La mirada de Jesús: Una mirada que traspasa el corazón
10-12-2017
1. Año 14, nº 683- 10 de diciembre de 2017
“Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo”
EL PÚLPITO
PARROQUIA DE NTRA. SRA. DE LA MEDALLA MILAGROSA
EL PUERTO DE SANTA MARÍA (CÁDIZ)
Ntra. Sra de Loreto
Domingo 2º de Adviento
¿Se hace camino al andar?
Remitiéndonos a la famosa
sentencia de Machado
contemplamos un mundo
que, cada camino que
indica o construye, es tal
vez camino de trayecto
corto. Las propuestas que
la sociedad nos hace es un
“gasta tu vida gastando”.
¿No debiera ser “vive tu
vida desgastándote”?
Hoy entra en escena un
personaje singular: Juan
Bautista. Su forma de
vestir, su alimentación (un
tanto peculiar) y, sobre
todo, por su forma de ser
no dejaba indiferente a
nadie. Era vox populi que
era profeta singular. Su
cuerpo no era el centro de
s u a t e n c i ó n p e r o , l a
esperanza del Pueblo de
Israel era su locura.
Sonaba su voz como una
trompeta que rompía de
arriba abajo el silencio
interesado sobre el Mesías
y e m p l a z a b a a l a
conversión; a mirar de otra
f o r m a l a v e n i d a d e l
Salvador; a regresar de los
palacios de la injusticia, del
t o d o v a l e o d e l a
comodidad. Este pregonero
del desierto, previamente
h a b í a c o r r e g i d o y
sacrificado su propio
camino con una existencia
nítida, radical y vociferaba
a disponer unos caminos
dignos por los que el Señor
pudiera entrar. Muchos de
los que añoraban a Jesús –
al igual que nosotros
m i s m o s - e l e g í a n l a s
avenidas más cómodas, y
no precisamente las más
santas, para hacerse los
encontradizos con Él. Dios
venía por un camino y…el
pueblo iba por otro. En
dirección contraria. Ese fue
el pecado de muchos de
ellos: no se encontraron
con el Salvador porque
“sus antenas” no estaban
bien orientadas hacia la
dirección por donde venía.
¿Cómo vestimos nosotros?
¿Con la piel de la oración o
con el oropel de la frialdad
hacia Dios? ¿Con qué nos
alimentamos? ¿Con la
Palabra y la Eucaristía o,
por el contrario, con todo
aquello que es agradable al
paladar del ojo, de la boca,
del tener o del placer? ¿En
qué dirección avanzamos?
¿ H a c i a l a N a v i d a d ,
Misterio de Amor, o hacia
la vanidad del disfrutar,
gastar y derrochar?
Juan, en este segundo
domingo de adviento, nos
pone contra las cuerdas.
¿Qué camino estamos
construyendo para la
llegada del Salvador? ¿Nos
preocupamos de despejar
la calzada de nuestra vida
d e a q u e l l o s e s c o l l o s
( e n v i d i a s , o r g u l l o ,
soberbia, malos modos,
egoísmo….) que convierten
n u e s t r a f e e n a l g o
irrelevante o simbólico?
En estos próximos días
(aunque en algunos lugares
ya lo han llevado a cabo
s e m a n a s a t r á s p o r
i n t e r e s e s m e r a m e n t e
comerciales) se adornan
las calles y plazas como
antesala de la Navidad.
¿Cómo vamos adornar
nuestra vida? ¿Hasta
dónde estamos dispuestos
a iluminar el interior de
cada uno de nosotros para
que, el Señor, cuando nazca
pueda entrar con todas las
de la ley al fondo de
nuestras vidas y nacer de
verdad? ¿De qué nos
vamos a rodear? ¿De
regalos que ya ni nos
llaman la atención o del
gran regalo que es Cristo
humillado en Belén?
