El documento habla sobre la alfabetización informacional (ALFIN) y provee dos puntos clave sobre este tema. Primero, explica que el proceso de ALFIN debe incluir una dificultad progresiva y una evaluación final para medir los progresos de los usuarios y la eficacia de la práctica. Segundo, señala que el objetivo final de ALFIN es que el usuario se convierta en un aprendiz independiente y autónomo para la gestión de problemas de información, no solo en bibliotecas sino en cualquier espacio.