Un joven filósofo llamado Menipio Licio conoce a una hermosa mujer fenicia que lo invita a su casa, prometiéndole bailes, canciones y un vino exquisito. Aunque Menipio sabía controlar sus pasiones, acepta quedarse con la mujer. Cuando se casan, Apolonio de Tiana, invitado a la boda, descubre que la mujer en realidad es una serpiente lamia y que su casa y muebles son una ilusión. Al ser descubierta, la lamia llora y le ruega a Apolonio