El documento describe diferentes tipos de drogas psicotrópicas, incluyendo neurolépticos que se usan para tratar la depresión y las psicosis, ansiolíticos que constituyen la mitad de todos los psicofármacos consumidos mundialmente a pesar de causar síndrome de abstinencia grave, somníferos cuyo uso puede dañar el hígado y los riñones y causar otras afecciones, y grandes narcóticos usados en anestesia general que producen mayor sopor que los estupefacientes.