SlideShare a Scribd company logo
1 of 12
Download to read offline
Experiencias curiosas para
enseñar química en el aula1
Experiències curioses per ensenyar química a l’aula
Some curious experiments to teach chemistry in the classroom
Marisa Aguilar Muñoz, Manuel Fernández Tapia y Carlos Durán Torres / Centro de Ciencia Principia (Málaga)
23
ISSN2013-1755,SCQ-IECEducacióQuímicaEduQnúmero8(2011),p.23-34DOI:10.2436/20.2003.02.59http://scq.iec.cat/scq/index.html
resumen
Una de las mejores maneras de divulgar la ciencia es realizando demostraciones experimentales en el aula. Las expe-
riencias aquí descritas se realizan con mucha frecuencia en el Centro de Ciencia Principia. Tomando las medidas de
seguridad indicadas, no han causado nunca ningún problema. Las experiencias han conseguido despertar en el alum-
nado la curiosidad, la motivación y el interés por la química y, en general, por la ciencia.
palabras clave
Experimentos, motivación, divulgación científica, reacciones químicas.
resum
Una de les millors maneres de divulgar la ciència és fer demostracions a l’aula. Les experiències que es descriuen en
aquest article es realitzen molt sovint al Centre de Ciència Principia. Realitzades amb les corresponents mesures de
seguretat, no han causat mai cap problema. Les demostracions han aconseguit desvetllar en l’alumnat la curiositat, la
motivació i l’interès per la química i, en general, per la ciència.
paraules clau
Experiments, motivació, divulgació científica, reaccions químiques.
abstract
One of the best ways of making science popular is by demonstrating experiments in the classroom. The experiments described
here are done frequently at the Principia Science Centre. These experiments are easy to do and have never caused any safety
issues. However, they have aroused students curiosity, motivation, and an interest in chemistry and in science in general.
keywords
Experiments, motivation, popular science, chemical reactions
Introducción
La enseñanza de la ciencia, en
particular, la de la física y la quí-
mica, ha tenido y sigue teniendo
una dificultad mayor que la de
otras asignaturas. Ello es debido a
múltiples factores, entre los que
no hay que olvidar el hecho de
que una parte del profesorado
ha creído necesario elevar el
nivel de los programas de las
asignaturas, pensando que con
ello se conseguirían alumnos
mejor preparados.
Evidentemente, la pluralidad de
alumnos con muy diferentes
conocimientos básicos que llegan
a las aulas donde se imparten las
asignaturas de física y química
hace que sea necesario comenzar
por unos niveles a veces por
debajo de los establecidos en los
programas oficiales.
Se hace difícil de cualquier
modo la unificación de esos míni-
mos niveles para el aprendizaje
de estas asignaturas de ciencias.
1. Aquest article va ser la ponència de clausura de les IV Jornades sobre l’Ensenyament de la Física i la Química – I Trobada d’Educació Quími-
ca, que va tenir lloc el dia 26 de març de 2011 a CosmoCaixa (Barcelona).
EducacióQuímicaEduQnúmero8
24
Pero la causa principal hay que
buscarla en los primeros momen-
tos en que el alumno debe recibir
las elementales nociones relacio-
nadas con la ciencia, y ello ten-
dría que ser durante los años de
enseñanza primaria.
Es entonces cuando los alum-
nos tienen capacidad para rete-
ner ideas que se les muestren de
una forma muy visual y entrete-
nida, haciendo que el progresivo
aprendizaje en los años siguien-
tes no sea algo abstracto e
incomprensible, como desgracia-
damente ocurre muchas veces.
Por ello, tanto en esos años de
enseñanza primaria como en los
posteriores de secundaria e inclu-
so en el bachillerato, las clases de
ciencias experimentales, concreta-
mente, las de química, deben
tener una dosis de motivación que
bien se puede alcanzar con el uso
frecuente de experiencias de labo-
ratorio, clases teóricas y visitas a
determinados lugares estratégicos
donde la química sea un referente
de la historia de la ciencia.
Tampoco ayuda el hecho de
que a nivel popular se hable de la
química como de algo artificial y,
generalmente, negativo: «esto
tiene mucha química» o «este
plato es pura química», o lo
absurdo que resulta que para dos
personas que coinciden en
muchas cosas se diga que «existe
química entre ellas».
Las experiencias que aquí se
muestran se realizan con mucha
frecuencia en el Centro de Cien-
cia Principia. Además, son fáciles
de realizar por parte de los profe-
sores, con materiales que se pue-
den encontrar en casi todos los
centros educativos (y que pueden
ser sustituidos por productos
naturales y material de vidrio
casero), y pueden enfocarse de
modo que sirvan igualmente para
alumnos de diferentes edades
con tal de que la explicación
correspondiente se adecue a sus
conocimientos.
No obstante, aunque las expe-
riencias sean asequibles, hay que
tener en cuenta las normas de
seguridad correspondientes.
Reacciones ácido-base
Para introducir la diferencia
entre sustancias ácidas y básicas
se pueden realizar estas expe-
riencias, en las que se emplean
distintos indicadores. Los indica-
dores tienen la ventaja de ser
sustancias que producen reaccio-
nes muy vistosas y coloridas que
se pueden emplear como pretex-
to para la introducción de con-
ceptos abstractos como puede ser
el de pH.
Antes de introducir en el aula
la idea de pH, sería conveniente
que los alumnos tuviesen clara la
diferencia entre disoluciones áci-
das, neutras y básicas de una
manera natural y experimental.
El concepto ácido les es conocido
porque han experimentado algu-
na vez el sabor de sustancias áci-
das, como el jugo de limón, pero
suelen confundirlo con sustan-
cias corrosivas o peligrosas. Las
disoluciones neutras suelen aso-
ciarlas a sustancias inocuas o
«naturales» cuyo pH, por supues-
to, creen que es 5,5. No tienen
tan claro el concepto sustancia
básica y, en general, les cuesta
trabajo presentar algún ejemplo.
La idea que suelen tener los
alumnos sobre el pH suele ser
confusa y muchas veces equivo-
cada. Una parte de la culpa la tie-
nen los medios de comunicación,
donde se habla del pH como de
un tecnicismo, presentándose
productos con pH 5,5 como el pH
«natural» para hacer ver que hay
mucha ciencia detrás de ellos.
Otra parte de culpa la tenemos
los profesores como consecuen-
cia del excesivo enfoque mate-
mático en el que se incurre con
frecuencia, presentando el pH
como una mera fórmula:
pH = –log [H3O+].
El pH es una magnitud cuanti-
tativa, un valor numérico; es
decir, las disoluciones no tienen
pH ácidos, básicos o neutros, sino
que las disoluciones con valores
del pH > 7 son básicas, las que
tienen valores de pH < 7 son áci-
das y para una disolución neutra
o para el agua pura, a 25 ºC, el
pH = 7 (Jiménez Liso et al., 2000).
En las experiencias que se deta-
llan a continuación se suele par-
tir de explicaciones poco
convincentes para que los alum-
nos se planteen lo que está ocu-
rriendo realmente e intenten dar
una explicación científica.
Tanto en esos años de enseñanza primaria como en
los posteriores de secundaria e incluso en el
bachillerato, las clases de ciencias experimentales,
concretamente, las de química, deben tener una
dosis de motivación que bien se puede alcanzar con
el uso frecuente de experiencias de laboratorio,
clases teóricas y visitas a determinados lugares
estratégicos donde la química sea un referente de la
historia de la ciencia
Antes de introducir en el
aula la idea de pH, sería
conveniente que los
alumnos tuviesen clara
la diferencia entre
disoluciones ácidas,
neutras y básicas de una
manera natural y
experimental
«El arco iris químico».
Utilización de indicadores
En el Centro de Ciencia Princi-
pia, normalmente, se presenta a
los alumnos esta experiencia de
forma recreativa. Se muestran
dos jarras: una de ellas con agua
«normal» y la otra con «agua del
arco iris». Al añadir agua de la
primera de ellas a las copas
«vacías» no ocurre nada extraño
y el agua permanece incolora,
pero al añadir «agua del arco iris»
comienzan a aparecer colores
(fig. 1), con lo que se crea un con-
flicto entre la explicación que se
les está dando (agua del arco iris)
y lo que observan. De esta mane-
ra, las preguntas surgen de
manera espontánea y, dependien-
do del nivel de los alumnos, se
puede hablar en mayor o menor
profundidad de los conceptos
ácido, base, neutralización y pH y
cómo pueden afectar a las reac-
ciones químicas.
Consideraciones didácticas
Esta experiencia suele tener
una gran aceptación, ya que es
muy vistosa por los colores que
aparecen. La solemos presentar
sin explicar que se trata de reac-
ciones químicas, de manera que
sean los propios alumnos los que
nos pregunten lo que ocurre real-
mente, con lo que es más fácil
introducir los conceptos reacción y
pH, ya que están muy motivados.
La explicación del «agua del arco
iris» no suele dejarles satisfechos
y con frecuencia indican que
debe haber alguna sustancia en
las copas antes de hacer la expe-
riencia; casi siempre hablan de
colorantes, pero les hacemos
notar que si así fuera, aparecerí-
an colores al añadir agua la pri-
mera vez. Esto nos da ocasión
para hablar de la reacción como
cambio químico y de la forma-
ción de sustancias nuevas.
TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8
25
Figura 1. Experiencia «El arco iris químico».
Procedimiento experimental
Se preparan dos jarras de agua transparentes de 1 L: una de ellas
llena de agua (no importa si es del grifo) y la otra, con una disolu-
ción de NaOH 0,05 M (10 g en 5 L), y siete copas o vasos transparen-
tes en los que se vierten varias gotas de indicadores preparados
como se indica a continuación:
Se parte de tres disoluciones de indicadores que se preparan del
siguiente modo:
– Fenolftaleína: 1 g + 60 mL de alcohol 96º + 40 mL de agua destilada.
– Timolftaleína: 0,1 g + 60 mL de alcohol 96º + 40 mL de agua destilada.
– p-nitrofenol: 2 g + 60 mL de alcohol 96º + 40 mL de agua destilada.
Para obtener los diferentes colores, se mezclan estas disoluciones
de los indicadores en las proporciones (expresadas en volúmenes)
que se indican a continuación:
– Rojo: 5 fenolftaleína / 2 nitrofenol.
– Naranja: 1 fenolftaleína / 7 nitrofenol.
– Amarillo: nitrofenol.
– Verde: 3 timolftaleína / 5 nitrofenol.
– Azul: timolftaleína.
– Añil: 1 fenolftaleína / 1 timolftaleína.
– Violeta: fenolftaleína.
Una vez preparadas las disoluciones, se colocan las siete copas y se
añaden las cantidades que se muestran en el siguiente esquema:
Se añaden a cada copa unos 100 mL de agua (media copa) de la
primera jarra (no aparece color en ninguna) y, a continuación, otros
100 mL de la segunda, que contiene la disolución de NaOH 0,05 M
(aparecen los «colores del arco iris», como se muestra en la fig. 1).
Por último, se vierten todas las copas en un vaso transparente gran-
de de 1 L, en el que se han añadido 10 mL de H2SO4 2,5M para deco-
lorarlas.
1ª 2ª 3ª 4ª 5ª 6ª 7ª
1 mL
de rojo
+
2 gotas
de H2SO4
2,5M
1 mL
de naranja
+
2 gotas
de H2SO4
2,5M
2 gotas
de amarillo
+
2 gotas
de H2SO4
2,5M
1 mL
de verde
+
2 gotas
de H2SO4
2,5M
1 mL
de azul
1 mL
de añil
5 gotas
de violeta
«Test del CO2»
Se puede comprobar la acidez del aire
expulsado por los pulmones utilizando indi-
cadores como la fenolftaleína o la col lombar-
da, pues el CO2 que espiramos se disuelve
parcialmente en agua y es capaz de acidificar
una solución ligeramente básica. Al añadir en
un vaso con agua y col lombarda unas gotas
de amoníaco 1M, la disolución adquiere un
color verdoso. Soplando mediante una pajita
en el interior de la disolución, esta cambiará
a azul. Si se utiliza fenolftaleína como indica-
dor, la solución alcalina de color violeta se
decolorará al soplar a través de la pajita. Pre-
caución: hay que soplar, no aspirar (fig. 3).
Consideraciones didácticas
Estas experiencias se pueden emplear
además para la enseñanza de otros concep-
tos o procedimientos:
– Preparación de disoluciones: en los cur-
sos de ESO, se pueden aprovechar las expe-
riencias anteriores para la realización
práctica de preparación de disoluciones en
el laboratorio, lo que implica el empleo de la
balanza y el manejo de materiales específi-
cos como matraces aforados. También se
puede ver la influencia de la temperatura de
las sustancias en su solubilidad. En la pre-
paración de las disoluciones de los indicado-
EducacióQuímicaEduQnúmero8
26
Figura 2. Experiencia «La tinta camaleónica», utilizando como indicador
la col lombarda.
Procedimiento experimental
Se prepara el indicador cociendo varias hojas de col
lombarda durante unos 10 minutos en agua (a ser posi-
ble, destilada), que se coloreará de azul oscuro y se deja-
rá enfriar.
Se disponen cinco vasos. En el primero, no se añade
nada; en el segundo, se añaden unas gotas de un ácido
débil (vinagre o limón) o ácido acético 1M; en el tercero,
una disolución de NaOH 1M o unas gotas de amoníaco
1M (sustancias básicas); en el cuarto, unas gotas de
ácido fuerte, como ácido sulfúrico concentrado (H2SO4
2,5M), o unas gotas de agua fuerte comercial (ácido clor-
hídrico), y en el último, unas gotas de lejía (en este caso,
lo que hace es decolorar la col lombarda).
Se llenan los vasos hasta la mitad con agua, se añade
un poco de indicador de lombarda en cada uno y apare-
cerán los colores: azul, violeta, verde, rojo y amarillo,
respectivamente, como se observa en la fig. 2.
«La tinta camaleónica». Indicador de col lombarda
Una alternativa a la utilización de los indicadores utilizados
en el arco iris químico consiste en usar un indicador natural
presente en muchos vegetales y que aparece en especial en la
col roja o col lombarda.
Figura 3. Experiencia «Test del CO2».
res se puede observar cómo estos
son poco solubles en agua, pero
también que se aumenta su solu-
bilidad si se disuelven previa-
mente en alcohol, con lo que se
puede introducir el concepto de
los diversos tipos de disolventes.
– Conceptos mol y concentración:
en los cursos de bachillerato, se