Navidad; no nos dejemos
ar rastrar por lo que
desvirtúa y mancilla la
belleza y la grandeza de
esos días. Desde ahora, y
con una profunda revisión
de nuestra vida cristiana
nos comprometamos, de la
mano de Juan, en encauzar
l o q u e e s t á t o r c i d o ,
i l u m i n a r l o qu e e s t á
o s c u r o , r e t o r n a r d e
senderos equivocados,
agarrarnos al poder y
fuerza de la oración o
pedirle al Señor que nos
ayude a convertirnos a Él
arropados por esa otra
versión del mundo, de las
p e r s o n a s , d e l o s
acontecimientos, del amor
y de la paz que nos trae y
nos da el Evangelio.
Equivocarse de caminos no
es malo siempre y cuando
regresemos a tiempo de
ellos. ¡Adelante con el
Señor!
Javier Leoz, sacerdote
¡Qué caminos! En el desierto del
mundo
Donde la locura
vuela más deprisa
que la sensatez,
allá donde la pobreza
ya no llama la atención
y se convierte
en estandarte
de un mundo infeliz,
quiero, Señor, preparar
tu camino.
En la soledad
del que busca
y no encuentra compañía,
en la desesperanza
de familias
que han perdido
el horizonte de la alegría,
en los egoísmos
y soberbias
que me impiden verte
cara a cara.
Quiero, Señor,
preparar tu camino.
Luchando por rebajar
todas esas colinas
de autosuficiencia.
Avanzando para llenar
lo que la sociedad
caprichosa e insolidaria,
mezquina y sin sentido
pretende dejar
lo más sagrado,
vacío y sin contenido.
Quiero, de verdad, Señor,
preparar tu camino.
Despejar nuestras
mentes embarulladas
por lo efímero
y colmarlas
con tu presencia,
con tu Nacimiento.
Denunciar falsedades o
verdades a medias
y, con la trompeta
de tu nuevo día,
2. PRIMERA LECTURA
(Is 40, 1-5.9-11)
“Allanad en la estepa una calzada
para nuestro Dios”
Consolad, consolad a mi pueblo, dice
vuestro Dios; hablad al corazón de
Jerusalén, gritadle, que se ha
cumplido su servicio, y está pagado
su crimen, pues de la mano del Señor
ha recibido doble paga por su
pecados. Una voz grita: “En el
desierto preparadle un camino al
Señor; allanad en la estepa una
calzada para nuestro Dios; que los
valles se levanten, que montes y
colinas se abajen, que lo torcido se
enderece y lo escabroso se iguale. Se
revelará la gloria del Señor, y la
verán todos los hombres juntos -ha
hablado la boca del Señor-”. Súbete a
un monte elevado, heraldo de Sión;
alza fuerte la voz, heraldo de
Jerusalén; álzala, no temas, di a las
ciudades de Judá: “Aquí está vuestro
Dios. Mirad, el Señor Dios llega con
poder, y su brazo manda. Mirad,
viene con él su salario, y su
recompensa lo precede. Como un
pastor que apacienta el rebaño, su
brazo lo reúne, toma en brazos los
corderos y hace recostar a las
madres”2
SALMO RESPONSORIAL
(Sal 84, 9-14)
R: Muéstranos, Señor, tu
misericordia y danos tu salvación.
Voy a escuchar lo que dice el Señor:
“Dios anuncia la paz a su pueblo
y a sus amigos”.
La salvación está ya
cerca de sus fieles,
y la gloria habitará
en nuestra tierra. R.
La misericordia y la fidelidad
se encuentran,
la justicia y la paz se besan;
la fidelidad brota de la tierra,
y la justicia mira desde el cielo. R.
El Señor nos dará la lluvia,
y nuestra tierra dará su fruto.
La justicia marchará ante él,
la salvación seguirá sus pasos. R.
