1. Los siete
Con la caída de los ángeles en la gran Batalla en los cielos provocada por Lucifer, hace ya
muchos siglos atrás, siete grandes ángeles quedaron en posesión y con vista siempre sobre la
humanidad, después de aquella gran batalla, aquellos que fueron exiliados a la tierra y
desterrados para siempre fueron enviados sin forma corpórea y con solo el poder de influir y
corromper, ya no tiene cuerpo propio y necesitan de un huésped, en este caso nosotros los
hombres, aquellas almas débiles y fáciles de controlar, como marionetas somos controlados.
Aquellos siete ángeles desiminados en la tierra con forma humana han nacido de siglos en
siglos y nacen en lugares distintos, solo son monitores de los que pasa en la tierra, y
documentan cada aspecto de la humanidad, algunos tienen el poder de mostrar la evidencia
de Dios de muchas formas, ya que el hombre en su intento propio de alabar el poder y
sacrificio del hombre ha sido corrompido en el interior de su ser, utilizando el nombre de Dios
y Jesucristo, para acumular riquezas y vanagloriarse así mismo, como representante de Dios.
Aquellos ángeles tienen el control de poder mostrar señales al hombre, tal vez no perceptible
por muchos, y solo unos cuantos han despertado ese espíritu y reconocen las señales. Si bien
es claro que Lucifer controla la humanidad como marioneta y mueve sus influencias con
aquellas almas condenadas y pactadas con él, los siete también tienen el poder de mostrar al
hombre que no están solos, utilizando medios ahora perceptibles para toda la humanidad,
envían mensajes, los medios ustedes sabrán cuales, puesto que a diario los utilizamos, solo
que determinar cuál es un mensaje proveniente de alguno de los siete, solo una alma con
fuerza de lucha podrá ver las señales.
Los siete ángeles en su momento pasaran a formar la hueste de ángeles y arcángeles de Dios, y
tomaran su forma real, cuando aquello suceda no tendrán misericordia del hombre, puesto
que escrito esta, que aquel que anduvo en camino de iniquidad la muerte y el infierno le
aguarda.
Los siete al morir su forma corpórea en la tierra renacen, y retoman la labor de documentar e
intentar ayudar al hombre a salir del vacío espiritual y moral, que Lucifer y sus demonios han
tendido sobre la humanidad, los siete no pueden intervenir por el hombre directamente mas
sin embargo con el gran poder provisto por Dios, pueden brindar protección y prevención a
una situación que tu crees no podría suceder.
Cuando sientas que por algo te detienes y algún contratiempo te hace perder tu control, y
crees que estropeara tu camino, puede ser que el control lo esté tomando alguno de ellos,
Dios no puede acercarse a la tierra puesto que si lo hiciera seria Arrasada por tormentas,
huracanes, tsunamis y toda catástrofe, la presencia del Señor nos mataría a todos, puesto que
vivimos en pecado, y solo aquellos ángeles a los cuales se les encomendó estar en la tierra,
pueden vivir entre nosotros ya que están envestidos con el poder del Altísimo.
Ellos tienen el poder de ver el corazón del hombre, y nos ven no por nuestra forma humana,
sino como espíritu, así cada espíritu tiene un color, y ese determina la clase de alma. Tales
colores solo ellos sabrán, puesto que a nosotros los hombres se nos fue quitado todo poder
que traspasa nuestros sentidos y entendimiento. Por eso somos carne y hueso,, y nuestra

2. forma corpórea nos fue heredada así para si en algún momento decidiéramos revelarnos ante
Dios, no tendríamos el poder de transfórmanos. Así está dado que solo Lucifer se revelo ante
el Señor y Dios del Universo, y ninguna criatura después de él podrá hacerlo.
Mas sin embargo el hombre al no poder transformase, crea armas y formas de viajar por el
tiempo/espacio, quiere tener el poder de controlar la naturaleza y ser inmortal, ese es el vacío
del hombre, aquel para el que no fue destinado, pero con la suficiente inteligencia para crear y
diseñar estructuras y maquinas semejantes a él.
Entonces Lucifer manipula la mente del hombre y crea en ellos el vacío y necesidad de poseer
todo cuanto se pueda, la historia de la humidad está llena de esos ejemplos, el hombre
queriendo conquistar al hombre, una rebelión de la humanidad contra la humanidad, y así se
desata nuestras propias batallas.
Estos últimos siglos de la vivencia del hombre son el más claro ejemplo del porque Dios jamás
nos dio más de lo que se fue permitido recibir. Y más con Aquel que cayó del cielo y quiere la
sumisión de la humanidad, puesto que está condenado para siempre.
Los siete han vivido con nosotros desde entonces, y aunque Dios ve lo que pasa en la tierra,
son aquellos que han convivido con el hombre los que determinan cuan buenos o malos se han
vuelto los hombres.
Cada día que pasa se ve como la necesidad del hombre de querer alcanzar lo divino, lo celestial
por supuesto esto no percibido así por la gran raza humana en su totalidad, son pocos los seres
humanos que ven como el hombre quiere trascender sin el visto buenos de Dios y quieren
forma su propio camino.
El vacío de la humanidad se dará y crecerá aún más y el día que descubran las leyes que rigen
el universo, cuando descubra el principio y motor de las cosas, y cuando esto ocurra y el
hombre se agigante tanto, Dios vendrá y se le levantara de su trono y aquellos que fueron
destinados a estar con el hombre se elevaran a los cielos, y llevaran la evidencia del hombre
que contra Dios quiere sublevarse producto de la ambición y necedad de controlar el tiempo y
el espacio. Y así como a Lucifer, será el último día del hombre y serán llevados al lugar que el
señor tiene destinado para él y, aunque no fue destinado para el hombre, su ambición lo
llevara a ese lugar.
Los siete y sus nombres serán revelados el día del juicio, puesto que cada uno tiene destinado
una labor ese día, la humanidad tiene escrito su juicio en los libros que nunca se detienen de
escribir los hechos del hombre, así como aquel momento en que Lucifer se revelo delante de
Dios y presumió por su poder ser más que el Altísimo.
Si alguna vez han escuchado esta frase y no sienten un sentimiento de poder en ellas, poseen
un alma débil, puesto que solo aquellos pueden aun sentir el poder del altísimo, “YO SOY EL
ALFA Y EL OMEGA; EL PRINCIPIO Y EL FIN”; recuerden no somos nada,, mas sin embargo
vivimos bajo la gracia del Señor por sacrificio de aquel que está sentado a la diestra del Padre,
y que venció a Satanás siendo hombre y resistiendo las más atroces y grandes tentaciones,
venciendo la muerte y resucitando así como fue escrito. By MG