pueden realizar además los cál-
culos correspondientes para la
preparación de las disoluciones
de las concentraciones indicadas,
con lo que se emplean los con-
ceptos mol, masa molar y concentra-
ción de una forma práctica.
– Valoraciones ácido-base: se
pueden utilizar los indicadores
preparados para la realización de
valoraciones de manera experi-
mental y realizar los cálculos
correspondientes.
Velocidad de reacción:
«La reacción del reloj de yodo»
Otro aspecto importante dentro
de las reacciones químicas es la
velocidad con la que se desarrollan.
No todas las reacciones son rápidas
como las que se han mostrado en
los experimentos anteriores, sino
que también existen reacciones
mucho más rápidas, como pueden
ser las explosiones, o muy lentas,
como la oxidación del hierro de la
reja de una catedral.
La experiencia que presentamos
es una reacción que se suele utili-
zar para estudiar la velocidad de
reacción, en la que se pueden
observar la influencia de la tempe-
ratura y la concentración de las
sustancias que intervienen. Depen-
diendo del nivel de los alumnos, se
puede hacer un enfoque más pro-
fundo o simplemente presentarla
como una reacción curiosa para
despertar su interés por la química.
Consiste en mezclar cantidades
iguales de dos disoluciones trans-
parentes e incoloras en una copa
de vidrio. Al cabo de unos 20
segundos, el contenido de la copa
se transforma de manera súbita
en un líquido negro (fig. 4).
Influencia del pH.
«El arco iris de noche y de día»
La reacción del reloj de yodo
descrita anteriormente tiene lugar
en medio ácido, pero cuando se
incrementa el pH hasta medio
alcalino, la reacción se puede
revertir. Aprovechando esta cir-
cunstancia, se puede realizar una
experiencia que puede resultar
llamativa para los alumnos y que
consiste en encadenar las reaccio-
nes del reloj de yodo y el arco iris
químico. En este caso presenta-
mos la experiencia como una sim-
ple curiosidad, debido a que
aparecen reacciones que escapan
al nivel de los alumnos no univer-
sitarios, aunque se puede consul-
tar de una manera más profunda
en la bibliografía (Aguilar Muñoz y
Durán Torres, 2011).
TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8
27
Figura 4. Experiencia «La reacción del reloj de yodo».
Procedimiento experimental
Se preparan dos disoluciones:
– Disolución A: yodato de potasio (KIO3) 0,03 M. Se disuelven 6,42 g
de KIO3 y se añade agua destilada hasta completar 1 L.
– Disolución B: hidrogenosulfito de sodio (NaHSO3) 0,03 M con
almidón. Se disuelven 3,1 g de NaHSO3 y 0,6 g de almidón en agua
destilada hasta 1 L. Conviene disolver antes el almidón en un poco de
agua caliente. También se pueden utilizar 5,75 mL de disolución de
NaHSO3 al 40 % (presentación comercial 5M) en lugar de los 3,1 g
de sólido.
Se mezclan cantidades iguales de las dos disoluciones (40 mL, por
ejemplo) en una copa transparente. Al cabo de unos 20 segundos, se
produce un cambio brusco pasando de incoloro a negro.
La reacción se produce en varias etapas:
– Etapa primera: los iones hidrogenosulfito (HSO3
-) reducen los
iones yodato (IO3
-) a iones yoduro (I-) según la reacción:
IO3
-(aq) + 3 HSO3
-(aq) © I-(aq) +3 SO4
2-(aq) + 3 H+(aq)
– Etapa segunda: los iones yoduro producidos en la etapa primera
reaccionan con los iones yodato en exceso produciendo yodo (I2):
5I-(aq) + IO3
-(aq) + 6H+(aq) © 3 I2(aq) + 3 H2O(l)
Esta reacción es muy rápida y el I2 producido reacciona con el almi-
dón para producir un complejo almidón-pentayoduro que presenta un
color azul oscuro casi negro (Aguilar Muñoz y Durán Torres, 2011).
EducacióQuímicaEduQnúmero8
28
Consideraciones didácticas
Se puede poner de relieve cómo
puede influir el pH en las reacciones
químicas y cómo algunas reacciones
solo tienen lugar a un pH determina-
do, como ocurre muchas veces en las
que tienen lugar en las reacciones
metabólicas.
Procedimiento experimental
Se preparan tres jarras trans-
parentes de 1 L. La primera se
llena con una disolución de
yodato de potasio 0,03 M (6,42 g
de KIO3 en 1 L de agua); la
segunda, con una disolución de
hidrogenosulfito de sodio
(NaHSO3) 0,03 M con almidón,
y la tercera, con hidróxido de
sodio (NaOH) 0,05 M.
Se colocan siete copas o
vasos transparentes de unos
200 mL de capacidad en los
que se vierten unas gotas de
cada uno de los indicadores
utilizados en el apartado 1.
A continuación se añaden
unos 50 mL de la disolución de
hidrogenosulfito de sodio y
almidón, que no producirán
coloración al ser el pH inferior
al de viraje de los indicadores
(fig. 5).
Se presentan a los alumnos
las jarras y los vasos, en los
que se pueden observar líqui-
dos transparentes e incoloros.
A continuación se van añadien-
do a cada copa unos 50 mL de
la disolución de yodato de
potasio 0,03 M (fig. 6). Al cabo
de unos 20 segundos, el líquido
de las copas vira brusca y suce-
sivamente a color negro (fig. 7).
Por último, se vierten otros
50 mL de la disolución de hidró-
xido de sodio (NaOH) 0,05 M,
con lo que va desapareciendo
el color negro (fig. 8) y aparecen
los colores correspondientes a
cada uno de los indicadores
(fig. 9).
Figura 5. Copas con unas gotas de cada indicador y 50 mL de la disolución B.
Figura 6. Se añaden 50 mL de la disolución A a cada copa.
Figura 7. Va apareciendo el complejo azul-negro sucesivamente.
Figura 8. Al añadir la disolución C, desaparece el color negro…
Figura 9. ... y aparece el arco iris químico.
Reacciones catalizadas
Un aspecto muy importante en las
reacciones químicas es la veloci-
dad con que transcurren, es decir,
la cinética de la reacción. Algunas
sustancias modifican la velocidad
de las reacciones sin participar
directamente en ellas y sin verse
modificadas. Son los catalizadores y
normalmente las aceleran; sin
embargo, otras sustancias las
retardan y, en este caso, reciben el
nombre de inhibidores.
Las reacciones catalizadas son
aquellas donde intervienen los
catalizadores. Este concepto suele
aparecer con cierta frecuencia en
la vida cotidiana (por ejemplo, los
catalizadores de los tubos de
escape de los coches). Incluso se
habla de «personas catalizadoras»
como de aquellas que con su pre-
sencia o intervención son capaces
de desencadenar algo. Por tanto, a
nuestros alumnos el término no les
resulta demasiado lejano, pero ¿tie-
nen ellos claro qué son los cataliza-
dores científicamente hablando?
Hay ejemplos muy asequibles
para que el alumnado comprenda
cuál es la misión de un catalizador,
como los aditivos que se añaden a
los alimentos para prolongar su
duración; en este caso actúan de
inhibidores, pues retrasan los pro-
cesos de oxidación o de descompo-
sición. También dentro de nuestro
cuerpo tenemos una gran cantidad
de catalizadores (biocatalizadores):
los más importantes se llaman
enzimas, que son proteínas y son
además muy específicas, pues algu-
nas de ellas actúan solo sobre una
molécula concreta y en una deter-
minada reacción. Son tan impor-
tantes que algunas enfermedades
se deben en última instancia a la
ausencia o la alteración de una
determinada enzima. Además,
algunas son útiles para preservar el
medio ambiente, como los cataliza-
dores de los coches, que permiten
reducir la emisión de gases conta-
minantes como óxidos de nitrógeno
(NO, NO2), CO o hidrocarburos no
quemados al acelerar procesos de
reducción de los óxidos o de oxida-
ción del CO y de los hidrocarburos
e impedir que se produzcan com-
bustiones incompletas.
Las experiencias que se descri-
ben a continuación se basan en la
reacción de descomposición cata-
lítica del peróxido de hidrógeno o
agua oxigenada. La molécula del
agua oxigenada es relativamente
estable a temperatura ambiente,
pero se descompone con facilidad
en oxígeno y agua por calenta-
miento y por exposición a la luz
solar. Además, numerosas sustan-
cias actúan como catalizadoras de
su descomposición, entre otras:
metales de transición, álcalis y
óxidos metálicos.
H2O2(ac) © H2O(l) + 1/2 O2 (g)
ΔH0 = -196,4 kJ mol-1
Vamos a realizar esta reacción
en dos experiencias distintas en
las que se utilizarán dos cataliza-
dores diferentes.
«La superespuma».
Descomposición del agua
oxigenada utilizando yoduro
de potasio como catalizador
En esta experiencia se mezclan, en
una probeta, una disolución de
agua oxigenada comercial de 110
volúmenes (30 % en masa) y un
poco de lavavajillas. Al añadir
yoduro de potasio, este actúa como
catalizador: la reacción de descom-
posición se acelera y aparece una
gran cantidad de espuma debido al
oxígeno desprendido. Al ser la reac-
ción fuertemente exotérmica, parte
del agua formada está en fase de
vapor (fig. 10).
Por otra parte, algunos aniones
yoduro (I-) se oxidan a yodo mole-
cular (I2), que reacciona con los
aniones yoduro presentes para
formar el anión triyoduro (I3
-),
produciendo una coloración
marrón, según la reacción:
I- + I2 © I3
-
TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8
29
Figura 10. En la probeta se encuentra
la disolución de peróxido de hidrógeno
con un poco de lavavajillas (a). Al
añadir la disolución de yoduro de
potasio (b), aparecen el color marrón
por la formación del anión triyoduro
(I3
-) y una gran cantidad de espuma
(c y d), pues el yoduro de potasio
actúa también de catalizador en la
descomposición del peróxido.
EducacióQuímicaEduQnúmero8
30
«El genio de la botella».
Descomposición del agua
oxigenada utilizando el óxido de
manganeso (IV) como catalizador
Para realizar este experimento,
se utiliza como catalizador el
óxido de manganeso (IV) fina-
mente dividido. Se dejan caer
0,5 g de este óxido envueltos en
un papel fino en forma de
«paquetito» en el interior de un
recipiente resistente a altas tem-
peraturas que contiene 30 mL de
agua oxigenada de 110 volúmenes.
Se produce un espectacular
chorro de vapor de agua debido a
la descomposición catalítica del
agua oxigenada, que es fuerte-
mente exotérmica (fig. 11c).
Esta experiencia se puede reali-
zar también utilizando permanga-
nato de potasio (KMnO4) en lugar
de dióxido de manganeso (IV),
pero el permanganato no actuaría
en este caso como catalizador,
sino que reaccionaría oxidando el
peróxido según la reacción:
2 MnO4
-(ac) + 3 H2O2(ac) ©
2 MnO2(s) + 2 H2O(l) + 3 O2 (g)
+ 2 OH- (ac)
En este caso, se libera más oxí-
geno que en la reacción de des-
composición catalizada del agua
oxigenada, por lo que la reacción
es más violenta.
Recomendaciones didácticas
Estas experiencias son de bajo
coste y fáciles de reproducir en el
aula o en el laboratorio. Es reco-
mendable que las realice el pro-
fesor, ya que la disolución de
agua oxigenada que se emplea es
corrosiva, irritante a los ojos y a
la piel.
Se pueden utilizar para introdu-
cir y explicar diferentes conceptos
químicos y biológicos relacionados
con la velocidad de reacción, la
catálisis, las enzimas, el poder oxi-
dante o la termoquímica.
La gran velocidad de produc-
ción de oxígeno da lugar a la for-
mación de espuma y hace que
esta experiencia se pueda emple-
ar para medir el tiempo que
tarda la espuma en alcanzar el
borde de una probeta en función
de la concentración de peróxido
empleada.
Este mismo experimento se
puede realizar usando otros cata-
lizadores, como las enzimas pero-
xidasas que existen en el hígado
o en una patata, el hierro conte-
nido en la hemoglobina de la
sangre u óxidos metálicos como
el de manganeso (IV), el de plomo
(IV) o el de hierro (III). Se puede
comprobar la distinta eficacia del
catalizador según su superficie
de contacto utilizando el óxido de
manganeso (IV) más o menos
pulverizado. La velocidad de for-
mación de la espuma variará
según la eficacia del catalizador.
Se recomienda el uso de gafas
de seguridad y guantes (Royal
Society of Chemistry, 1994).
Quimioluminiscencia: «Luz fría
con luminol»
La luminiscencia, también
conocida como luz fría, es un
fenómeno que ha llamado la
atención del hombre a lo largo de
la historia (los chinos ya la cono-
cían desde la antigüedad y la lla-
maban «el fuego frío» que emitía
«la mosca del fuego») y sigue
siendo igual de atractiva para los
estudiantes de cualquier nivel
educativo.
Un proceso luminiscente se
produce cuando un átomo es
excitado, los electrones pasan a
niveles de energía superior (sin
que sea por acción de la radia-
ción térmica) y retornan poste-
riormente al nivel fundamental
con emisión de luz.
Según el tiempo en que tarde
en emitirse la luz después de la
excitación, la luminiscencia se
clasifica en fluorescencia, si el
fenómeno es prácticamente ins-
Figura 11. En la botella se encuentra la disolución de agua oxigenada. Al desta-
parla y dejar caer sobre ella el catalizador [dióxido de manganeso (IV)], aparece
un chorro de microgotas de agua por la rápida formación de una gran cantidad de
vapor de agua.
tantáneo, o en fosforescencia, si es
más duradero. Las sustancias
fluorescentes (como la quinina o
la fluoresceína) necesitan ser
irradiadas para mostrar luminis-
cencia (fotoluminiscencia). Estas
sustancias absorben una radia-
ción de longitud de onda menor a
la que emiten, normalmente
absorben luz ultravioleta y emi-
ten luz visible. Cuando se apaga
el foco emisor de radiación, la
sustancia deja de emitir luz.
Según la forma de excitar el
electrón, la luminiscencia recibe
distintos nombres:
– Fotoluminiscencia, si es por
acción de la luz.
– Triboluminiscencia, si es por
fricción.
– Electroluminiscencia, si es por
impacto con partículas cargadas.
– Quimioluminiscencia, si es por
efecto de una reacción química.
La quimioluminiscencia es un
fenómeno que nuestros alumnos
reconocen fácilmente en algunos
animales, como las luciérnagas,
o también en las llamadas barras
de luz que se utilizan en las
acampadas o las que usan los
pescadores.
Una de las sustancias más
empleadas para realizar reaccio-
nes luminiscentes es el luminol,
descubierto por Albrecht en 1928.
El luminol (3-aminoftalhidracida),
para exhibir su luminiscencia,
debe ser excitado mediante un
agente oxidante.
En la experiencia que aquí se
describe, el luminol es oxidado en
