2. La chatarra electrónica o desechos
electrónicos o basura tecnológica (en inglés: e-
waste o WEEE) corresponde a todos aquellos
productos eléctricos o electrónicos que han sido
desechados o descartados, tales como:
ordenadores, teléfonos móviles, televisores y
electrodomésticos.
3. se caracteriza por su rápido crecimiento
debido a la rápida obsolescencia que están
adquiriendo los dispositivos electrónicos y por
la mayor demanda de estos en todo el mundo,
entre otros factores.
4. De acuerdo a la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)
un desecho electrónico es todo dispositivo
alimentado por la energía eléctrica cuya vida
útil haya culminado.2
5. Existen diversos daños para la salud y el
medio ambiente generado por varios de los
elementos contaminantes presentes en los
desechos electrónicos, en especial el
mercurio, el plomo y el cadmio.
6. Al día de hoy se sabe de la existencia de
grandes vertederos donde los países
occidentales vierten su basura electrónica.5
El mayor vertedero del mundo de ese tipo se
encuentra en China, concretamente en la
ciudad de Guiyu
7. Algunas son:
Incorporar el consumo responsable que incluya el reciclado de los
equipos electrónicos. Reducir la generación de desechos
electrónicos a través de la compra responsable y el buen
mantenimiento. Donar o vender los equipos electrónicos que
todavía funcionen. Donar equipos rotos o viejos a organizaciones
que los reparan y reutilizan con fines sociales.
8.
9. Al año el país produce mil toneladas en residuos de
equipos electrónicos, de ellos solo un 56% se logra
recuperar, la mayoría de forma informal.
10. Informes realizados en 2008 señalaban que en el
mundo existían mil millones de computadoras y
cerca de cuatro mil millones de celulares, cifras que
para el 2013 serían duplicadas.
11. En el 2010 se hizo un diagnóstico de los residuos
informáticos que arrojó que al año El Salvador genera mil
toneladas de desechos. Del total, se recuperan 600
toneladas, que equivalen a un 56%, y el resto,
aproximadamente 479 toneladas son descartadas, con la
posibilidad que lleguen a rellenos sanitarios o botaderos
ilegales. El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos
Naturales (MARN) indica que buena parte de la
“recuperación” se realiza informalmente y sin los permisos
ambientales requeridos.