Mientras pequeñas diferencias nos dividan, no habrá forma de multiplicar resultados, que surgen precisamente de: Sumar lo mejor de cada cual.

1. Efrén Martín, gerente de FV y profesor de Deusto Business School
BBiioossiimmiilliittuudd
Nº 84 enero 2014 http://confidenciasdeungerente.blogspot.com www.fvmartin.net
Los humanos somos la especie más homogénea y sin embargo no hacemos más que crear diferencias extremas y falsas. Veamos las absurdas situaciones que causan percepciones y palabras: Raza (El lazarillo de Tormes): «Mi madre viuda…se fue a vivir a Salamanca… Ella y un hombre negro, vinieron en conocimiento. De manera que mi madre vino a darme un negrito muy bonito, con el cual yo jugaba y ayudaba a calentar. Y recuerdo que, estando el negro de mi padre jugando con el mozuelo, como el niño veía a mi madre y a mí blancos y a él no, huía de él con miedo y señalando con el dedo decía:¡Madre, coco! Dije para mí: ¡Cuántos debe de haber en el mundo que huyen de otros porque no se ven a sí mismos!». Edad: «Un joven comentó a su padre que había estado hablando con un viejo pescador. El progenitor conocía a todos los pescadores del lugar y preguntó extrañado: “viejo, ¿qué viejo?” El muchacho sólo pudo retener la última vocal en su respuesta, al darse cuenta, según hablaba, de que estaba metiendo la pata: “¡Pues un viejo, como thhh…!».
Género: «Cuando en 1865 se realizó la autopsia al doctor James Barry, se descubrió que, en realidad, era mujer. En aquel entonces la medicina estaba vetada al sexo femenino y se hizo pasar por hombre para poder ingresar en la universidad y alcanzar su sueño de convertirse en cirujano».
Las consecuencias de discriminar por raza, edad y género son injustas y su efecto intenta compensarse mediante normas. Pero ninguna ley nos librará de estar condicionados por temores absurdos basados en diferencias irreales:
- Muchas personas se resisten a viajar, al considerar que “el extranjero” les resulta amenazante; sin caer en la cuenta de que ya viven en un país extranjero para el resto del mundo.
- Hay quienes no se atreven a hablar con jefes y clientes; y menos ante un público. Para que ninguna persona o grupo te asuste, piensa que son… como tú.
- Mientras pequeñas diferencias nos dividan, no habrá forma de multiplicar resultados, que surgen precisamente de:
Sumar lo mejor de cada cual
“Nuestras variaciones intraespecie son modestas cuando se las compara con otras especies mamíferas (Templeton 1998), y el nivel de diferenciación está por debajo del umbral usado para identificar subespecies (razas).
Entre los humanos, las razas como subespecies no existen desde el punto de vista de la diferenciación genética. Es genéticamente indefendible y biológicamente equívoco”.
Juan Carlos Skewes