medio básico por el oxígeno (libe-
rado en la descomposición del
peróxido de hidrógeno) a ión ami-
noftalato, que se forma en un
estado excitado, es decir, de mayor
energía, el cual se desactiva emi-
tiendo luz y produciéndose la
luminiscencia (Shakhashiri, 1983).
Esta reacción necesita ser cata-
lizada para que se produzca la
luminiscencia (véase el apartado
anterior).
Procedimiento experimental
Se pueden emplear diferentes
catalizadores, como sales de Cu
(II) o de Co (II). En este caso, utili-
zaremos como catalizador el ión
hierro (III) (Fe3+) contenido en el
hexacianoferrato (III) de potasio
(K3Fe(CN)6), conocido también
como ferricianuro de potasio.
Para ello, se prepararan las
siguientes disoluciones:
– Disolución A: se disuelven 4 g
de hidróxido de sodio (NaOH) y
0,4 g de luminol en 1 L de agua
destilada.
– Disolución B: se disuelven 4 g
de ferricianuro de potasio en
1 L de agua destilada.
Se preparan tubos de ensayo (u
otros recipientes) como se mues-
tra en la fig. 5a, cada uno con:
1. 30-40 mL de la disolución A.
Opcionalmente se pueden añadir
unas gotas de disolución de colo-
rante cromóforo (unos 0,5 mL).
2. El mismo volumen de la diso-
lución B y unas gotas (unos 0,5 mL)
de la disolución de agua oxigena-
da al 30 % (110 volúmenes).
Para poder observar la luminis-
cencia, se oscurece la habitación
y se añade poco a poco el conte-
nido del tubo 2 sobre el 1. Apare-
cerá un destello luminoso azul (la
longitud de onda de la luz emiti-
da es de 425 nm) por la quimiolu-
miniscencia del luminol.
Si se han añadido además dife-
rentes cromóforos, aparecerán
distintos colores para la luz emi-
tida: amarillento, si se añade
fluoresceína; rojo rosáceo, si se
añade rodamina B; rojo violáceo,
con rodamina 6G, y naranja, si es
eosina (mezclando fluoresceína y
rodamina B en proporción 3:1
aparece rosa pálido). Las disolu-
ciones de cromóforos se preparan
al 0,5 % en agua, excepto la de
rodamina 6G, que es una disolu-
ción al 0,5 % en alcohol.
En esta experiencia se han uti-
lizado como colorantes cromófo-
ros: rodamina 6G, fluoresceína
con timolftaleína (indicador de
pH), fluoresceína y timolftaleína
(fig. 12a), dando lugar a luz de
color azul, amarillo, verde y viole-
ta, respectivamente (fig. 12b).
TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8
31
luminol (3-aminoftalhidracida) + H2O2/Fe3+ © Ión aminoftalato * +N2 + H2O
Figura 12. Las probetas contienen luminol en
medio básico con diferentes colorantes cromó-
foros. Al añadir la disolución de ferricianuro
de potasio y agua oxigenada, se produce la
luminiscencia.
EducacióQuímicaEduQnúmero8
32
Recomendaciones didácticas
Si no se dispone de luminol, que
es un reactivo caro, se pueden com-
prar las «barras de luz» (se pueden
adquirir en tiendas de equipos para
aire libre), que contienen otra sus-
tancia luminiscente (un éster de un
feniloxalato) junto con una base
fluorescente dentro de un tubo de
cristal que se encuentra dentro de
otro de plástico que contiene la
disolución de agua oxigenada.
Cuando dicho tubo se dobla, se
rompe el de cristal y ambas disolu-
ciones se mezclan produciéndose la
reacción. En este caso no se podrí-
an realizar los experimentos ante-
riores tal como están descritos.
Se puede hacer un estudio
cualitativo sobre cómo influye la
temperatura en la velocidad de
reacción calentando o enfriando
estas «barras de luz», o bien las
soluciones antes descritas. Cuan-
to mayor sea la temperatura, más
intensa será la luz emitida, pero
menos duradera.
Habría que resaltar que esta
reacción del luminol tiene diver-
sas aplicaciones en distintos cam-
pos de la vida, como, por ejemplo,
para encontrar la presencia de
agua oxigenada en el agua. La
policía científica la utiliza para
detectar rastros de sangre y en
medicina general se usa para
investigar la presencia de óxido
nítrico en los gases exhalados de
enfermos asmáticos (Martín Sán-
chez y Martín Sánchez, 2001).
Reacciones redox:
«Botes de colores»
Todos hemos comprobado algu-
na vez la oxidación de una man-
zana mordida que hemos dejado
a la intemperie. Las reacciones de
oxidación-reducción (redox) for-
man una parte importante de
nuestra vida, desde la combus-
tión de los combustibles fósiles
hasta la acción de la mayoría de
los blanqueadores domésticos.
En este tipo de reacciones existe
una transferencia de electrones
Procedimiento experimental
Se preparan las siguientes disoluciones:
– Disolución A: se disuelven 20 g de NaOH en 1 L de agua.
– Disolución B: se disuelven 40 g de glucosa en 1 L de agua.
– Disolución C: se disuelve 1 g de azul de metileno en 100 mL de agua.
Nota: se puede utilizar agua del grifo. Estas soluciones pueden conservarse
durante bastante tiempo en botes bien cerrados.
En una botella o matraz, se añaden 100 mL de las disoluciones A y B,
unas dos o tres gotas de la disolución C y se tapa. Esta disolución pre-
senta un color azul intenso, pero tras unos segundos el color va desapa-
reciendo y queda totalmente incolora. Cuando se agita el frasco,
recupera el color azul, pero tras unos segundos vuelve a quedarse inco-
lora y así se produce sucesivamente un ciclo de oxidaciones y reduccio-
nes.
desde una especie denominada reductora (porque «reduce» a la otra
cediendo electrones) a otra especie que los acepta, llamada oxidante. La
oxidación es un proceso que implica una pérdida de electrones, mientras
que la reducción implica ganancia.
Las reacciones redox tienen una gran importancia tanto desde un
punto de vista industrial como desde un punto de vista biológico. En los
seres vivos forman parte de los procesos más importantes para la vida,
como la respiración y la fotosíntesis, donde se producen secuencias de
reacciones redox sucesivas.
En esta experiencia se observa cómo funcionan dos reacciones redox aco-
pladas, es decir, de forma consecutiva y cíclica. Este es un ejemplo simple
de cómo se transfieren los electrones al oxígeno del aire desde un azúcar
(como el que se ha tomado en la comida). Se utilizan reactivos que se pue-
den encontrar fácilmente en los laboratorios de secundaria o bien se pue-
den adquirir en droguerías.
Como azúcar se utiliza la glucosa, que en medio alcalino se oxida fácilmente y
reacciona con el oxígeno del aire para formar ácido glucónico, según la reacción:
Glucosa + oxígeno © ácido glucónico + OH-
Para observar esta reacción, utilizamos un indicador redox, el azul de
metileno, que se presenta en dos formas diferentes: en presencia de oxíge-
no, está en su forma oxidada y tiene color azul, siendo incoloro en su
forma reducida.
Mientras hay oxígeno disuelto en la disolución, el azul de metileno está
en su forma oxidada de color azul. Pero este oxígeno reacciona con la glu-
cosa, que se oxida hasta ácido glucónico. Cuando se consume el oxígeno, la
glucosa reacciona con el azul de metileno reduciéndolo hasta su forma
reducida, que es incolora. Al agitar el frasco, el oxígeno del aire que hay en
él se incorpora a la disolución y oxida el azul de metileno, dando lugar a su
forma oxidada de color azul. Al mismo tiempo, esta forma oxidada lenta-
mente oxida la glucosa, mientras que ella se reduce, volviendo a dar su
forma incolora inicial reducida (fig. 13).
Así transcurre de forma encadenada este ciclo de reacciones redox,
que se puede describir en el siguiente esquema:
– Etapa 1: anaeróbica (sin aire).
Azul de metileno (oxid.) + glucosa © Azul de metileno (red.) + ácido glucónico
azul incoloro
– Etapa 2: aeróbica (al agitar la botella, participa el oxígeno del aire).
Azul de metileno (red.) +O2(g)+2 H2O © Azul de metileno (oxid.) + 4OH–(ac)
incoloro azul
Recomendaciones didácticas
• Los colores del paso de azul © incoloro conseguidos con la reduc-
ción-oxidación del azul de metileno se pueden cambiar utilizando indi-
cadores de pH, puesto que este ciclo de reacciones transcurre en medio
alcalino. Para ello se preparan dos matraces con la misma mezcla que
se describió anteriormente y, además, se añade:
– Matraz A: unas gotas de una disolución de 4-nitrofenol
(véase exp. 2.1) (fig. 13a).
– Matraz B: unas gotas de una disolución de fenolftaleína
(véase exp. 2.1).
Tras unos segundos:
– Matraz A: pasará de verde a amarillo, y así sucesivamente (fig. 13b).
– Matraz B: pasará de morado a rosa, y así sucesivamente.
• Además del azul de metileno, pueden utilizarse otros indicadores
redox, como, por ejemplo, la resazurina, que produce el siguiente cam-
bio de color:
azul claro (forma reducida) ⇄ rosa púrpura (forma oxidada)
(sin agitar) (con agitación)
Con fenosafranina:
incolora (forma reducida) ⇄ rojo rosáceo (forma oxidada)
(sin agitar) (con agitación)
La reacción con índigo carmín es incluso más espectacular, con un
cambio de color amarillo a rojo con agitación suave y a verde con
agitación fuerte.
• La temperatura afecta en la velocidad de reacción, por lo que en
días fríos habría que calentar la disolución entre 25 y 50 ºC.
• Se puede comprobar que el oxígeno es el responsable del color de
los indicadores redox, eliminando el oxígeno mediante burbujeo con
nitrógeno en el matraz. Al agitar el bote, no hay cambio de color.
TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8
33
Figura 13a. Los matraces contienen la
mezcla de las disoluciones A, B y C
antes descritas. El matraz de la dere-
cha contiene además unas gotas de
una disolución de 4-nitrofenol.
Figura 13b. Tras un tiempo, el azul de
metileno se reduce, por lo que queda
incolora la disolución y el que contenía
4-nitrofenol aparece amarillo.
Recomendaciones
Aunque las experiencias que se
describen aquí no utilizan mate-
riales especialmente peligrosos o
nocivos, conviene observar las
normas elementales de seguridad
de los laboratorios químicos y
emplear los elementos de protec-
ción adecuados, como el uso de
gafas protectoras, guantes y batas.
Se pueden consultar normas de
seguridad en esta dirección web:
http://www.quimicaweb.net/ciencia/
paginas/laboratorio/normas.htm.
Conclusiones
La realización de experimentos
con los alumnos hace que
aumente su interés por saber lo
que hay detrás de ellos. Nos sue-
len preguntar por el «truco» y
dónde se pueden conseguir las
sustancias para que ellos los
puedan repetir por su cuenta. En
realidad, lo que nos están pidien-
do sin darse cuenta son las reac-
ciones químicas que tienen lugar
en las experiencias. Ello nos
muestra que tras ver las sesiones
de demostraciones de química
cambia la visión que tienen de la
asignatura.
Muchos profesores también
nos piden el procedimiento para
realizarlas y poder llevarlas al
aula con sus alumnos, lo que nos
indica que también sirve de
motivación para la enseñanza de
la química. En definitiva, la quí-
mica y, en general, las ciencias
experimentales necesitan una
base teórica, pero, como indica
su nombre, necesitan también
experimentar.
La química y, en general,
las ciencias
experimentales necesitan
una base teórica, pero,
como indica su nombre,
necesitan también
experimentar
Referencias bibliográficas
AGUILAR MUÑOZ, M.; DURÁN TORRES,
C. (2011). «Reacciones encadena-
das: Del reloj de yodo al arco iris
químico». Revista Eureka sobre
Enseñanza y Divulgación de las Cien-
cias, 8(1): 105-110. [También en:
http://hdl.handle.net/10498/10209]
JIMÉNEZ LISO, M. R.; MANUEL TORRES,
E. de; GONZÁLEZ GARCÍA, F.; SALI-
NAS LÓPEZ, F. (2000). «La utiliza-
ción del concepto de pH en la
publicidad y su relación con las
ideas que manejan los alum-
nos: Aplicaciones en el aula».
Enseñanza de las Ciencias, 18(3):
451-461.
MARTÍN SÁNCHEZ, Mª T.; MARTÍN
SÁNCHEZ, M. (2001). «Luz fría:
Trabajos experimentales senci-
llos». Anales de la Real Sociedad
Española de Química, 4: 37-42.
ROYAL SOCIETY OF CHEMISTRY (2002).
Experimentos de química clásica.
Madrid: Síntesis.
SHAKHASHIRI, B. Z. (1983). Chemical
demonstrations: A handbook for
teachers of chemistry. Vol. 4.
Madison: The University of Wis-
consin Press.
Páginas web
CAÑAMERO, A. (2007). «Los colores
del agua: Una reacción de ida y
vuelta». El Rincón de la Ciencia
[en línea], 40: s. p. <http://cen-
tros5.pntic.mec.es/ies.victoria.
kent/Rincon-C/Curiosid2/rc-
100/agua/rc-100d.htm>. [Con-
sulta: 18 febrero 2011]
«Experimento 10» (s. a.). En: Provi-
sión de materiales de laboratorio:
Guía de trabajos prácticos [en
línea]. Buenos Aires: Universi-
dad de Buenos Aires.
<http://www.oaq.uba.ar/Labes-
cuela/Exp-10alu.htm>. [Consul-
ta: 18 febrero 2011]
RECIO MIÑARRO, J. (s. a.). «Normas
de seguridad en el laboratorio».
En: QuímicaWEB [en línea].
Málaga: s. n. <http://www.qui-
micaweb.net/ciencia/paginas/
laboratorio/normas.html>.
[Consulta: 18 febrero 2011]
EducacióQuímicaEduQnúmero8
34
Marisa Aguilar Muñoz
es profesora de física y química en el
IES Costa del Sol de Torremolinos
(Málaga). Licenciada en Ciencias Quí-
micas por la Universidad de Málaga.
Ha impartido numerosos cursos de
formación del profesorado y de divul-
gación científica. Ha escrito varios
artículos sobre didáctica de la quími-
ca y experiencias prácticas. Actual-
mente es profesora en el Centro de
Ciencia Principia de Málaga.
C. e.: marisaaguilar@principia-malaga.com.
Manuel Fernández Tapia
es profesor de física y química en el
IES Arroyo de la Miel de Benalmáde-
na (Málaga). Licenciado en Física por
la Universidad Complutense de
Madrid. Ha impartido cursos de for-
mación del profesorado y de divulga-
ción científica. Actualmente es
profesor en el Centro de Ciencia Prin-
cipia de Málaga.
C. e.: principia@principia-malaga.com.
Carlos Durán Torres
es profesor de física y química en el
IES Nuestra Señora de la Victoria de
Málaga. Licenciado en Ciencias Quí-
micas por la Universidad de Málaga.
Ha impartido cursos de formación
del profesorado y de divulgación
científica. Ha escrito varios artículos
sobre didáctica de la química y expe-
riencias prácticas. Actualmente es
profesor en el Centro de Ciencia Prin-
cipia de Málaga.
C. e.: carlosduran@principia-malaga.com.
Figura 14. Museo Principia, Málaga. Web: http://www.principia-malaga.com.

