1. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
IDEARIO
CONGREGACIÓN DE LAS HERMANAS
DOMINICAS DE SAN JOSÉ
La Congregación de Hermanas Dominicas de San José, mediante la presentación
de este Ideario, tiene como fin volver a la inspiración originaria de su Fundador Fray
Reginaldo Toro, fiel hijo de la Iglesia. Así lo expresa en el Acta Fundacional:
“Siendo la mente de los Fundadores de este Instituto remediar, con el auxilio de Dios,
muchas necesidades que se dejan sentir en ésta sociedad, no es más que justo que
esta misma sociedad conozca los fines que se propone.”1
Aquella intención vuelve a ser la nuestra: dar a conocer los fundamentos de la
misión de compasión y misericordia, expresada insistentemente en sus escritos:
“Abrazad todas las miserias de la humanidad paciente sin distinción de creencias,
patria ni condición” 2
A todos los que nos sentimos llamados a vivir el carisma dominicano, desde la
impronta de un fiel hijo de Domingo, Fray Reginaldo Toro, les confiamos este ideario
que unificará nuestra misión apostólica en los diversos lugares donde “la humanidad
que sufre” necesite nuestro abrazo compasivo.
Madre Liliana de Santo Domingo O.P.
Priora General
Córdoba, Febrero de 2015
1- Padre Reginaldo, “Acta Fundacional”.
2- Padre Reginaldo, “Acta Fundacional”.
2. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
Fray Reginaldo Toro, Fundador de la Congregación de Hermanas Dominicas de
San José, al concebir su ideal educativo lo expresa en estas palabras:
“…Tenemos una misión: enseñar al que no sabe,
Educar y enseñar a juventud, preparar su corazón
y su inteligencia para recibir esos golpes que la
sociedad con frecuencia descarga sobre los débiles y
desprevenidos…”3
En los diversos escritos de Fray Reginaldo, encontramos los fundamentos de su
proyecto educativo explicitados en las siguientes nociones:
1-Noción de Dios
Proclama a un Dios misericordioso, de allí su insistencia por “abrazar a la
humanidad que sufre”4, un Dios Creador, como origen y causa de todo lo que es bueno
y verdadero, “cognoscible a través de su obra creadora”5, dando al hombre la
capacidad de conocerlo por medio de la razón natural.
Por lo tanto, todas las dimensiones de nuestros apostolados deben tener como
principio a Dios Creador, de allí la posibilidad que Reginaldo considera, de realizar la
síntesis entre fe y razón, por medio del estudio y la oración. 6
3- Padre Reginaldo, “Discurso en la colocación de la Piedra Fundamental del Colegio y Casa Matriz.”
4- Padre Reginaldo, “Fines de la Congregación”; “Discurso en ocasión de la Muerte de la Hermana
Imelda”; “Discurso en la colocación de la Piedra Fundamental del Colegio y Casa Matriz.”
5- Padre Reginaldo, “Ejercicios Espirituales III”.
6- Cfr. Padre Reginaldo, “Ejercicios Espirituales VII”.
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3. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
2-Noción de Hombre
El hombre es un ser creado a imagen y semejanza de Dios, es unidad de cuerpo
y alma, dotado de inteligencia para conocerlo y de voluntad para amarlo; perfectible y
que tiene un fin trascendente: gozar de Dios en la vida futura 7, a la que llamamos
Bienaventuranza.
Esta noción de hombre es fundamental para nuestra misión educativa.
Reginaldo insiste en ella como respuesta al surgimiento de las ciencias modernas, que
tienden a reducir al hombre a lo puramente inmanente y natural, excluyendo su
dimensión trascendental y sobrenatural. Cita del Padre Reginaldo:
“…No es que piense desdeñar la instrucción moderna, ni menos las ciencias y
conocimientos humanos (…) pero por si solos no elevan el alma, ni la pueden dotar con
ese sentido infinito…”8
3-Noción de Mundo
Reginaldo Toro expresa en sus diversos escritos, que el mundo es creación de
Dios. Así lo señala con las siguientes palabras:
“…El mundo es creado y por las cosas que existen él, conocemos algo de Dios”.9
Fiel Hijo de Santo Domingo y de Santo Tomás de Aquino, concibe al mundo
como una vía o camino para conocer a Dios a través de la razón natural. Su insistencia
en esta concepción es central en su programa educativo ya que la ciencia de su tiempo
acentuaba la dimensión materialista como origen y principio de todo lo que es.
Quienes nos sentimos llamados a vivir el Carisma Dominicano, no podemos
prescindir de esta concepción de mundo y debemos, desde los distintos campos del
saber, estar atentos a los reduccionismos de la ciencia que tienden a negar la
dimensión trascendente de toda la realidad.
8- Padre Reginaldo, “Discurso en la colocación de la Piedra Fundamental del Colegio y Casa Matriz.”
9- Padre Reginaldo, “Ejercicios Espirituales III”.
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4. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
4-Concepto de Educación
La educación es un apostolado, una misión, que consiste en preparar el corazón
y la inteligencia de niños y jóvenes.10
Preparar viene del latín preparare, que significa disponer, detenerse,
contemplar, sacar obstáculos.
De la concepción antropológica de Fray Reginaldo se deduce su concepto de
educación centrada en Preparar las dos potencias de la persona: inteligencia y
voluntad.
