1. EL DESPLAZAMIENTO FORZADO: UN FLAGELO MUY
ANTIGUO
Alumno
Presentado a: profesor
Materia Grado
Colegio
Popayán
mes de año

2. EL DESPLAZAMIENTO FORZADO: UN FLAGELO MUY
ANTIGUO
(1) “Canto las armas y a ese hombre que de las
costas de Troya - llegó el primero a Italia
prófugo por el hado y a las playas -
lavinias, sacudido por mar y por tierra por
la violencia - de los dioses a causa de la ira
obstinada de la cruel Juno, …”
Publio Virgilio Marón, más conocido como Virgilio, en el Siglo I antes de Cristo,
escribió la epopeya: “La Eneida”, por encargo del Emperador Augusto, quien
convirtió a Roma en un Imperio y que quería que todos pensasen que Roma tenía
un origen mítico y Divino. El Poema más popular de ese tiempo era La Ilíada, que
cuenta la guerra de Aqueos y Troyanos que termina con la victoria de los primeros
y la destrucción de Troya, de donde unos pocos consiguen huir, entre los que se
encontraba el Príncipe Eneas (de aquí viene el nombre del libro) por tanto, Virgilio
parte de éste punto e imitando a los mitos griegos cuenta esta historia que
eventualmente desembocará en el nacimiento de Roma, siendo la base inicial de
la obra, aunque no sea descrita como tal: el desplazamiento forzado.
Inmediatamente salta el recuerdo que hace parte de nuestra historia, por lo que
trataremos un poco sobre este flagelo, con el que tenemos que convivir en
nuestros días.
Ya sea por cualquiera de las teorías sobre la evolución humana (2) por la que el
hombre ha poblado la tierra y se ha desarrollado, el hecho para considerar en el
momento es que aquí estamos, de tal manera que tuvieron que existir una serie de
factores para que nuestra existencia haya llegado al punto que conocemos y
--------------------------------------------------------
1.- Publio Virgilio Marón (Virgilio) - “La Eneida”, Versión electrónica (.doc) Página 1.
2.- http://www.molwick.com/es/evolucion/130-teorias-evolucionistas.html#texto

3. Tengamos un pasado, marcado en muchas instancias por hechos violentos en
contra de nuestros semejantes.
Primero, ya hace mucho tiempo algún hombre (o mujer) primitivo, en un ataque de
rabia quizá, tomó una roca en sus manos y la arrojó a la humanidad de otra
persona; o si recordamos: (3) “…Y dijo Caín a su hermano Abel: -Salgamos al campo. Y
aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo
mató. ….”. La historia de la humanidad llena sus páginas de hechos cargados de
acciones agresivas en contra de unos y realizadas por otros, nuestra naturaleza
podría definirse como una naturaleza violenta. Y si la violencia, sea ésta natural o
humana, ha presidido permanente la vida del planeta. Nunca, en toda nuestra
existencia como especie, hemos podido dominarla. Todavía más: somos hijos de
ella y como buenos hijos la practicamos y la usamos cuando lo creemos
necesario, o cuando sencillamente queremos hacerlo. Pero, el reconocerlo no
implica aceptarla mansamente y sin reparo alguno, especialmente cuando la
misma pueda inducir a tantas cosas malas, como ocurre en nuestro tiempo.
Sin embargo, y a pesar de de cualquier rechazo que pudo existir por todo lo que
generaba repudio, los hechos violentos fueron ganando espacio en el constante
progresar de la humanidad, vinieron también los deseos de gloria, riqueza y poder
que desencadenaron en guerras, torturas, esclavitud, etc.; dejando a su paso
mucho dolor y destrucción; pero lo más triste es que estos actos hicieron que
muchas personas tuvieran que dejar sus pertenencias, su medio de subsistencia y
su pasado abandonados para salir a buscar cómo continuar su vida en otra parte,
donde estuvieran lejos del alcance de las manos de sus verdugos. (4) “…Más y más
encendida por todo esto, agitaba a los de Troya - por todo el mar, resto de los dánaos y del
cruel Aquiles, - y los retenía lejos del Lacio. Sacudidos por los hados - vagaban ya muchos
años dando vueltas a todos los mares. ...”
--------------------------------------------------------
3.- Génesis 4:8
4.- Publio Virgilio Marón (Virgilio) - “La Eneida”, Versión electrónica (.doc) Libro 1.

4. También encontramos los primeros escritos en los que se tiene constancia de la
presencia de esclavos en una gran civilización: es en Egipto, donde un número de
esclavos eran suficiente como para tener cierta importancia social. Esto se dio
solamente en algunos periodos, el origen de los esclavos provenía de las
conquistas y no existía una regulación jurídica sobre los mismos. Esta práctica
tenía el mismo efecto sobre las comunidades afectadas, peor aún, eran tomados
cautivos, desprendidos de sus tierras y familias y además les quitaban hasta su
libertad.
De igual forma la esclavitud como práctica social y económica fue usual en la
antigüedad. El estatus social y el papel de los esclavos era considerado inferior o
inexistente en relación a una persona libre. (5) La sociedad de la Antigua Grecia
tenía fundamentada filosóficamente la esclavitud que, para Aristóteles era la
garantía indispensable para que los hombres libres pudieran dedicar su tiempo a
la política y buen gobierno de la ciudad. En la Antigua Roma la práctica de la
esclavitud se regula, en algunas ocasiones al mínimo detalle, estableciéndose la
manumisión como fórmula de liberación de los esclavos, siempre con causa. Del
siglo V ad C al siglo I es la época de mayor implantación y extensión de la
esclavitud. (6) “…Al correr de los lustros llegará un tiempo - en que la casa de Asáraco
someterá a esclavitud a Ftía - y la ilustre Micenas y mandará en la vencida Argos. …”
Durante el Imperio Romano empieza a remitir, comportamiento influido por tesis
de los primeros cristianos y, sobre todo, por el agotamiento de las fuentes
tradicionales de suministro de nuevos esclavos como resultado de la finalización
de la expansión territorial romana (siglo I).
En segundo lugar, en Europa durante la Edad Media la esclavitud desaparece
siendo cambiada por la servidumbre. Existe un intenso debate entre historiadores
respecto a la cronología, las causas y las formas en que se produjo este
hecho.
--------------------------------------------------------