More Related Content

What's hot

Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)
Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)
Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)zelideth-25
 
Pares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinaria
Pares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinariaPares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinaria
Pares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinariaceciza
 
Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02
Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02
Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02Lee Marvin Vila Gadea
 
(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases
(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases
(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gasesErnesto Torija
 
Plan de experimentos de biologia ib
Plan de experimentos de biologia ibPlan de experimentos de biologia ib
Plan de experimentos de biologia ibMarco B jimenez
 
Practica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetales
Practica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetalesPractica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetales
Practica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetalesBrandoOn Hernández Bna
 
Practica 6 celula vegetal
Practica 6 celula vegetalPractica 6 celula vegetal
Practica 6 celula vegetalIriniita FG
 
Practica de laboratorio 5 Identificación de proteínas
Practica de laboratorio 5  Identificación de proteínasPractica de laboratorio 5  Identificación de proteínas
Practica de laboratorio 5 Identificación de proteínasJohan Manuel
 
Tipos de microscopios
Tipos de microscopiosTipos de microscopios
Tipos de microscopiosPaola072015
 
EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)
EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)
EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)Vivi Aguilar
 
Informe de biologia 1 2-3-4-5
Informe de biologia 1 2-3-4-5Informe de biologia 1 2-3-4-5
Informe de biologia 1 2-3-4-5GabyVega9412
 
Práctica de laboratorio de biología
Práctica de laboratorio de biologíaPráctica de laboratorio de biología
Práctica de laboratorio de biologíaMichael Urgilés
 
Practica n° 5
Practica n° 5Practica n° 5
Practica n° 5irenashh
 

What's hot (20)

Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)
Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)
Informe de laboratorio de biología digna cisneros y zelideth moreno (1)
 
Pares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinaria
Pares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinariaPares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinaria
Pares craneales I al XII y su evaluación clínica en la medicina veterinaria
 
Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02
Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02
Microscopaymorfologacelular 130304171326-phpapp02
 
TABLA PERIODICA
TABLA PERIODICATABLA PERIODICA
TABLA PERIODICA
 
(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases
(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases
(Sencillo) Espectro de absorción y emisión de gases
 
Plan de experimentos de biologia ib
Plan de experimentos de biologia ibPlan de experimentos de biologia ib
Plan de experimentos de biologia ib
 
Practica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetales
Practica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetalesPractica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetales
Practica 2 extraccion e identificacion de pigmentos vegetales
 
Practica 6 celula vegetal
Practica 6 celula vegetalPractica 6 celula vegetal
Practica 6 celula vegetal
 
Practica de laboratorio 5 Identificación de proteínas
Practica de laboratorio 5  Identificación de proteínasPractica de laboratorio 5  Identificación de proteínas
Practica de laboratorio 5 Identificación de proteínas
 
Tipos de microscopios
Tipos de microscopiosTipos de microscopios
Tipos de microscopios
 
Disección de una trucha
Disección de una truchaDisección de una trucha
Disección de una trucha
 
RADIOACTIVIDAD
RADIOACTIVIDADRADIOACTIVIDAD
RADIOACTIVIDAD
 
Guialab4
Guialab4Guialab4
Guialab4
 
Microscopia
Microscopia Microscopia
Microscopia
 
EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)
EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)
EXPERIMENTO: OBSERVACIÓN DE LAS CÉLULAS VEGETALES (Informe)
 
Informe de biologia 1 2-3-4-5
Informe de biologia 1 2-3-4-5Informe de biologia 1 2-3-4-5
Informe de biologia 1 2-3-4-5
 
Práctica de laboratorio de biología
Práctica de laboratorio de biologíaPráctica de laboratorio de biología
Práctica de laboratorio de biología
 
Células BI1
Células BI1Células BI1
Células BI1
 
Practica n° 5
Practica n° 5Practica n° 5
Practica n° 5
 
Estructura y diversidad celular
Estructura y diversidad celularEstructura y diversidad celular
Estructura y diversidad celular
 

Viewers also liked

BARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIA
BARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIABARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIA
BARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIAManel Cantos
 
Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016
Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016
Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016CeciliaFerrante
 
Electrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! y
Electrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! yElectrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! y
Electrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! yLunetithaa
 
La nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la Caixa
La nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la CaixaLa nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la Caixa
La nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la Caixacasaciencias
 
Indicador ácido base col lombarda
Indicador ácido base col lombardaIndicador ácido base col lombarda
Indicador ácido base col lombardafisquisierra
 
Manual Biología Tisular
Manual Biología TisularManual Biología Tisular
Manual Biología TisularNadhel
 
tecnicas microscópicas teoria
 tecnicas microscópicas  teoria   tecnicas microscópicas  teoria
tecnicas microscópicas teoria James Ttito Nina
 

Viewers also liked (8)

BARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIA
BARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIABARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIA
BARCELONA MUSEOS - 3 MUSEU DE LA CIENCIA
 
Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016
Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016
Taller Experimentación Escolar y Material Didáctico JVG 2016
 
Electrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! y
Electrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! yElectrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! y
Electrolisis de una disolucion acuosa de yoduro de potasio!! y
 
La nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la Caixa
La nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la CaixaLa nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la Caixa
La nueva estrategia de divulgación científica de la Fundación la Caixa
 
Indicador ácido base col lombarda
Indicador ácido base col lombardaIndicador ácido base col lombarda
Indicador ácido base col lombarda
 
Manual Biología Tisular
Manual Biología TisularManual Biología Tisular
Manual Biología Tisular
 
tecnicas microscópicas teoria
 tecnicas microscópicas  teoria   tecnicas microscópicas  teoria
tecnicas microscópicas teoria
 
Analisis microscopico
Analisis microscopicoAnalisis microscopico
Analisis microscopico
 

Similar to Experimentos curiosos

84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf
84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf
84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdfANAYNALLELYLAPON
 
Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...
Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...
Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...GG_Docus
 
La quimica y los alimentos
La quimica y los alimentosLa quimica y los alimentos
La quimica y los alimentosBeto Rodriguéz
 
Quimicaycocina (1)
Quimicaycocina (1)Quimicaycocina (1)
Quimicaycocina (1)ImeIbarra1
 
Instrucciones
InstruccionesInstrucciones
Instruccionesjulyfra98
 
Expe jovenes
Expe jovenesExpe jovenes
Expe jovenesFranyEdu
 
Experimentos divertido
Experimentos divertidoExperimentos divertido
Experimentos divertidoursulach
 
Experimentos divertidos de quimica para jovenes
Experimentos divertidos de quimica para jovenesExperimentos divertidos de quimica para jovenes
Experimentos divertidos de quimica para jovenesCEIP LUIS VIVES
 
Manual de Laboratorio de Qumica General.pdf
Manual de Laboratorio de Qumica General.pdfManual de Laboratorio de Qumica General.pdf
Manual de Laboratorio de Qumica General.pdfPedroRafaelHurtadoAl
 
experimentos de Fisica y Quimica.
experimentos de Fisica y Quimica.experimentos de Fisica y Quimica.
experimentos de Fisica y Quimica.SELU RR
 
Nat5 b pauta-prueba_inicial
Nat5 b pauta-prueba_inicialNat5 b pauta-prueba_inicial
Nat5 b pauta-prueba_inicialAdriana Jimenez
 
Silabo de quimica general
Silabo de quimica generalSilabo de quimica general
Silabo de quimica generalPedrito Paguay
 
Cuadernillo quimica
Cuadernillo quimica Cuadernillo quimica
Cuadernillo quimica juana muñoz
 

Similar to Experimentos curiosos (20)

84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf
84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf
84 Experimentos de Química Cotidiana en Secundaria - González.pdf
 
Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...
Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...
Estrategias didácticas para la promoción de la química en la ensañanza secund...
 