Preparar la inteligencia consiste en disponer dicha potencia para el encuentro
con la verdad. En palabras de Reginaldo el “preparar” supone adecuarse a la realidad
integral de quienes se nos confían; así lo expresa en el reglamento que diseñó para las
clases:
“Tengan presente (…) que las impresiones y recuerdos de la niñez no se borran
jamás y que recordarán con la misma facilidad una acción o palabra desedificante,
como las de buen ejemplo y edificación…”11
Preparar el corazón 12 es abrazar las dolencias de la propia humanidad
manifestada en los rostros de niños y jóvenes. Dichas dolencias abrazadas
compasivamente, serán el terreno propicio para conducir el corazón hacia la virtud que
consiste en amar lo bueno.
Reginaldo busca superar los límites del enciclopedismo de su época. Entiende
que la educación no consiste solamente en la instrucción, sino en “formar el corazón
para la virtud”13, es decir aprender a vivir eligiendo el bien. Escuchemos los consejod
del Padre Reginaldo:
“…Siendo la enseñanza un apostolado, las maestras no cumplirían con su deber,
ni con el espíritu del Instituto, si solo se ciñesen a dar a las niñas una instrucción
puramente elemental y no procurasen formarles el corazón para la virtud… ”14
10- Padre Reginaldo, “Reglamento para las clases”.
11- En palabras de Reginaldo “preparar el corazón” es “preparar la voluntad”.
12- Padre Reginaldo, “Reglamento para las clases”.
13- Padre Reginaldo, “Reglamento para las clases”.
14- Ibíd.
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5. Fin de la Educación
5. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
Toda obra educativa tiene una finalidad, que se fundamenta en la noción de
persona y de educación, ambos conceptos definidos por Fray Reginaldo en su
programa educativo apunta a un único fin:
“Estar preparados para afrontar los golpes que la sociedad descarga sobre los
más débiles…”15
En el Discurso de la Piedra fundamental Fray Reginaldo enumera cuáles son los
golpes para los que hay que preparar a nuestros niños y jóvenes.
Éstas son sus palabras:
“…A medida que avanza el refinamiento de la civilización, en que el hombre tan
fácilmente siente desfallecer su ánimo y el vigor de su espíritu juntamente con el de su
cuerpo, se encuentra importante para la lucha para la vida y para soportar los
quebrantos y las debilidades de su ser natural…”16
El programa educativo de Fray Reginaldo atiende a los desafíos de nuestro
tiempo y comprende una misión que lleva a la persona a su plenitud. Ésta consiste en
la perfección de las potencias propias del hombre: inteligencia y voluntad, para
conocer la verdad y amar el bien. De este modo, nuestros niños y jóvenes aprenderán
a vivir, que es el conocimiento supremo. Éste se logra con el desarrollo en plenitud de
las capacidades propias del hombre, a fin de afrontar los desafíos de la vida. Estarán
así fortalecidos para soportar los golpes y sufrimientos propios de todo cristiano que
se compromete en la construcción del Reino en nuestra sociedad.
15-Padre Reginaldo, “Discurso en la colocación de la Piedra Fundamental del Colegio y Casa Matriz.”
16- Ibíd.
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6. Concepto de Educador y Estilo Formativo
6. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
Desde el inicio de Nuestra Congregación, fundada “en obsequio y gratitud a
José” 17, las Hermanas, siguiendo el ejemplo de este gran Santo de la Iglesia, han
abrazado de manera heroica y silenciosa a la humanidad doliente en niños y jóvenes.
Desde entonces, tanto las religiosas como los laicos, siguiendo el carisma que nos
legara nuestro Padre Reginaldo, no dejan de…
“Inmolarse noche y día de cuantas maneras sea necesario por la institución y
educación de las niñas 18 que nos confían en los pueblos; formando el corazón de esas
tiernas criaturas a medida del buen Jesús”19
Concibiendo la tarea educativa como una misión, quien se compromete con el
proyecto de Reginaldo debe ser una persona dispuesta a mirar con compasión, capaz
de abrazar las dolencias propias de los que nos son confiados. En palabras de
Reginaldo, disponible a:
“…inventar medios para suavizar las dolencias de la humanidad…”20
Para ser fiel al mandato de nuestro Fundador, quien educa debe ser un experto
en Preparar, lo que implica la búsqueda constante de la verdad y el bien por medio de
la propia formación.
Inmerso en la cultura, debe confiar en la posibilidad del encuentro con la
verdad por medio de la razón natural y de disponerla para el encuentro con la fe.
17- Padre Reginaldo, “Recomendaciones para la Maestra de Novicias”.
18- Nuestro Padre utiliza “niñas” según su época. Hoy tenemos en nuestras obras niños y jóvenes de
ambos sexos.
19- Padre Reginaldo, “Conclusiones de las Primeras Constituciones”.
20- Padre Reginaldo, “Discurso en ocasión de la Muerte de la Hermana Imelda”.
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7. Ideario de la Congregación de las Hermanas Dominicas de San José
Atentos a los desafíos y necesidades del mundo contemporáneo y unidos al
sentir de la Iglesia, Madre compasiva de la Humanidad que sufre, confiamos esta obra
en Dios, que Bueno es y Eterna su Misericordia.
Preparar el corazón y la inteligencia…
Fray Reginaldo Toro
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