2. FELIDAE
Los félidos agrupan a los mamíferos parecidos a los gatos, son
animales de tamaño variable, sus extremidades terminan en 4
dedos en las patas anteriores y 5 en las patas posteriores, con
garras curvas y retráctiles.
La mayoría de especies tienen el pelaje con manchas negras sobre
un fondo amarillo, siendo las excepciones, el puma y el
yaguarundí, que tienen el color del pelaje uniforme.
Los félidos son netamente carnívoros y sus actividades las realizan
principalmente en la noche.
La mayoría de las especies se encuentran en zonas tropicales y sub
tropicales a ambos lados de los andes; a excepción de Oncifelis
colocolo que vive en zonas templadas y altoandinas (Tirira, 1999)
5. Panthera onca: pantera, jaguar, tigre.
La base de su pelaje suele ser de un color entre amarillo pálido y castaño rojizo. La
piel está cubierta de unas manchas en forma de rosa para camuflarse en su hábitat
selvático. Las manchas pueden variar en la piel de un mismo animal y entre
diferentes ejemplares: las rosetas pueden incluir una o más manchas y la forma de
las manchas varía. Las de la cabeza y el cuello son generalmente sólidas, igual que
las de la cola, donde se pueden unir para formar una banda. La región ventral, el
cuello y la superficie exterior de las patas y los flancos inferiores son blancos.
En la especie se produce con relativa frecuencia un exceso de pigmentación
conocido como melanismo . La condición melanística es menos común que la
manchada (se da en aproximadamente un 6% de la población) y es el resultado de
un alelo dominante. Los ejemplares con melanismo parecen totalmente
negros, aunque se pueden apreciar las manchas si se los mira de cerca. Los
ejemplares con melanismo son conocidos informalmente como panteras
negra, pero no constituyen una especie distinta, ni siquiera una subespecie. Igual
que en los demás grandes félidos, en raras ocasiones aparecen individuos
albinos, denominados panteras blancas