La quimica y los alimentos
La quimica y los alimentosLa quimica y los alimentos
La quimica y los alimentos
 
Experimentos de qumica
Experimentos de qumicaExperimentos de qumica
Experimentos de qumica
 
Quimicaycocina (1)
Quimicaycocina (1)Quimicaycocina (1)
Quimicaycocina (1)
 
Plan de encuadre quimica ii
Plan de encuadre quimica iiPlan de encuadre quimica ii
Plan de encuadre quimica ii
 
Instrucciones
InstruccionesInstrucciones
Instrucciones
 
Expe jovenes
Expe jovenesExpe jovenes
Expe jovenes
 
Expe jovenes
Expe jovenesExpe jovenes
Expe jovenes
 
Experimentos divertido
Experimentos divertidoExperimentos divertido
Experimentos divertido
 
Experimentos
ExperimentosExperimentos
Experimentos
 
Experimentos divertidos de quimica para jovenes
Experimentos divertidos de quimica para jovenesExperimentos divertidos de quimica para jovenes
Experimentos divertidos de quimica para jovenes
 
Experimentos de qumica divertits PDF
Experimentos de qumica divertits PDFExperimentos de qumica divertits PDF
Experimentos de qumica divertits PDF
 
Manual de Laboratorio de Qumica General.pdf
Manual de Laboratorio de Qumica General.pdfManual de Laboratorio de Qumica General.pdf
Manual de Laboratorio de Qumica General.pdf
 
Experimentos
ExperimentosExperimentos
Experimentos
 
experimentos de Fisica y Quimica.
experimentos de Fisica y Quimica.experimentos de Fisica y Quimica.
experimentos de Fisica y Quimica.
 
Nat5 b pauta-prueba_inicial
Nat5 b pauta-prueba_inicialNat5 b pauta-prueba_inicial
Nat5 b pauta-prueba_inicial
 
Silabo de quimica general
Silabo de quimica generalSilabo de quimica general
Silabo de quimica general
 
3. guia de biologia 2015 1
3. guia de biologia  2015 13. guia de biologia  2015 1
3. guia de biologia 2015 1
 
Cuadernillo quimica
Cuadernillo quimica Cuadernillo quimica
Cuadernillo quimica
 

More from CeciliaFerrante

More from CeciliaFerrante (13)

Laboratorio 1
Laboratorio 1Laboratorio 1
Laboratorio 1
 
Química NES
Química NESQuímica NES
Química NES
 
Rubrica Actividades Experimentales
Rubrica Actividades ExperimentalesRubrica Actividades Experimentales
Rubrica Actividades Experimentales
 
Tipos de Actividades
Tipos de ActividadesTipos de Actividades
Tipos de Actividades
 
Listas de cotejo
Listas de cotejoListas de cotejo
Listas de cotejo
 
F intermoleculares
F intermolecularesF intermoleculares
F intermoleculares
 
Ejercicios de solubilidad
Ejercicios de solubilidadEjercicios de solubilidad
Ejercicios de solubilidad
 
Guia básica de soluciones
Guia básica de solucionesGuia básica de soluciones
Guia básica de soluciones
 
Algunas ideas
Algunas ideasAlgunas ideas
Algunas ideas
 
Acciones farmacológicasalcoholetílico c_ferrante
Acciones farmacológicasalcoholetílico c_ferranteAcciones farmacológicasalcoholetílico c_ferrante
Acciones farmacológicasalcoholetílico c_ferrante
 
Solubilidad
SolubilidadSolubilidad
Solubilidad
 
Bebidas isotónicas
Bebidas isotónicasBebidas isotónicas
Bebidas isotónicas
 
Bebidas Isotónicas
Bebidas IsotónicasBebidas Isotónicas
Bebidas Isotónicas
 

Recently uploaded

TIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptx
TIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptxTIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptx
TIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptxlclcarmen
 
OLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptx
OLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptxOLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptx
OLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptxjosetrinidadchavez
 
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdfSELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdfAngélica Soledad Vega Ramírez
 
SINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptx
SINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptxSINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptx
SINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptxlclcarmen
 
TECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptx
TECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptxTECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptx
TECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptxKarlaMassielMartinez
 
cortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahua
cortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahuacortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahua
cortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahuaDANNYISAACCARVAJALGA
 
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdfNeurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdfDemetrio Ccesa Rayme
 
UNIDAD DPCC. 2DO. DE SECUNDARIA DEL 2024
UNIDAD DPCC. 2DO. DE  SECUNDARIA DEL 2024UNIDAD DPCC. 2DO. DE  SECUNDARIA DEL 2024
UNIDAD DPCC. 2DO. DE SECUNDARIA DEL 2024AndreRiva2
 
programa dia de las madres 10 de mayo para evento
programa dia de las madres 10 de mayo  para eventoprograma dia de las madres 10 de mayo  para evento
programa dia de las madres 10 de mayo para eventoDiegoMtsS
 
ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...JAVIER SOLIS NOYOLA
 
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdfBaker Publishing Company
 
Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.José Luis Palma
 
Historia y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arteHistoria y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arteRaquel Martín Contreras
 
Heinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativo
Heinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativoHeinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativo
Heinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativoFundación YOD YOD
 
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Lourdes Feria
 

Recently uploaded (20)

TIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptx
TIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptxTIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptx
TIPOLOGÍA TEXTUAL- EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN.pptx
 
Unidad 3 | Metodología de la Investigación
Unidad 3 | Metodología de la InvestigaciónUnidad 3 | Metodología de la Investigación
Unidad 3 | Metodología de la Investigación
 
Medición del Movimiento Online 2024.pptx
Medición del Movimiento Online 2024.pptxMedición del Movimiento Online 2024.pptx
Medición del Movimiento Online 2024.pptx
 
Sesión de clase: Defendamos la verdad.pdf
Sesión de clase: Defendamos la verdad.pdfSesión de clase: Defendamos la verdad.pdf
Sesión de clase: Defendamos la verdad.pdf
 
OLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptx
OLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptxOLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptx
OLIMPIADA DEL CONOCIMIENTO INFANTIL 2024.pptx
 
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdfSELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
 
SINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptx
SINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptxSINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptx
SINTAXIS DE LA ORACIÓN SIMPLE 2023-2024.pptx
 
TECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptx
TECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptxTECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptx
TECNOLOGÍA FARMACEUTICA OPERACIONES UNITARIAS.pptx
 
cortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahua
cortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahuacortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahua
cortes de luz abril 2024 en la provincia de tungurahua
 
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdfNeurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdf
 
UNIDAD DPCC. 2DO. DE SECUNDARIA DEL 2024
UNIDAD DPCC. 2DO. DE  SECUNDARIA DEL 2024UNIDAD DPCC. 2DO. DE  SECUNDARIA DEL 2024
UNIDAD DPCC. 2DO. DE SECUNDARIA DEL 2024
 
Presentacion Metodología de Enseñanza Multigrado
Presentacion Metodología de Enseñanza MultigradoPresentacion Metodología de Enseñanza Multigrado
Presentacion Metodología de Enseñanza Multigrado
 
Power Point: "Defendamos la verdad".pptx
Power Point: "Defendamos la verdad".pptxPower Point: "Defendamos la verdad".pptx
Power Point: "Defendamos la verdad".pptx
 
programa dia de las madres 10 de mayo para evento
programa dia de las madres 10 de mayo  para eventoprograma dia de las madres 10 de mayo  para evento
programa dia de las madres 10 de mayo para evento
 
ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
 
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
 
Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
 
Historia y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arteHistoria y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arte
 
Heinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativo
Heinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativoHeinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativo
Heinsohn Privacidad y Ciberseguridad para el sector educativo
 
