5. Es difícil ver con claridad el camino cuando se alborota el polvo de la tierra en torno a nosotros. La ventolera de cada día nos ciega. Y andamos bastante ciegos con relación a las cuestiones que más deberían importarnos.
6. Son muy fuertes los vientos y muy cruzadas las corrientes que pasan frente a nosotros, y con frecuencia pagamos muy caro el daño que nos hacen.
7.
8. Como al ciego de nacimiento, también nosotros necesitamos que Jesús nos envié a lavar nuestros ojos en la fuente de “ El Enviado”.
10. Es preciso recordar el lavatorio original de nuestro bautismo y recobrar el frescor que brotaba de las aguas que nos dieron nueva vida. “ Ve, a lavarte a la piscina de Siloé”
11. “ Ve, a lavarte a la piscina de Siloé” ¿Cómo olvidar que sólo en el contacto con Jesús puede aclararse nuestra mirada para descubrir su misterio y nuestra dignidad?
12. Señor Jesús , que has abierto nuestros ojos a tu luz, ayúdanos a aceptarte como profeta de Dios, a superar las tentaciones que nos acechan. Ayúdanos a creer en ti con sinceridad y a dar testimonio de ti con valentía. Amén.
13. José Román Flecha Andrés DIOS CON NOSOTROS–Salamanca Presentación: Antonia Castro Panero Música: Canto gregoriano