5. 5.- http://www.atenea-nike.com/pagina_101.html
6.- Publio Virgilio Marón (Virgilio) - “La Eneida”, Versión electrónica (.doc) Página 7.
Después de conocer estas formas abusivas de trato humano, entremos un poco a
analizar más en detalle el “Desplazamiento forzado”, como lo vemos en nuestros
días, porque quién de nosotros no se ha encontrado por donde vaya con la triste
imagen de familias enteras llenas de dolor, tristeza, preocupación y hasta rabia
causadas por este flagelo. Comencemos señalando que el problema del
desplazamiento forzado en Colombia tiene una raíz histórica, cuya fase previa fue
la violencia política de los años cincuenta. Este problema nacional volvió a
promoverse en los años ochenta cuando el Estado inicia su lucha contra el
narcotráfico y los grupos insurgentes.
Y son precisamente estos primeros informes y estudios los que incidieron para
que el Estado empezará a actuar de cara a proponer soluciones al problema del
desplazamiento forzado, ya sea mediante su actividad legislativa (7), o través de la
atención directa sobre la población afectada; a pesar de la lucha iniciada por el
Estado contra del narcotráfico y los grupos insurgentes, encontramos que en la
actualidad dicho conflicto persiste. (8) “…Sólo uno has de añadir, oh el mejor de los
reyes, un solo presente - a esos que en gran cantidad ordenas sean enviados y asignados -
a los Dardánidas, y que no pueda vencerte la violencia - de nadie al dar tu hija a un yerno
egregio y a un digno - himeneo y sellar esta paz con un pacto eterno. …” El control y
deseo de expansión territorial por parte de los grupos armados insurgentes, el
fortalecimiento y avanzada territorial del paramilitarismo, el auge de
narcotraficantes en las zonas rurales y grandes ciudades y la política de seguridad
del gobierno actual expresan que el conflicto armado no solo persiste sino que se
ha escalonado y agudizado. Son estos factores los que vienen incidiendo para que
en la actualidad se registre un crecimiento vertiginoso del desplazamiento forzado,
más oscuro que el vivido en la última década del siglo XX. De acuerdo con los
cálculos del CODHES, desde 1985 hasta 2006 se estima que el desplazamiento
forzado ha alcanzado una cifra de 3.832.000 personas.
--------------------------------------------------------
7.- Sentencia T-025, 1997:33

6. 8.- Publio Virgilio Marón (Virgilio) - “La Eneida”, Versión electrónica (.doc) Página 188.
Ahora, el desplazamiento forzado se ha constituido en uno de los más graves
problemas políticos en Colombia. La última década del siglo XX y los primeros
años del siglo XXI representan momentos históricos caracterizados por el aumento
de ciudadanos expuestos a enfrentar dicha situación de desarraigo y marginalidad
socio-cultural. El desarrollo de valiosos estudios sobre el desplazamiento por los
científicos sociales nacionales, los diversos fallos de la Corte Constitucional, las
denuncias internacionales realizadas por las ONG, el intento de solución del
asunto por parte de la Iglesia Católica, los esfuerzos del Estado para responder a
las demandas de los desplazados y la insensibilidad de la sociedad civil se
constituyen en reacciones y formas de representación orientados a explicar,
solucionar, visualizar o interiorizar el problema.
Así, en el sentido literal de la palabra, desplazamiento significa trasladarse de un
punto a otro, pero en Colombia a causa de las condiciones políticas y sociales
actuales significa: exilio, muerte y dolor. Los desplazados llevan una carga pesada
y dura, impuesta por los gobiernos de turno, difícil de soportar, ellos, militares o
paramilitares manifiestan “tienen que irse o los matamos.” Es pues, el
desplazamiento, abandonarlo todo: los sueños, las utopías, la familia, la lucha por
el cambio social.
Por consiguiente, si las personas que han tenido que sufrir en carne propia las
consecuencias de éste flagelo, se quedaran sin actuar al respecto, y si quienes se
vean de algunas otras maneras también afectadas, fueran pasivos a lo que
ocurre, el problema en ves de solucionarse tenderá a incrementarse, afligiendo no
solo a los directamente implicados, sino también al resto del país. (9) “…Acuden los
demás entonces (les apremia la presencia de Turno) - y todos los jóvenes se lanzan con
negras teas …”
--------------------------------------------------------
9.- Publio Virgilio Marón (Virgilio) - “La Eneida”, Versión electrónica (.doc) Página 143.

7. En conclusión, como sociedad violenta, conflictiva y contrastante, los colombianos
no sólo hemos descubierto el fenómeno de la violencia social y sus tremendos
efectos, sino también estamos intentando superar ese nivel desarrollando, por así
decir, una serie de estrategias, aprovechando el potencial de nuestra gente. La
movilización de las personas en contra de éste flagelo, la incitación a la unión, el
rechazo rotundo a los actos violentos, vengan de quien vengan, la recuperación de
los valores en la sociedad, etc. Son acciones que debemos realizar en todo
ámbito, y en todo momento para alcanzar lo antes posible ese nivel de vida
armónico tan deseado por todos.