2. Quedó estampada en el ayate de Juan Diego que
contenía las flores que por mandato de la Virgen
había cortado en la cima del Tepeyac y que Ella
misma tomó en sus manos y las puso en la tilma.
La imagen de la Virgen de Guadalupe apareció el
día 12 de diciembre de 1531, en el transcurso de la
mañana.
3. Sobre la textura de la tilma, se afirma: “Ocurre el
primer milagro en la materia misma del manto o
sea del ayate en que está pintada... que por el lado
de la Santísima Imagen, muestra una suave
blandura, mas por la otra parte conserva
tenazmente la rudeza de su materia".
4. La tela no muestra bosquejos o algún signo de silueta
dibujada que permita al artista producir una pintura.
El método utilizado para producir esta pintura sigue
siendo desconocido.
Con respecto a un análisis de la pintura de la Virgen de
Guadalupe, puede decirse que se trata de un cuadro de
belleza extraordinaria.
Se encuentran todas las manifestaciones del arte. Desde
Mesopotamia, Egipto y Grecia, hasta nuestros días.
5. Según varios estudiosos y hombres de ciencia que han
inspeccionado la imagen se pueden ver reflejadas, en
ambos ojos y en la ubicación precisa en que se
reflejarían en un ojo humano vivo, algunas figuras que
han sido extensivamente analizadas y parecen
corresponder a la forma y tamaño de figuras humanas
localizadas enfrente de la imagen.
Son varias figuras humanas que parecen constituir una
familia, incluyendo varios niños y un bebé llevado en la
espalda por su madre como se acostumbraba en el siglo
16, aparece en el centro de la pupila de la Virgen.
6. En el manto de la Virgen de Guadalupe se
encuentra representado con mucha fidelidad, el
cielo del solsticio de invierno de 1531 que tuvo
lugar a las 10:40 del martes 12 de diciembre, hora
de la ciudad de México.
Están representadas todas las constelaciones, que se
extienden en el cielo visible a la hora de la salida del
sol, y en el momento en que Juan Diego enseña su
tilma (capa azteca) al obispo Zumárraga.
Caen las rosas que llevaba en ella y aparece
estampada en la tela, la imagen de la Virgen.
7. Virgen Santísima de Guadalupe, Madre de Dios,
Señora y Madre nuestra! Míranos aquí ante tu santa
imagen, que nos dejaste estampada en la tilma de
Juan Diego, como prenda de amor, bondad y
misericordia.
Defiéndenos en las tentaciones, consuélanos en las
tristezas, y ayúdanos en todas nuestras necesidades.
En los peligros, en las enfermedades, en las
persecuciones, en las amarguras, en los abandonos,
en la hora de nuestra muerte, míranos con ojos
compasivos y no te separes jamás de nosotros. Amén.