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
 

Experimentos curiosos

  • 1. Experiencias curiosas para enseñar química en el aula1 Experiències curioses per ensenyar química a l’aula Some curious experiments to teach chemistry in the classroom Marisa Aguilar Muñoz, Manuel Fernández Tapia y Carlos Durán Torres / Centro de Ciencia Principia (Málaga) 23 ISSN2013-1755,SCQ-IECEducacióQuímicaEduQnúmero8(2011),p.23-34DOI:10.2436/20.2003.02.59http://scq.iec.cat/scq/index.html resumen Una de las mejores maneras de divulgar la ciencia es realizando demostraciones experimentales en el aula. Las expe- riencias aquí descritas se realizan con mucha frecuencia en el Centro de Ciencia Principia. Tomando las medidas de seguridad indicadas, no han causado nunca ningún problema. Las experiencias han conseguido despertar en el alum- nado la curiosidad, la motivación y el interés por la química y, en general, por la ciencia. palabras clave Experimentos, motivación, divulgación científica, reacciones químicas. resum Una de les millors maneres de divulgar la ciència és fer demostracions a l’aula. Les experiències que es descriuen en aquest article es realitzen molt sovint al Centre de Ciència Principia. Realitzades amb les corresponents mesures de seguretat, no han causat mai cap problema. Les demostracions han aconseguit desvetllar en l’alumnat la curiositat, la motivació i l’interès per la química i, en general, per la ciència. paraules clau Experiments, motivació, divulgació científica, reaccions químiques. abstract One of the best ways of making science popular is by demonstrating experiments in the classroom. The experiments described here are done frequently at the Principia Science Centre. These experiments are easy to do and have never caused any safety issues. However, they have aroused students curiosity, motivation, and an interest in chemistry and in science in general. keywords Experiments, motivation, popular science, chemical reactions Introducción La enseñanza de la ciencia, en particular, la de la física y la quí- mica, ha tenido y sigue teniendo una dificultad mayor que la de otras asignaturas. Ello es debido a múltiples factores, entre los que no hay que olvidar el hecho de que una parte del profesorado ha creído necesario elevar el nivel de los programas de las asignaturas, pensando que con ello se conseguirían alumnos mejor preparados. Evidentemente, la pluralidad de alumnos con muy diferentes conocimientos básicos que llegan a las aulas donde se imparten las asignaturas de física y química hace que sea necesario comenzar por unos niveles a veces por debajo de los establecidos en los programas oficiales. Se hace difícil de cualquier modo la unificación de esos míni- mos niveles para el aprendizaje de estas asignaturas de ciencias. 1. Aquest article va ser la ponència de clausura de les IV Jornades sobre l’Ensenyament de la Física i la Química – I Trobada d’Educació Quími- ca, que va tenir lloc el dia 26 de març de 2011 a CosmoCaixa (Barcelona).
  • 2. EducacióQuímicaEduQnúmero8 24 Pero la causa principal hay que buscarla en los primeros momen- tos en que el alumno debe recibir las elementales nociones relacio- nadas con la ciencia, y ello ten- dría que ser durante los años de enseñanza primaria. Es entonces cuando los alum- nos tienen capacidad para rete- ner ideas que se les muestren de una forma muy visual y entrete- nida, haciendo que el progresivo aprendizaje en los años siguien- tes no sea algo abstracto e incomprensible, como desgracia- damente ocurre muchas veces. Por ello, tanto en esos años de enseñanza primaria como en los posteriores de secundaria e inclu- so en el bachillerato, las clases de ciencias experimentales, concreta- mente, las de química, deben tener una dosis de motivación que bien se puede alcanzar con el uso frecuente de experiencias de labo- ratorio, clases teóricas y visitas a determinados lugares estratégicos donde la química sea un referente de la historia de la ciencia. Tampoco ayuda el hecho de que a nivel popular se hable de la química como de algo artificial y, generalmente, negativo: «esto tiene mucha química» o «este plato es pura química», o lo absurdo que resulta que para dos personas que coinciden en muchas cosas se diga que «existe química entre ellas». Las experiencias que aquí se muestran se realizan con mucha frecuencia en el Centro de Cien- cia Principia. Además, son fáciles de realizar por parte de los profe- sores, con materiales que se pue- den encontrar en casi todos los centros educativos (y que pueden ser sustituidos por productos naturales y material de vidrio casero), y pueden enfocarse de modo que sirvan igualmente para alumnos de diferentes edades con tal de que la explicación correspondiente se adecue a sus conocimientos. No obstante, aunque las expe- riencias sean asequibles, hay que tener en cuenta las normas de seguridad correspondientes. Reacciones ácido-base Para introducir la diferencia entre sustancias ácidas y básicas se pueden realizar estas expe- riencias, en las que se emplean distintos indicadores. Los indica- dores tienen la ventaja de ser sustancias que producen reaccio- nes muy vistosas y coloridas que se pueden emplear como pretex- to para la introducción de con- ceptos abstractos como puede ser el de pH. Antes de introducir en el aula la idea de pH, sería conveniente que los alumnos tuviesen clara la diferencia entre disoluciones áci- das, neutras y básicas de una manera natural y experimental. El concepto ácido les es conocido porque han experimentado algu- na vez el sabor de sustancias áci- das, como el jugo de limón, pero suelen confundirlo con sustan- cias corrosivas o peligrosas. Las disoluciones neutras suelen aso- ciarlas a sustancias inocuas o «naturales» cuyo pH, por supues- to, creen que es 5,5. No tienen tan claro el concepto sustancia básica y, en general, les cuesta trabajo presentar algún ejemplo. La idea que suelen tener los alumnos sobre el pH suele ser confusa y muchas veces equivo- cada. Una parte de la culpa la tie- nen los medios de comunicación, donde se habla del pH como de un tecnicismo, presentándose productos con pH 5,5 como el pH «natural» para hacer ver que hay mucha ciencia detrás de ellos. Otra parte de culpa la tenemos los profesores como consecuen- cia del excesivo enfoque mate- mático en el que se incurre con frecuencia, presentando el pH como una mera fórmula: pH = –log [H3O+]. El pH es una magnitud cuanti- tativa, un valor numérico; es decir, las disoluciones no tienen pH ácidos, básicos o neutros, sino que las disoluciones con valores del pH > 7 son básicas, las que tienen valores de pH < 7 son áci- das y para una disolución neutra o para el agua pura, a 25 ºC, el pH = 7 (Jiménez Liso et al., 2000). En las experiencias que se deta- llan a continuación se suele par- tir de explicaciones poco convincentes para que los alum- nos se planteen lo que está ocu- rriendo realmente e intenten dar una explicación científica. Tanto en esos años de enseñanza primaria como en los posteriores de secundaria e incluso en el bachillerato, las clases de ciencias experimentales, concretamente, las de química, deben tener una dosis de motivación que bien se puede alcanzar con el uso frecuente de experiencias de laboratorio, clases teóricas y visitas a determinados lugares estratégicos donde la química sea un referente de la historia de la ciencia Antes de introducir en el aula la idea de pH, sería conveniente que los alumnos tuviesen clara la diferencia entre disoluciones ácidas, neutras y básicas de una manera natural y experimental
  • 3. «El arco iris químico». Utilización de indicadores En el Centro de Ciencia Princi- pia, normalmente, se presenta a los alumnos esta experiencia de forma recreativa. Se muestran dos jarras: una de ellas con agua «normal» y la otra con «agua del arco iris». Al añadir agua de la primera de ellas a las copas «vacías» no ocurre nada extraño y el agua permanece incolora, pero al añadir «agua del arco iris» comienzan a aparecer colores (fig. 1), con lo que se crea un con- flicto entre la explicación que se les está dando (agua del arco iris) y lo que observan. De esta mane- ra, las preguntas surgen de manera espontánea y, dependien- do del nivel de los alumnos, se puede hablar en mayor o menor profundidad de los conceptos ácido, base, neutralización y pH y cómo pueden afectar a las reac- ciones químicas. Consideraciones didácticas Esta experiencia suele tener una gran aceptación, ya que es muy vistosa por los colores que aparecen. La solemos presentar sin explicar que se trata de reac- ciones químicas, de manera que sean los propios alumnos los que nos pregunten lo que ocurre real- mente, con lo que es más fácil introducir los conceptos reacción y pH, ya que están muy motivados. La explicación del «agua del arco iris» no suele dejarles satisfechos y con frecuencia indican que debe haber alguna sustancia en las copas antes de hacer la expe- riencia; casi siempre hablan de colorantes, pero les hacemos notar que si así fuera, aparecerí- an colores al añadir agua la pri- mera vez. Esto nos da ocasión para hablar de la reacción como cambio químico y de la forma- ción de sustancias nuevas. TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8 25 Figura 1. Experiencia «El arco iris químico». Procedimiento experimental Se preparan dos jarras de agua transparentes de 1 L: una de ellas llena de agua (no importa si es del grifo) y la otra, con una disolu- ción de NaOH 0,05 M (10 g en 5 L), y siete copas o vasos transparen- tes en los que se vierten varias gotas de indicadores preparados como se indica a continuación: Se parte de tres disoluciones de indicadores que se preparan del siguiente modo: – Fenolftaleína: 1 g + 60 mL de alcohol 96º + 40 mL de agua destilada. – Timolftaleína: 0,1 g + 60 mL de alcohol 96º + 40 mL de agua destilada. – p-nitrofenol: 2 g + 60 mL de alcohol 96º + 40 mL de agua destilada. Para obtener los diferentes colores, se mezclan estas disoluciones de los indicadores en las proporciones (expresadas en volúmenes) que se indican a continuación: – Rojo: 5 fenolftaleína / 2 nitrofenol. – Naranja: 1 fenolftaleína / 7 nitrofenol. – Amarillo: nitrofenol. – Verde: 3 timolftaleína / 5 nitrofenol. – Azul: timolftaleína. – Añil: 1 fenolftaleína / 1 timolftaleína. – Violeta: fenolftaleína. Una vez preparadas las disoluciones, se colocan las siete copas y se añaden las cantidades que se muestran en el siguiente esquema: Se añaden a cada copa unos 100 mL de agua (media copa) de la primera jarra (no aparece color en ninguna) y, a continuación, otros 100 mL de la segunda, que contiene la disolución de NaOH 0,05 M (aparecen los «colores del arco iris», como se muestra en la fig. 1). Por último, se vierten todas las copas en un vaso transparente gran- de de 1 L, en el que se han añadido 10 mL de H2SO4 2,5M para deco- lorarlas. 1ª 2ª 3ª 4ª 5ª 6ª 7ª 1 mL de rojo + 2 gotas de H2SO4 2,5M 1 mL de naranja + 2 gotas de H2SO4 2,5M 2 gotas de amarillo + 2 gotas de H2SO4 2,5M 1 mL de verde + 2 gotas de H2SO4 2,5M 1 mL de azul 1 mL de añil 5 gotas de violeta
  • 4. «Test del CO2» Se puede comprobar la acidez del aire expulsado por los pulmones utilizando indi- cadores como la fenolftaleína o la col lombar- da, pues el CO2 que espiramos se disuelve parcialmente en agua y es capaz de acidificar una solución ligeramente básica. Al añadir en un vaso con agua y col lombarda unas gotas de amoníaco 1M, la disolución adquiere un color verdoso. Soplando mediante una pajita en el interior de la disolución, esta cambiará a azul. Si se utiliza fenolftaleína como indica- dor, la solución alcalina de color violeta se decolorará al soplar a través de la pajita. Pre- caución: hay que soplar, no aspirar (fig. 3). Consideraciones didácticas Estas experiencias se pueden emplear además para la enseñanza de otros concep- tos o procedimientos: – Preparación de disoluciones: en los cur- sos de ESO, se pueden aprovechar las expe- riencias anteriores para la realización práctica de preparación de disoluciones en el laboratorio, lo que implica el empleo de la balanza y el manejo de materiales específi- cos como matraces aforados. También se puede ver la influencia de la temperatura de las sustancias en su solubilidad. En la pre- paración de las disoluciones de los indicado- EducacióQuímicaEduQnúmero8 26 Figura 2. Experiencia «La tinta camaleónica», utilizando como indicador la col lombarda. Procedimiento experimental Se prepara el indicador cociendo varias hojas de col lombarda durante unos 10 minutos en agua (a ser posi- ble, destilada), que se coloreará de azul oscuro y se deja- rá enfriar. Se disponen cinco vasos. En el primero, no se añade nada; en el segundo, se añaden unas gotas de un ácido débil (vinagre o limón) o ácido acético 1M; en el tercero, una disolución de NaOH 1M o unas gotas de amoníaco 1M (sustancias básicas); en el cuarto, unas gotas de ácido fuerte, como ácido sulfúrico concentrado (H2SO4 2,5M), o unas gotas de agua fuerte comercial (ácido clor- hídrico), y en el último, unas gotas de lejía (en este caso, lo que hace es decolorar la col lombarda). Se llenan los vasos hasta la mitad con agua, se añade un poco de indicador de lombarda en cada uno y apare- cerán los colores: azul, violeta, verde, rojo y amarillo, respectivamente, como se observa en la fig. 2. «La tinta camaleónica». Indicador de col lombarda Una alternativa a la utilización de los indicadores utilizados en el arco iris químico consiste en usar un indicador natural presente en muchos vegetales y que aparece en especial en la col roja o col lombarda. Figura 3. Experiencia «Test del CO2».
