Barcelona y Madrid se van consolidando como ciudades líderes en la llamada “economía colaborativa”, vinculada a prácticas como el alquiler temporal de viviendas con Airbnb. No es despreciable la actividad que producen este tipo de aplicaciones: Airbnb ofrece 30.000 camas en Barcelona, la mitad de la oferta en el total de alojamientos tradicionales de la ciudad. Ante esta realidad, algunas preguntas son recurrentes: ¿Qué tienen de “colaborativas” este tipo de economías? ¿Generan nuevas posibilidades de transformación del turismo hacia modelos más sostenibles? ¿Qué capacidad tienen estas plataformas para distribuir territorialmente la oferta? ¿Qué efectos urbanos producen estos modelos “colaborativos” sin regulación ni planificación pública? Otras preguntas nos llevan más allá del discurso “colaborativo”: ¿Es la titularidad de la propiedad la forma más justa para distribuir plusvalías urbanas? ¿Cuál es realmente la distribución de la propiedad del territorio y en qué medida facilita la “redistribución”? En esta sesión veremos el papel de la “economía colaborativa”, sus efectos sociales y urbanos y cómo se articula con el modelo productivo metropolitano. http://lahidra.net/economia-y-ecologia-del-turismo-2a-edicion/