Los resúmenes presentan historias cortas escritas por niños de una escuela hogar. Las historias incluyen a personajes como una vaca llamada Luli, una princesa llamada Alexia, un hombre llamado Arturo con una espada mágica, un caracol y una araña, y más.
1. Creadores de cuentos!!!!!
Aquí les presentamos una serie de
Maravillosos y fabulosos textos
pensados y escritos por los chicos
de la Escuela Hogar del
Paraje Pichi Leufu
¡A disfrutar!
2. Luli y los animales
Había una vez una vaca que estaba enamorada de un toro; la vaca se llama Luli y el toro se llama Arnaldo... peroel toro estaba enamorado de una oveja llamada Norma. El toro era alto con músculos fuertes, en cambio la vacaLuli era gentil, gordita y fuerte. Ellos Vivian en una granja ubicada en un pueblo abandonado en Buenos Aires.
Un día Luli a la luz de la luna decidió contarle que le gustaba mucho, pero él la rechazó y ella se fue llorado.
Esa misma noche enfrente de su casa apareció una vaca llamada Nerea que la quería ayudar, entró al establo y ledijo:
-Hola... ¿Por qué lloras?
- Es que el toro que me gusta me dijo que era fea y que no me quería, pero…… ¿vos quien sos?-respondió Luli
-Yo soy Nerea, soy una vaca que tiene super poderes y que te puede ayudar.
-Yo lo único que quiero es estar con Arnaldo y no creo que me puedas ayudar- respondió Luli muy angustiada.
Mientras ellas charlaban había un toro barbudo que quería solamente que Luli sea feliz porque él una vez se habíaenamorado pero nadie lo había ayudado y así se quedó solo. Lo primero que hizo fue encerrar a Nerea en uncalabozo lleno de pinches, clavos y vidrios, mientras Luli estaba de compras. En cuanto Luli notó que Nerea ya noestaba empezó a buscarla por todos lados pero no la encontró.
El toro le dijo que para salvar a Nerea tenía que entregarle a Arnaldo. Ella no tuvo otra opción que hacerlodiciéndole que había un lugar donde había mucho pasto para que comiera él solo y ahí sería feliz, fue así queaceptó. Cuando llegaron al lugar donde estaba el toro, Luli le dijo que ya la iba sacar de su encierro, pero Nerea ledijo que se vaya, que salve a Arnaldo, porque ella podía escapar. Nerea sin pensarlo dos veces utilizó sussuperpoderes, peleó contra el toro y terminó ganando.
Así es que Arnaldo se dió cuenta que Luli era muy buena, valiente y fuertele, le propuso matrimonio y ella aceptó.Pero Nerea se tenia que ir para ayudar a otras vacas o toros y despareció en el aire.
Desde entonces, Luli prometió recordar por siempre a Nerea por haberla ayudado.
FIN
3. Alexia y Raúl
Había una vez una princesa llamada Alexia que vivía en un reino
llamado Encantia. Ella tenía un hechizo que consistía en que
cuando se ocultaba el sol y salía la luna oscura se convertía en
una ogra gorda y verde.
Un día apareció un ogro llamado Raúl, que era verde con orejas
de trompeta. Ella se enamoró perdidamente de él... pero el rey no
permitió que se casen.
Entonces el ogro enfrentó al rey y lo amenazó con matar a su
gato ¡era lo más preciado que tenia! El rey se enfureció tanto que
lo retó a un duelo de caballeros.
Cuando llego el día del enfrentamiento, el rey después de pelear
mucho, se rindió y le entregó la mano de su hija.
Y así vivieron felices para siempre y comieron muchas perdices.
FIN
4. La espada mágica
Había una vez un hombre que se llamaba Arturo. Tenía una espada mágica para luchar por su país
que siempre estaba en guerra. La espada era brillante, cubierta de oro y plata. Cuando Arturo
pasaba por la calle de la ciudad la gente exclamaba:
-¡Oooh! ¡Ahí va el salvador de un nuestro pueblo, Arturo!
Pero un día andando con su caballo blanco el animal se asustó, la espada se rompió y Arturo dijo:
-¡Noo, mi espada mágica!
Entonces la llevó a unos de sus tíos magos para que se la arreglara. Al llegar Arturo le dijo:
-Tío ¿podés armar mi espada mágica?
-Si, como no- le respondió el tío.
Después que arregló su espada Arturo tomaba un paseo por el campo cuando un hombre con
sombrero y poncho negro lo empujó y lo hizo caer del caballo. La espada de Arturo se enojó mucho,
se alzó por el aire y fue a dar a la mano de Arturo quien la agarró fuertemente, con la punta tocó al
hombre y lo convirtió en una piedra.