  • 5. res se puede observar cómo estos son poco solubles en agua, pero también que se aumenta su solu- bilidad si se disuelven previa- mente en alcohol, con lo que se puede introducir el concepto de los diversos tipos de disolventes. – Conceptos mol y concentración: en los cursos de bachillerato, se pueden realizar además los cál- culos correspondientes para la preparación de las disoluciones de las concentraciones indicadas, con lo que se emplean los con- ceptos mol, masa molar y concentra- ción de una forma práctica. – Valoraciones ácido-base: se pueden utilizar los indicadores preparados para la realización de valoraciones de manera experi- mental y realizar los cálculos correspondientes. Velocidad de reacción: «La reacción del reloj de yodo» Otro aspecto importante dentro de las reacciones químicas es la velocidad con la que se desarrollan. No todas las reacciones son rápidas como las que se han mostrado en los experimentos anteriores, sino que también existen reacciones mucho más rápidas, como pueden ser las explosiones, o muy lentas, como la oxidación del hierro de la reja de una catedral. La experiencia que presentamos es una reacción que se suele utili- zar para estudiar la velocidad de reacción, en la que se pueden observar la influencia de la tempe- ratura y la concentración de las sustancias que intervienen. Depen- diendo del nivel de los alumnos, se puede hacer un enfoque más pro- fundo o simplemente presentarla como una reacción curiosa para despertar su interés por la química. Consiste en mezclar cantidades iguales de dos disoluciones trans- parentes e incoloras en una copa de vidrio. Al cabo de unos 20 segundos, el contenido de la copa se transforma de manera súbita en un líquido negro (fig. 4). Influencia del pH. «El arco iris de noche y de día» La reacción del reloj de yodo descrita anteriormente tiene lugar en medio ácido, pero cuando se incrementa el pH hasta medio alcalino, la reacción se puede revertir. Aprovechando esta cir- cunstancia, se puede realizar una experiencia que puede resultar llamativa para los alumnos y que consiste en encadenar las reaccio- nes del reloj de yodo y el arco iris químico. En este caso presenta- mos la experiencia como una sim- ple curiosidad, debido a que aparecen reacciones que escapan al nivel de los alumnos no univer- sitarios, aunque se puede consul- tar de una manera más profunda en la bibliografía (Aguilar Muñoz y Durán Torres, 2011). TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8 27 Figura 4. Experiencia «La reacción del reloj de yodo». Procedimiento experimental Se preparan dos disoluciones: – Disolución A: yodato de potasio (KIO3) 0,03 M. Se disuelven 6,42 g de KIO3 y se añade agua destilada hasta completar 1 L. – Disolución B: hidrogenosulfito de sodio (NaHSO3) 0,03 M con almidón. Se disuelven 3,1 g de NaHSO3 y 0,6 g de almidón en agua destilada hasta 1 L. Conviene disolver antes el almidón en un poco de agua caliente. También se pueden utilizar 5,75 mL de disolución de NaHSO3 al 40 % (presentación comercial 5M) en lugar de los 3,1 g de sólido. Se mezclan cantidades iguales de las dos disoluciones (40 mL, por ejemplo) en una copa transparente. Al cabo de unos 20 segundos, se produce un cambio brusco pasando de incoloro a negro. La reacción se produce en varias etapas: – Etapa primera: los iones hidrogenosulfito (HSO3 -) reducen los iones yodato (IO3 -) a iones yoduro (I-) según la reacción: IO3 -(aq) + 3 HSO3 -(aq) © I-(aq) +3 SO4 2-(aq) + 3 H+(aq) – Etapa segunda: los iones yoduro producidos en la etapa primera reaccionan con los iones yodato en exceso produciendo yodo (I2): 5I-(aq) + IO3 -(aq) + 6H+(aq) © 3 I2(aq) + 3 H2O(l) Esta reacción es muy rápida y el I2 producido reacciona con el almi- dón para producir un complejo almidón-pentayoduro que presenta un color azul oscuro casi negro (Aguilar Muñoz y Durán Torres, 2011).
  • 6. EducacióQuímicaEduQnúmero8 28 Consideraciones didácticas Se puede poner de relieve cómo puede influir el pH en las reacciones químicas y cómo algunas reacciones solo tienen lugar a un pH determina- do, como ocurre muchas veces en las que tienen lugar en las reacciones metabólicas. Procedimiento experimental Se preparan tres jarras trans- parentes de 1 L. La primera se llena con una disolución de yodato de potasio 0,03 M (6,42 g de KIO3 en 1 L de agua); la segunda, con una disolución de hidrogenosulfito de sodio (NaHSO3) 0,03 M con almidón, y la tercera, con hidróxido de sodio (NaOH) 0,05 M. Se colocan siete copas o vasos transparentes de unos 200 mL de capacidad en los que se vierten unas gotas de cada uno de los indicadores utilizados en el apartado 1. A continuación se añaden unos 50 mL de la disolución de hidrogenosulfito de sodio y almidón, que no producirán coloración al ser el pH inferior al de viraje de los indicadores (fig. 5). Se presentan a los alumnos las jarras y los vasos, en los que se pueden observar líqui- dos transparentes e incoloros. A continuación se van añadien- do a cada copa unos 50 mL de la disolución de yodato de potasio 0,03 M (fig. 6). Al cabo de unos 20 segundos, el líquido de las copas vira brusca y suce- sivamente a color negro (fig. 7). Por último, se vierten otros 50 mL de la disolución de hidró- xido de sodio (NaOH) 0,05 M, con lo que va desapareciendo el color negro (fig. 8) y aparecen los colores correspondientes a cada uno de los indicadores (fig. 9). Figura 5. Copas con unas gotas de cada indicador y 50 mL de la disolución B. Figura 6. Se añaden 50 mL de la disolución A a cada copa. Figura 7. Va apareciendo el complejo azul-negro sucesivamente. Figura 8. Al añadir la disolución C, desaparece el color negro… Figura 9. ... y aparece el arco iris químico.
  • 7. Reacciones catalizadas Un aspecto muy importante en las reacciones químicas es la veloci- dad con que transcurren, es decir, la cinética de la reacción. Algunas sustancias modifican la velocidad de las reacciones sin participar directamente en ellas y sin verse modificadas. Son los catalizadores y normalmente las aceleran; sin embargo, otras sustancias las retardan y, en este caso, reciben el nombre de inhibidores. Las reacciones catalizadas son aquellas donde intervienen los catalizadores. Este concepto suele aparecer con cierta frecuencia en la vida cotidiana (por ejemplo, los catalizadores de los tubos de escape de los coches). Incluso se habla de «personas catalizadoras» como de aquellas que con su pre- sencia o intervención son capaces de desencadenar algo. Por tanto, a nuestros alumnos el término no les resulta demasiado lejano, pero ¿tie- nen ellos claro qué son los cataliza- dores científicamente hablando? Hay ejemplos muy asequibles para que el alumnado comprenda cuál es la misión de un catalizador, como los aditivos que se añaden a los alimentos para prolongar su duración; en este caso actúan de inhibidores, pues retrasan los pro- cesos de oxidación o de descompo- sición. También dentro de nuestro cuerpo tenemos una gran cantidad de catalizadores (biocatalizadores): los más importantes se llaman enzimas, que son proteínas y son además muy específicas, pues algu- nas de ellas actúan solo sobre una molécula concreta y en una deter- minada reacción. Son tan impor- tantes que algunas enfermedades se deben en última instancia a la ausencia o la alteración de una determinada enzima. Además, algunas son útiles para preservar el medio ambiente, como los cataliza- dores de los coches, que permiten reducir la emisión de gases conta- minantes como óxidos de nitrógeno (NO, NO2), CO o hidrocarburos no quemados al acelerar procesos de reducción de los óxidos o de oxida- ción del CO y de los hidrocarburos e impedir que se produzcan com- bustiones incompletas. Las experiencias que se descri- ben a continuación se basan en la reacción de descomposición cata- lítica del peróxido de hidrógeno o agua oxigenada. La molécula del agua oxigenada es relativamente estable a temperatura ambiente, pero se descompone con facilidad en oxígeno y agua por calenta- miento y por exposición a la luz solar. Además, numerosas sustan- cias actúan como catalizadoras de su descomposición, entre otras: metales de transición, álcalis y óxidos metálicos. H2O2(ac) © H2O(l) + 1/2 O2 (g) ΔH0 = -196,4 kJ mol-1 Vamos a realizar esta reacción en dos experiencias distintas en las que se utilizarán dos cataliza- dores diferentes. «La superespuma». Descomposición del agua oxigenada utilizando yoduro de potasio como catalizador En esta experiencia se mezclan, en una probeta, una disolución de agua oxigenada comercial de 110 volúmenes (30 % en masa) y un poco de lavavajillas. Al añadir yoduro de potasio, este actúa como catalizador: la reacción de descom- posición se acelera y aparece una gran cantidad de espuma debido al oxígeno desprendido. Al ser la reac- ción fuertemente exotérmica, parte del agua formada está en fase de vapor (fig. 10). Por otra parte, algunos aniones yoduro (I-) se oxidan a yodo mole- cular (I2), que reacciona con los aniones yoduro presentes para formar el anión triyoduro (I3 -), produciendo una coloración marrón, según la reacción: I- + I2 © I3 - TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8 29 Figura 10. En la probeta se encuentra la disolución de peróxido de hidrógeno con un poco de lavavajillas (a). Al añadir la disolución de yoduro de potasio (b), aparecen el color marrón por la formación del anión triyoduro (I3 -) y una gran cantidad de espuma (c y d), pues el yoduro de potasio actúa también de catalizador en la descomposición del peróxido.
  • 8. EducacióQuímicaEduQnúmero8 30 «El genio de la botella». Descomposición del agua oxigenada utilizando el óxido de manganeso (IV) como catalizador Para realizar este experimento, se utiliza como catalizador el óxido de manganeso (IV) fina- mente dividido. Se dejan caer 0,5 g de este óxido envueltos en un papel fino en forma de «paquetito» en el interior de un recipiente resistente a altas tem- peraturas que contiene 30 mL de agua oxigenada de 110 volúmenes. Se produce un espectacular chorro de vapor de agua debido a la descomposición catalítica del agua oxigenada, que es fuerte- mente exotérmica (fig. 11c). Esta experiencia se puede reali- zar también utilizando permanga- nato de potasio (KMnO4) en lugar de dióxido de manganeso (IV), pero el permanganato no actuaría en este caso como catalizador, sino que reaccionaría oxidando el peróxido según la reacción: 2 MnO4 -(ac) + 3 H2O2(ac) © 2 MnO2(s) + 2 H2O(l) + 3 O2 (g) + 2 OH- (ac) En este caso, se libera más oxí- geno que en la reacción de des- composición catalizada del agua oxigenada, por lo que la reacción es más violenta. Recomendaciones didácticas Estas experiencias son de bajo coste y fáciles de reproducir en el aula o en el laboratorio. Es reco- mendable que las realice el pro- fesor, ya que la disolución de agua oxigenada que se emplea es corrosiva, irritante a los ojos y a la piel. Se pueden utilizar para introdu- cir y explicar diferentes conceptos químicos y biológicos relacionados con la velocidad de reacción, la catálisis, las enzimas, el poder oxi- dante o la termoquímica. La gran velocidad de produc- ción de oxígeno da lugar a la for- mación de espuma y hace que esta experiencia se pueda emple- ar para medir el tiempo que tarda la espuma en alcanzar el borde de una probeta en función de la concentración de peróxido empleada. Este mismo experimento se puede realizar usando otros cata- lizadores, como las enzimas pero- xidasas que existen en el hígado o en una patata, el hierro conte- nido en la hemoglobina de la sangre u óxidos metálicos como el de manganeso (IV), el de plomo (IV) o el de hierro (III). Se puede comprobar la distinta eficacia del catalizador según su superficie de contacto utilizando el óxido de manganeso (IV) más o menos pulverizado. La velocidad de for- mación de la espuma variará según la eficacia del catalizador. Se recomienda el uso de gafas de seguridad y guantes (Royal Society of Chemistry, 1994). Quimioluminiscencia: «Luz fría con luminol» La luminiscencia, también conocida como luz fría, es un fenómeno que ha llamado la atención del hombre a lo largo de la historia (los chinos ya la cono- cían desde la antigüedad y la lla- maban «el fuego frío» que emitía «la mosca del fuego») y sigue siendo igual de atractiva para los estudiantes de cualquier nivel educativo. Un proceso luminiscente se produce cuando un átomo es excitado, los electrones pasan a niveles de energía superior (sin que sea por acción de la radia- ción térmica) y retornan poste- riormente al nivel fundamental con emisión de luz. Según el tiempo en que tarde en emitirse la luz después de la excitación, la luminiscencia se clasifica en fluorescencia, si el fenómeno es prácticamente ins- Figura 11. En la botella se encuentra la disolución de agua oxigenada. Al desta- parla y dejar caer sobre ella el catalizador [dióxido de manganeso (IV)], aparece un chorro de microgotas de agua por la rápida formación de una gran cantidad de vapor de agua.
