2. La palabra Pentecostés viene del griego y
significa el día quincuagésimo.
La Fiesta de Pentecostés es como el
"aniversario" de la Iglesia, es la fiesta del
Espíritu Santo.
Es una de las fiestas más importantes para los
cristianos, después de la Pascua, pues evoca el
nacimiento de la Iglesia por la acción del
Espíritu Santo.
¿Qué es Pentecostés?
3. En Pentecostés celebramos
Celebramos el inicio de la actividad de la
Iglesia en el día de la venida del Espíritu
Santo sobre María y los Apóstoles, cuando
se encontraban reunidos el día de
Pentecostés judío, cumpliéndose así la
promesa hecha por Jesús y dándoles el valor
necesario para anunciar la Buena Nueva de
Jesús y disponiéndolos a ser sus testigos, ir
a bautizar y enseñar a todos.
4. En Pentecostés se fundó la Iglesia?
Después de la Ascensión de Jesús, estaban
reunidos los apóstoles con la Madre de Jesús
celebrando Pentecostés. Todos estaban asustados,
sentían miedo de salir a predicar, pero de pronto
escucharon un gran ruido y lenguas de fuego se
posaron sobre sus cabezas, el Espíritu Santo
descendió sobre ellos y los impregnó de la valentía
y la fuerza que necesitaban para cumplir con el
mandato de Jesús, predicar la Buena Noticia, con
ello nace la Iglesia .
5. ¿Quién es el Espíritu santo?
El Espíritu Santo es Dios, es la tercera
persona de la Santísima Trinidad.
El Espíritu Santo coopera desde el principio
con el Padre y el Hijo, actuando en toda la
historia de los hombres.
6. ¿Qué nombres recibe
el Espíritu Santo?
Jesús nos presenta al Espíritu Santo como el PARÁCLITO, el
abogado defensor, es aquel que poniéndose de parte de los
que son culpables debido a sus pecados, los defiende del
castigo merecido, los salva del peligro de perder la vida y les
proporciona la salvación eterna.
Jesús nos lo presenta como EL ESPÍRITU DE LA VERDAD, es
quien hace posible que la verdad acerca de Dios, del hombre
y de su destino nos llegue a todos.
La Iglesia también reconoce al Espíritu Santo como
SANTIFICADOR, porque es la fuerza que santifica porque Él
mismo es "espíritu de santidad".
7. ¿Qué símbolos representan al
Espíritu Santo?
● El Agua: Es significativo de la acción del Espíritu Santo en el
Bautismo, ya que el agua se convierte en el signo sacramental del
nuevo nacimiento.
● La Unción: Simboliza la fuerza. La unción con el óleo es sinónima
del Espíritu Santo. En el sacramento de la Confirmación se unge al
confirmado para prepararlo a ser testigo de Cristo.
● El Fuego: Simboliza la energía transformadora de los actos del
Espíritu.
● La Nube y la Luz: Así desciende sobre la Virgen María para
"cubrirla con su sombra". En el Monte Tabor, en la Transfiguración,
el día de la Ascensión; aparece una sombra y una nube.
● La Mano: Mediante la imposición de manos los Apóstoles y ahora
los Obispos, trasmiten el "don del Espíritu".
● La Paloma: En el Bautismo de Jesús, aparece en forma de paloma y
se posa sobre Él. Es el símbolo más representativo del Espíritu
8. Los 7 dones del Espíritu
Santo
Para que el cristiano pueda luchar y hacer el bien, el Espíritu Santo
le regala sus siete dones:
● Sabiduría: nos comunica el gusto por las cosas de Dios.
● Ciencia: nos enseña a darle a las cosas terrenas su verdadero
valor.
● Consejo: nos ayuda a resolver con criterios cristianos los
conflictos de la vida.
● Piedad: nos enseña a relacionarnos con Dios como nuestro Padre
y con nuestros hermanos.
● Temor de Dios: nos impulsa a apartarnos de cualquier cosa que
pueda ofender a Dios y a los demás.
● Entendimiento: nos da un conocimiento más profundo de las
verdades de la fe.
● Fortaleza: nos impulsa al apostolado y nos ayuda a superar el
miedo de defender los derechos de Dios y de los demás.
9. ¿Cómo vivían las primeras
comunidades cristianas?
“Todos ellos perseveraban en la enseñanza de los apóstoles
y en la unión fraterna, en la fracción del pan y en las
oraciones. Todos estaban impresionados, porque eran
muchos los prodigios y señales realizados por los apóstoles.
Todos los creyentes vivían unidos y lo tenían todo en
común. Vendían sus posesiones y haciendas y las
distribuían entre todos según las necesidades de cada uno.
Todos a una y constantes, acudían diariamente al templo,
partían el pan en las casas y compartían los alimentos con
alegría y sencillez de corazón; alababan a Dios y se ganaban
el favor de todo el pueblo.”
Hechos de los Apóstoles 2, 42-47