Estado democratico y social de derecho y de justicia
I conferencia
1. I CONFERENCIA
PODER POPULAR VERSUS DEFENSA INTEGRAL DE LA NACION
El Poder Popular es el ejercicio pleno de la soberanía por parte del pueblo en lo político,
económico, social, cultural, ambiental, internacional, y en todo ámbito del
desenvolvimiento y desarrollo de la sociedad, a través de sus diversas y disímiles
formas de organización, que edifican el estado comunal.
Entre tanto, la dimensión del Poder Popular se fundamenta en el principio de soberanía
y el sentido de progresividad de los derechos contemplados en la Constitución de la
República, cuyo ejercicio y desarrollo está determinado por los niveles de conciencia
política y organización del pueblo.
Y es así, que el Poder Popular tiene por finalidad garantizar la vida y el bienestar social
del pueblo, mediante la creación de mecanismos para su desarrollo social y espiritual,
procurando la igualdad de condiciones para que todos y todas desarrollen libremente su
personalidad, dirijan su destino, disfruten los derechos humanos y alcancen la suprema
felicidad social; sin discriminaciones por motivos de origen étnico, religioso, condición
social, sexo, orientación sexual, identidad y expresión de género, idioma, opinión
política, nacionalidad u origen, edad, posición económica, condición de discapacidad o
cualquier otra circunstancia personal, jurídica o social, que tenga por resultado anular o
menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio de los derechos humanos y garantías
constitucionales.
Por lo tanto, basado en principios y valores en la organización y participación del
pueblo en el ejercicio de su soberanía se inspira en la doctrina del Libertador Simón
Bolívar, y se rige por los principios y valores socialistas de: democracia participativa y
protagónica, interés colectivo, equidad, justicia, igualdad social y de género,
complementariedad, diversidad cultural, defensa de los derechos humanos,
corresponsabilidad, cogestión, autogestión, cooperación, solidaridad, transparencia,
honestidad, eficacia, eficiencia, efectividad, universalidad, responsabilidad, deber
social, rendición de cuentas, control social, libre debate de ideas, voluntariedad,
sustentabilidad, defensa y protección ambiental, garantía de los derechos de la mujer, de
los niños, niñas y adolescentes, y de toda persona en situación de vulnerabilidad,
defensa de la integridad territorial y de la soberanía nacional.
Para poder entender con claridad y establecer un marco referencial de nuestras
responsabilidades, colectivas e individuales como Poder Popular, dentro del nuevo
espectro de la Seguridad y la Defensa de la Nación, necesario es primero conocer lo que
a tal respecto dictamina nuestra jurisprudencia. En primer lugar nuestra Carta Magna
indica en su artículo 322 lo siguiente: “La seguridad de la Nación es competencia
esencial y responsabilidad del Estado, fundamentada en el desarrollo integral de ésta y
su defensa es responsabilidad de los venezolanos y venezolanas; también de las
personas naturales y jurídicas, tanto de derecho público como de derecho privado, que
se encuentren en el espacio geográfico nacional”, de igual manera nuestro máximo
2. instrumento legal hace alusión, de manera aún más específica, a la decisiva y
protagónica participación de la sociedad venezolana en la seguridad y defensa de
nuestro estado y del sistema de gobierno legítimamente constituido, empleando para
ello los diferentes ámbitos del poder nacional, cuando en su Artículo 326 refiere
textualmente lo siguiente: “La seguridad de la Nación se fundamenta en la
corresponsabilidad entre el Estado y la sociedad civil para dar cumplimiento a los
principios de independencia, democracia, igualdad, paz, libertad, justicia, solidaridad,
promoción y conservación ambiental y afirmación de los derechos humanos, así como
en la satisfacción progresiva de las necesidades individuales y colectivas de los
venezolanos y venezolanas, sobre las bases de un desarrollo sustentable y productivo de
plena cobertura para la comunidad nacional. El principio de corresponsabilidad se ejerce
sobre los ámbitos económico, social, político, cultural, geográfico, ambiental y militar”.
Una vez establecido este marco jurídico, era más que imperiosa la necesidad y
obligación que tenía el gobierno nacional de instrumentar una serie de mecanismos que
permitiesen que este mandato constitucional no quedase, cual pintura rupestre, en letra
muerta, digna de ser conservada para la admiración y estudio de las generaciones
futuras; sino que, por el contrario, se transformase en un torbellino sinérgico que diera
verdadera vida a las máximas aspiraciones de nuestros conciudadanos y materializara de
igual forma, el ideario social y político de nuestro actual sistema de gobierno… una
verdadera democracia participativa y protagónica.
Una forma de abordar las referencias constitucionales sobre la participación ciudadana
está en el establecimiento de las relaciones o vínculos entre los artículos citados y otras
normas específicas, a partir de las concordancias existentes, igualmente el tener presente
que la participación no es un proceso aislado.