Arturo vivió feliz para siempre, defendiendo a su pueblo con su espada mágica.
5. El caracol y la araña
Había una vez dos amigos, el caracol y la araña, que vivían en una cueva en la punta del
cerro. La araña aunque era fea, grande, peluda, larga y ojona; era muy habilidosa para
tejer su telaraña. En cambio el caracol era lento, baboso y chiquito. Aunque eran
diferentes, se llevaban bien... a veces.
Un día el caracol estaba comiendo y se atoró. Empezó a tirar baba y la araña se reía y le
decía:
- ¡jajaja! eso te pasa por comer rápido, te atoraste jajaja!- no lo ayudó y se fue muerta de
risa.
Pero un día, la araña estaba tejiendo su telaraña, se equivocó en un punto, se cayó y
se enredó en su propia telaraña.
-¡Ayúdame ¡caracol! Socorro- decía la araña con mucha angustia.
Pero el caracol que ya había secado su baba se le acercó corriendo y al verla la miró y
le dijo:
-Vos te reíste de mí cuando me atoré con mi baba y no me ayudaste… ahora... ¡me toca
a mí reírme!
MORALEJA: No hagamos a los otros lo que no nos gustaría que nos hagan a
nosotros.
6. El hechizo mágico
Había una vez, una princesa que se llamaba Morena y un príncipe que estaba
enamorado de ella. Pero un hombre de la aldea llamado Jorge también estaba
enamorado de la princesa. Entonces el príncipe le pidió a la bruja que lo convierta en el
más lindo de todos para que la princesa se enamorara de él.
Entonces Jorge que era feo y narigón fue también a visitar a la bruja y le dijo:
-¡Quiero que me conviertas en el príncipe más lindo del mundo, para que la princesa
Morena se enamore de mi!
La bruja le preparó un hechizo con arañas, tiburón, lagartijas, patas de oso y
manos de caballos para que lo tomara de un trago. Fue así que luego de prepararlo, le
dijo:
-Toma de un trago este líquido y te convertirás en lo que me habías pedido pero… ¡ojo! a
las diez de la noche el hechizo se te terminará y serás otra vez el hombre feo y narigón
de la aldea.
Cuando Jorge, el hombre de la aldea, se encontró con la princesa y estaba a
punto de darle un beso en la boca ¡se le terminó el hechizo! Morena lo empujó por la
ventana, cayó al suelo y murió por los golpes. En ese instante llegó al castillo el príncipe
galopando en su caballo bayo; abrazó fuertemente a la princesa, se casaron y fueron
felices para siempre.
FIN
7. Arthur, Malcom y el libro
Había una vez un mago muy poderoso llamado Arthur que vivía en el castillo de
un reino casi deshabitado. A unos kilómetros de allí vivía el mago maligno
Malcom que quería convertirse en el mejor mago de la historia. Para eso tenía
un libro mágico que contenía todos los hechizos pero al libro le faltaba una hoja
que pertenecía al mago Arthur.
Entonces Malcom decide hacer un duelo de magos, quien ganara se convertiría
en el mejor mago del mundo. Si Malcom ganaba obtendría la parte faltante del
libro pero si era Arthur el libro le correspondería y transformaría en sapo a
Malcom para siempre.
Cuando llegó el día del combate Malcom lanzó un hechizo para convertirlo en
sapo y Arthur se lo devolvió... ¡ambos se quedaron como sapos para toda la
vida!
8. El sapo y la abeja
Había una vez dos amigos, el caracol y la araña, que vivían en una cueva en la punta del
cerro. La araña aunque era fea, grande, peluda, larga y ojona; era muy habilidosa para
tejer su telaraña. En cambio el caracol era lento, baboso y chiquito. Aunque eran
diferentes, se llevaban bien... a veces.
Un día el caracol estaba comiendo y se atoró. Empezó a tirar baba y la araña se reía y le
decía:
- ¡jajaja! eso te pasa por comer rápido, te atoraste jajaja!- no lo ayudó y se fue muerta de
risa.
Pero un día, la araña estaba tejiendo su telaraña, se equivocó en un punto, se cayó y
se enredó en su propia telaraña.
-¡Ayúdame ¡caracol! Socorro- decía la araña con mucha angustia.
Pero el caracol que ya había secado su baba se le acercó corriendo y al verla la miró y
le dijo:
-Vos te reíste de mí cuando me atoré con mi baba y no me ayudaste… ahora... ¡me toca
a mí reírme!
MORALEJA: No hagamos a los otros lo que no nos gustaría que nos hagan a
nosotros.