  • 9. tantáneo, o en fosforescencia, si es más duradero. Las sustancias fluorescentes (como la quinina o la fluoresceína) necesitan ser irradiadas para mostrar luminis- cencia (fotoluminiscencia). Estas sustancias absorben una radia- ción de longitud de onda menor a la que emiten, normalmente absorben luz ultravioleta y emi- ten luz visible. Cuando se apaga el foco emisor de radiación, la sustancia deja de emitir luz. Según la forma de excitar el electrón, la luminiscencia recibe distintos nombres: – Fotoluminiscencia, si es por acción de la luz. – Triboluminiscencia, si es por fricción. – Electroluminiscencia, si es por impacto con partículas cargadas. – Quimioluminiscencia, si es por efecto de una reacción química. La quimioluminiscencia es un fenómeno que nuestros alumnos reconocen fácilmente en algunos animales, como las luciérnagas, o también en las llamadas barras de luz que se utilizan en las acampadas o las que usan los pescadores. Una de las sustancias más empleadas para realizar reaccio- nes luminiscentes es el luminol, descubierto por Albrecht en 1928. El luminol (3-aminoftalhidracida), para exhibir su luminiscencia, debe ser excitado mediante un agente oxidante. En la experiencia que aquí se describe, el luminol es oxidado en medio básico por el oxígeno (libe- rado en la descomposición del peróxido de hidrógeno) a ión ami- noftalato, que se forma en un estado excitado, es decir, de mayor energía, el cual se desactiva emi- tiendo luz y produciéndose la luminiscencia (Shakhashiri, 1983). Esta reacción necesita ser cata- lizada para que se produzca la luminiscencia (véase el apartado anterior). Procedimiento experimental Se pueden emplear diferentes catalizadores, como sales de Cu (II) o de Co (II). En este caso, utili- zaremos como catalizador el ión hierro (III) (Fe3+) contenido en el hexacianoferrato (III) de potasio (K3Fe(CN)6), conocido también como ferricianuro de potasio. Para ello, se prepararan las siguientes disoluciones: – Disolución A: se disuelven 4 g de hidróxido de sodio (NaOH) y 0,4 g de luminol en 1 L de agua destilada. – Disolución B: se disuelven 4 g de ferricianuro de potasio en 1 L de agua destilada. Se preparan tubos de ensayo (u otros recipientes) como se mues- tra en la fig. 5a, cada uno con: 1. 30-40 mL de la disolución A. Opcionalmente se pueden añadir unas gotas de disolución de colo- rante cromóforo (unos 0,5 mL). 2. El mismo volumen de la diso- lución B y unas gotas (unos 0,5 mL) de la disolución de agua oxigena- da al 30 % (110 volúmenes). Para poder observar la luminis- cencia, se oscurece la habitación y se añade poco a poco el conte- nido del tubo 2 sobre el 1. Apare- cerá un destello luminoso azul (la longitud de onda de la luz emiti- da es de 425 nm) por la quimiolu- miniscencia del luminol. Si se han añadido además dife- rentes cromóforos, aparecerán distintos colores para la luz emi- tida: amarillento, si se añade fluoresceína; rojo rosáceo, si se añade rodamina B; rojo violáceo, con rodamina 6G, y naranja, si es eosina (mezclando fluoresceína y rodamina B en proporción 3:1 aparece rosa pálido). Las disolu- ciones de cromóforos se preparan al 0,5 % en agua, excepto la de rodamina 6G, que es una disolu- ción al 0,5 % en alcohol. En esta experiencia se han uti- lizado como colorantes cromófo- ros: rodamina 6G, fluoresceína con timolftaleína (indicador de pH), fluoresceína y timolftaleína (fig. 12a), dando lugar a luz de color azul, amarillo, verde y viole- ta, respectivamente (fig. 12b). TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8 31 luminol (3-aminoftalhidracida) + H2O2/Fe3+ © Ión aminoftalato * +N2 + H2O Figura 12. Las probetas contienen luminol en medio básico con diferentes colorantes cromó- foros. Al añadir la disolución de ferricianuro de potasio y agua oxigenada, se produce la luminiscencia.
  • 10. EducacióQuímicaEduQnúmero8 32 Recomendaciones didácticas Si no se dispone de luminol, que es un reactivo caro, se pueden com- prar las «barras de luz» (se pueden adquirir en tiendas de equipos para aire libre), que contienen otra sus- tancia luminiscente (un éster de un feniloxalato) junto con una base fluorescente dentro de un tubo de cristal que se encuentra dentro de otro de plástico que contiene la disolución de agua oxigenada. Cuando dicho tubo se dobla, se rompe el de cristal y ambas disolu- ciones se mezclan produciéndose la reacción. En este caso no se podrí- an realizar los experimentos ante- riores tal como están descritos. Se puede hacer un estudio cualitativo sobre cómo influye la temperatura en la velocidad de reacción calentando o enfriando estas «barras de luz», o bien las soluciones antes descritas. Cuan- to mayor sea la temperatura, más intensa será la luz emitida, pero menos duradera. Habría que resaltar que esta reacción del luminol tiene diver- sas aplicaciones en distintos cam- pos de la vida, como, por ejemplo, para encontrar la presencia de agua oxigenada en el agua. La policía científica la utiliza para detectar rastros de sangre y en medicina general se usa para investigar la presencia de óxido nítrico en los gases exhalados de enfermos asmáticos (Martín Sán- chez y Martín Sánchez, 2001). Reacciones redox: «Botes de colores» Todos hemos comprobado algu- na vez la oxidación de una man- zana mordida que hemos dejado a la intemperie. Las reacciones de oxidación-reducción (redox) for- man una parte importante de nuestra vida, desde la combus- tión de los combustibles fósiles hasta la acción de la mayoría de los blanqueadores domésticos. En este tipo de reacciones existe una transferencia de electrones Procedimiento experimental Se preparan las siguientes disoluciones: – Disolución A: se disuelven 20 g de NaOH en 1 L de agua. – Disolución B: se disuelven 40 g de glucosa en 1 L de agua. – Disolución C: se disuelve 1 g de azul de metileno en 100 mL de agua. Nota: se puede utilizar agua del grifo. Estas soluciones pueden conservarse durante bastante tiempo en botes bien cerrados. En una botella o matraz, se añaden 100 mL de las disoluciones A y B, unas dos o tres gotas de la disolución C y se tapa. Esta disolución pre- senta un color azul intenso, pero tras unos segundos el color va desapa- reciendo y queda totalmente incolora. Cuando se agita el frasco, recupera el color azul, pero tras unos segundos vuelve a quedarse inco- lora y así se produce sucesivamente un ciclo de oxidaciones y reduccio- nes. desde una especie denominada reductora (porque «reduce» a la otra cediendo electrones) a otra especie que los acepta, llamada oxidante. La oxidación es un proceso que implica una pérdida de electrones, mientras que la reducción implica ganancia. Las reacciones redox tienen una gran importancia tanto desde un punto de vista industrial como desde un punto de vista biológico. En los seres vivos forman parte de los procesos más importantes para la vida, como la respiración y la fotosíntesis, donde se producen secuencias de reacciones redox sucesivas. En esta experiencia se observa cómo funcionan dos reacciones redox aco- pladas, es decir, de forma consecutiva y cíclica. Este es un ejemplo simple de cómo se transfieren los electrones al oxígeno del aire desde un azúcar (como el que se ha tomado en la comida). Se utilizan reactivos que se pue- den encontrar fácilmente en los laboratorios de secundaria o bien se pue- den adquirir en droguerías. Como azúcar se utiliza la glucosa, que en medio alcalino se oxida fácilmente y reacciona con el oxígeno del aire para formar ácido glucónico, según la reacción: Glucosa + oxígeno © ácido glucónico + OH- Para observar esta reacción, utilizamos un indicador redox, el azul de metileno, que se presenta en dos formas diferentes: en presencia de oxíge- no, está en su forma oxidada y tiene color azul, siendo incoloro en su forma reducida. Mientras hay oxígeno disuelto en la disolución, el azul de metileno está en su forma oxidada de color azul. Pero este oxígeno reacciona con la glu- cosa, que se oxida hasta ácido glucónico. Cuando se consume el oxígeno, la glucosa reacciona con el azul de metileno reduciéndolo hasta su forma reducida, que es incolora. Al agitar el frasco, el oxígeno del aire que hay en él se incorpora a la disolución y oxida el azul de metileno, dando lugar a su forma oxidada de color azul. Al mismo tiempo, esta forma oxidada lenta- mente oxida la glucosa, mientras que ella se reduce, volviendo a dar su forma incolora inicial reducida (fig. 13). Así transcurre de forma encadenada este ciclo de reacciones redox, que se puede describir en el siguiente esquema: – Etapa 1: anaeróbica (sin aire). Azul de metileno (oxid.) + glucosa © Azul de metileno (red.) + ácido glucónico azul incoloro – Etapa 2: aeróbica (al agitar la botella, participa el oxígeno del aire). Azul de metileno (red.) +O2(g)+2 H2O © Azul de metileno (oxid.) + 4OH–(ac) incoloro azul
  • 11. Recomendaciones didácticas • Los colores del paso de azul © incoloro conseguidos con la reduc- ción-oxidación del azul de metileno se pueden cambiar utilizando indi- cadores de pH, puesto que este ciclo de reacciones transcurre en medio alcalino. Para ello se preparan dos matraces con la misma mezcla que se describió anteriormente y, además, se añade: – Matraz A: unas gotas de una disolución de 4-nitrofenol (véase exp. 2.1) (fig. 13a). – Matraz B: unas gotas de una disolución de fenolftaleína (véase exp. 2.1). Tras unos segundos: – Matraz A: pasará de verde a amarillo, y así sucesivamente (fig. 13b). – Matraz B: pasará de morado a rosa, y así sucesivamente. • Además del azul de metileno, pueden utilizarse otros indicadores redox, como, por ejemplo, la resazurina, que produce el siguiente cam- bio de color: azul claro (forma reducida) ⇄ rosa púrpura (forma oxidada) (sin agitar) (con agitación) Con fenosafranina: incolora (forma reducida) ⇄ rojo rosáceo (forma oxidada) (sin agitar) (con agitación) La reacción con índigo carmín es incluso más espectacular, con un cambio de color amarillo a rojo con agitación suave y a verde con agitación fuerte. • La temperatura afecta en la velocidad de reacción, por lo que en días fríos habría que calentar la disolución entre 25 y 50 ºC. • Se puede comprobar que el oxígeno es el responsable del color de los indicadores redox, eliminando el oxígeno mediante burbujeo con nitrógeno en el matraz. Al agitar el bote, no hay cambio de color. TreballpràcticallaboratoriEducacióQuímicaEduQnúmero8 33 Figura 13a. Los matraces contienen la mezcla de las disoluciones A, B y C antes descritas. El matraz de la dere- cha contiene además unas gotas de una disolución de 4-nitrofenol. Figura 13b. Tras un tiempo, el azul de metileno se reduce, por lo que queda incolora la disolución y el que contenía 4-nitrofenol aparece amarillo. Recomendaciones Aunque las experiencias que se describen aquí no utilizan mate- riales especialmente peligrosos o nocivos, conviene observar las normas elementales de seguridad de los laboratorios químicos y emplear los elementos de protec- ción adecuados, como el uso de gafas protectoras, guantes y batas. Se pueden consultar normas de seguridad en esta dirección web: http://www.quimicaweb.net/ciencia/ paginas/laboratorio/normas.htm. Conclusiones La realización de experimentos con los alumnos hace que aumente su interés por saber lo que hay detrás de ellos. Nos sue- len preguntar por el «truco» y dónde se pueden conseguir las sustancias para que ellos los puedan repetir por su cuenta. En realidad, lo que nos están pidien- do sin darse cuenta son las reac- ciones químicas que tienen lugar en las experiencias. Ello nos muestra que tras ver las sesiones de demostraciones de química cambia la visión que tienen de la asignatura. Muchos profesores también nos piden el procedimiento para realizarlas y poder llevarlas al aula con sus alumnos, lo que nos indica que también sirve de motivación para la enseñanza de la química. En definitiva, la quí- mica y, en general, las ciencias experimentales necesitan una base teórica, pero, como indica su nombre, necesitan también experimentar. La química y, en general, las ciencias experimentales necesitan una base teórica, pero, como indica su nombre, necesitan también experimentar
  • 12. Referencias bibliográficas AGUILAR MUÑOZ, M.; DURÁN TORRES, C. (2011). «Reacciones encadena- das: Del reloj de yodo al arco iris químico». Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de las Cien- cias, 8(1): 105-110. [También en: http://hdl.handle.net/10498/10209] JIMÉNEZ LISO, M. R.; MANUEL TORRES, E. de; GONZÁLEZ GARCÍA, F.; SALI- NAS LÓPEZ, F. (2000). «La utiliza- ción del concepto de pH en la publicidad y su relación con las ideas que manejan los alum- nos: Aplicaciones en el aula». Enseñanza de las Ciencias, 18(3): 451-461. MARTÍN SÁNCHEZ, Mª T.; MARTÍN SÁNCHEZ, M. (2001). «Luz fría: Trabajos experimentales senci- llos». Anales de la Real Sociedad Española de Química, 4: 37-42. ROYAL SOCIETY OF CHEMISTRY (2002). Experimentos de química clásica. Madrid: Síntesis. SHAKHASHIRI, B. Z. (1983). Chemical demonstrations: A handbook for teachers of chemistry. Vol. 4. Madison: The University of Wis- consin Press. Páginas web CAÑAMERO, A. (2007). «Los colores del agua: Una reacción de ida y vuelta». El Rincón de la Ciencia [en línea], 40: s. p. <http://cen- tros5.pntic.mec.es/ies.victoria. kent/Rincon-C/Curiosid2/rc- 100/agua/rc-100d.htm>. [Con- sulta: 18 febrero 2011] «Experimento 10» (s. a.). En: Provi- sión de materiales de laboratorio: Guía de trabajos prácticos [en línea]. Buenos Aires: Universi- dad de Buenos Aires. <http://www.oaq.uba.ar/Labes- cuela/Exp-10alu.htm>. [Consul- ta: 18 febrero 2011] RECIO MIÑARRO, J. (s. a.). «Normas de seguridad en el laboratorio». En: QuímicaWEB [en línea]. Málaga: s. n. <http://www.qui- micaweb.net/ciencia/paginas/ laboratorio/normas.html>. [Consulta: 18 febrero 2011] EducacióQuímicaEduQnúmero8 34 Marisa Aguilar Muñoz es profesora de física y química en el IES Costa del Sol de Torremolinos (Málaga). Licenciada en Ciencias Quí- micas por la Universidad de Málaga. Ha impartido numerosos cursos de formación del profesorado y de divul- gación científica. Ha escrito varios artículos sobre didáctica de la quími- ca y experiencias prácticas. Actual- mente es profesora en el Centro de Ciencia Principia de Málaga. C. e.: marisaaguilar@principia-malaga.com. Manuel Fernández Tapia es profesor de física y química en el IES Arroyo de la Miel de Benalmáde- na (Málaga). Licenciado en Física por la Universidad Complutense de Madrid. Ha impartido cursos de for- mación del profesorado y de divulga- ción científica. Actualmente es profesor en el Centro de Ciencia Prin- cipia de Málaga. C. e.: principia@principia-malaga.com. Carlos Durán Torres es profesor de física y química en el IES Nuestra Señora de la Victoria de Málaga. Licenciado en Ciencias Quí- micas por la Universidad de Málaga. Ha impartido cursos de formación del profesorado y de divulgación científica. Ha escrito varios artículos sobre didáctica de la química y expe- riencias prácticas. Actualmente es profesor en el Centro de Ciencia Prin- cipia de Málaga. C. e.: carlosduran@principia-malaga.com. Figura 14. Museo Principia, Málaga. Web: http://www.principia-malaga.com.