En primer lugar, la participación se encuentra directamente relacionada con las
diferentes opciones organizativas y las actividades que cumple el Estado, pensemos por
ejemplo, en las políticas de descentralización, planificación y desarrollo económico y
social. En segundo lugar, desde la perspectiva de la sociedad la participación se
relaciona con elementos como la corresponsabilidad, la solidaridad, la organización de
las comunidades, la defensa y protección de los derechos humanos y la educación
ciudadana
Inicialmente, la defensa nacional concebida como un conjunto de acciones vinculadas al
desarrollo, permite como sociedad articularnos para lograr objetivos y alcanzar niveles
óptimos de seguridad que hagan viable la ecuación: paz social más crecimiento
económico obtendremos el bienestar. Sobre esto, la sobrevivencia de la sociedad y su
proyección generacional son aspiraciones que requieren un grado de seguridad que de
aparecer amenazas activen acciones de defensa nacional para protegerlas. Muchos
indicadores alertan sobre los riesgos y peligros que se ciernen sobre la seguridad
nacional.
Por otra parte, La definición de los "Intereses Nacionales" y la "Defensa Nacional" se
hallan unidas por la esencia misma del Estado. Todo país requiere de una clara óptica de
los dos conjuntos para poder establecer claramente los delineamientos conceptuales de
su visión de nación. Las acciones que un país realice a través de la política exterior que
3. está en total consonancia con sus intereses nacionales y la defensa del mismo. Las
Relaciones Exteriores es el conjunto de acciones que un Estado emprende para la
defensa de sus intereses en el ámbito de las Relaciones Internacionales. Dentro de este
contexto tales medidas son adoptadas conforme al ideario establecido por el marco legal
dado por la Constitución Nacional y los tratados internacionales ratificados, canjeados y
la legislación interna y por el marco filosófico que está dado por su concepción de
"Defensa...
La Defensa de la Nación es un componente íntimo de la del sistema político, que
depende de la preservación del Estado de Derecho. Además es un elemento primordial
para la Seguridad de la Nación.
El Pueblo Venezolano, en desarrollo de sus poderes y pidiendo la protección de Dios,
con el fin de volver a fundar la República para construir una sociedad democrática,
participativa y protagonista en un estado de justicia, federal y descentralizado que
fortalezca los valores y garantía universal de los derechos humanos.
Unos de los aportes fundamentales de la Carta Magna, nos dice: que no sólo la Fuerza
Armada Nacional es la encargada de la Defensa Integral del territorio, sino también de
la sociedad en su conjunto.
Con la nueva Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999, se dio
inicio a la revisión y adecuación de las normas jurídicas que la rigen, estando entre las
mismas, por su valiosa significación, la de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
Esta que acabamos de decir, hace obligante a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana,
amante de la paz, defensora de los derechos humanos y solidaria de las naciones
hermanas del continente Americano, dentro del ideario de Simón Bolívar.
En relación al tema plateado, fue muy clara la afirmación “de unir al pueblo y al
ejército, con el fin de sustentar el Sistema Bolivariano”. Cuando Bolívar se refiere al
Sistema de Gobierno, afirmaba: depende inmediata y exclusivamente de la igualdad
establecida…
La Ley Orgánica de Seguridad de la Nación, en todo su articulado establece aspectos de
suma importancia para el efectivo resguardo y protección del Estado Venezolano, y por
ende de cada uno de los venezolanos. La importancia radica y depende del nivel de
conocimiento y comprensión por parte de todos los sujetos que integran y construyen
con sus actos y aptitudes una nación más segura, donde todos y cada uno de los
ciudadanos: niños, jóvenes, adultos y ancianos, tienen un rol determinante en el
establecimiento y ejecución de los preceptos jurídicos que el ordenamiento consagra.
En este sentido, dicha ley establece que la Seguridad de la Nación es la condición que
garantiza el goce y ejercicio de los derechos y garantías en los ámbitos político,
económico, social, cultural, ambiental, militar y otros.
4. La misma, ratifica la orientación constitucional de conceptualizar a la seguridad como
una categoría que va más allá de la tradicional concepción de amenazas bélicas. Se
presenta una visión de seguridad y defensa, asociada al desarrollo sustentable y calidad
de vida, promoviendo así el cambio social y la evolución política.
Tomando en consideración todo lo anteriormente expuesto, y siendo que uno de los
factores principales del poder nacional lo constituye su Fuerza Armada, era lógico
pensar que ni el Estado venezolano, y mucho menos el pueblo venezolano, aceptarían
que éste quedara excluido del torrente indetenible de la participación ciudadana. Es por
ello que cada vez son más las manifestaciones tangibles del acercamiento entre nuestros
componentes y nuestras comunidades.