion para todos
Salmo 50 un salmo de mucha bendicion para todosSalmo 50 un salmo de mucha bendicion para todos
Salmo 50 un salmo de mucha bendicion para todos
 
Agenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdf
Agenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdfAgenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdf
Agenda Organización Escuela Sabatica Culto (Opción 1).pdf
 
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxPARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR-CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
 
Jesus predico a los espiritus encarcelados"
Jesus predico a los espiritus encarcelados"Jesus predico a los espiritus encarcelados"
Jesus predico a los espiritus encarcelados"
 
Luisa de Marillac, cuidado de los galeotes
Luisa de Marillac, cuidado de los galeotesLuisa de Marillac, cuidado de los galeotes
Luisa de Marillac, cuidado de los galeotes
 
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptxRecuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #5.pptx
 
EL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdf
EL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdfEL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdf
EL DISPENSACIONALISMO Qué es realmente?.pdf
 
Luisa de Marillac y los niños abandonados
Luisa de Marillac y los niños abandonadosLuisa de Marillac y los niños abandonados
Luisa de Marillac y los niños abandonados
 
Luisa de Marillac y cuidado de las personas ancianas
Luisa de Marillac y cuidado de las personas ancianasLuisa de Marillac y cuidado de las personas ancianas
Luisa de Marillac y cuidado de las personas ancianas
 
CARTA de Dios para ti. Dios hablando contigo
CARTA  de Dios para ti. Dios hablando contigoCARTA  de Dios para ti. Dios hablando contigo
CARTA de Dios para ti. Dios hablando contigo
 
Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada
Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada  Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada
Guadalupe Ortiz de Landázuri, biografía ilustrada
 
"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23
"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23
"espiritu alma y cuerpo" 1 Tesalonicenses 5:23
 
Estudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdf
Estudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdfEstudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdf
Estudio Biblico El libro de Enoc Anonimo.pdf
 
Luisa de Marillac: cuidado de los enfermos pobres
Luisa de Marillac: cuidado de los enfermos pobresLuisa de Marillac: cuidado de los enfermos pobres
Luisa de Marillac: cuidado de los enfermos pobres
 
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptxRecuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #4.pptx
 
La Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguir
La Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguirLa Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguir
La Predicación de los Puritanos un ejemplo a seguir
 
tratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdf
tratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdftratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdf
tratado-de-egguns70pag-130221102039-phpapp02 4.pdf
 
Lleva Frutos Como Cristo - Serie de Enseñanzas
Lleva Frutos Como Cristo - Serie de EnseñanzasLleva Frutos Como Cristo - Serie de Enseñanzas
Lleva Frutos Como Cristo - Serie de Enseñanzas
 
GUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdf
GUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdfGUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdf
GUÍA PARA EL REZO DEL SANTO ROSARIO, tamaño cuartilla A5 .pdf
 

7 Domingo Ordinario - C

  • 1. Ser hombres y mujeres celestiales 7º Domingo Ordinario – Ciclo C Las lecturas de hoy son impactantes, pues nos muestran hasta qué cimas puede llegar la nobleza humana. En la primera encontramos a David, que está proscrito en los montes. Una noche llega hasta el campamento del rey Saúl, que lo está persiguiendo. Todos duermen, el rey está a su alcance, dormido e indefenso, podría matarlo. Pero no lo hace y respeta su vida. ¿Qué hombre perseguido perdería la oportunidad de deshacerse de su enemigo? En el evangelio, Jesús nos habla de un amor que parece imposible: amor al enemigo, piedad con los que nos quieren mal, generosidad con los que abusan de nosotros, perdón a los que nos maltratan… Porque si amamos a los que nos aman, si somos amables con los que nos caen bien, ¿qué hay de especial en nosotros? ¡Cualquiera lo haría! Es curioso. Solemos decir que fallar, equivocarse, pecar y ser mezquinos, a fin de cuentas, ¡es humano! Incluso parece que se elogia y se valora la mediocridad y la pequeñez de alma. ¡Es tan común! En cambio, un amor incondicional, generoso, que perdona todo; un gesto como el de David o la magnanimidad de Jesús perdonando a sus verdugos, nos parecen sobrehumanos. O más bien “inhumanos”. Pensamos que son actitudes heroicas, pero que no van con nuestra naturaleza. Algunos, más cínicos, lo consideran una locura o una especie de desequilibrio mental. Pero ¿es realmente así? ¿Acaso no es el amor heroico lo que justamente nos hace más humanos? ¿No es la superación de nuestras tendencias e instintos lo que nos distingue de los animales y nos hace más personas? ¿No está inscrito en nuestra naturaleza un deseo innato de crecer y superar nuestros límites? ¿Acaso no es humano aspirar a la verdad, a la belleza, a un bien mayor? Claro que lo es. Jesús no nos pide nada inhumano ni imposible, porque conoce nuestra naturaleza. San Pablo lo explica con palabras muy bellas. Somos seres físicos, animales, por supuesto. Pero en nosotros también hay una parte espiritual que aspira a trascender. Somos seres espirituales, “hombres de cielo”. Somos terrenales y celestiales a la vez. Por nacimiento hemos recibido toda nuestra herencia genética, familiar, histórica… Nuestra parte terrenal incluye nuestra biología y nuestra psicología, lo que nos configura como quienes somos. Pero Jesús nos invita a un renacimiento: entrar en la vida celestial, en el reino de su Padre. Y en este renacimiento podemos dar un paso más allá y empezar de nuevo, sin lastres ni ataduras. Podemos llegar a esa meta a la que todos aspiramos. Es una meta alta, porque Dios ha insuflado el deseo de cielo en nosotros. Jesús nos enseña el camino. Es un sendero cuesta arriba, pero abierto a paisajes bellísimos. Sólo quien lo recorre lo sabe: es difícil amar al enemigo, perdonar a quien te ha traicionado, ser generoso con el que te pide y delicado con quien te ofende cada día… Tampoco se trata de exponernos inútilmente, por supuesto, sino de no abrigar odio ni resentimiento en el corazón. ¡La venganza también es una esclavitud! En cambio ¡cuán libre y cuán dichosa se siente el alma, cuando elegimos amar como Jesús nos propone! Ser semejantes a Dios, en esto, no nos quitará humanidad, sino al contrario: nos hará vivir una vida totalmente humana, profunda e intensa, como nunca hayamos podido imaginar. Nos hará vivir una vida que ya es un poco divina: la vida que Jesús posee, la vida que nos ofrece a todos.