SEGUNDA LECTURA
(2P 3, 8-14)
“Esperad y apresurad
la venida del Señor”
Queridos hermanos: No perdáis de
vista una cosa: para el Señor un día
es como mil años, y mil años como
un día. El Señor no tarda en cumplir
su promesa, como creen algunos. Lo
que ocurre es que tiene mucha
paciencia con vosotros, porque no
quiere que nadie perezca, sino que
todos se conviertan. El día del Señor
llegará como un ladrón. Entonces el
cielo desaparecerá con g ran
e s t r é p i t o ; l o s e l e m e n t o s s e
desintegrarán abrasados, y la tierra
con todas sus obras se consumirá. Si
todo este mundo se va a desintegrar
de este modo,¡qué santa y piadosa ha
de ser vuestra vida! Esperad y
apresurad la venida del Señor,
cuando desaparecerán los cielos,
consumidos por el fuego, y se
derretirán los elementos. Pero
nosotros, confiados en la promesa
del Señor, esperamos un cielo nuevo
y una tierra nueva en que habite la
justicia. Por tanto, queridos
hermanos, mientras esperáis estos
acontecimientos, procurad que Dios
os encuentre en paz con él,
inmaculados e irreprochables.
SANTO EVANGELIO
(Mc 1, 1-8)
“Detrás de mí viene
el que puede más que yo”
Comienza el Evangelio de Jesucristo,
Hijo de Dios. Está escrito en el
profeta Isaías: “Yo envío mi
mensajero delante de ti para que te
prepare el camino. Una voz grita en
el desierto: “Preparad el camino del
Señor, allanad sus senderos””. Juan
bautizaba en el desierto; predicaba
que se convirtieran y se bautizaran,
para que se les perdonasen los
pecados. Acudía la gente de Judea y
de Jerusalén, confesaba sus pecados,
y él los bautizaba en el Jordán. Juan
iba vestido de piel de camello, con
una correa de cuero a la cintura, y se
alimentaba de saltamontes y miel
silvestre. Y proclamaba: “Detrás de
mí viene el que puede más que yo, y
yo no merezco agacharme para
desatarle las sandalias. Yo os he
bautizado con agua, pero él os
bautizará con Espíritu Santo”.
“Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo”
Parroquia de Ntra. Sra. de la Medalla Milagrosa. C/Federico García Lorca, s/n. Apdo. de correos, 164. 11.500 El Puerto de Santa María. Tlfno: 956 85 65 61.
Tiempo de oración
Lecturas de la próxima semana
(2ª semana del salterio)
Lunes 11: San Daniel
Is 35, 1-10; Sal 84, 9-14; Lc 5, 17-26
Martes 12: San Israel
Is 40, 1-11; Sal 95, 1-3.10-14; Mt 18, 12–14
Miércoles 13: Santa Lucía
Is 40, 25-31; Sal 102, 1-4.8.10; Mt 11, 28-30
Jueves 14: San Juan de la Cruz
Is 41, 13-20; Sal 144, 1.9-13; Mt 11, 11-15
Viernes 15: San Valeriano
Is 48, 17-19; Sal 1, 1-6; Mt 11, 16-19
Sábado 16: Santa Adelaida
Eclo 48, 1-4.9-11; Sal 79, 2-3.15-19; Mt 17, 10-13
Domingo 17: San Juan de Mata
Is 61, 1-2a.10-11; Sal Lc 1, 46-50.53-54;
1Ts 5, 16-24; Jn 1, 6-8.19-28
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http://www.parroquiadelamedallamilagrosa.blogspot.com.es
pregonar a este mundo
que todavía es posible la esperanza;
que Tú, Señor, estás por llegar
pero que los caminos por donde avanzamos
no son los auténticos para poderte alcanzar.
Tú, Señor, puedes cambiar el ritmo de la historia
si somos capaces de dejar aquello que nos atenaza,
duerme, amordaza, esclaviza y nos impide caminar.
Contigo, Señor. Para Ti, Señor. Por Ti, Señor.
Quiero preparar mis caminos: que sean los tuyos.
Quiero andar por tus caminos: sal a mi encuentro .
Quiero dejar los viejos: renuévame con tu gracia.
¡Ven, Señor! ¡Apresura tu llegada!
¡Contigo, para siempre, por tus caminos!
Adviento: ¡Ven y enciende nuestra fe,
Señor,para vivir en el amor!