La seguridad de las redes Wi-Fi ha evolucionado durante la última década hasta alcanzar un nivel de madurez aceptable. En consecuencia, los ataques sobre las tecnologías Wi-Fi también han evolucionado desde las infraestructuras de red a los equipos cliente. Inexplicablemente, hoy en día los dispositivos móviles basados en iOS y Android (y otros), aún presentan vulnerabilidades relevantes independientemente de los mecanismos de seguridad Wi-Fi empleados: Open, WEP, WPA y WPA2-PSK, e incluso WPA y WPA2-Enterprise. "¿Acaso crees que lo que respiras ahora es aire?”…