La mujer le pide a Santa regalos extravagantes y poco realistas para el próximo diciembre, incluyendo tarjetas de crédito sin límite, dispositivos para controlar el peso y la fertilidad, ropa que cambie de estilo según la temporada, y la habilidad de comprar abdominales ya formados. También pide castigos mágicos para posibles infieles como narices brillantes o incapacidad de tener una erección.